-Tengo los anillos. -gritó Donovan mientras corría hacia nosotros.

-Yo conseguí el velo y tomé prestadas estas flores de una mesa en un restaurant. -Fabia se acercó a mi y colocó la tela sobre mi cabeza; sujetada por una pequeña peineta.

Empezamos a recorrer la avenida entre risas hasta que llegamos a una pequeña capilla blanca, en la puerta de ésta estaban mi hermano y mi cuñado quienes entraron al lugar después de nosotros. Todos se sentaron en el primer banco y Alan tomó mi mano para acercarnos a una pequeña mesa de vidrio que estaba más adelante, en esta reposaban unas cuantas rosas en un florero, no había nadie por lo que de pronto Fabia pasó a mi lado, sacó las rosas y puso en su lugar las flores que ella había traído. Me entregó el ramillete de rosas el cual unió con una liga de pelo y luego entre risas volvió junto a los demás.

Supongo que fue el escándalo que estábamos haciendo, ya que poco después apareció un hombre mayor luciendo un traje negro y se situó frente a nosotros.

-¿Están seguros que quieren casarse?. -preguntó limpiando sus gafas con un pañuelo.

-Por supuesto que sí. -respondió el chico de ojos verdes mientras me tomaba de ambas manos. Quedamos enfrentados y luego de un suspiro el hombre respondió:

-En todos mis años de servicio todavía no he casado a la primera pareja que este sobria.

Tanto Alan como yo soltamos una risita para luego prestar atención al hombre quien había comenzado a hablar, daba el típico discurso, del cuál solo recuerdo la parte de los votos, observé a los chicos y todos tenían sus teléfonos grabandonos y tomando fotos.

-Venus... -el chico frente a mí empezó a hablar. -Solo quiero decirte que desde ese día cuando entraste al baño y me viste la polla, me llamaste la atención. Me gustaba pasar tiempo contigo hasta que de pronto me di cuenta que me había enamorado de ti, sinceramente no sé si mañana me acuerde de lo que hice hoy, pero sé que al ver nuestros anillos confirmaré que tú eres mía y yo soy tuyo... siempre. Por cierto, si quieres aún puedo mostrarte mi pajarito.

Luego de sus palabras el hombre que dirigía la ceremonia me pidió a mí recitar mis votos, tomé una profunda inhalación y lentamente dejé salir el aire pensando en que decir a continuación.

-Es muy extraño estar aquí, a punto de casarme con el primo del chico que era mi crush, concuerdo contigo en que seguramente mañana no recordaremos nada, pero sin pensármelo mucho solo quiero decirte que te amo y que sí, si quiero ver tu pajarito.

El hombre del traje dijo unas palabras más y luego pidió los anillos, Donovan se acercó y nos entregó uno a cada uno, Alan colocó el anillo en mi dedo y luego dejó un pequeño beso sobre este, imité su acción y luego él se acercó y tomando mi rostro entre sus manos dejó un vasto beso sobre mis labios.

-Te gané, ella es mía. -le gritó a Donovan, para después sacarle la lengua haciendo que los demás se rieran.

Me sentía incómoda, intenté encontrar una mejor posición para dormir pero cuando me moví caí al piso dándome un golpe en la cabeza, poco a poco fui abriendo los ojos, aunque por momentos debía cerrarlos nuevamente ya que la luz me pegaba demasiado.
Había tenido un sueño bastante loco.

El dolor de cabeza era uno de los peores que había tenido, con cuidado me senté en el piso, llevé mi mano a mi cabeza para masajearla y tratar de disminuir el dolor pero sentí una tela colgando de mis cabellos, la tomé y vi que era una especie de tull blanco, alarmada observé mi mano y sí, en mi dedo anular izquierdo estaba puesto un fino anillo con un diamante en medio.

¡Mierda! No había sido solo un sueño.

Observé a mi alrededor y Fabia estaba dormida en uno de los sofás individuales, Donovan estaba sobre la alfombra y de los demás no había rastro, vi el sofá grande de donde me había caído y ahí estaba un Alan muy dormido y sin camisa.

-Alan. -susurré tratando de no despertar a los otros dos. -Alan. -se movió un poco pero solo para darme la espalda y seguir durmiendo. Opté por mi última opción así que lo moví bruscamente haciendo que se sentara asustado, con una de sus manos frotaba sus ojos hasta que poco a poco los fue abriendo y fijó su vista en mi, una mueca de dolor surcó su rostro y de inmediato se llevó las manos a la cabeza.

Con el susto del momento mi dolor de cabeza había pasado a segundo plano, pero ahora estaba volviendo incluso más fuerte que antes.

-¿Que sucede?. -su voz era ronca.

Tomé su mano izquierda y la puse junto a la mía frente a sus ojos mostrando ambos anillos, su entrecejo estaba fruncido y pasaba su vista de un anillo al otro.

-¿Compramos anillos de matrimonio?. -preguntó confundido.

Su vista recorrió mi cuerpo, pero en lo que observó la tela que aún estaba enganchada en mis cabellos abrió los ojos asombrado.

Buscó su teléfono y juntos vimos las últimas fotos y vídeos en su galería, no había más que fotos de nosotros en el bar y en el casino.

-Seguramente y fue una broma pesada de los chicos, y ese sueño fue producto de la gran cantidad de alcohol en mi sistema.

Me relajé un poco pensando en que seguramente fue eso. Cerca de mi estaba un teléfono, al tomarlo me di cuenta que era el Donovan y cuando intenté revisarlo me pedia la clave, me acerqué hasta donde estaba él dormido y después de luchar unos cuantos minutos para que despertara, cuando lo hizo le pedí desbloquear su teléfono. A duras penas lo hizo y luego se volvió a quedar dormido, fui directo a su galería y empecé a ver las últimas fotos.

Nosotros fuera de una capilla, yo con un velo de novia y un ramo de rosas con pocos pétalos, yo en brazos de Alan dándonos un beso... más fotos de Alan y yo con el resto de los chicos.

Dios santo, esto no fue un simple sueño.

Volví al sofá donde estaba Alan con la cabeza apoyada en el espaldar y los ojos cerrados, me senté a su lado y luego de moverlo un par de veces, obtuve su atención. Su vista estaba fija en la pantalla del teléfono al igual que la mía. Ahora venían los vídeos, ¡y que cantidad había!.

Nosotros tomados de las manos junto a un hombre trajeado, Donovan entregandonos algo, Alan colocando un anillo en mi dedo y el hombre diciendo: Los declaro marido y mujer, puede besar a la novia.

-Vivan los novios. -podía reconocer esa voz perfectamente, era mi hermano quien había gritado.

-Mi mamá va a matarme. -fue lo primero que dije apenas se terminaron de reproducir los vídeos.

-¿Te ofrecí verme la polla delante del ministro?

-¿¡Es en serio!? Solo a eso le presentaste atención?.

-Bueno... no creí que mi deseo de cumpleaños se cumpliera tan rápido. -me atrajo hacia él y depósito un beso en mi cabeza. Pareció recordar algo y se inclinó un poco para sacar algo del bolsillo trasero de su pantalón, desdobló la hoja y luego de darle un vistazo soltó una risita. -Al parecer sí eres mi esposa ahora.

Me di una palmada en la frente pero luego solté un quejido cuando sentí como si estuviesen enterrando clavos en mi cabeza.

-Venus Kelly de Johnson... te dije que sonaría bonito.

Capítulo dedicado a mis bebés:

*GenesisBaez4
*sophiforteza
*SaraVernet1
*CatherineVivianaLara

NOTA: entonces... a poco creyeron que iba a dejar pasar ese viaje sin hacer un poquito de desastre.

OFICIALMENTE VENUS KELLY DE JOHNSON.

Malvada sea, casé primero a estos dos que a Eli y Marco (Destinos Cruzados).

Bye.

Un beso grandote💋

Att: Oriana.