JungKook y Taehyung estaban disfrutando de la cercanía que cada vez se hacía más pequeña, el azabache sonrió cuando Taehyung pasó sus manos por su cuello, eso era una clara señal de que el también quería romper esa distancia que los separaba.

Taehyung estaba más que dispuesto a darle un beso, era parte de su trabajo de conquista, pero la idea tampoco le parecía un sacrificio, por lo que cerró sus ojos y se dejó llevar por el momento, Jungkook al ver que los dos deseaban lo mismo no lo pensó más, tomó al castaño de sus mejillas y lo acercó juntando sus labios, creando un beso suave, en donde se concentró en sentir los labios ajenos, los movimientos pequeños que Taehyung hacía para corresponder el beso le fascinaban.

Jungkook bajó sus manos a su cintura y lo apretó levemente, con la intención de apegarlo más a su cuerpo, Taehyung captó perfectamente la señal y se acercó más al cuerpo contrario dejándose abrazar por los fuertes brazos del azabache.

Jungkook estaba feliz saboreando los labios contrarios, eran finos y muy dulces, a parte se movían en su boca de forma tan sexy, que lo último que quería era dejarlos, por lo que se alejó un leve momento para darle una pequeña mordida a su labio inferior, chuparlo y regresar a besarlo, esta vez un poco más intenso, la experiencia se sentía tan bien, que lo único que quería era explorar esa boca de inicio a fin. 

Estaba seguro de que este seria el chico afortunado de pasar su noche de cumpleaños con él, deseaba tanto cargarlo y llevarlo a su habitación para dar rienda suelta a la pasión que el castaño le provocaba.

Taehyung estaba disfrutando el beso, sería un mentiroso si negara eso, y a pesar que era la primera vez que besaba a alguien con un piercing, debía confesar que la experiencia resultó ser bastante buena e interesante, además el azabache sabía manejar muy bien ese tema, lo estaba besando intensamente y el pircing no resultaba ser un estorbo para nada, al contrario era excitante sentir ese pequeño frio del metal tocar sus labios

Los dos estaban muy concentrados en probarse mutuamente, disfrutando de las ricas lamidas y mordidas que se daban en  medio del beso, cuando de pronto.

-Jeon Jungkook...!!!, ¿Qué carajos haces?

Taehyung escuchó esa voz y se separó de inmediato, sintiendo una vergüenza muy grande apoderarse de su cuerpo, levantó la vista y vio un hombre alto, aparentemente de unos 29 o 30 años de edad que cruzaba sus brazos y los fulminaba con la mirada.

Volvió su vista a Jungkook y este tenía la cabeza agachada, tocaba sutilmente su piercing con la lengua y apretaba sus puños con fuerza.

Por lo que solo pudo pensar en una cosa, ese chico tenía pareja y a Jimin se le olvidó contarle ese pequeño detalle, maldijo por dentro, el nunca se ha metido en una relación, ni a sido la trampa de  nadie, quería salir corriendo de ahí, porque sentía que en cualquier momento ese chico alto se le iba a lanzar encima para matarlo, lo podía ver en su mirada, es más estaba seguro de que si no lo hizo aún es porque otro chico le sostenía la mano, y no le dejaba acercarse.

-Maldito mocoso- Taehyung vio que ese chico logró zafarse del agarre y caminó hacia el, y solo pudo pensar, "ojala no me golpee en el rostro, porque sino adiós a mi carrera de modelo" estaba por levantarse del sofá para pedirle disculpas por meterse con su pareja, pero de pronto vio como a él ni lo miró, pasó de frente hacia el azabache y lo tomó de la oreja.

-Que carajos crees que esto ¿un motel?- gritó.

-Hyung Hyung ahh duele- se quejó.

-Agradece que no me sacó el zapato y te golpeo, pero no me busques porque ganas no me faltan-

-Hyung ahh suéltame, yo solo...-

-¿Tu solo que?- lo hizo levantarse mientras aún lo tenía agarrado de la oreja -tu solo pensaste que mi casa la podías irrespetar como te de la gana, pero que crees sobre mi cadaver pasará eso

-Jin amor- Nam lo tomó de la mano que tenía libre -¿no crees que estas exagerando?, Jungkook no estaba haciendo nada...

-No termines la frase Kim Namjoon, yo vi a este hormonal con mis propios ojos, además este lugar huele a pecado- miró a Taehyung.

-Pero amor, es el cumpleaños de Jungkook, esto no es tan gra...

-¿Me estas diciendo que estoy loco?- llevó a Jungkook de la oreja hasta estar al frente de su novio -¿o que imagino cosas?

-No amor, no-

-Hyung por favor mi oreja, duele, duele mucho- 

Jin lo soltó luego de escuchar tantas quejas por parte del menor. -habla, si no me das una buena explicación para lo que vi, hablaré con nuestros padres para que te manden a un centro militar y aprendas a ser una persona de bien

Taehyung abrió su boca en una perfecta O al escuchar eso, pareciéndole increíble  lo que acababa de ver, ese chico grande resultó ser el hermano, y no cualquier tipo de hermano porque no le importó en lo más mínimo su presencia e igual tomó al azabache de la oreja como si fuera un niño pequeño.

Jin tomó aire y se sentó en  uno de los sofás que adornaban su bonita sala, -Tienes 5 minutos, y ya han corrido 10 segundos, yo de ti empiezo hablar ya

-Hyung- empezó hablar Jungkook mientras se sobaba un poco su oreja adolorida -lo que viste fue algo que lo dos quisimos, yo no lo obligué a nada, si eso es lo que estas pensando, además fue un besito tierno y cortito.

-Ya- cruzó sus brazos junto con sus piernas, llevando la mirada al chico que estaba con su hermano -¿y el chico aquí presente, no sabe hablar?

-Yo...- jugó con sus manos, el castaño nunca había estado en una situación así, por lo que sus nervios se sentían latentes, -le pido disculpas por entrar a su casa, sin permiso, solo vinimos a conversar, porque la música allá fuera estaba muy alta.

-Ya veo, mira en primer lugar tú no te disculpes, la culpa es del mocoso que tengo como hermano, y en segundo lugar yo no vi que estaban conversando- miró a Jungkook

-Hyung me estas avergonzado- llevó sus manos a su cabeza en señal de nervios -él es un amigo, pero no te preocupes, ya estábamos por salir de aquí.

-Espera- tomó la mano de su hermano -¿Y tu amigo no tiene un nombre? o es otro de los chicos sin nombre con los que sales.

-Hyung por favor, no empieces con tus cosas-

-Cállate, ¿Cómo te llamas criatura?- miró a Taehyung -dime algo, Jungkook se portó bien contigo, no te hizo alguna proposición, no se tal vez indecorosa?

-No- respondió rápidamente el castaño -y mi nombre es Kim Taehyung, mucho gusto señor- hizo una reverencia.

-Oh no, no me digas señor, apenas tengo 28 añitos, no soy un viejo- sonrió -un gusto Taehyung, y ya que veo que mi hermanito no me presentará, lo haré yo, soy Jeon SeokJin pero puedes decirme Jin- le extendió la mano.

Taehyung le regaló una bonita sonrisa cuadrada y correspondió el saludo.

-Y esta belleza que ves parada a lado mío es mi novio Kim Namjoon

Namjoon le extendió la mano y Taehyung la correspondió.

-Bueno nosotros regresaremos a La fiesta- habló Jungkook.

-Si vayan- le respondió su hermano. -En un rato voy con Nam-

Jungkook lo miró divertido -recuerda lo que siempre dices, la casa se respeta hermanito- le sonrió.

-Este mocoso- lo miró enojado -claro que se respeta, ¿acaso crees que soy como tú?- gritó mientras Jungkook tomó la mano de Taehyung y juntos salieron de la casa.

-Amor, cálmate, no te alteres- Namjoon se acercó a su novio y depositó un tierno besito en sus labios.

-Es que Nam...-resopló -este mocoso se me esta saliendo de las manos, es un rebelde, hace lo que le da la gana, y no, eso esta mal, por ejemplo primero fue y se hizo esos tatuajes horrorosos, quedando como un pandillero, no contento  con eso luego va y se hace un piercing en la boca, solo falta que uno de estos dias aparezca rapado la cabeza y ahí si Nam, ahí si me dará un infarto.

-Amor, Jungkook es un buen chico, un poco alocado pero es bueno, no se va rapar la cabeza, tranquilo eso no pasará, además los tatuajes y el piercing no le quedaron mal.

-No lo defiendas Nam, tu eres su mejor amigo, no le celebres esas estupideces, deberías apoyarme-

-Claro que te apoyo mi amor, yo hablaré con Jungkook para que no te haga pasar más corajes

-Te amo Nam, si no estuvieras a mi lado, ese mocoso ya me hubiese enloquecido

-Yo también te amo mi amor- se acercó y besó suavemente a su novio, dejándose llevar por lo dulce y tierno que era Jin al besarlo.

-Nam, ¿viste a ese chico?- se alejó un poco -¿viste lo hermoso que era? y mi hermanito se veía bastante interesado en él.

-Si, estaba simpático, hermoso eres tu mi amor

-lo sé- se sonrojó -yo se que soy el hombre más hermoso del mundo, pero ese no es el punto, será que mi hermanito por fin se interesó en alguien de verdad y no solo para llevarlo a la cama.

-No lo se amor, mejor regresemos a la fiesta o quedémonos aquí, pero dame muchos besitos

 -No Nam, si quiero que ese mocoso aprenda limites, yo debo ser el ejemplo, regresemos a la fiesta, ¿pero me puedes hacer un favor?

-El que tu quieres mi amor

-Habla con Jungkook sobre ese chico, pregúntale si hay algo serio o no entre los dos, yo lo haría pero a mi ese mocoso no me cuenta nada.

-Claro amor, cuenta con eso.

...

Mientras Jungkook y Taehyung estaban caminando por el jardín, el azabache no le permitió entrar a la fiesta, porque necesitaba hablar con él, y justo ahora estaba buscando las palabras correctas para disculparse por la vergüenza que le hizo pasar su hermano.

-Tae yo quiero que sepas que Jin es como...-

-No tienes que explicarme nada- le respondió.

-Pero..-

-Pero nada, es tu hermano y veo que te cuida mucho, es más hasta te envidió- habló un poco triste.

-¿Envidiarme?- lo miró sorprendido.

-Si, debe ser bonito tener un hermano que se preocupe por ti y te cuide.

-¿No tienes hermanos?- se acercó a él  -bueno si es bonito, pero por ejemplo ahora que me tomó de la oreja y me avergonzó en frente de ti, no fue bonito, créeme, no fue para nada bonito.

Taehyung soltó una pequeña risa -fue divertido- confesó -fue divertido verte suplicando por tu oreja-

-Oye, no te rías, hasta ahora me duele- se sobó la oreja -pero no me respondiste ¿no tienes hermanos?

 -No- lo miró -soy hijo único.

-Wow, eso debe ser interesante- le sonrió -no tienes que darle explicaciones a nadie, ni recibir regaños ni reclamos, sabes ahora soy yo el que te envidia.

-¿Envidiar mi vida de soledad? no creo- sonrió

-Yo si te envidio y  mira te cuento sobre mi vida para que me entiendas un poquito, hace un tiempo me hice estos tatuajes- los señaló en su cuerpo -Y Jin mi hermanito casi me mató, se sacó la chancla y me cayo a chancletazos, y me gritó hasta quedarse sin voz, me dijo muchas cosas entre ellas, que parecía un pandillero.

Taehyung soltó una carcajada al escuchar eso -creo que exageras-

-Ah si, pues mira luego me hice este piercing- lo señaló con sus dedos, y Taehyung no pudo evitar recordar que ese piercing del que le hablaba lo tuvo sobre su boca y le encantó.

-¿Y que pasó, te volvió a caer a chancletazos?-

Jungkook sonrió al ver la linda sonrisa que el castaño le regalaba -si, pero esta vez, me persiguió por toda la casa con una chancleta en la mano y un sarten en la otra-

-¿un sarten?- rio -ahora si ya no te creo, tu hermano no parece una persona violenta-

-Lo que te digo es de verdad, es que el estaba en la cocina cuando yo llegué y le mostré mi piercing, por lo que del coraje agarró lo primero que pudo, que fue el sartén, luego creo que pensó que me podría matar con eso, y se sacó la chancleta y ahí si empezó a perseguirme, tuve que correr por mi vida.

Taehyung lo miró mientras aún se reía -Ósea que a tu hermano no le gustan ni tus tatuajes ni tu piercing

-No gustarle es poco, los odia.

El castaño se acercó a Jungkook y lo tomó del brazo que tenía tatuado -No entiendo porque- le acarició el brazo -si quieres yo le digo que a mi me encantan.

Jungkook tragó saliva, ese chico era tan sexy y cautivador, pero el no se quedaba atrás, Taehyung era coqueto y una verdadera tentación, pero el se consideraba un Dios de la seducción.

-¿Y mi piercing te gusta?- lo tomó de la cintura.

-¿Tu que crees?-le respondió.

Jungkook lo miró y su vista se fue hacia sus labios, los tenía algo hinchados y un poco lastimados.

-No sé, viéndote esa boquita, estoy creyendo que te lastimé, la próxima vez me quito el piercieng-

-¿Y quien te dijo que va a haber una próxima vez?

-Estoy seguro que si habrá- lo apretó contra su cuerpo.

-Me gusta tu seguridad, pero te advierto, si hay una próxima vez quiero que sea con ese piercing.

Jungkook le sonrió y apegó su rostro hacia el castaño, rozando sus narices -vaya y que casualidad que justo ahora siga con el piercing -habló sobre los labios contrarios-

-Si, que buena casualidad, creo que no hay que desaprovecharla

Jungkook escuchó eso y sintió su respiración acelerarse, estaba deseando volver a sentir esos dulces labios, cerró sus ojos y estaba punto de perderse otra vez en esa boca, pero de pronto escuchó.

-Tete ya me quiero ir, ¿Dónde estabas? te he buscado como loco-

Hola como están, aquí regreso retomando esta historia que la tenía un poco abandonada, espero les haya gustado el capitulo.

Nos leemos pronto, Cuídense, los quiero

Ale

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