Ꜥꜥֶָ֢🪻ֶָ֢۫݊˒𐙚 capítulo 11
── "I never thought that I would find a way out, I never thought I'd hear my heart beat so loud."
TaeHyung todo el día estuvo en el jardín y en su habitación musical. Se tomó un poco de tiempo luego del almuerzo para ir con JiMin y contarle lo que había pasado y como estaba su relación con JungKook ahora.
No iba a negar que, aunque aún pensaba que iba demasiado rápido, le gustaba la sensación de saber que las cosas con JungKook cada vez eran más oficiales y que tal vez podrían acabar teniendo una bonita historia, juntos.
Se encontraba solo en casa, viendo una película. So-ah, Ju-Hwan y YunMin se habían ido hace poco, así que para matar el tiempo mientras esperaba al Alfa, decidió encender el televisor y ver lo que fuera que estuvieran presentando. Estaba a punto de quedarse dormido debido al aburrimiento, cuando escuchó la puerta cerrarse y sin darse cuenta tenía a alguien parado en frente suyo. Eran JungKook.
— Hey... Llegaste — Dijo sonriendo desde el sofá.
— Llegué — JungKook sonrió y empezó a acercarse — ¿Que hacías?
— Veía una película.
— Parecías dormido — TaeHyung ahora estaba de pie, frente al mayor.
— Tonto — Rió un poco — ¿Cómo estuvo el trabajo?
— Aburrido, muy aburrido.
—¿Por qué? Es imposible que te aburras con ese amigo tuyo, el alegre.
— Bueno... — JungKook se acercó más para posar sus manos en la cintura del Omega — Digamos que estaba aburrido porque tenía muchas ganas de verte — TaeHyung sonrió tímido.
— Y... ¿Para que querías verme?
— Para esto — Respondió antes de atacar la boca del más bajo.
Ambos sabían que nunca se iban a cansar de besarse. Cada beso que se daban los hacía sentir más vivos y con cada uno de ellos confirmaban que lo que sentían era sincero.
Luego de besarse un rato decidieron ir a cenar. Lo hicieron como todas las noches, en el balcón mientras hablaban de cosas triviales o más bien mientras TaeHyung contaba anécdotas y JungKook simplemente se reía de cada una de ellas.
— Me voy a dormir — Dijo Kim — Mañana debo salir a trotar, ya sabes.
— ¿Aún vas a seguir durmiendo solo?
— Si... Yo, creo que debemos ir despacio, ¿Sabes? Aún no voy a dormir contigo, JungKook.
— Está bien, te entiendo — Hizo un puchero mientras se ponía de pie.
— Alfa mimado — Se burló — Buenas noches, JungKook.
— No te diré buenas noches hasta que me des un beso.
— Ugh, ¿Qué voy a hacer contigo? — El Omega puso los ojos en blanco antes de avanzar donde el oji-verde para darle un beso de buenas noches —Descansa.
— Oh, créeme que voy a descansar. Cómo un bebé — TaeHyung negó con la cabeza y empezó a dirigirse hacía la puerta — ¡Descansa, TaeHyung!
JungKook se quedó en el balcón un rato más pensando en lo maravilloso que fue su día luego de la conversación que tuvo con el Omega en la mañana.
Definitivamente TaeHyung le gusta, demasiado.
Había pasado ya una semana desde que habían tenido la conversación en la que confesaban sus sentimientos.
Esa semana se dedicaron a aprovechar mucho el tiempo que podían pasar juntos. Si TaeHyung tenía que ir a comprar semillas o algo para su habitación musical, JungKook hacía lo posible para acompañarlo. Por su parte, TaeHyung había decidido hacer más corta su rutina de la mañana para poder llegar y desayunar con el Alfa o por lo menos para alcanzar a verlo un rato antes de que se marche al trabajo. Todo iba bien.
Ahora es domingo y estaban en la sala observando el final de una serie mientras comen helado.
— Que final tan estúpido — TaeHyung fue el primero en hablar una vez la serie había terminado.
— No estuvo tan mal — Dijo Jeon dejando a un lado los dos potes de helado.
— Tonto, tu no sabes nada de series. No hables — Sonrió luego de decir eso antes de darle un pequeño beso en los labios al Omega.
— Ya que estamos aquí... — Empezó a hablar JungKook tomando una de las manos del oji-azul — Quiero hablar contigo algo.
— Lunas... Eso nunca trae nada bueno — Ahora estaba nervioso.
— No, no. No es nada malo — El Alfa se apresuró a hablar al ver la expresión del otro — Quiero hablar sobre nosotros, pero no es nada malo.
— Bien... Habla.
— Yo... Ya ha pasado una semana desde que confesamos que nos gustamos, ¿Cierto? — Kim asintió — Bien, entonces... Yo en serio estoy sintiéndome muy bien con esto, con lo que tenemos y siento que cada día me gustas más y más, TaeHyung, y yo quiero cortejarte adecuadamente — El corazón del Omega se aceleró al escuchar lo último.
— Pero... Ya estamos casados, JungKook. No hace falta que...
— Pero yo quiero — El Alfa lo interrumpió — Quiero hacerlo, TaeHyung. Lo mereces y en serio necesito hacerlo. Quiero hacerte sentir bien, hacerte sentir querido y que me importas. Solo déjame hacerlo, por favor.
— Sigo sin creer que sea necesario, pero si es lo que quieres... Está bien, hazlo — JungKook sonrió y abrazó al Omega.
— Gracias, gracias — Dijo besando la frente de Omega — Seré un buen Alfa, lo prometo.
— Ya sé que eres y serás un buen Alfa — TaeHyung lo dijo en un tono suave y dulce — Desde esa primera noche acá me lo dijiste y lo he comprobado. Eres un Alfa genial, JungKook.
Se quedaron abrazados un rato más, sintiéndose seguros en los brazos del otro.
— Así que, ¿Desde que edad tocas el piano? — Preguntó JungKook.
— Desde los once o doce años, creo.
Era viernes por la noche. Hace poco el Alfa había regresado a casa encontrándose con un TaeHyung limpiando los estantes de su habitación musical. El Omega solo llevaba puesto una camiseta grande que le quedaba a la mitad de sus muslos, no llevaba nada más y cuando JungKook lo vio tuvo que pasar saliva varias veces para poder hablar. Cada día su instinto le hacía desear más y más a TaeHyung.
— Me causa mucha ternura imaginarte todo pequeñito tocando el piano — El Alfa le sonrió.
— Tonto, me veía igual que ahora — Le respondió poniendo los ojos en blanco.
— Eso es mentira — Señaló — Es imposible que con once años te vieras así de... — El Alfa dejó de hablar — Olvídalo.
— ¿Así de que? — JungKook negó con la cabeza — Oh, vamos, habla. No me vas a dejar con la intriga — Se acercó al otro para sentarse en su regazo — Dime, JungKook.
— Yo... Yo solo creo que... — JungKook vio hacía abajo y se encontró con los muslos del Omega descubiertos al lado de sus piernas — Eh... Yo creo que es imposible que cuando tenías once años te vieras así de... Así de sexy — Soltó y cerró los ojos.
— ¿Piensas que soy sexy? — Preguntó TaeHyung, quién ahora tenía las cejas levantadas debido a la confesión del Alfa.
— Mucho — Llevó sus manos a la cintura del Omega — Demasiado.
TaeHyung no respondió nada y simplemente lo besó. Pero no lo besó como siempre acostumbraba. El Alfa se sorprendió cuando sintió la lengua del otro sobre sus labios pidiéndole permiso para entrar. Sus lenguas bailaban juntas y JungKook no perdía la oportunidad para morder los labios del Omega robándole pequeños gemidos que eran música para sus oídos.
— Lunas... Me estás volviendo loco, TaeHyung — Le habló al oído antes de morderle el lóbulo haciendo temblar al otro.
— A-ah... No hagas eso — El oji-azul habló bajito.
— ¿Por qué? — El Alfa repitió la acción — ¿No te gusta, Tae?
Tae. Le había dicho Tae en ese tono lleno de lujuria y deseo que lo hizo estremecer aún más.
— Si... Si me gusta, pero... — JungKook ahora le estaba besando el cuello — Maldición... Mierda, tu boca algún día me va a matar — Sintió como el Alfa sonreía en su cuello y le apretaba la cintura haciéndolo sentir la erección que empezaba a crecer bajo los pantalones que éste llevaba.
— Y tú a mi también me vas a matar — Dijo saliendo del cuello del Omega para mirarlo a los ojos — No sabes lo mucho que te deseo — Le dio un pequeño beso en los labios hinchados — Eres tan hermoso y sexy y te juro que me tengo que contener de hacerte tantas cosas cada que te veo así con estas cosas que dejan ver tu cuerpo, mierda, te juro que cada día me gustas más.
— Yo también te deseo... Te deseo mucho — Confesó el Omega — Pero... Hay que ir despacio, lo sabes.
— Ya lo sé... Y voy a respetar eso — Le dio una pequeña caricia en la mejilla antes de darle un pequeño besito en la otra — Oh, antes de que se me olvide. Hoy te traje un regalo.
— ¿Un regalo? — Preguntó y el otro asintió sonriendo — Pero, ayer me trajiste ese atril para todas mis partituras... Y los otros días de ésta semana me diste muchas otras cosas.
— No me importa, te estoy cortejando y darte pequeños regalitos hace parte de eso — Le dio otro beso antes de estirarse para alcanzar una bolsa que había dejado en el piso — Toma.
En la bolsa habían unos chocolates en forma de corazón con una pequeña nota que decía: "Todos los días a tu lado son cada vez mejores. Me gustas mucho, no lo olvides. Xx"
TaeHyung quería llorar. Era algo muy pequeño pero significaba mucho para él.
— Es poco pero...
— No termines esa frase, Jeon JungKook — Lo interrumpió — Es hermoso, amo los chocolates y la pequeña nota me encantó. Gracias — Le dio un suave beso para mostrarle cuan agradecido estaba.
— Me alegra que te gustara — Le sonrió — ¿Puedo preguntarte algo?
— Claro.
— Eh, tu desde que vivimos juntos no has tenido tu celo, ¿Por qué? Responde solo si quieres, sin presiones.
— Oh no, no. Está bien — Respiró profundo antes de hablar — Bien, yo desde siempre he tenido unos celos muy intensos y cuando me empezaron a llegar me ponían demasiado mal y no tenía con quien pasarlos y los medicamentos no me servían. Luego, conocí a mi ex-novio, del que te conté un día y con él pude pasar algunos celos y me ayudó mucho, ya no me dolía ni me ponía tan mal, pero luego, cuando terminamos, el primer celo sin él fue muy feo, demasiado. Ni siquiera tocarme ayudaba, era horrible. Entonces, mi mamá me llevó donde un doctor y él me dio unas pastillas que me quitaban los celos por completo o si me llegaban solo vendrían un día y muy suave y hasta hace unas semanas dejé de tomarlas, entonces mientras se pasa todo el efecto y esas cosas mi celo puede llegar en cualquier momento o demorarse otro poco.
— Entiendo, y lamento que tuvieras que pasar por todo eso — TaeHyung le sonrió y le dio un besito en la frente — Y cuando tu celo llegue... ¿Me dejarás ayudarte con eso?
— ¿Quieres ayudarme con mi celo? — Preguntó levantando una ceja.
— Obviamente que quiero. La pregunta me ofende — TaeHyung rio.
— Está bien, yo también quiero que me ayudes con eso.
Se besaron de nuevo.
— Oh, antes de que se me olvide — Habló luego de separarse — Mi papá obtuvo un ascenso en su empleo y mi mamá quiere hacer una cena para celebrarlo, entonces mañana nos esperan allá y puedes invitar a NamJoon y YoonGi, si quieres.
— ¡Genial! Amo a tu familia — JungKook dijo sonriendo de oreja a oreja.
— Bien... Y espero que también ames a la tuya por que van a estar ahí también.
— Oh... Bien no importa.
— Bien, entonces invita a tus amigos mientras yo bajo a servir la cena que dejó So-ah — TaeHyung se paró de su regazo para salir de la habitación.
— Claro. Eh... ¿TaeHyung?
— ¿Si?
— ¿Hasta cuando vas a seguir durmiendo en otra habitación? — Preguntó con un pequeño puchero.
— Yo... — Se aclaró la garganta — Creo que ésta noche puedo dormir contigo, si quieres.
— ¿En serio? — Jeon preguntó asombrado.
— Sip.
— Genial — Dijo antes de sacar su teléfono para mensajear a sus dos amigos.
TaeHyung salió de la habitación con una sonrisa en el rostro leyendo la pequeña nota que JungKook le había obsequiado por tercera vez.
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