Capitulo 12
Taehyung seguía abrazado de Jungkook, pues el miedo que tenía a las películas de terror era real, no estaba fingiendo, pero al estar en el pecho del azabache sintió su aroma, ya que para calmarse estaba inhalando suavemente, pero lo único que podía respirar en ese momento era el delicioso aroma de Jungkook, pensando que el perfume que usa era realmente rico, pues su fragancia era muy dulce con toques florales, realmente tenía un aroma que él nunca en su vida había apercibido.
Jungkook sentía a ese bonito chico escondido en su pecho, tomándolo suavemente de la ropa que usaba, sin duda estar así era una bendición para él, pues Taehyung a demás de ser el chico más hermoso que a visto. también era el ser más sensual del mundo y con el mejor aroma que haya sentido en su vida.
-Tranquilo bonito- le acarició la espalda, dando pequeñas palmaditas para relajarlo.
Taehyung respiró profundo, pues lo último que quería es quedar como un idiota con la persona que debe conquistar, por lo que suavemente abrió sus ojos, maldiciendo bajito por haber escogido una película de miedo pues si hubiese ido a la sala donde pasaban películas románticas, nada de eso estaría pasando.
-Estoy bien- se alejó, -perdón, es solo que cuando veo algo de terror prefiero sentirme protegido y tu pecho me pareció un muy buen lugar para resguardarme. Pero no estoy asustado. -Inventó una excusa esperando que el azabache le crea.
Jungkook soltó una pequeña carcajada, pues a esas alturas ya estaba muy seguro que el bonito castaño mintió al decir que le gustaba el terror.
-¿Te ríes de mi?- lo miró con un tierno puchero, -que malo, no me esperaba eso.
-No, claro que no, pero me hubieses dicho que te asustaban este tipo de películas y hubiésemos escogido otro genero.
-Ya te dije que no estoy asustado- cruzó sus brazos.
Jungkook se quitó los lentes 3D, lo miró sin perderse ni un solo detalle de ese lindo berrinche, pues el castaño tenía una de sus cejas levantadas, con su carita tierna mientras formaba un lindo puchero con sus labios.
-Te creo- volvió a reír.
-No- lo empujó suavemente, -no me crees, seguro que estas pensando que soy un feo cobarde.
-¿Tu feo?- tomó los lentes de Taehyung y se los quitó. -¿Por donde?, si yo lo único que veo es que eres el chico más lindo del mundo.
Taehyung al escuchar eso, sintió que sus mejillas se pintaron de un lindo color carmín, se sorprendió por eso pues hace mucho que no se sonrojaba por un piropo, y con Jungkook ya sentía que a cada rato se sonrojaba, pero luego regresó a la realidad, pues eso que le dijo era perfecto para empezar con lo que debía hacer, enamorar a ese chico.
-Gracias- le sonrió, -Tu también eres muy guapo, pero de verdad no estaba asustado.
-Si,si-, asintió con un tono de burla, -Mira, -señaló la pantalla, -apareció otro monstruo y es uno enorme- mintió, mientras sentía como Taehyung brincó nuevamente hacia su pecho.
-No, no, no- se escondió en el pecho de Jungkook, -abrázame Jungkook, abrázame y no me sueltes.
Jungkook respiró nuevamente ese rico aroma, sintiendo algo tan bonito dentro suyo por tenerlo tan cerquita. -Era broma Tae, - se obligó a decir, -no hay ningún monstruo.
Taehyung se alejó rápidamente y lo miró, -chistoso eres.
-Perdón- le sonrió.
-Igual ya sabía que era broma, por eso actué así, a mi no me asustan esas películas, es solo que cuando veo algo de miedo me gusta acurrucarme y sentirme calientito por eso te abracé.
-Ah si- se acercó a él, -Pues era que me lo digas y te hubiese calentado hace mucho, no necesitabas poner de excusa el miedo.
Taehyung se acercó más a Jungkook, llevó su dedo a su mentón y lo atrajo más a él. -¿así de dispuesto estas a cumplir lo que quiero?
-Super dispuesto- le respondió, -y espero que tu también, porque no eres el único que le gusta hacer cosas mientras ve una película.
Taehyung le sonrió mientras mordió sutilmente su labio, pues todo estaba saliendo mejor de lo que esperaba. -¿y que te gusta hacer?
-Besar- habló directamente.
Taehyung se sorprendió un poco, pues se supone que el era el que debía ser coqueto y seducir a sus victimas, sin embargo le encantó la manera en la que le habló.
-Mira que interesante, -pasó sus manos por el cuello del azabache, -a mi me gusta abrazar y aferrarme a alguien y a ti te gusta besar. ¿no crees que hacemos un muy buen dúo? Para ver películas obvio. -aclaró coquetamente.
Jungkook pasó saliva, jamás había conocido a alguien tan sensual como Taehyung, pues la simple manera en la que le hablaba ya estaba ocasionando que se ponga duro.
-Por su puesto, -le sonrió, -hacemos un perfecto dúo.
Taehyung lo tomó del cuello y se apegó más a Jungkook, quedando a tan solo milímetros de distancia, sintiendo como sus respiraciones se cruzaban.
-Entonces supongo que así como tu te dejaste abrazar, yo debo dejar que me beses ¿verdad?
-Si, me parece lo más justo, pero no solo te voy a besar -llevó sus manos al cabello contrario y lo apretó, -te voy a devorar.
Taehyung estaba listo para recibir ese beso, pues la sola idea de sentir nuevamente ese piercieng sobre su boca le encantaba, porque resultó que la experiencia que tuvo antes en la fiesta le fascinó. -Devórame entonces.
Jungkook estaba por lanzarse a esos labios, tomarlos y no soltarlos nunca, pues definitivamente anhelaba con todas sus fuerzas volver a sentir el sabor de los labios de Taehyung.
-Hey- un hombre gritó furioso, -si quieren hablar vayan al parque y si quieren hacer otras cosas busquen un lugar pero no aquí.
-Asi es, cállense, -apoyó otra persona, -no nos dejan ni ver, ni escuchar la película.
-Jóvenes calenturientos, -gritó un señor, -Dios, la juventud en este tiempo esta perdida, por si no se han dado cuenta todos hemos escuchado su conversación, pero ahora cállense y déjennos disfrutar la película.
Taehyung al esuchar eso, se separó rápidamente de Jungkook, llevando sus manos a su rostro para tapar un poco la vergüenza que sentía en ese momento.
-Dios, que pena- Taehyung se inclinó lo más que pudo sobre su silla, sintiendo tocar su rostro contra sus piernas.
Jungkook también sintió algo de pena, pero tampoco le pareció para tanto, pues solo podía pensar que en todo lado hay gente amargada, ya que cuando estaba en el mejor momento, zas, le arruinan su felicidad.
-Tae, no te pongas así, -sobó su espalda, -es solo gente envidiosa.
-Vámonos- se levantó y lo miró.
-¿Qué? No, por unas cuantas personas amargadas no nos vamos a ir.
-No es por ellas, o bueno en parte si, pero también es porque no me gusta la película, mejor vámonos.
-Ok- le sonrió y lo tomó de la mano, -si es por eso esta bien, vámonos.
Taehyung correspondió al agarré del azabache, le regaló una sonrisa sin importarle que la gente les pedían que se sienten. Pues luego de la pena vino las risas, ya que ahora estaban riéndose a carcajadas, encontrando que lo que pasó fue demasiado divertido.
-Soy un imbécil- Yoongi gritaba mientras pataleaba en su cama, -¿Porque bebí? ¿porque?
El pelinegro estaba muy enojado consigo mismo pues al recordar que había hablado de más en su estado de embriaguez, maldecía dando gritos por ser tan estúpido y haberle confesado a Taehyung que estaba enamorado.
-¿Y ahora que carajos voy hacer?, ¿será que le di a entender que lo amo a él?.
Pensaba en alguna manera de enmendar su error, pero eso significaba ver a Taehyung y eso era lo último que quería hacer, se moría de la pena de solo pensar en enfrentarlo y no saber que decirle, por lo que de ahora en adelante se esconderá de él, pues llegó a la conclusión de que esa era la mejor solución en ese momento,
Agradecía a Dios porque era fin de semana, así que todavía tenía un día para pensar muy bien como ignorar y esconderse de Taehyung, considerando que eran compañeros de clase y siempre se sentaban juntos.
-Ya me tengo que ir, quita el seguro- Taehyung miraba a Jungkook sonreírle y no hacer nada de lo que le decía, pues supuestamente el castaño aceptó entrar al auto del azabache solo para conversar un ratito, pero ese ratito se había convertido en más de una hora.
-No- lo miró triste, -¿Porque te quieres ir tan pronto? La noche recién empieza.
-Es que ya hicimos lo que acordamos, ya fuimos al cine, no salió muy bien, pero igual ya lo hicimos.
Jungkook al recordar eso sonrió, -jamás me habían hecho callar en un cine, pero debo aceptar que fue divertido.
-Ni lo menciones y cállate que fue tu culpa- lo miró riéndose.
-¿Mi culpa?- se acercó a él.
-Si, tu saliste con que querías devorarme, obvio fue tu culpa.
El azabache se acercó a él y le acarició la mejilla, -ok, si tu dices que fue mi culpa, así fue, pero no hables en pasado, porque yo no quería, yo quiero.
Taehyung lo miró fijamente a los labios, esos labios tan carnosos y provocativos que le gritaban por la necesidad de ser besados, no podía negar que moría por chuparlos y morderlos, pero no sabía si hacer eso era una buena idea o sería mejor dejarlo con las ganas.
-No me mires así bonito, entre tu y yo hay algo pendiente. Me debes un beso.
Taehyung lo miró algo juguetón, pues a pesar de que estaba consiente de que lo que hacía era solo un trabajo, le encantaba sentirse deseado, le encantaba saber que es capaz de enloquecer a cualquiera.
-¿Ah si?- pasó sus manos por su cuello acercándose a milímetros de la boca contraria, -no me gusta las cosas pendientes, -susurró contra sus labios, sacó su lengua y lamió descaradamente los labios entreabiertos del azabache.
Jungkook al sentir eso tembló, cerró sus ojos con fuerza, lo tomó de la cintura y lo apegó más a su cuerpo.
-Me estas enloqueciendo-Jungkook lo apretaba con fuerza, sintiendo como nuevamente su miembro reaccionó. -Siento que aunque te devore como quiero, siempre voy a querer más.
-Eso sería de descubrirlo, pero ya cállate y besame- exigió el castaño.
Jungkook no esperó más se lanzó sobre la boca de Taehyung, la tomó con ansias, con ganas de perderse entre esos labios, empezando por chupar el labio inferior para luego pasar al superior, sintiendo como Taehyung ladeó su cabeza mientras abría su boca para que el beso sea más profundo. Lo tomó por sus mejillas, apretándolo suavemente con ambas manos.
Taehyung estaba disfrutando cada segundo de ese beso, sintiendo como el azabache metía su lengua en él y lo probaba completamente, a parte el piercieng jugaba un papel muy importante, pues sentir ese frio metal sobre su boca era tan excitante, no podía negar que Jungkook es uno de los chicos más apasionados que a besado, pues con un solo beso lo dejaba sin respiración.
Al separarse, estaban jadeando, sintiendo como sus frentes aún estaban pegadas, se miraron por unos segundos a los ojos, JungKook seguía con sus manos en el rostro de Taehyung.
-Me encantas- habló con una voz gruesa, pues por la falta de aire se le escuchaba como si tuviera la voz ronca, eso a Taehyung le encantó. -Me enloqueces bonito, desde que te vi no paro de pensar en ti, te tengo en mi cabeza siem...-
Taehyung no aguantó esas palabras, a parte el hombre que tenía frente a él, era tan guapo, tan varonil, besaba como los mismos dioses, así que otro beso no le parecía mal, por lo que sin dejar que termine de hablar se lanzó nuevamente a él, lo besó con la misma efusividad que antes, pues sentir esos labios no era ningún sacrificio, al contrario, lo estaba disfrutando mucho.
Jungkook no podía creer que en el mundo existía una persona tan parecida a él, tan apasionado, tan efusiva, pues el castaño era la definición perfecta de la sensualidad. Y eso a él le encantaba, por lo que al sentir nuevamente sus labios contra su boca, no dudó en corresponder, pero esta vez tomó al castaño de la cintura y lo subió sobre su cuerpo, pues la palanca de cambios le estorbaba para tener al lindo chico como quería, por lo que no dudó en cargarlo y pasarlo a su asiento.
Taehyung al sentir las manos de Jungkook levantarlo de su asiento para llevarlo al asiento del copilotó, no dudó en colaborar, pues tener a Jungkook pegado a su cuerpo era algo que estaba descubriendo que le encantaba, por lo que al estar sentado en las piernas del azabache comiéndose la boca, llevó sus manos al cabello contrario y lo apretó con fuerza mientras mordía y lamia los labios del azabache.
Jungkook sentía que estaba en el mismo cielo, pues el delgado cuerpo, el aroma, la boca, todo en ese chico era perfecto. Por lo que se alejó un momento de su boca, y fue hasta el cuello besando y chupando cada parte de ese lindo cuerpo, siguió un camino de besos hasta llegar a sus clavículas, Taehyung se estremeció, tiró su cabeza para atrás y soltó algunos gemidos, JungKook bajó sus manos de la cadera del castaño, llevándolas hasta su redondo trasero, apretándolo con fuerza para saciar esas ganas que tenía de tocar esas nalgas. Sintiendo como el castaño vibraba y se dejaba tocar con deseo.
-Vamos a un lugar más privado- habló jadeante el azabache, pues ya no pudo controlarse más, necesitaba sentir suyo a ese chico o iba a enloquecer.
Hola, como están, primero quiero decirles perdón por la demora, sé que tenía olvidada este historia.
Pero bueno, he vuelto, aunque debo aceptar que fue gracias a mis seguidores en mi canal de WhatsApp que votaron por que actualice esta historia, por eso estoy aquí.
y hoy estuve muy inspirada escribiendo este capitulo, así que espero que les haya gustado.
Nos leemos pronto, recuerden que los quiero mucho.
Ale
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