—Señorita Fukugawa —me habla All Might (cuyo nombre real descubrí hace unas horas mientras husmeaba por los registros de la U.A: Yagi Toshinori), acercándose a mí y sonriendo levemente—, ¿cómo la está pasando en la U.A? Tengo entendido que fue alumna hace unos años.

—Sí, lo fui —devuelvo la sonrisa sin problema alguno. La verdad es que, como sea, All Might es genial, ¡es mi segundo héroe favorito después de Endeavor!—, hace 14 años. Y la estoy pasando bastante bien, gracias por preguntar.

—No es nada. Como nuevo profesor también, entiendo lo difícil que puede ser el lidiar con los deberes de docente, pero pienso que debemos estar ahí para apoyarnos mutuamente.

—Es lindo encontrar a alguien dispuesto a socializar de forma decente —suspiro aliviada. Por esto es que la gente lo considera el Símbolo de la Paz—. Me agrada, Yagi-san. Espero tener más oportunidades de hablar con usted, pero ahora debo irme.

—¿Ya? Pero es temprano.

—Mi abuelo me espera en casa, debo llegar temprano o se preocupará.

—Entiendo. ¿Me permite acompañarla? Eso nos brindaría un poco más de tiempo para hablar.

—Me encantaría —admito sin problema.

¡Dios mío! ¡All Might va a acompañarme hasta mi casa! ¡Esto no puede ser real! ¡Estoy hablando con All Might! ¡Con el Símbolo de la Paz!

—Entonces, señorita Fukugawa —habla finalmente, mientras salíamos de las instalaciones de la academía—, me habló del joven Midoriya… ¿Qué piensa de él?

—¡Sí! ¡Midoriya Izuku! ¡Es un héroe asombroso! Además de su presentación en el festival deportivo, tuve la oportunidad de… “evaluarlo” hace unos días y descubrí que ahora controla muy bien su quirk. ¡Es asombroso, realmente asombroso! No dudo que logrará superarlo a usted y a Endeavor, ¡vaya que sí!

—Yo tampoco lo dudo —sonríe, viendo al cielo unos momentos—. De hecho, me gustaría que el tomara mi lugar cuando me retire.

—¿Se retirará?

—¿Le parece que estas son las condiciones adecuadas para seguir ejerciendo como héroe?

—No… realmente no. Definitivamente, descansar le vendría bien.

—Sí, lo haría —deja de observar el cielo y ahora observa nuestros pasos—. ¿Por qué todos los come-todo son tan altos?

¿A qué viene esa pregunta? ¿A cuántos come-todo puede conocer este hombre? Digo, quizás recuerde a mi abuelo, quizás haya oído de mi padre… Pero, la verdad, mi padre es más bajo que otros come-todo varones, apenas más alto que come-todo mujeres; mi abuelo, en cambio, si es más alto que nosotros dos, pero se ha encorvado con los años. Un come-todo saludable puede medir casi tres metros, ¡de hecho! El hermano mayor de mi papá mide tres metros, ¡y el abuelo dice que su padre media tres metros y medio! Pero, la verdad, la estatura promedia para hombres es de 2.75, y 2.60 para las mujeres.

—No estoy muy segura… Mi abuelo dijo que era porque nuestro tamaño nos da la fuerza necesaria para cargar, partir y triturar la comida. Por ejemplo, mi padre -que es “puro”- tiene la fuerza para destrozar un diamante con sus propias manos. Yo soy muy baja y débil en comparación a otros miembros mi familia.

—Lo he notado. Su padre es Noburu, ¿cierto? El canibal —asiento en señal de afirmación. De nuevo, no fue All Might el responsable de la captura de mi padre, sino Endeavor.

¡Por eso me parece tan genial! Otros héroes no habían podido con él, ¡pero el asombroso Endeavor se encargó de él en menos de dos minutos!

—Él carece de labios y mejillas, pero usted…

—Sí, pero es normal: todas las mujeres de mi familia tenemos labios y mejillas; aunque no están deformados como los míos, claro. ¿Qué hay de usted? ¿Es su quirk de su padre o de su madre?

—Una mezcla de ambos —responde de inmediato, sin titubeo alguno—. Claro… me fortalecí con el tiempo.

—Seguro están muy orgulloso de usted.

—Así como su padre de usted.

Al menos sé que mi padre lo está. Mi madre, en cambio, debe retorcerse en el más allá cada que abro mi boca.

—Bueno, esta es mi casa —sonrío gentilmente, señalando la morada frente a nosotros. De hecho, es de mi abuelo, pero no vale la pena especificar—. Gracias por acompañarme hasta aquí, Yagi-san.

—No fue nada, señorita Fukugawa. Espero tener más oportunidades de hablar con usted; es bueno encontrar a alguien… “normal”.

—Y que lo diga —suspiro—. Puede decirme Atsuko —sugiero. Porque para empezar “Fukugawa” no es mi apellido, pero tampoco quiero a All Migth diciéndome “Kishaba”.

—¿No le molestaría?

—En lo absoluto.

—Entonces supongo que usted puede decirme Toshinori.

Sonrío ante su respuesta. ¿Este es el verdadero All Might? Me provoca ganas de abrazarlo y contarle todos mis problemas para que me aconseje o al menos me consuele. Aunque, claro, es lo menos que se puede esperar de el Símbolo de la Paz, el héroe número 1: ¡el poderoso All Might! Que siempre rescata a todos con una sonrisa en el rostro…

—¿Sabe qué, Toshinori-san? —él me observa fijamente— ¿Por qué no salimos a cenar algo y seguimos hablando? He disfrutado esta charla más que cualquier otra.

—¿Qué hay de su abuelo?

—Ya sabrá que estaré bien. Además, no creo que se enoje porque salí a cenar con All Might, lo entenderá. Entonces, ¿qué dice? Entiendo si no tiene tiempo para algo como esto, seguro un héroe como usted…

—No, señorita Atsuko —me interrumpe, pero estoy segura que lo hace sin el afán de ser descortés—, me encantaría cenar con usted.

—¡Genial! —lo siento, no puedo ocultar mi emoción— Entonces vamos, conosco un buen lugar.

De cualquier forma, no puedo dejar de pensar que olvido algo…

Tan solo espero que no sea algo importante… o al menos no demasiado.