CAPITULO 35
¿Ahora que mierda hago?
No puedo permitir que Wheein vea a Tae, en mi habitación y seguramente desnudo. Soy un idiota, no tenía por qué haber dejado pasar a Wheein, no más bien no tenía siquiera porque haber atendido cuando sonó el timbre. Ahora estaría haciendo cosas más importantes y placenteras.
—¡Contéstame, Jungkook! ¿Es una mujer la que esta allá arriba?
—¡No carajo! Wheein, por favor vete.
—Hay alguien, yo lo sé, por eso me dejaste, ya estas con otra.
—Por supuesto que no... No debiste de haber venido, ya te había dicho que no me buscaras.
—Ahora mismo voy a ver quién es esa zorra —corrió para subir las escaleras, pero la detuve a mitad de ellas. No sé en que puto momento comenzó a hacer un espectáculo, aunque por fortuna no había ningún espectador.
—Basta, te vas ahora mismo.
—Entonces dime quien es... ¡Sal maldita zorra! —comenzó a gritar y a forcejear conmigo para que la soltara y pudiera subir.
—Wheein cállate, no seas ridícula.
—Quiero ver quien es la zorra por la que me dejaste.
—Estas completamente loca —logré llegar con ella a la puerta pero no sé de dónde sacaba fuerza porque en verdad me estaba costando mucho.
—Suéltame Jungkook, quiero ver quien es...
—¡Ay pero que circo tan entretenido! —Escuché la voz de Taehyung que venía bajando las escaleras. ¿Pero que mierda hace? giré a verlo y me alivié al verlo con su ropa puesta y su cabello peinado —En serio que pena das Wheein, mi tío no está con ninguna "zorra" solo era yo.
—¡¿Tu qué haces aquí mocoso?!
—Vine a ver a mi tío, ¿Qué hay de malo en eso?
—Wheein, ya gritaste, ya hiciste tremendo espectáculo ahora vete por favor —le pedí con voz firme. Ella me clavo su mirada y me veía fijamente, me veía con curiosidad y luego hizo lo mismo con Taehyung. Trataba de averiguar algo con solo mirarnos. Nos estudiaba, nos analizaba, espero que esto no la haga sospechar absolutamente nada.
—¿Por qué no simplemente me dijiste que era tu sobrino quien que estaba allá arriba? —Dios, dame paciencia por favor. Suspiré exasperado y puse mis manos en mi cintura.
—Escucha Wheein, yo no tengo porque darte explicaciones sobre quien está o no en mi casa, de aquí entra y salen las personas que a mí se me den la gana.
—Por dios Jungkook, es que... aun no logro entender que fue lo que paso entre nosotros.
—Ya, por favor, deja de hacer esto. Valórate un poco.
—¿O sea que venir y tratar de recuperar al amor de mi vida es no valorarme?
—Si porque yo ya no siento nada por ti y te lo he dicho ya algunas veces... Vete por favor —Me miró unos segundos, hasta que por fin dijo.
—Está bien. Me voy y disculpa por molestarte —Miró a mi sobrino y el cínicamente le sonrió y le hizo adiós con la mano. Dios, lo amo. Me miró a mí de nuevo y salió de ahí, cerré la puerta de inmediato.
No puedo creer todo esto que acaba de pasar, me sentí casi descubierto, y si eso hubiera pasado no sé qué sería de mi en estos momentos. Pero por fortuna no paso nada, definitivamente tengo que hacer algo con Wheein, ya no quiero que me busque, lo que le dije hace unos momentos fue algo doloroso, pero espero sea suficiente, no me gustaría hablarle más feo.
—Vaya con tu mujercita— Taehyung se burló de mí.
—No es mi mujercita —me acerqué a é, lo tomé de la cintura, lo acerqué a mí con fuerza —solo tu eres mi hombrecito nadie más —Lo besé con posesión, hundí mi lengua hasta el fondo de su boca, mis manos fueron de su cintura hasta sus nalgas para apretarlas con fuerza atrayéndolo más a mí, quería que sintiera mi erección, aun me sorprendo de la facilidad con la que el me excita.
—Tú y yo tenemos algo pendiente cariño —le dije sobre sus labios y sentí como sonreía.
—Soy todo tuyo mi amor, puedes hacer conmigo todo lo que tú quieras.
—Mide tus palabras que no sabes todo lo que puedo hacerte.
—¿Sí? quiero verlo, enséñame de que es capaz Jeon Jungkook —eso fue suficiente. Me está retando y ahora sabrá de lo que soy capaz de hacerle.
Lo tomé con más fuerza de su trasero y lo cargué, rodeo mi cadera con sus piernas y subí las escaleras rumbo a la habitación, sin dejar de saborear sus hermosos labios. Tae se aferraba con fuerza a mis hombros y en ocasiones jalaba mi cabello. Lo quiero, lo necesito ya, pero justo me están pasando por mi mente imágenes de la vez que me castigo en casa de mis padres apenas el sábado pasado. Es momento de cobrarme esa que me tenía guardada.
Entramos a la habitación, cerré como pude la puerta y me acerqué a la cama. Hice que se hincara sobre ella, y con ardientes besos le quité su ropa, lo quiero completamente desnudo.
—Te amo, Taehyung.
—Yo también Jungkook, te amo mucho —Volví a besarlo con desesperación hasta que por fin terminé de quitarle toda su ropa, le pedí se acostara y fui a mi closet, saque un pañuelo de seda color morado. Recuerdo que fue él quien me lo regaló, y nunca lo he usado, creo que esta ocasión amerita que lo estrene. Me acerqué a mi pequeño travieso y le mostré el pañuelo.
—Yo conozco ese pañuelo —dijo con una sonrisa coqueta. Le pedí juntara sus manos y lo ate de las muñecas juntándolas, le pedí se acostara y levanté sus manos por encima de su cabeza, lo amarré a la cabecera de la cama —Mmm así que de esto se trata tu juego ¿eh?
—Es solo el comienzo, cariño —Le dije juguetón y me quité el pantalón del pijama quedando completamente desnudo ante él. Vi como recorría con su mirada todo mi cuerpo deteniéndose a mirar con detalle mi miembro mucho más que hinchado. Lo tomé con una mano y comencé a acariciarlo arriba y abajo sin dejar de mirarlo, Taehyung se retorció jadeante, me desea y está demasiado excitado, y es justo el efecto que quería conseguir.
Me subí a la cama y abrió sus piernas para darme paso entre ellas. Me acerqué a su rostro y volví a adueñarme de sus labios, esta vez lo besé más lento y al final tiré de su labio inferior. Besé su mentón, su cuello y bajé hasta sus pezones, lo recorrí con la lengua y después tomé uno entre mis labios y jale haciéndolo gemir, después fui al otro y repetí, al terminar dibuje la areola con la lengua y volví a meterlo todo en mi boca, jugué con él, lo chupé, lo succioné y lo jalé. La respiración de Tae cada vez iba más y más rápido y se retorcía con desesperación, quiere que me hunda en él, su cuerpo lo delataba pero esta vez lo voy a hacer sufrir.
Terminé de jugar con sus pezones y continué bajando con besos hasta que llegue a su pene, el cual ya se encontraba escurriendo liquido preseminal, tomé sus piernas, hice que las abriera un poco más para poder apreciar su pene y sus testículos, además de su entrada.
—¡Eres perfecto!
—¡Ah! Jungkook...
—No, no... Ya sabes cómo me gusta que me digas. — Llevé mi dedo a su agujero para comenzar a dilatarlo.
—¡Tío!
—Buen chico —me incliné y acerqué mi rostro a su vello púbico, inhalé y su delicioso aroma me invadió, es simplemente exquisito, deliciosamente exquisito. Repartí algunos besitos ahí hasta que llegué a mi destino, sin pensarlo hundí mi lengua hasta el fondo de su agujero, sentí como sus paredes anales se contraían alrededor de mi lengua. Quería retenerme, quería disfrutarlo más, pero la saqué de inmediato, volví a hundirla, fuera, dentro, fuera, dentro, fuera. Sentí como su pene se hinchaba y aproveché para llevar mi mano libre y comenzar a bombearlo.
Levantó sus caderas, buscando más placer, pero ejercí más fuerza en sus piernas, obligándolo a que no se moviera. Continué jugando con su ano, mientras mi mano continuaba masturbando su pene, estaba por venirse, pero me detuve. Que sienta ahora el condenado lo que es querer venirse pero que no te lo permitan.
Abrió sus ojos desmesuradamente, le sorprendió mucho que me detuviera, sin duda.
—No pares...
—Tranquilo cariño —sonreí y fui hasta su boca para besarlo. Gimió al sentir y saborear su propio sabor, el sabor más rico que pueda haber.
Bajé de nuevo hasta su pectoral y comencé a jugar con ellos. Con la palma de mi mano comencé a acariciar su pene que seguía chorreando, hundí tres dedos dentro de él con fuerza, gritó de nuevo. Tomé uno de sus pezones y lo mordí y volvió a gemir.
—¡Jungkook!
—¡Tío! Soy tu tío —Lo corregí.
—Si, tío... más, por favor —Aceleré el ritmo de mi mano mientras. Cada que mis dedos entraban, yo hacía círculos dentro de él para acercarlo más y más.
—¡Ah! Tío... así, me encanta.
—Así como... —Lo penetré de nuevo con los dedos con fuerza — ¿Así? O ¿Así? —Entré lentamente, pude sentir su próstata.
—Así... Así tío, mas... mas.
Continué e hice lo que él quería, una, está cerca, dos, ya casi y retiré mis dedos.
—¡Ay! No... no pares tío.
—¿Estabas cerca?
—Si, por favor me quiero venir.
—No es agradable querer venirte pero que no te lo permitan ¿cierto? —Clavó sus profundidades avellanas, me miró divertido, pero aun excitado.
—¿Esto es una venganza acaso?
—Algo así... además me retaste, yo solo te demuestro de lo que soy capaz.
—Me encanta de lo que eres capaz... Ya aprendí la lección, además quiero tocarte, necesito tocarte.
—Escoge... Tocarme o venirte.
—No tío, por favor...
—Elije.
—Venirme...
—¿Prefieres tu placer que el mío? —Le pregunté divertido, pero ofendido mientras enarcaba mis cejas.
—La verdad si... Ya me hiciste sufrir mucho, necesito venirme más de lo que crees.
—Umm, está bien. Te daré lo que quieres mi amor —Abrí más sus piernas y de una fuerte envestida lo penetré. Tae se arqueó lleno de placer y comencé a bombear una y otra vez, lo tomé con fuerza de las caderas, y aumenté mi ritmo, él quiere llegar y yo también.
—¡Ah! Dios, tío, lo tienes tan grande.
—Y es todo tuyo.
—Si, mío, solo mío.
—¿Y el señor pinky? —él me miró confundido mientras seguía gimiendo.
—En mi casa... ¡Ah!
—Tú y yo vamos a jugar con el... Así que, para la próxima, lo traes.
—¡Si! Si tío... —Una, dos, tres, cuatro y cinco profundas y posesivas embestidas.
—¡Taehyung! —grité cuando llegué al orgasmo.
—¡Tío! Dios... Te amo —Gritó al mismo tiempo cuando también había alcanzado su orgasmo que tanto anhelaba. Caí rendido a un lado de él y solo mirábamos al techo mientras nuestras respiraciones se normalizaban. Una estúpida sonrisa cruzó por mi rostro y aunque acabamos de terminar, no veo la hora para jugar con nuestro amigo el señor Pinky.
-----------------------------------------------------------
LA COSA SE PUSO CALIENTE 🥵🥵🥵🥵🥵🥵🥵
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro