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Capitulo 1

Todos conocen a nuestros queridos Méxicos, tres hermanos con grandes diferencias. Que conviven y respetan las disimilitudes que tienen cada uno de ellos.

El representante de los indígenas y el líder de nuestro país, lo conocemos como Centro, la que es amada por todos y que lleva consigo la corona de la antigua nueva España, la conocemos como Norte. Pero que era nuestro representante del Sur, el más joven de los hermanos.

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Un nuevo ciclo comenzó para México, por fin alguien pudo sostener el hasta de su país, y el nacimiento de una 'nueva' esperanza para los ciudadanos. México Centro se a echo presente este años 2019, renaciendo la unión entre mexicanos.

Los días pasaban tranquilamente, los tres hermanos volvieron a encontrarse, después de 17 años desde la desaparición de México centro. La felicidad de todos parecía una esfera de cristal, que podía romperse fácilmente.

La razón, el México más joven y nuestro principal protagonista, México Sur; a Sur se le veía atento a sus alrededores, como si estuviera cuidándose de alguna manera, de algo o de alguien, se movía a todas partes, como si un solo lugar no fuera seguro, salía con más frecuencia, y no decía han donde o con quienes se iba, parecía que no dormía o comía, y eso preocupaba a sus dos hermanos.

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En un hospital donde se encontraba Sur, tras el terremoto del 2017, fue el inicio del caos, la primera señal, de lo que sus hermanos conocían como el inicio de ese infierno que se creó su hermano menor. En ese momento estaba alterado, mientras sus manos no paraban de temblar, sosteniendo en su mano derecha un bisturí, tirados en el piso, se encontraban sur y el doctor que lo atendía, estaba bajo la amenaza del menor, Sur lo había rasgado con el bisturí, su mano y su rostro, el doctor aterrado, no para sangrar, eh intentaba pedir ayuda.

Los enfermeros llegaron para calmarlo, Sur al darse cuenta, reacciona y en un movimiento rápido, desapareció del hospital, para dirigirse a donde se encontraba su hermano centro, los enfermeros y el doctor, prefirieron no decirle nada a México norte, para que ella no se preocupara...

Pero..., tras pasar dos meses, no tuvieron de otra que contárselo, ya que Sur estaba presentando síntomas muy extraños de paranoia y amenazas al aire, como si estuviera luchando, y siempre alguien salía herido por sus acciones y eso no era para tolerarse.

Tras saberlo, ambos hermanos vigilaban a Sur, querían saber qué es lo que le pasaba a su hermano tan inquieto..., y preocupado..., pero este nunca dijo el porqué.

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La segunda señal, paso en enero del 2019, en la ciudad de Atlixco, puebla donde una pequeña chica, caminaba por las montañas en busca de "su antiguo representante", hasta que lo vio durmiendo en un árbol, pero ese árbol estaba un peñasco que iba a un rio.

-Conque allí estas- exclamo una pequeña chica, de colores blanco, amarillo y azul con un vestido tradicional y algunas vendas- sabes cuánto tiempo lleva la tía norte buscándote.

-hagg...allí vas de nuevo con el regaño- se quejó el sureño, mientras se sentaba en la copa del árbol, para mirar a su hija puebla.

-No vengas con eso Sur, sabes perfectamente que no te la puedes pasar todo el día durmiendo y flojeando en cada parte de México y peor aún, cada día mas duermes en lugares más peligrosos, solo mírate, estas entre un árbol y un risco, no puedes vivir pensando que tus poderes te salvara.

Sur, intentaba con todas su fuerzas prestarle atención a puebla, pero el joven mestizo sentía su cuerpo pesado, como si cargara 20 bolsas de sementó, y sentía sus ojos cerrarse lentamente, y la voz de su hija, cada vez más se oía más lejana. Lo único que pudo escuchar al final fue un ''me escuchas'' de Puebla, y de repente el cuerpo del sureño callo del árbol.

-¡PAPÁ!- Grito puebla alterada por la caída de su padre del árbol hacia debajo del risco.

Sur al escucharla, observaba que se dirigía al agua, se trasporto hacia atrás de su hija Puebla, quien hizo un ''¡HA!'' cuando escucho el cuerpo del sureño caer unos metros detrás de ella.

Puebla se dirigía a Sur con preocupación, mientras este se levantaba con dificultad, Puebla podía observar los ojos de su padre, tenía ojeras en ella, su mirada parecía muerta, sin ningún brillo y sin signo de vida, pero en ella se encontraba una sonrisa pícara.

-Jejejeje...me me dijiste papá-en eso Puebla le pone sus sandalias en la cara de su padre.

-¡No es verdad! ¡Y vete a dormir en un lugar normal por una vez en tu maldita vida!-recriminada la sureña, mientras su padre bajaba sus hombros y asentía con la cabeza.

Puebla observaba como se iba su padre, mientras se tambaleaba al caminar, y desaparecía de su vista, como un soplido de viento.

Puebla le contó lo sucedido a Centro, este simplemente asintió y le dijo que vería que hacer. Pero el propio Centro sabía que no podría con la actitud cerrada de su propio hermano, Centro no sabía que le pasaba, lo recordaba menos atrevido y cascarrabias, pero como el dicho dice, ''los tiempos cambian'' y parecía que ese cambio no iba a buen camino para su hermano menor.

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Norte se encontraba en su oficina, haciendo un reporte de los productos y ventas de cada uno de sus hijos, con que regularidad hacían los envíos y la cantidad de productos que podían hacer. Además de presentar reportes sobre las actividades de la policía en cada estado del norte, lo cual era difícil, porque algunos de sus hijos se negaron a presentárselo.

Pero en la mente de la mexicana se encontraba la imagen de su hermano, preguntándose si..., '' ella no lo conocía lo suficiente'', acaso, '' no crecieron juntos'' y la cruda realidad siempre la golpeaba...

-*Claro que no...yo y Sur siempre estuvimos separados, diferentes nanas, diferentes amigos, diferentes actitudes y decisiones, claro que no conozco a mi propio gemelo* - se cubría su rostro frustrada, apoyada sobre la meza, mientras sus pensamientos se hundían.

El sexenio pasado se la pasó totalmente inconsciente, durante 4 años, no sabe todos los términos de lo que sucedió en su ausencia, simplemente se vio a sí misma, volando, y despertando en un hospital de Cuba. Después solamente salió de ese hospital y fue a la búsqueda de su hermano, en cuanto sintió la presencia de sur cerca de ella, lo único que hizo fue abrazarlo fuerte y de unos segundos su hermano ya estaba inconsciente en sus brazos.

Norte se culpaba, no sabía que es lo que le pasaba a su hermano, y cada día, era peor, se veía cada vez más flaco, ojeroso y perdido; lo único que podía pensar era, "Soy la culpable de todo lo que mi hermano está sufriendo".

Un sonido interrumpió sus pensamientos, ella levanta su rostro y buscaba con sus ojos el producto de ese sonido. A su lado ella observaba, que su celular se iluminaba con un nombre: ''Alemania''.

Norte sostuvo su celular con pesadez, contestando la llamada que le hacia el europeo, ella lleva su celular a su oído y escucha la profunda y tranquila voz del alemán.

-Muy buenos noches, desde aquí Norte.-Saludo cortésmente el alemán al ser, correspondido por su llamada- espero no molestarte en un momento importante.

-No te preocupes, solamente estoy haciendo algunos reportes- Contexto la mexicana con el idioma del europeo.

Todos sabían de antemano que Norte, es una mujer dotada para los idiomas, no solamente el de su gente, si no que aprendió otros idiomas de otros países con el tiempo.

-Estás segura. ¿Te oyes agotada?- Pregunto el europeo preocupado.

-Estoy bien, yo solo...

­-Norte, no quiero ser grosero, pero si algo sabemos bien de ti, es que, aunque mientas, tu voz me dice que estas cansada. Así que por favor, por el bien de tu salud, dime... ¿Estas bien? ­– Alemania escuchaba un fuerte suspiro se hizo escuchar por parte de la norteña.

-No estoy segura, ultimadamente Sur ha estado inquieto y alerta.

-Para mí eso suena algo normal en él.

-Tal vez para ti, pero algo no anda bien con mi hermano, puedo sentirlo, él puede ser alguien defensivo e inquieto, pero ultimadamente se comporta de un modo, que hace temblar a quien se le cruce. – Norte no sabía que era, pero ella misma intentaba atar los cabos de lo que su hermano podría estarle pasando.- Es como si toda su felicidad y energía se desvaneciera...y me da miedo que esté sufriendo por su cuenta...

-lo entiendo...no han intentado, ¿Hablar con él?

-Sí, pero él siempre dice que está bien...y hay días en que sí parece estar bien...o simplemente ya no sé cómo diferenciar el estar bien con estoy sufriendo.

-Y porque no simplemente lo llevan con alguien que pueda resolver sus problemas.

-Lo hicimos...pero él no iba y hasta quisimos obligarlo, pero terminaba por escapar y gritando que no necesita ayuda, que está bien...-Norte se acomodaba en su silla, mientras ponía su cabeza sobre el respaldo de la silla y ponía su mano en su frente.-y pensamos que podría ser bueno llevarlo lejos del país, que pueda relajarse, y al mismo tiempo recibir ayuda...

-¿Han pensado llevarlo con sus amigos latinos?

-No quisiera ser grosera, y sé que lo aceptarían sin dudarlo, pero... enviar a Sur a los países latinos, es como llevarlo al mismo lugar solo con diferente ubicación. Mismas peleas, discusiones, gritos, quejas, victimismo, sangre y muerte. No creo que eso ayude a mi hermano...

-¿Y España?

-Hable con él hace una semana, me dijo que no podía tenerlo aquí, porque estaba pasando por una electa selección presidencial y que las cosas parecía ir un poco problemáticas, puesto que sus elecciones serán el próximo año, y los candidatos andan con todo.

-Lo lamento mucho Norte...me gustaría poder ayudarlos.

-Lo entiendo... no te preocupes..., nada de lo que se hace es fácil...

-Si lo se...

-jajaja, apuesto que tú me llamas por trabajo y yo aquí contándote mis problemas, debo ser muy enfadosa – Decía Norte con sarcasmo.

-Claro que no, siempre es bueno, que alguien te pueda escuchar.

Ambos reían entre el teléfono, Norte atendió la petición de Alemania, mientras el aun intentaba resolver el problema que tenía norte con Sur. Pero pareciera que el propio Sur tenía millones de escusas para no aceptar la ayuda de otros, sea cual sea.

-Recibirás el reporte en la mañana, así que cuando despistes tengas más trabajo que hacer jajajaja

-Que cruel resultaste ser, y yo aquí, intentando ayudarte...

-jajajajajaja lo siento – Hablo norte en español.-bueno Alemania que tengas una buena noche y te deseo lo mejor mañana en la mañana jijiji.

-Gracias- pronuncio el alemán en un perfecto español- A ti también.

Ambos cortaron la llamada, Alemania observaba su celular, mientras que Berlín lo miraba sorprendido.

-Wow, Alemania, estoy feliz que actúes tan amable, y te preocupes por tu amiga-Berlín fue interrumpido con la mano del europeo de colores amarillo negro y rojo.

-Silencio, esto es simplemente trabajo, conservar las alianzas es primordial para una convivencia confiable y con buenos resultados, cómo pudiste escuchar, recibiré todas mis peticiones en la mañana, así es como se debe manejar las relaciones entre países, mientras más cercanos, mejor. Mostrar preocupación, solo hace que me den lo mejor y con más velocidad.- Ante las palabras de su representante, Berlín simplemente lo observaba caminar hacia la salida de su hogar-y que no se te olvide, aquí nadie es tu amigo. Y así se fue por la puerta, dejando a Berlín con una mirada preocupante.

Eran las 6:40 en la Ciudad de México, en frente del zócalo capitalino, se encontraban una persona de la policía militar junto a PM y frente a ellos un Sur sentado en frente de ellos.

Ambos soldados lo miraban con sorpresa, el joven mexicano solamente se quedaba a unos metros de ellos, mirándolos con sus ojos heterocroma, fríos y lejano a lo que ellos dos acostumbraban, ya que la mirada de Centro era estricta, pero cálida y la de Norte una llena de amor y compresión. Pero la del Sur, simplemente era incomprensible.

-Joven Sur, usted está...

-¡Cállate! – Interrumpió Sur a PM, mientras el soldado al lado de PM lo miraba con lastima.

El soldado se acercó a PM y le susurro.

-¿Mi señor, me dejaría bajar un poco el nivel estricto y acercarme a Alejandro?... -Dijo entre murmullos.

-Si le puedes decir algo sin que te golpe, adelante – dijo sin exagerar ante lo último, el soldado, se quitó el casco y dejo el arma al lado de PM.

El Soldado tenía un tono de piel quemado, un color de cabello castaño y un corte de cabello rapado por los lados y la parte de atrás del cuello y un poco de cabello plato en la parte de arriba de su cabeza, ojos cafés claro.

Este se acercó a Sur, siendo mirado con la misma mirada fría, hasta que el joven soldado se puso en cuclillas y se acomodó a la altura de un Sur sentado en el suelo.

-¿Que paso mi Alejandro, porque tan amargado? – Sur no entendía que paso, hasta que vio más detenidamente el joven que veía.

-¿Frank?...-Dijo Sur confundido al ver al soldado.

-Claro mi campeón, soy yo, -Hizo un chasqueo entre dientes – No me digas que ya te olvidaste de mí y de mis jefes, así me vas a tratar, después de tantas peleas juntos.

-No manches wey, no te reconocí, si estabas a mi altura, cuando te conocí a ti y a tu familia, allí en Guerrero, que ases aquí de soldado, si tu bien sabes lo que pienso de...ser un soldado... - Decía Sur mientras su mirada se dirigía a PM, quien empezó a sudar frio.

-Pues, que te digo, la verdad si se me fue muy difícil, casi caía en drogas, después de una balacera allá en mi Zihuatanejo en mi queridísimo Guerrero. Y pues, mi madre no podía conseguir el dinero para seguir pagando mi escuela, y pues, teníamos que sobrevivir, fue difícil, y ya sabes, tienes que hacer lo que sea...

-Frank... por amor a dios, y que te dijo tu mamá, no creo que haya aceptado a la primera... y también tu padre...

-Y tienes razón, pero tras el nacimiento de mi hermanita, se fue aún más difícil, que la comida, que los pañales, que la leche, la ropa, y la educación... y mi jefe no podía, tu sabes que él, al igual que yo, no pudimos recibir una buena educación...y mi pobre jefe, pues...trabajar, trabaja, y mucho, pero no, no lograba, -Sur lo miraba entristecido – Y pues mi jefe se fue a migrar allá a estados unidos, y pues ya no hemos sabido nada de él.

-No... porque no me dijeron nada... les hubiera buscado otra solución... - Se levantaba junto al joven, que si era mucho más alto que Sur ahora.

-Alejandro...la verdad, perdona que te lo diga, pero, no es tu trabajo, me duele decírtelo, pero la verdad, se te notaba muy triste y cansado el sexenio pasado y cuando te conocimos, la verdad te veías casi muerto.- Confeso el soldado.

-Claro que no, no sea tonto, dime hora, día, semana, tiempo, mes, y yo te traigo lo que necesites- Quejo Sur.

-No Alejandro, algún día lo entenderán los demás, pero depender tanto de un gobierno, y no esforzarte por cambiar, te hará más pobre, mientras que los que avanzan, sin dañar a otros, serán los que aun mantengan a este país a pie.

Sur dio un suspiro, mientras una leve sonrisa salía de sus labios, pero sus ojos se dirigieron a PM. Policía Militar, podría leer perfectamente su mirada, '' Si el muere, tu morirás'' era lo que él podía interpretar, por lo poco que había escuchado.

PM Sabia que no todos los soldado era buenos, algunos llegaba a hacer lo mismo de reprimir a otros, pero como Sur, el sentía un alivio enorme al escuchar historia de cómo llegaron a ser mejores y que los trajo a luchar por su familia.

Pero alguien atrás de la puerta, le toco a PM, quien le decía que se prepararan, porque iban de salida, tanto reporteros como representantes de alguna cámara, o área institucional. PM dio aviso al soldado que estaba junto a Sur, este se dio media vuelta y le dio un saludo de despedida.

El joven soldado se ha como el casco y sostuvo su arma, mientras los demás miembros de la PM se acomodaban para hacer que las personas salieran con cuidado y sin daños.

Sur observaba a cada persona que salía, contando todo un lio, siguiendo a los funcionarios, en la reuníos de esta nueva dinámica, conocida como '' Las Mañaneras''.

En su mente era de asco, ante aquellos que se creían informadores de la verdad, al mismo tiempo miraba con desacuerdo a los que decían que harían mejor que los anteriores, él sabía que era imposible, un día, un semana, un mes, un años, seis años, no eran suficiente para hacer un cambio real.

¿Es bueno tener esperanzas? Todo era tan lento en su mente, todo debe ser echo con cuidado, y con atención.

-Por eso confiare en ti, sé que no podrás satisfacer a todos, y que no podremos estar de acuerdo, pero se quién eres, y sé que dejaras por lo menos algo que valga la pena. –Sur susurraba para sí mismo.

La gente empezaba a llegar al Zócalo, ignorando su propia presencia, y sin darse cuenta, entre la gente, a un hombre, con la cara rota, se veían unos cristales verdes en su rostro, unas sonrisa maquiavélica aparecía entre sus labios, mientras caminaba dentro del zócalo.

Los ojos de Sur se abrían en par a par, mientras intentaba cruzar entre el mar de gente que empezó a invadir todo el Zócalo, Sur lo observaba, como caminaba, podía ver a su hermano Centro junto a CDMX siendo fotografiados por algunos medios, aunque Centro se negaba a ser fotografiado de ese modo tan desesperado, así que caminaba junto a su hijo, mientras les gritaban preguntas, y Centro no respondía a ninguna.

Sur entro en pánico, ese ser, se acercaba cada vez más a su hermano, después de 5 años, el reconocía perfectamente, su rostro era inolvidable.

Sin miedo, Sur saco su machete de su cinturón, aproximándose a esa cosa con velocidad, mientras veía como intentaba tocar a Centro, Sur se lo impidió, lazándose contra él, apilando la primera apuñalada.

Gritos, flashes de luz, sangre...hacían a sur sentirse confundido...y lo único que logro escuchar fue...

-¡SUR!...

Continuara.

Primero que nada, aquí empieza el primer episodio de Terapia.

Algunos datos antes de seguir y que puedan entender al 100% como se manejara la historia.

Primero

- Hola – saludo./ Las letras negras, representaran el idioma real del país, como no quiero arruinar la lectura, y quiero hacerlo entender, completamente, el idioma será escrito en su totalidad en español, pero las letras negras, será como si hablaran el idioma real de país. Como podrán leer, entre la conversación de Norte y Alemania.

- * Quisiera poder hacerlo* - Pensó / Este signo * representara el pensamiento, los diálogos encerrados con este signo, serán considerados como pensamientos.

-lo siento - dijo / Y la típica, que sera calificada como el idioma español, únicamente.

Sur en México, nosotros lo conocemos como Alejandro, como a Norte la conocemos como María y a Centro Eduardo. Así que no se confundan, si algún mexicano lo llama con un nombre normal y no su puesto en el país.

Espero y disfruten este primer capítulo. También aclaro que no soy muy buena narrando, ya si alguien le gustaría darme algunos consejos, serán bien recibidos.

También quiero agradecer a RemedySix por ayudarme a desatollar la historia, y mejorar mi redacción. 

Eso es todo, nos vemos la siguiente y espero y les guste.


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