Bien, se suponía que esto sería una actividad intra-escolar divertida… ¡pero ahora estamos plagados de villanos! Aunque, sinceramente, no diría del todo plagados… son más que los pros, pero los superamos por mucho si contamos con los alumnos. ¡Pero los pros son realmente bobos! ¡Les han ordenado huír! ¡Estos chicos no deberían huír!

¡Regresen y peleen, maldita sea! ¡Es para esto que quieren su licencia provisional! ¡¿No?!

—Vaya mierda.

—¡Ryōsoku! Evacua a los estudiantes, por favor. Tu habilidad como rescatista… ¡la necesitamos! —indica Tiger—, ¡por favor!

¡Ah! Por fin alguien que reconoce el título de recatista por el que me partí el culo tanto tiempo, ¡que emoción!

—¡Sí, Tiger! ¡De inmediato!

¡Bien! Me dirigiré a la gran explosión que ocurrió hace unos momentos, ¡debió ser un gran ataque de un gran villano! ¡Debo rescatar a todos los heridos y luego encargarme de la amenaza yo misma! ¡Puedo hacerlo! ¡Lo daré todo de mí!

Llego al punto lo más rápido que puedo, pero para mi sorpresa no son varios estudiantes, es solo uno: Midoriya Izuku. Detrás de él está Kouta, el sobrino de Mandalay. ¿Qué hace acá este niño? Debo ponerlos a salvo de inmediato. Los brazos de Midoriya se ven seriamente lastimados, se tambalean en señal que están rotos, y esto me preocupa. Debo inmovilizarlos para que no se lastime más.

Pero aún así, con sus brazos lastimado, ataca al villano con todo lo que tiene.

—¡Ice Wall! —exclamo, protegiendo a Kouta con un muro de hielo. Sigo practicando la técnica, pero este sirvió bastante bien— ¡Kouta! ¿Te encuentras bien? ¿Estás lastimado, te duele algo, puedes caminar?

—¡Estoy bien! ¡Por favor, ayúdelo! Ese sujeto… ¡ese sujeto fue quien asesinó a mis padres! ¡No deje que nada malo le pase! ¡Él se arriesgó por mí a pesar de todo!

—Tranquilo, me encargaré de esto.

Me deshago del muro de hielo y me acerco para arrebatar a Midoriya del peligro, colocándolo bruscamente detrás de mí.

—¡Ryōsoku-san! —exclama, al verme esquivar torpemente el ataque del villano.

—¡Midoriya, llévate de aquí a Kouta! ¡Yo me encargaré!

—¿Ah? ¿Una más? ¡Está bien! ¡Mientras más sangre mejor!

Su quirk es repulsivo, las capas de piel siguen apareciendo una tras otra. Me coloco en posición de defensa y espero su primer golpe, que viene directo a mi rostro. Congelo la mejilla para recibir el golpe, y me congelo al piso para que el impacto se devuelva, no ha logrado ni fisurarme, no es tan fuerte como parece.

—¿Crees que una coraza va a detenerme? —ríe.

—¡Midoriya, llévate a Kouta ahora! ¡Busquen a su grupo y pónganse a salvo!

—Ryōsoku…

Recibo un golpe más.

—¡Ahora!

No hay respuesta. No sé si se han ido, me siento incapaz de bajar la guardia. Me atina un golpe más, pero esta vez derrito el piso con tal de deslizarme por él.

—¡Patético! ¡Si solo viniste a morir será mejor terminar rápido con esto! ¡Muere!

—¡Lo siento, pero no es algo que esté en mis planes!

Abro mi boca con bastante menos dificultad que con mi anterior bozal, sin preocuparme por lastimar mis mejillas o mis encias. Derrito el piso para barrerlo e intentar hacerlo perder el equilibrio, y el momento en que lo intenta recuperar me lanzo a él y muerdo su cuello, arrancando una a una las nuevas fibras de piel que crea.  Voy congelando las partes que muerdo, asegurándome de no darle oportunidad a no fortalecerse más, y he ido congelando su otro brazo al suelo; una vez una parte considerable de su cuerpo está inutilizable me impulso en su propio cuerpo para elevarme considerablemente.

—¡Ice… —extiendo mis brazos sobre mi cabeza, concentro mi hielo en el aire, y reflexiono largo rato sobre si esto funcionará— Pulse!

La corriente de hielo me impulsa con fuerza a él. Mi pierna derretida tiene como objetivo su clavícula congelada. Un golpe de este estilo, si no lo asesina, lo dejará bien aturdido.

Descongelo su mano detenida al piso, mi pierna atraviesa el hielo, y al momento de estar en contacto con su piel la regreso a su estado normal para que sea un golpe limpio. La forma en que su cuello se dobla es ridícula, y cae inconsciente al piso, conmigo sobre él.

Por fin soy capaz de verificar a Midoriya y Kouta… ambos siguen ahí de pie.

—Les dije que se retiraran —regaño, exhalando aire frío mientras limpio la sangre de mi boca y me acerco a ellos—. Midoriya-kun, ¿te encuentras bien? Permíteme inmovilizar tus brazos para que no te dañes más, ¿te duele algún otro lugar? ¿Puedes caminar adecuadamente?

—Estoy bien, gracias, Ryōsoku-san.

—Tú, Kouta, ¿estás bien? —normalmente priorizo niños y ancianos, pero a causa que a Kouta lo revisé antes de empezar a pelear ahora solo hago una verificación—, ¿te duele algo? ¿puedes caminar correctamente?

—Estoy bien —asegura, está aterrado, puedo verlo.

—Kouta, escucha, ahora estás a salvo —¡amo las maniobras de rescate! Sea para víctimas, sera para familiares, ¡me encantan!—. Pero debemos salir de aquí ahora, y para eso necesito que te tranquilices, ¿bien? —el chiquillo asiente una vez más. Limpia torpemente sus lágrimas y frunce el ceño, tratando de demostrar fortaleza— Genial. Ahora los llevaré a un lugar seguro. Irán en mi espalda, si ven algo fuera de lugar no se alarmen e informenme de inmediato.

Los cargo en mis hombros y me deslizo para llegar a las instalciones y dejarlos en un lugar seguro.

—¿Está bien que nos cargue sola, Ryōsoku? Todavía puedo caminar —alega Midoriya.

—Está bien, Midoriya-kun. Soy una rescatista, ¿sí? Puedo cargar cinco personas como tú sin disminuir mi velocidad. Estarán seguros pronto.

—¡Ah! Ryōsoku, ¡espere por favor!

—¿Sucede algo?

—Debo encontrar a Mandalay, tengo un anuncio que dar: ¡Kacchan está en peligro! Es el objetivo principal de los villanos, ¡quieren capturarlo!

—Capturarlo… ¡A Bakugo! ¿Por qué?

—No lo sé, ¡pero debo advertirlo!

—Dejarlos ir solos es peligroso…

Intento pensar rápidamente. Logro divisar a Shōta acercándose a nosotros.

—¡Eraserhead! —exclamo, acercándome a él— Por favor, manten a salvo a Kouta y Midoriya, debo encontrar a Mandalay para que anuncie algo, ¡por favor, cuida de ellos!

—Espera, ¿irás por Mandalay?

—¡Eso te dije!

—Bien, porque yo también tengo un anuncio que dar, pero dalo de mi parte.

—Lo que sea.

🐾🐾🐾

—Como han podido notar, ¡estamos siendo atacados! Pero lo más importante aquí es que tienen un objetivo: Kacchan, Bakugo Katsuki. En nombre de sus tutores, Ryōsoku y Eraserhead, tienen derecho de usar sus quirks para defenderse.