El fin de semana llego, por fin lejos del trabajo. Desde el martes pasado no he visto a Tae, solo he podido hablar con él. Esa fue la primera noche que pasamos juntos y fue increíble. Claro después de haberlo amarrado no crean que lo perdoné, oh no, le hice el amor prácticamente toda la noche. Sabía de antemano que no podría estar con él el resto de la semana así que aproveche.

Sobre la demanda, bueno Jin ha estado haciendo preguntas en el colegio de Tae, claro que él y Jimin lo han ayudado a entrevistarse con las personas que ellos saben vieron todo, los chicos están dispuestas a todo para que Bogum no se salga con la suya y les agradezco su ayuda y apoyo. El lunes ya dan la fecha del juicio ya quiero que toda esa mierda termine y me siento tranquilo. Jin dice que tenemos muchas posibilidades, al parecer el idiota de Bogum solo fue a meter demanda sin asesorarse y el tiro le puede salir por la culata.

Ahora mismo voy camino a casa de Hyun, me invitaron a comer, además mi amor, quiere que esté a su lado pues hoy conocerá a su abuela materna y se siente algo nervioso por ello.

Al llegar, mi hermano es quien me abre la puerta, me dice que Tae y mi cuñada están arriba terminando de arreglarse y tratando de tranquilizarse, pues sobre todo Sun-hee tiene los nervios de punta.

—¿Y cómo estuvo Sun-hee después de volver a hablar con su madre?

—Bien, al principio estaba algo nerviosa pero cuando habló con ella por fin se alegró y pudo perdonarla por completo. Le ayudo escucharla y bueno, quedaron que sería hoy cuando por fin se encontraran. Sobre todo, porque quiere conocer a Taehyung.

—¿Y su padre?

—El está muy enfermo, ya es cuestión de tiempo... Y sigue sin querer ver a Sun-hee

—Qué triste que ni en su lecho de muerte pueda ser capaz de reconciliarse con su hija.

—Lo se. Ese señor siempre fue muy... riguroso muy... anticuado, no se.

—¿Cómo se llaman sus padres? —pregunté.

—Kim Lee Chan y Kim Shim-Hee. Aún recuerdo la mirada de Lee Chan-nim cuando supo que había embarazado a su hija —rio por lo bajo —por fortuna supo controlarse, pero estoy seguro que me hubiera descuartizado en ese momento —ambos reímos.

—Y dime, ¿Cómo se reconciliaron Sun-hee y Tae?

—Ah, los dos son iguales, son muy sentimentales. Sun-hee se sintió mal porque su hijo no se acercó a ella para platicarle... —se removió incomodo en su lugar —de su primera vez.

Oh, dios... Ellos piensan que la primera vez de Taehyung fue con Bogum, bueno supongo que todo mundo lo piensa, y eso la verdad es que me molesta un poco, no me gusta que piensen que ese pendejo fue quien lo... carajo. Pero bueno no puedo hacer nada, obvio no voy a salir a gritarle a todo mundo que fue conmigo con quien perdió su virginidad.

—Y Tae se sintió porque no le mostró apoyo después del error que cometió, se gritaron y se fue a tu casa. Ya al día siguiente hablaron ya sabes, tuvieron su platica de mamá e hijo, aunque pienso que yo soy quien debió hablar con él. Pero debido a su "orientación" supongo que siempre ha sentido un poco más de confianza con Sun-hee.

—Probablemente, de todos modos, sé que a ti no te molesta para nada. — Mi hermano asintió — Lo importante aquí es que todo se encuentra bien.

—Pues sí, no te voy a negar que me molesta un poco, sobre todo por ese cabrón, aun quiero partirle la cara... pero estoy seguro de que ahora Taehyung sabrá mejor con quien... mierda, no me gusta hablar de eso. Yo... aun lo veo como mi pequeño. Solo diré que espero mi hijo encuentre en un buen chico que lo haga feliz y lo satisfaga... en todos los sentidos —le dio un trago a su bebida nervioso. Yo solo sonreí, es divertido verlo ponerse así por hablar de su hijo y los hombres.

Aunque la sonrisa se me borró de inmediato, pues Taehyung ya tiene a alguien que hace todo por hacerlo feliz, por hacerlo sonreír y me da pánico el tratar de imaginar la reacción de Hyung cuando sepa que ese hombre soy yo.

El jamás va a entender que yo lo amo, que mis sentimientos hacia él son puros y verdaderos, y creo que es lógico que no lo entienda nunca, si estuviera en su lugar –por que en verdad me pongo en su lugar- yo jamás lo aceptaría. Dicen por ahí que nunca hagas lo que no te gustaría que te hicieran a ti, pero ¿Qué puedo hacer con lo que siento? Dios mío, que situación la mía.

mi sobrino y cuñada bajaron y... se ve tan apuesto, cada día me encanta mucho más. Luce tan guapo, amo cuando usa short de mezclilla y esos crop tops que dejan al descubierto su ombligo. Su sexy y precioso ombligo, que ganas de hundir mi lengua en el y tomarlo duro contra la pared.

Jeon, aleja esos pensamientos de tu mente.

Por ahora...

Saludé a Sun-hee, seguido de Tae al que obvio abracé con más fuerza mientras me llenaba de su exquisito aroma. Creo que nunca me voy a cansar de ello. Ambos estaban muy nerviosos y mi hermano y yo tratábamos de confortarlos y que se relajaran. Hasta que minutos después, sonó el timbre, sentí como Tae se tensaba. Sun-hee miró a mi hermano y el la besó dulcemente en los labios diciéndole que todo estaría bien, ella asintió con la cabeza y fue a abrirle a su madre, a la cual no veía desde hace más de 18 años.

Miré a mi Tae dedicándole una sonrisa tranquilizadora, la cual surtió un poco de efecto. Un minuto después Sun-hee volvió, tenía los ojos cristalinos, es un hecho que lloro de la emoción. Tras ella entró una señora muy bien conservada debo admitirlo, sin duda se ve que le gusta cuidarse al igual que mi madre, les gusta tener un lindo aspecto. La señora Kim Shim-hee es delgada y de cabello corto y color castaño, se parece mucho a Sun, de cara afilada y angelical. Primero ve a mi hermano y luego a mí y finalmente, mira a fijamente a Taehyung, es la primera vez que lo ve en persona y de inmediato sus ojos se llena de más lágrimas. Mira a mi cuñada y ella asiente con la cabeza, fue como si le pidiera permiso para acercarse a su nieto, y así lo hace, lentamente camina hasta Taehyung, no deja de mirarlo, la observa de arriba abajo.

—No puedo creer que seas tú —dijo con un hilo de voz y abrazo a Tae y fue cuando mi pequeño niño se quebró y comenzó a llorar, sin duda es un momento muy emotivo y más para él y Sun-hee. Todo fue silencio mientras se abrazaban con fuerza y emoción, me alegra tanto que mi amor por fin conozca a su abuela, él siempre lo quiso y sobre todo espero que ya no se sienta tan mal y deje de culparse por la separación de su madre con sus padres.

—Eres tan guapo y estas enorme, hace tanto quería tenerte así —dijo Kim Shim-hee, mientras secaba sus lágrimas.

—Yo tenía muchas ganas de conocerte.

—Y yo a ti, querido —tomó con cariño de su mejilla —las fotos no te hacen justicia, eres tan guapo.

—Gracias, tú también eres muy guapa, te ves muy bien.

—Gracias —volvió a darle un abrazo, pero esta ocasión más corto. Después miro a Hyun —Hola Hyun-ssi, ¿Cómo has estado? Sigues igual de guapo. —mi hermano apenado sonrió y saludo a su suegra.

—Bien, y gracias. Me da gusto volver a verle, le presento a mi hermano, Jungkook.

—Oh por dios... ¿él es aquel niño que en ocasiones llevabas a casa? —dijo mientras se acercaba a mí. La señora me conoció cuando tenía tan solo 7 años, y me conoce porque cuando mis padres salían me dejaban a cargo de mi hermano y el me llevaba a casa de Sun-hee cuando iba a verla.

—El mismo.

—Estas enorme Jungkook ¿Cuántos años tienes ya?

—25 —respondí y la saludé con una reverencia —Me da gusto verla de nuevo.

—A mí también, no tienes idea de cuánto.

Sonreí ampliamente. Todos tomamos asiento y comenzaron las preguntas. Ya saben ¿Qué has hecho? ¿Cómo han estado? A Tae sobre la escuela, a nosotros sobre nuestros trabajos... en fin. Shim-hee resulto ser una señora muy agradable, la verdad es que no la recordaba mucho, bueno solo que me daba galletas cuando íbamos a su casa. Ella es una persona muy culta, le gusta leer mucho sobre todo la historia universal, así que es seguro que tienes una plática muy interesante con ella. Después le preguntó a Tae por sus amigos y sobre si tenía novia, el en ese momento me miró con discreción y solo dijo que no, que aún no, claro no le contó de Bogum o sobre sus preferencias sexuales, probablemente pensó que no era un tema para este encuentro, ya tendrían tiempo para ello. Luego hizo lo mismo conmigo yo le conté de Wheein pero solo me limite a decir que no funcionó y terminamos. Al final llegó a lo más triste. Se disculpó de nuevo por cómo se comportó con su hija cuando más la necesitaba, se disculpó por no haber sido capaz de luchar por su hija y no haber enfrentado a su esposo, ella se siente muy mal por ello, pero, Sun-Hee la calmó, le pidió que no se siguiera atormentando, que eso ya es cosa del pasado y que ahora solo deben mirar hacia el futuro y recuperar el tiempo perdido. Incluso yo intervengo apoyando a mi cuñada, tiene razón, ¿Para qué torturarse con los errores del pasado? Si la vida les dio una segunda oportunidad, es mejor que la aprovechen y la disfruten al máximo.

—¿Y mi papá? —preguntó Sun-hee con melancolía. Su madre agachó la mirada.

—Está muy enfermo hija... ya no le queda mucho tiempo de vida, en cualquier momento se puede ir.

—Y... ¿siempre no le dijiste que vendrías a verme?

—No. Si lo hacía seguro se enojaba y no quiero perturbarlo, aunque traté de convencerlo de que te llame y hable contigo, pero es un terco y no quiere.

—Claro... entiendo —dijo con tristeza, pero mi hermano la abrazó para confortarla.

—Tu padre siempre fue un poco cerrado, nunca admitía cuando se equivocaba. Aunque no estoy segura de si alguna vez el en su interior lo acepto, pero al menos nunca pidió una disculpa o acepto que estaba mal. Ahora solo trato de que este tranquilo y hacerlo feliz, aunque me cueste mucho trabajo por que la verdad es que... le tengo un poco de rencor.

—Te entiendo un poco mamá. Pero, no hablemos de cosas tristes y ¿qué les parece si mejor pasamos a comer?, hice ternera en salsa, era tu favorita... ¿Lo sigue siendo? —Shim-Hee sonrió sorprendida y acaricio el rostro de su hija.

—Si mi vida, sigue siendo mi favorita.

Todos pasamos a la mesa y en la comida la plática volvió a ser amena, incluso hablamos de mis padres, los cuales ahora son unos grandes amigos para la abuela de Tae. Después de comer, la platicaba continuaba incluso le mostraron los álbumes de fotos que tenían, Shim-hee quedó encantada de verlas y le emocionó ver el crecimiento de Taehyung, por que por supuesto, mi hermano y cuñada tomaron cada momento importante en la vida de su único hijo. Mas tarde la madre de Sun-hee tuvo que despedirse, no sin antes prometer volver a verse y ponerse al día en todo. Taehyung le dio un fuerte abrazo, y pude notar como su rostro se llenaba de esa alegría genuina profunda.

Más tarde invite a mi sobrino al centro comercial y tomar un helado y él aceptó con gusto. Se que muere de ganas de que estemos solos y hablemos, pero decidí invitar a mi hermano y cuñada, también para no verme tan grosero, pero por fortuna no aceptaron, así que Taehyung y yo nos fuimos solos.

Todo el camino, se la pasó diciéndome lo feliz que estaba por haber conocido por fin a su abuela. Yo lo escuchaba gustoso, verlo así de contento y feliz me hace feliz a mí. Yo daría todo por ver esa sonrisa en su rostro todo el tiempo, él es mi vida entera y solo quiero lo mejor para mi amor.

Compramos nuestros helados, obvio de uva y chocolate y decidimos dar una vuelta por todo el lugar. Metí mi mano libre en el bolsillo de mi pantalón, y él pasó su mano debajo de él, yo hubiese preferido llevarlo de la mano, además de que me muero de ganas de besarlo, pero no podemos arriesgarnos a que alguien nos vea, así que con esto me conformo.

—Me alegra tanto verte tan feliz.

—Es que, de verdad, fue algo increíble haber conocido a mi abuela. Es tan linda, me agrado mucho.

—Si, a mí también me agrado. Y me alegro de que a partir de hoy inicie una relación entre ustedes, seguro serán muy cercanos.

—Si yo estoy seguro también... Pero hay algo que necesito para que mi día sea perfecto.

—¿Sí? ¿Qué cosa? —se acercó a mi oído y me dijo...

—Quiero que juguemos hoy mismo con el señor Pinky.

—Mmm, ¿En serio?

—Lo traigo en mi bolso, listo para lo que desees —cuando susurraba en mi oído su aliento me estremecía, me enloquecía, lo deseo ya.

—Vamos a mí casa, ahora mismo —lo tomé de la mano y comencé a caminar con rapidez. Dios, esto será increíble, como siempre es el sexo con él. Es único.
Pero justo al dar la vuelta en una tienda nos encontramos de frente con Wheein que iba acompañada de un chico, el cual recorrió de arriba abajo con la mirada a mi Taehyung. 

Carajo.

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GRACIAS POR LA ESPERA

BESOS VIRTUALES

YAYIS💜💜💜💜