-Cerca de la colmena-

-Jose-

Capricornio aun me mira con su cuchillo en la mano y se mantiene apacible aunque hace un segundo sentí la liberación de un zodiaco, y por supuesto él debió sentir eso también, entonces lo veo suspirar y lanza su cuchillo, que logró evitar dando un salto hacia atrás, sin embargo, veo como crea miles de cuchillos y empieza a lanzar hacia mi dirección, pero uso mi gravedad para hacerlos impactar con el suelo, la cantidad es tan enorme que comienza levantar una nube de humo, lo veo saltar encima de ella y lanzar una gran espada a gran velocidad que logro evadir al disminuir la gravedad y ser impulsado al cielo, donde comienzo a correr hacia a él que vuelve a lanzarme cuchillos que vuelvo a evadir moviendo mi cuerpo de izquierda a derecha mientras los cuchillos pasan rápidamente cortando algunas partes de mi ropa mientras él vuelve a caer encima de la duna de arena y yo salto sobre él estirando mi puño y él se defiende con el suyo, pero rápidamente se da cuenta de la diferencia de fuerza física y retrocede con un salto obligandome a saltar al suelo, no sin antes ver como un cuchillo pasa cerca de mí rostro pero no sin antes obligarlo a caer, cuando toco el suelo vuelvo a correr hacia donde está con mi puño levantando, él crea una espada y lo sostienen esperando que me acerque, pero falla al primer intento de golpearme con ella así que aumento lo gravedad donde está la espada obligándolo a soltarla y aprovecho para golpearlo en el estómago, no sin antes aumentar la gravedad en mi golpe, lo que lo obliga a escupir mientras alcanzo a disminuir la gravedad y retrocede mientras veo como miles de cuchillas comienzan a salir y cubrir su cuerpo, mientras soy despedido por los aires y cubriendo mi cara mientras muchas de ellas se clavan en mis brazos y piernas que eventualmente comienzan a sangrar, cuando deja de lanzar comienzo a sacarlas. Gracias a la poca gravedad los pocos cuchillos que comienzo a sacar no impactaron en mi si no que solo atravesaron mi piel superficialmente, por lo que al sacarlos no hay mucho sangrado. Vuelvo a mirarlo él se encuentra de rodillas mientras pone una mano en su estómago y respira forzosamente, en ese momento puedo ver como se estremece y por un segundo hay una muestra de miedo en su rostro, pero luego es ocultada por la liberación de otro zodiaco que a mi también me toma por sorpresa y volteo en esa dirección, Elodia es la única en esa dirección, lo cual comienza a preocuparme, espero que este bien vuelvo a mirar al capricornio, pero ha desaparecido. Comienzo a buscarlo con la mirada pero no está en ningún lado, comienzo a ascender para tener una mejor vista pero en un parpadeo miles de cuchillas, espadas, cuchillos están rodeando mi cuerpo de forma circular y todas apuntan hacia mi.

-Ahora eres la representación de la gravedad en la tierra-se burla capricornio, que está de pie abajo de mi- No podrás empujar a todas con tu gravedad.

Lo cual es cierto, son demasiadas que no podré hacer que todas caigan, miro hacia el cielo y cierro mis ojos.

-Mi cuerpo, mi alma y mis acciones te pertenecen padre, por favor limpia este ser pecador y hazlo digno de tu misericordia y amor- murmuro.

-¿Qué es lo que dices pequeña sabandija?-me grita, en ese momento abro mis ojos y lo miro, una sonrisa su pone en mi rostro-muere idiota.

Cuando las cuchillas comienzan a moverse, una por una comienza a caerse antes de golpear mi cuerpo y además hago que la gravedad dónde está capricornio aumente mientras su cuerpo intenta  sostenerse en el suelo que comienza a formar grietas, mientras su cara muestra una gran sorpresa y en ese momento pierdo la concentración por la liberación de otro zodiaco, su energía está al otro extremo de la lucha pero puedo sentirla tan fuerte como si estuviera cerca de mí, esto provoca que uno de  los cuchillos se clave fuertemente en mi muslo obligándome a caer mientras los cuchillos faltantes evito que impacten conmigo haciéndolos caer, mientras disminuyo la gravedad justo antes de tocar el suelo, lo que me hace flotar encima de este y levantar una pequeña nube de humo, no obstante soy sorprendido por una espada en mi dirección que me obliga rodar en el aire y luego por capricornio empuñando una espada hacia mí pero que logro sostener con mis dos manos sin que impacte con mi cuerpo, en ese momento hace que el cuchillo en mi pierna se retuerce y se entierre más en ella, lo que me hace perder el equilibrio, caer al suelo y por reflejo evitar el golpe echando la cabeza hacia atrás mientras veo como la espada pasa sobre mi cara, entonces, pateo su cuerpo hacia el cielo mientras aumentó la gravedad para enviarlo por los aires y sacar su cuchillo de mi pierna que comienza a sangrar, pero arranco un pedazo de mi gabardina y la coloco alrededor de ella fuerte y rápidamente para evitar miles de cuchillos que se clavan en el suelo, justo donde hace unos segundos yo estaba. Lo veo regresar al suelo muy agitado.

-Eres un oponente formidable, por tus movimientos puedo deducir que escorpio fue el que te entrenó pequeño tezar- me dice mientras otro zodiaco al sur hace su liberación- volvamos esto más interesante.

Se lo que se refiere, mi pierna aún sangra, aunque la cubrí con la gabardina, esta intenta fallar y hacerme caer, pero me mantengo firme aun cuando veo su energía comienza a liberarse.

-Liberación- grita, mientras todos los cuchillos esparcidos por los alrededores van hacia donde él está y comienzan a girar alrededor de él y clavando en su cuerpo, que despide sangre por todos lados.

-Hace muchos cientos de años-

-El cielo-

-Escorpio-

Hace tiempo que el padre me creo, sin embargo, siempre me siento a ver a los humanos, intento entender ¿cómo es que padre los ama tanto?, es curioso, él sacrificó a su único hijo para que ellos encontrarán salvación. Me gusta la libertad que tienen ellos, tienen la posibilidad de creer o no en el padre, aunque esto es un poco absurdo a veces, creo que envidio su libertad. Siempre me he sentido que no encajó entre los ángeles, me siento sucio y aveces inferior. Me pregunto si ellos también tienen impulso hacia los humanos, hace poco que unos cuantos ángeles cayeron por amar a los humanos. Vuelvo a concentrarme viendo fijamente a un humano, su vida me parece sorprendente, es un joven tiene cerca de 17 años humanos, hasta el momento se ha mantenido distante de cualquier relación con chicas humanas, los humanos conocen este acto de pureza, como virginidad, esto último en relación con la mujer que dio nacimiento a él hijo del padre. Intento ocultar mis deseos de conocer a ese chico, más de lo que he visto desde que era un niño. Si algún ángel descubriera lo que pienso sería castigo y lanzado a la tierra, perdería mi divinidad y me convertiría en un humano con poderes, suspiro y en ese momento noto que Teo está al lado mío mirando hacia la tierra también.

-Sabes que está mal…-lo murmura mientras se sienta a mi lado como si leyera mis pensamientos.

-No voy a hacer nada-le respondo mientras sus ojos escarlata se fijan en mí y comienza a jugar con sus dedos.

-No quisiera que sufrieras por ese sentimiento-me dice, él siempre es tan astuto e inteligente- Sabes que te apoyare mientras no te unas al ángel rebelde.

Dice esto con desagrado, esto debido a lo que pasó hace mucho tiempo, parece que aún no ha podido superar lo acontecido, por un momento veo una expresión de tristeza pero soy distraído por el aleteo de sus alas, siempre me han parecido majestuosas, siempre luciendo los colores de las piedras preciosas, mientras un escarlata dorada las intenta sofocar.

-Apesar de ser tu tío, siempre has demostrado ser mayor que yo-me burlo, él también se ríe y sus ojos escarlata dejan de mirarme y se fijan otra vez en la tierra.

-Es un chico lindo-me dice, eso me toma por sorpresa, siento que él sabe que me avergüenza y que posiblemente estoy sonrojado porque comienza a sonreír, vuelvo a mirar a ese chico, su cabello es dorado y la luz del sol brilla en su piel blanca.

-¿Crees que el padre me perdone?- Le pregunto mientras mi voz se ahoga y lágrimas comienzan a salir, el me rodea con sus brazos y comienza a pasar su mano por mi espalda, mientras gruño acerca de lo injusto que es esto, él se limita a decirme que todo estará bien mientras su alas me rodean.

-Él te perdonará, su amor no tiene límites, creo que deberías saberlo-me murmura mientras caigo dormido en sus brazos.

-Presente-

-Cerca de la colmena-

-Gaara-

Hace unos momento dos zodiacos liberan su energía lo cual nos tomó por sorpresa, puesto que ambos estábamos mirando fijamente mientras él jugaba con el fuego en su mano, parecía que se burlaba de mí, entonces cuando este último lo liberó, se limitó a mirarme y luego suspirar.

-Lo lamento tezar, pensé que te darías cuenta de la diferencia de poder y te irías, lo cual estaba bien, ya que a mi no me interesa lo que suceda contigo-me dice con un asco en su voz, me limito a mirarlo fijamente con disgusto en mi mirada.

Golpeo la tierra con mi pie, pero leo lanza una bola de fuego que desvío con mi mano derecha cubierta de roca, él sonríe mientras crea varias bolas de fuego que envía en mi dirección que contrarrestó con pirámides de arena que atraviesan estas haciéndolas desaparecer pero son desintegradas con una llamarada que se expulsa del cuerpo de leo, esto hace que me cubra los ojos por la calor que de él irradia, hasta que me obliga a saltar hacia atrás puesto que su mano se vuelve un lanzallamas y el lugar donde estaba parado es completamente incinerado mientras él salta hasta ese lugar y sus puños se vuelven de fuego mientras corre hacia mi, pero lo detengo agarrando su pie cuando está lo suficientemente cerca y lo envío en la dirección contraria mientras creó muchas espinas de roca que lanzo en su dirección y él destruye con sus manos de fuego antes de acercarse mientras aún está en el aire, para luego enviarme pájaros de fuego que detengo creando un muro de roca y arena, que luego hago desaparecer para empezar a correr en su dirección mientras cubro mi cuerpo con muchas partículas de roca que se van adhiriendo a mi a medida que me voy acercando, mientras soy sorprendido por una flecha de fuego que pasa rápidamente por el lado derecho de mi cabeza, lo que hace que me detenga y luego sea golpeado con una bola de fuego, que luego la hago desaparecer levantando un escudo en forma de esfera alrededor de mi, para hacerlo desaparecer, mientras él me mira fijamente, ambos empezamos a correr. Cuando está la suficiente cerca le envío un puño que no puede esquivar obligándolo a girar su cara a la izquierda mientras que él me golpea un puño en el estómago lo suficiente fuerte para hacerme retroceder mientras creó muchas cuchillas de arena que lo hace saltar hacia atrás mientras comienza a lanzarme perros de fuego que rodean las cuchillas pero creo muros a ambos lados lo que hacen que impacten y cubran estos muros totalmente de fuego, vuelvo a mirarlo para llevar la sorpresa que miles de flechas de fuego están girando a su alrededor, él mira mi sorpresa en mi rostro y luego sonríe, en ese momento comienza a lanzar todas ellas que impactan con un muro de arena que fácilmente es destruido obligándome a correr mientras disparo esferas de arena que van destruyendo poco a poco algunas flechas hasta que soy sorprendido por una gran bola de fuego que logro esquivar rodando a la derecha y creando un muro de roca que detiene algunas flechas mientras me levanto y sigo corriendo, hasta que me volteo para mirar el montón de flechas que comienzo a destruir con esferas de arena hasta que todas impactan contra mi mientras me defiendo con mi brazos mi rostro y luego es seguido por muchas bolas de fuego que comienzan a impactar con mi cuerpo lo que hace crear un gran tornado de fuego que cubre todo mi cuerpo. Es sorprendente como la ropa se mantiene intacta aún con la cantidad de fuego, los que significa que está ropa no sólo nos potencia nuestras habilidades sino que también sirve para defender nuestro cuerpo. Leo no ha parado de enviar ataque tras ataque, puedo ver como la armadura de partículas de roca mantiene la piel que es expuesta segura pero comienza a volverse roja, empiezo a caminar fuera del espiral de fuego pero leo lanza dos bolas más de fuego que detengo con manos de arena y las desintegró, uso esas mismas manos para enviarlas en forma de puño mientras este intenta contrarrestarlo con muchas bolas de fuego que solo impactan con los puños y los cubren con fuego, pero este intenta evadir los ataques pero agarro sus pies con la arena que está dejo de ellos lo que lo obliga a cubrirse con sus manos mientras los puños golpean contra él. En ese momento salgo del espiral de fuego mientras siento la liberación de otro zodiaco, pero esta vez siento como todo mi cuerpo se paraliza y pareciera que el alma acabara de abandonar mi cuerpo, porque mi cuerpo cae al suelo sin poder defender con mis manos, mi cuerpo no puede reaccionar ante esa energía, me pregunto ¿quién puede estar luchando contra ese monstruo?, desde esta distancia su energía es tan asfixiante que no puedo mover mi cuerpo, en ese momento puedo escuchar la risa de leo mientras se está acercando.

-Te lo dije, las diferencias de poderes son demasiado para tezars, sin embargo, has dado una buena lucha...pero esto ha llegado a su fin-me dice mientras una lanza de fuego se pone en su mano, intento mover la arena, pero ella no me responde es como si todas mis fuerzas hubieran sido sacadas, sin embargo logro crear un pequeño muro de arena que apenas y puede detener la lanza que se clava justo en mi pierna derecha, chillo de dolor pero mi cuerpo no puede moverse.

-El miedo es algo completamente natural, y más cuando te encuentras de frente con alguien que supera tus habilidades-me vuelve a decir mientras otra lanza de fuego se pone en su mano y la envía contra mi brazo izquierdo otra vez el pequeño y débil muro de arena no puede defenderme.

-Tonto es inútil…- me gruñe mientras su pierna se vuelve de fuego y comienza a patear mi cuerpo hasta que soy lanzado lejos y doy vueltas en el suelo.

En ese momento hay otra liberación muy lejos de mí, sin embargo, esta hace que mi cuerpo pueda volver a moverse y como puedo, intento levantarme mientras uso mi arena para sacar lentamente las lanzas de fuego.

-Parece que no te rindes- me dice molesto mientras apunta un dedo hacia mi pecho en forma de pistola y delante de él, una gran bola de fuego se crea y luego rápidamente se comprime- este es tu fin, las llamas de leo te extinguirá para siempre.

Cierro los ojos mientras la calor comienza aumentar y siento como es lanzada hacia donde estoy, sin embargo, siento como algo salta por encima de mí, en ese momento abro mis ojos para ver una silueta masculina lanzar una patada cubierta de agua y enviar el ataque de leo hacia la derecha, luego este impacta con una roca y veo con se estalla y todo alrededor se cubre de fuego y finalmente se vuelve cenizas.

Cuando intento preguntar ¿quién es? y ¿porque me ha salvado?, unos brazos helados me rodean y una dulce voz me pregunta si estoy bien, yo asiento y ella se gira para mirarme de frente empieza a analizar mi cara y luego mi cuerpo se fija en las dos heridas e inmediatamente crea muros de hielo sobre ellas.

-Me Alegra que estés bien-me dice mientras me abraza fuertemente, este cambio de temperaturas no me hace sentir muy bien.

-Yo también me alegro que estés bien-le murmuro mientras coloco mi cabeza sobre su cabello y respiro profundamente.

-¿Qué te pasa acuario?- grita leo, eso nos sorprende y hace que nos separemos, sin embargo yo sigo rodeando su cuerpo con mi brazo derecho.

-Tengo que detenerte leo-le dice el muchacho frente a nosotros, entonces me fijo en las heridas de su cuerpo y que toda su ropa está manchada de sangre, entonces me doy cuenta que la ropa de Alice también está cubierta de sangre, ella me mira y niega con la cabeza y voltea a mirar el chico, parece que intenta decirme que la sangre pertenece a él, entonces él fue el zodiaco que tuvo que enfrentar, sin embargo está de nuestro lado, o al menos eso aparenta.

-Hace muchos cientos de años-

-El cielo-

-Escorpio-

Todos los días camino hasta este lugar y me siento a ver a ese chico, a veces creo que ya mi cerebro lo hace por impulso, Teo ha venido más seguido a acompañarme y darme ánimos en la decisión que voy a tomar, volví a mirar a ese chico, cerré mis ojos y recordé las palabras de Teo, “eres una persona increíble tío, yo te ayudare a ocultarlo, sabes lo que debes hacer, solo…”.

-Salta…-murmuro y ya estoy bajando del cielo hacia donde está ese muchacho.

Él vive en una granja apartada, hay un pueblo cercano a muchos kilómetros, por ende paso primero aya por algo de ropa más común y luego regresó a la granja. Hay una casa cerca de la vía de tierra y un granero al fondo, ambos están cubiertos de árboles y hay animales corriendo por ahí, él vive con sus padres sin embargo ellos no se encuentran en este momento, empiezo a caminar dentro pero su voz me toma por sorpresa.

-¿Se le ofrece algo? -Es una voz fuerte, el sale detrás de la granja y me mira fijamente, eso hace que mi cuerpo tenga un escalofrío.

-Estoy perdido…-alcanzo a decir, él lleva puesto unas botas y un mono de granjero sin camisa y la tira de la izquierda cuelga suelta del traje, lo que deja su pecho izquierdo al descubierto.

-Hay un pueblo cerca solo tiene que seguir ese camino señor-me dice acercándose a mí y señalando el camino por donde acabe de venir. No se que responder así que me quede mirándolo con la boca abierta, debo parecer un tonto ante él, que solo se limita a mirarme.

-Lo que quiero decir es que necesito trabajo, pensé que podría ayudar aquí en cualquier cosa-le digo rápidamente intentando ocultar el nerviosismo de mi voz.

-Mis padres no se encuentran-se limita a responder y comienza a pensar, debe estar pensando qué hacer con un vagabundo que se postró en la entrada y no quiere irse.

Sin embargo era más atractivo ahora que estaba cerca, no es que desde el cielo no lo pudiera ver bien, incluso podía verlo detalladamente, solo que la sensación de cercanía me es asfixiante.

-Yo puedo hacer lo que sea, no tengo dinero, hogar o familia-intento suplicar, él vuelve a mirarme, deja escapar un suspiro y abre la puerta.

-Mis padres me mataran por esto, por favor pasa-me dice mientras cruzo la puerta y me pongo frente de él, estiro mi mano hacia él.

-Mirlo, encantado de conocerte-le digo él sujeta mi mano y puedo sentir como el aire comienza a faltar, pero regresa cuando él responde.

-Harry señor Mirlo-me dice, escuchar mi nombre de su boca hace que me sienta bien, él es el que suelta mi mano, lo cual me hace sentir tonto y avergonzado por sostenerla tanto tiempo.

-Puedes hacer estas cosas mientras mis padres llegan-comienza a decirme mientras me lleva por el lugar, en algún momento pierdo el hilo de la conversación y solo me limito a asentir.

Nunca imagine poder sentirme tan feliz y seguro cerca de alguien, sin embargo, sabía muy en el fondo que estos sentimientos no durarán para siempre, pero no deje que eso arruinara este momento, así que, cuando él volteo a mirarme yo solo le mostré la mayor sonrisa que podía dar y él me devolvió la suya.

-Presente-

-Cerca de la colmena-

-Ruth-

Su respuesta aun me deja sorprendida, sin embargo ella se mantiene apacible y levanta una mano hacia mi, entonces yo doy un paso atrás, veo mis espada aun cubierta de vidrio debajo del espejo con la imagen del chico.

Empiezo a correr hacia donde está ella pero soy detenida cuando siento la liberación de un zodiaco, pero esta era diferente a las demás, porque esta limito mis movimientos unos segundos, haciéndome voltear hacia donde venía la energía, es impresionante la cantidad de energía liberada.

-Virgo….-dice libra y mientras en su mano comienza formarse un cristal, vuelco a correr hasta llegar al vidrio que pateo hacia izquierda mientras uso mi telekinesis para detener los cristales que me arroja de su mano y enviarlos hacia arriba mientras golpeo el cristal donde está mi katana con mi telekinesis y la levanto mientras que con la otra mano voy enviando lejos los pedazos de cristal, en ese momento miro hacia arriba para ver miles de cristales que había mandando a volar girando sobre mi cabeza y luego empiezan caer pero detengo los que se intentan llegar a mi cuerpo mientras que los otros impactan fuertemente contra el suelo levantando una gran nube de humo, lo que me obliga a usar mi telekinesis para detener todas las partículas que habían caído y se dirigían hacia mi posición, utilizo mi katana para destruir los cristales mientras me hago paso a través de la nube de humo, cuando por fin salgo me doy cuenta que una fila de cristales se dirigen hacia mi, me detengo y me giro coloco la katana frente de mi y comienzo a girar la katana a gran velocidad, destruyendo los cristales que se acercan y creando una gran nube de polvo de cristal.

Tomó mi katana y me impulso hacia adelante con mi telekinesis por encima de la nube de humo y cristal, cuando veo a libra sujeto la katana sobre mi cabeza y la mueve hacia ella pero ella se defiende creando un espejo sobre su cabeza, sin embargo, el espejo no es capaz de soportar la presión de la katana y la telekinesis y comienza a romperse, lo que obliga a libra a levantarse y  comenzar a retroceder mientras el espejo se destruye y yo caigo cerca de ella, pero una vez que toco el suelo me acerco corriendo hacia donde está ella que sigue retrocediendo y vuelve a crear los cristales pero los destruyo con mi espada cuando están lo suficiente cerca, levanto la katana sobre la cabeza de ella pero en ese momento el espejo de hace un momento se interpone entre nosotras y me muestra la imagen de la hermana pamela.

-Ruth…- me murmura y luego ella sonríe en el espejo.

-El Amor es una enfermedad y puede matarte-murmura libra.

-Eres una monstruo sin corazón -le grito mientras mi katana tiembla en mi manos, ella cierra los ojos y vuelve a abrirlos, su rostro se mantiene a un inherente de emoción incluso cuando estuvo a apunto de ser cortada por mi katana. En ese momento siento la liberación de muchos zodiacos que hace un momento no pude notar por la batalla.

-Es mi turno…-murmura mientras comienzo a retroceder por la energía que empieza desprender, le lanzo mi katana pero es desviada hacia mi dirección nuevamente por un campo de fuerza que comienza a girar en torno de ella y luego el espejo con el rostro de la hermana pamela se agrieta hasta que se destruye.

-Liberacion -vuelve a mientras la energía se adhiere a su cuerpo.