Ya es jueves al medio día y me siento horrible, no pude dormir en toda la noche y ¿Cómo dormir después de lo que paso? es simplemente imposible, solo pienso en Taehyung, recuerdo su rostro, sus lágrimas, las palabras de Hyun y mi cuñada, ahora me odian no quieren ni verme, ni si quiera saber que existo. Me miro en el espejo y simplemente me veo fatal, tengo ojeras, estoy pálido y los ojos hinchados de tanto llorar, creo que en realidad nunca me había sentido así, es horrible y lo único que quiero es estar encerrado el resto de mis días, no quiero ver a nadie y mucho menos quiero hablar con nadie...

Solo con él, solo quiero verlo a él.

Me pregunto que habrá pasado con Taehyung después de que se fueron de aquí, no saben esta impotencia que siento por no poder hacer nada, quiero saber cómo está, como se siente, que le dijeron sus padres, solo ruego que Hyun no haya enfurecido aún más como para hacerle algo, el solo recordar cuando le dio esa bofetada me hierve la sangre, así que espero por su bien no se haya atrevido a tocarlo. Esta maldita agonía me está volviendo loco, tengo que hablar con él, tengo que escucharlo, tengo que saber que está bien, tengo que llamarlo, no me importa nada.

Tomé mi teléfono y le llamé a su celular, no puedo llamarlo a su casa porque obviamente sus padres jamás me lo van a comunicar y además de eso me voy a ganar unos cuantos insultos más. Sonó una, dos, tres y contestó por fin.

—¿Qué mierda quieres? —maldita sea es mi hermano — creo que fui muy claro al decirte que te quería fuera de la vida de mi hijo y eso incluye llamadas telefónicas.

—Solo quiero saber cómo está, necesito escucharlo —le dije usando el mismo tono que el uso conmigo, ahora mismo me vale mierda buscar su perdón o ser amable, solo me importa él, solo me importa mi Taehyung.

—Olvídate de mi hijo, no lo vuelvas a llamar, no lo busques...

—Papá déjame hablar con él por favor —Alcancé a escucharlo un poco a lo lejos, está ahí, dios mío escuchar su voz temblorosa hace que un fuerte escalofrió me recorra todo el cuerpo.

—Vete a tu habitación ahora mismo Taehyung.

—Por favor —comenzó a llorar. Maldita sea esto es demasiado dolor para mí, no lo soporto.

—Hyun, solo déjame hablar con él te lo pido por favor —mi voz también se quebró.

—No te atrevas a volver a buscar a mi hijo, Jungkook y te lo estoy diciendo muy en serio, créeme que tengo unas enormes ganas de ir y pegarte un maldito tiro en la frente, así que no me tientes, porque si no lo hago es por mis padres, que por cierto mamá va para tu casa, pero no te preocupes porque ni ella ni papá saben absolutamente nada, no pienso causarles el mismo dolor que ahora estoy sintiendo yo. Taehyung no saldrá de aquí si no es conmigo o con su madre y no tiene ni teléfono ni computadora, así que vete haciendo a la idea de que no volverás a verlo.

Colgó sin darme oportunidad de decir nada. Maldita sea ¿por qué las cosas tenían que ser así? Todo iba tan bien, estábamos más que felices, ya no había nada ni nadie que nos hiciera la vida imposible y ahora, justo ahora, pasa todo esto, no puede ser, aun no lo puedo creer. No puedo verlo, no puedo hablar con él, me tienen prácticamente atado de manos, lo tienen más que vigilado y es imposible tener algún tipo de contacto con mi pequeño. Esto es un infierno.

Ahora otro gran problema, mamá viene para acá, maldita sea no puede verme así, seguramente me va a hacer mil preguntas y yo no sé qué mierda voy a contestarle. Pero algo que debo agradecer a Hyun definitivamente es que no les haya dicho nada a mis padres, esto sería algo... no se siquiera, creo que al enterarse sería lo más doloroso que ellos pudieran experimentar, sentirían decepción, dolor, coraje, rabia, asco todo al doble de lo que siente mi hermano. El timbre sonó y de mala gana fui a recibir a mi madre, nunca me ha gustado mentirle, pero ahora debo hacerlo por el bien de todos. Abro la puerta y la veo, ella al verme se sorprende, obvio por la facha que tengo, me mira de arriba abajo, solo tengo una playera, una Bermuda y mis tenis, estoy despeinado y mi cara bueno ya saben.

—¿Pero ¿qué te ha pasado Jungkook? —preguntó mamá con sorpresa.

—Hola mamá —la abracé con fuerza y ella de inmediato me recibió en sus brazos, comenzó a acariciar mi espalda de arriba abajo como consolándome, aunque no tiene ni idea de el porque lo hace.

—Ven pasa —hice que pasara y la llevé hasta la sala —¿te ofrezco algo de tomar?

—No gracias, prefiero que me digas que te pasa —nos sentamos en el sillón.

—No pasa nada ma, es solo que tengo mucho trabajo y no he parado.

—Ummm, no sé porque no te creo Jungkook... Por favor dime que tienes.

—En serio que no es nada.

—Vengo a ver a mi hijo después de no verlo ya hace un tiempo, y lo que me encuentro es a un hombre que parece zombie.

—No pasa nada de lo cual debas preocuparte.

—Bebé, no sé si recuerdes que soy tu madre y te conozco perfectamente.

—Mamá ya no soy bebé.

—Para mí tu siempre serás mi bebé —tomó mi mejilla con su mano tan dulcemente. Un enorme nudo se me formo en la garganta, les juro que estoy a punto de echarme a llorar como un niño, quiero que me abrace y que me diga que todo va a estar bien pero no puedo hacerlo, no por la verdadera razón de mi estado, así que solo me limite a sonreírle.

—Anda mi vida, dime que tienes.

—Te juro que no es nada, solo es el trabajo. Tengo un proyecto importante y me desvelé en el —me miró unos segundos con los ojos entrecerrados y yo solo volví a sonreír divertido.

—Ok Jungkook haré de cuenta que te creo —dijo rendida por fin. Bueno la parte difícil ya paso.

—¿Y mi papá?

—Se fue al super con Sun-hee, ya sabes que le encanta andar caminando y de aquí para allá. ¿Por qué no vienes a comer a casa de tu hermano para estar todos juntos? —mierda.

—No ma, te repito tengo mucho trabajo y no puedo dejarlo para después.

—Anda solo es un rato.

—No lo siento, no puedo retrasarme.

—Bueno, está bien —suspiro —estas muy rarito Jungkook pero bueno, cambiemos de tema. Dime ¿Cómo has estado?

Pues bien, puro trabajo nada fuera de lo normal —me enamore de tu nieto que es mi sobrino, con él he pasado los mejores momentos de mi vida y ahora tu hijo lo sabe, él y Sun-hee me odian a muerte y no van a permitir que lo vea nunca más.

—De maravilla, todo... va bien

—Me alegro tanto por ti hijo, por cierto ¿Y Wheein? ¿Siempre no regresaste con ella?

—No ya no, de hecho, ella ya no vive acá, se fue con su hermano.

—Oh, es una lástima, ella me agradaba, era un poco... especial, pero me agradaba.

—Si es una buena chica, estoy seguro de que le ira muy bien.

—Pues sí. Por cierto, quiero tu opinión.

—¿Sobre qué?

—No sé qué regalarle a Taehyung por su graduación, no sabes lo feliz y orgullosa que me siento, y te pregunto a ti por que sé que lo conoces mejor que nadie —Escuchar su nombre es como si me apachurraran el corazón. ¿Qué si lo conozco mejor que nadie? Dios mamá, si tú supieras todo lo que lo conozco.

—Pues, no lo se. Él no me ha dicho sobre algo que quisiera, ¿porque no mejor lo llevas de compras y que escoja lo que le guste?

—Sí, buena idea —Sonrió y después todo fue silencio, la verdad es que no sé qué decirle, quiero estar solo, no tengo ánimos de nada y menos de hablar con ella, no más bien con nadie, siento horrible no decirle lo que está pasando, pero sentiría más horrible ver su rostro al enterarse de todo. — Jungkook, yo sé que algo te pasa, y aunque me cueste mucho voy a respetar tu silencio, pero quiero que sepas que siempre puedes contar conmigo, te amo, eres mi hijo y no hay nada que yo no haría por ti.

—Gracias mamá. pero de verdad no pasa nada, solo es que tengo sueño, de verdad.

—OK, ok, ya no diré nada más. Así que si tienes sueño lo mejor es que me vaya, seguro tu papá y Sun-Hee ya volvieron —nos levantamos y la acompañe hasta la salida, no saben cuánto le agradezco que se vaya, sé que veo muy poco a mi madre, pero con estos ánimos que me cargo no es buena idea estar acompañado.

—Te veo mañana en la graduación de Taehyung ¿está bien? —mierda, ¿ahora que le digo? Si le digo que no iré, comenzara a preguntarme por qué y bla bla bla, carajo.

—Si claro, mañana te veo —le mentí, será mucho más fácil simplemente no llegar.

—Bien, entonces hasta mañana y duerme que no te quiero con esa cara en la graduación.

—Ok ma, dormiré toda la tarde. Salúdame a papá.

—Claro, bueno —me abrazó y besó mi mejilla —cuídate mi vida, te veo mañana.

—Si, hasta mañana. Con cuidado.

Por fin se fue mamá, sé que no quedó muy contenta con mis respuestas sobre sus preguntas pero el que ella y mi padre se enteren solo complicaría mas todo, en verdad quedaría solo como perro para toda la vida, obviamente soy su hijo y me quieren, pero jamás me perdonarían que haya tenido una relación con mi sobrino, ellos lo adoran, es su pequeñita y sería algo devastador e imperdonable, ya perdí a mi hermano, a mi cuñada y al más importante a mi sobrino y amor de mi vida, no me sería de mucha ayuda quedarme sin padres también.

Mañana es su graduación, y será horrible no estar a su lado en un momento tan importante para él, sobre todo porque nuestro plan era disfrutarnos lo más que nos fuese posible antes de que se vaya a la universidad y ahora todo se fue al carajo. Si tan solo pudiera verla por 5 minutos, tocarlo, besarlo, sentirlo, quizá me sentiría menos mal ya que todo paso así de repente y no tuvimos oportunidad de decirnos adiós. Aunque, ahora que lo pienso, puede que haya una forma de verla por un rato... Si, ya sé lo que voy a hacer, necesito verlo, necesito hablarle y mi hermano y todo el mundo se pueden ir al carajo, yo lo necesito.

Llegué al auditorio del colegio de Taehyung en donde será la ceremonia, tuve que ingeniármelas para poder entrar por atrás para que nadie se diera cuenta y me pidieran me retirara con los padres de familia, y no me voy a arriesgar a que Hyun o mi cuñada me vean. Aquí veo alumnos todos de vestido y trajes, maestros y gente que está a cargo del sonido y todo sobre el evento, falta una hora para que inicie, pero por lo que se, citan antes a los alumnos, ¿para qué? No tengo idea, pero tampoco es algo que me importe, lo único que quiero y deseo es encontrarlo y proponerle lo más descabellado que se me ha ocurrido jamás.

Llego a una parte donde hay varios salones, supongo que los usan para ensayos y todo tipo de clases de artes. Todos están llenos de alumnos hasta que no sé cómo logro encontrar a uno de los chicos que me ayudaron en el juicio contra el pendejo de Bogum.

—Hola —lo saludo.

—Hola Jungkook, ¿Cómo has estado?

—Bien gracias ¿y tú?

—Yo bien también.

—Me alegro... una pregunta, ¿sabes en dónde está Taehyung?

—Si, está en el tercer salón a la derecha.

—Perfecto, gracias.

—De nada.

Salgo de ahí directo al salón donde me indicaron esta Taehyung, y cada que me acerco siento que mi corazón se acelera, no veo el momento de tenerlo frente a mí. Llego por fin y lo busco con la mirada y veo a Jimin que me ve inmediato, me sonríe y le da un pequeño golpecito al chico que está frente a él y entonces voltea, nuestras miradas se cruzan, siento que mi corazón saldrá de mi pecho en cualquier momento, en ese momento todo desaparece, solo estamos él y yo, nadie más, se establece una línea de corriente eléctrica que nos atrae a los 2 y que al mismo tiempo vuelve a darle vida a mi corazón. Comienzo por caminar entre la gente, ahora mismo no me interesa nada más que llegar a su lado, hasta que por fin lo tengo frente a mí, sus ojos ya están cristalinos, no puede creer que yo esté ahí, así que tomo su rostro entre mis manos y uno mis labios contra los suyos e importándome una mierda y media, lo beso como quería hacerlo desde que sus padres la alejaron de mi lado  

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CAPITULO 48

FALTAN 2 PARA EL FINAL

EL QUE VIENE ESTA FUERTE, YO SOLO AVISO.

YAYIS  💜💜💜💜💜💜💜