El paso número uno era: encontrarme con mi nuevo amigo en el centro comercial.

Listo.

El paso número dos es: pedirle ayuda a alguien porque sinceramente creo que lo dejé peor que como estaba.

—Mira, yo no creo que tú realmente sepas lo que estás haciendo. —decía Ian mientras se veía en el espejo de la tienda. —Ni yo que soy tan nerd combinaría una camisa de estampados de ranas con un pantalón de cuerina. —se quedó observando su reflejo unos cuantos minutos hasta que volvió a hablar. —¿tu estas segura que este pantalón no es de mujer?.

—Bastante exigente me saliste, y respondiendo a tu pregunta, ese pantalón lo tomé de la sección de caballeros. —iba a protestar pero le hice una seña de que guardara silencio, tomé mi teléfono y llamé a Fabia un par de veces pero no respondió, iba  desistir cuando se me ocurrió llamar a la otra persona que conozco y tiene un buen gusto para comprar ropa, aunque la mayoría sea en blanco y negro.

—Necesito tu ayuda. —dije apenas oí su voz del otro lado de la línea. —¿podrías venir al centro comercial que está a unas dos cuadras de la biblioteca?.

—¿No se supone que deberías estar trabajando?.

—Se supone que sí pero Julie me dio la tarde libre, ¿puedes venir si o no?. —pregunté nuevamente al no tener una respuesta afirmativa la primera vez.

—Bien, en 15 minutos estoy ahí. —luego de decir eso colgó la llamada.

Caminé hasta el vestidor al no ver a Ian por ningún lado, al estar la cortina cerrada supuse que estaría cambiándose nuevamente así que me senté en uno de los sofás que estaban cerca de estos.

Poco tiempo después mi pequeño amigo salió del vestidor con su ropa puesta, hablamos un poco y cuando recibí una llamada de Alan salimos de la tienda para indicarle donde estaba, o bueno, estábamos; porque no le había dicho que tenía compañía.

Unos cuantos minutos después veía al chico de ojos verdes acercarse hacia nosotros, vestía un jeans negro y una franela blanca con algún micro estampado que debido a la distancia no distinguía muy bien, en su camino más de una volteo a verlo y es que la verdad hasta yo lo hubiese hecho.

Alan llamaba la atención sin siquiera proponerselo, porque aunque venia con la vista en su teléfono; sabía que era bastante consciente de las miradas hacia él.

—Hola. —saludó apenas estuvo frente a mí.

—Hola. —volteé a ver a mi derecha y mi pequeño amigo estaba concentrado viendo algo en la vitrina, le toqué el hombro e inmediatamente se volteó. —Alan, él es mi nuevo amigo Ian, Ian el es Alan mi...

—Novio, soy  su novio. Mucho gusto.  —me interrumpió antes de que terminase de hablar y se presentó él, aunque esas no eran las palabras que yo iba a decir.

—Igualmente. —respondió Ian estrechando su mano.

Ya luego le preguntaría por qué dijo eso.

—Bueeeno... —me balancee sobre mis talones intentando no hacer el momento más incómodo de lo que ya era, aunque supongo que eso solo lo percibía yo porque ellos estaban como si nada. —te llamé para que me ayudarás a hacerle un cambio de look, te juro que yo lo intenté pero no salió bien.

—Nada bien. —puntualizó mi amigo. —mira lo que me hizo poner. —Ian le tendió su teléfono a Alan y yo me acerqué para ver que era lo que le mostraba. Una foto de él vistiendo un pantalón de cuerina super ajustado y una camisa con ranas por doquier era lo que se veía.

Una carcajada salió de los labios de Alan mientras le devolvía el teléfono a Ian.

—Están en el lugar equivocado, ¿si se dieron cuenta que estaban en una tienda donde la mayoría de la ropa es vintage, o usada para algún disfraz?. —voltee a ver el cartel detrás de mi y pude ver las especificaciones de lo que se encontraba en la tienda.

—Ahora tiene sentido el porqué tantas pelucas y sombreros raros. —dijo Ian a mi lado.

Definitivamente ahora leeré los carteles antes de entrar a las tiendas.

Alan nos dijo que lo siguiéramos y tanto Ian como yo fuimos detrás de él hasta llegar a las escaleras mecánicas, subimos a la siguiente planta y caminamos hasta una de las últimas tiendas que quedaban en ese amplio pasillo.

—Éste es el lugar correcto. —dijo mientras señalaba una tienda especialmente para caballeros.

Entramos y nos pusimos a observar unas cuantas prendas de ropa hasta que el chico de ojos verdes volvió a hablar.

—Entonces... ¿a que se debe este cambio de imagen?. —preguntó mientras tomaba unas cuantas franelas básicas y un par de camisas.

—Principalmente a que jugaron con mis sentimientos y se negaron a salir conmigo por ser un nerd, y también porque Venus se empeñó en "arreglarme". —respondió Ian haciendo comillas con sus dedos cuando mencionó lo de arreglar.

Alan centró su vista en mí a la vez que alzaba una de sus cejas.

—Creí que eso solo era cosa de Fabia.

—Y lo es, definitivamente mi sentido de la moda está bastante perdido. —dije hacercandome a él para ver la ropa que tenía entre sus manos.

—¿Bastante perdido? La pregunta creo que sería si alguna vez lo haz tenido. —murmuraba Ian creyendo que no le oiría, pero definitivamente lo hice y un golpe en la cabeza fue lo que recibió a cambio. —¡Auch! eres bastante agresiva, sabías.

Iba responderle pero no pude porque Alan le tendió varias prendas y el chico caminó hasta los vestidores dejándonos solos.

—Entonces... ¿desde cuándo soy tu novia?. —saqué el tema refiriéndome a sus palabras de hace rato.

—Pues... así como que lo seas realmente, no. Pero ganas no me faltan. —poco a poco cortaba la distancia entre ambos.

—¿Te pusiste celoso?. —pregunté al tenerlo frente a mi con escasos centímetros de distancia.

—Sí.

—Es un niño, tiene dos años menos que yo.

—Tú tienes casi tres años menos que yo, y de igual forma me gustas. —sus manos se posaron en mi cintura y terminaron por juntar nuestros cuerpos.

—Sé que la edad no es impedimento para estar con alguien, claro siempre y cuando la diferencia entre las partes no sea tan abismal, pero personalmente, no me atraen las personas menores que yo.

—Que bueno saber que te gustan mayores, y que como lo dije antes, yo te llevo casi tres años. —sus labios estaban a escasos centímetros de los míos, y su respiración chocaba contra ellos.

—¿Por qué estás tan seguro de que me gustas?. —pregunté mientras posaba una de mis manos sobre su pecho.

—Porque no haz hecho nada para alejarte de mí, y sé que quieres que te bese tanto como yo deseo hacerlo. —no me dio tiempo a responder porque junto sus labios con los míos en un beso delicado, lleno de ternura. Nuestras lenguas danzaban entre sí, sus manos en mi cintura me acercaban más a él, como si eso fuese posible, pero tuvimos que separarnos por la falta de aire, bueno, eso y un carraspeo de alguien junto a nosotros.

Junto a nosotros estaba un Ian completamente cambiado, vestía un jeans azul rasgado, con una franela básica negra y una camisa manga larga a cuadros a blanco, negro y gris.

—Te ves bien. —dije después de que mi respiración se normalizó.

—Me gusta. —dijo mientras su vista  se posaba en el chico a mi lado. —gracias,  tienes mucho mejor gusto que ella. —me señaló y luego volvió al vestidor por otro cambio.

Con Alan nos quedamos viendo más ropa hasta que decidió tomar un par de prendas para él, el tiempo aunque pasó un poco lento fue bastante entretenido.

Y el resultado de esa tarde fue un Ian Dampsey completamente diferente, y unos cuantos besos más entre el  chico de ojos verdes y yo.

Capítulo dedicado a mis bebés:

*MichellM674
*JADCSR
*FernandaCash08
*Labebarivas
*ana03092005
*CarmenRosalesNarcizo
*Karladanaeguerrerope
*CatherineVivianaLara

NOTA: Holis✌ para no perder la costumbre, pero como siempre, no tengo nada que decir aquí, salvo ALAN MI VARÓN.

Es que yo en serio lo amo muchísimo.

Bye.

Un beso grandote 💋

Att: Oriana.