Amenaza potencial

A pesar del comienzo de mierda de mi día, para el inicio de mi última clase todo está marchando perfectamente. 

Zarah no se me ha acercado, Belcebú se ha comportado bien, y puedo decir con seguridad que hoy es el día en el que las cosas parecen retomar su curso y volver a la normalidad.

El profesor Benzon se para al frente de la pizarra y calla a todos rápidamente y sin gritos.

—Sus interesantes pláticas tendrán que esperar para el fin de clase — dice —. Ahora hay cosas importantes por hablar. Lo primero: el trabajo que todos debieron entregar sobre el reporte de la excursión del viernes pasado valdrá un punto extra además de su calificación en el — escucho protestas al instante, pues cuando fui a entregar mi trabajo vi que no había más de diez en el escritorio —, y además de eso, cuando entregue sus trabajos también señalaré si tuvieron puntos extras en la excursión, y de ser así, la cantidad que tuvieron.

—Eso no es justo, ni siquiera dijo que tendría valor todo el viaje — se queja Zarah.

—Bueno, a principio de semestre dejé claro que los trabajos de excursión tendrían un porcentaje de la calificación, y que podría dar puntos extras en las actividades extracurriculares, quizá debiste anotar la evaluación como lo pedí ese día.

Quiero reírme en la cara de Zarah, sin embargo me mantengo neutra en espera de más información.

—Que puta jalada — escucho su queja, pero nadie más lo nota.

—Lo siguiente es... — mira hacia la libreta que tiene en la mano —. Bien, les recuerdo a todos que la fecha límite de pago para el viaje es el día veinticuatro, o sea, el viernes de la siguiente semana, aunque me alegra decirles que la mayoría ya ha pagado o al menos dado un adelanto. Por eso mismo son el primer grupo con el que ya puedo adelantar nuestro plan de trabajo para ese fin de semana — el hombre hojea su libreta y tarda un largo minuto en encontrar y leer lo que buscaba —. Silencio todos. No tengo claro como van a acomodarse las habitaciones para el día que nos hospedemos, sin embargo he formado parejas para la realización de las actividades, y dejo claro de una vez que eso no tiene nada que ver con la acomodación de habitaciones. 

—¿Entonces para qué es? — pregunta alguien.

—Esto únicamente es para la parte de trabajos, cuando salgamos a alguno de los lugares turísticos elegidos tienen que ir y permanecer todo el tiempo con su pareja, y así realizar los trabajos posteriores — explica rápidamente —, las parejas que hice también son mixtas, así que pongan atención, voy a informarles quién será su compañero.

—Oh no... hoy muere alguno de los dos — musita Archer con angustia.

—Relájate, solo será en las salidas — susurro.

El profesor comienza a decir nombres, por lo que todos permanecemos en silencio a la espera de la maldición o bendición que nos toca.

Oliver queda totalmente descartado cuando lo ponen de pareja con otro tipo que no es ninguno de nosotros ni conocido.

—Zarah — nombra y ruego mentalmente porque no sea mi maldición —, estás con Bael.

Aunque quiero echarme a reír por esto, me compadezco del chico que ya ha escondido el rostro en una de las manos.

—Te sacrificaste por el equipo, jamas lo olvidaremos — apoya Archer y me dan más ganas de reír.

—Este sacrificio basta para todos los dioses que han existido en la historia — se lamenta.

—Archer — nombra —, tú estarás con Daisy.

Aunque no lo demuestra, apenas alcanza a girar el rostro hacia nosotros antes de ponerse color tomate.

—Este momento en vida es algo que me marcará para siempre — dice totalmente en las nubes.

Alguien de nosotros tenía que correr con suerte y el elegido ha sido Archer, a quien el destino decidió cruzar en el camino con su gran amor platónico de años.

—Ahora solo falta que no vayas a cagarla como acostumbras — agrego.

—Eso nunca, no desperdiciaría mi oportunidad ni en mil años.

—Aradia — llaman, y los nervios vuelven a hacerse presentes en los tres —, estarás con Christian, quizá no se conozcan pero es nuestro nuevo alumno.

Y si no fuera por la silla en la que estoy sentada, juraría que ni el piso habría sido capaz de detenerme.

Siento un mareo tan intenso que me sorprende no acabar perdiendo el conocimiento, y cuando miro en dirección al chico ya está mirándome con una sonrisa satisfactoria. 

No puedo con esto, me ha costado el alma soportar todas estas horas estar en el mismo salón donde él está.

Definitivamente no podría ser su pareja en las prácticas del viaje, aún si sólo fueran cinco minutos.

—¿Te encuentras bien? — Bael me saca de mi pesadilla consciente y termino dando un brinco donde estoy.

—Sí, iré a hablar con el profesor — decido poniéndome de pie rápidamente.

Las pláticas han comenzado por segunda vez y nadie presta atención de nada mientras a mí se me van doblando las piernas con cada uno de mis pasos.

—Profesor — llamo en voz baja cuando estoy en el escritorio.

—¿Todo bien, Aradia?

—En realidad no, todo lo contrario... — niego nerviosa —. Necesito un cambio de pareja — suelto sin más rodeos —. Jamás le he pedido nada del tipo, y sabe que si pusiera a Zarah de mi pareja ni siquiera reprocharía, pero esta vez no puedo hacerlo.

—Te elegí porque eres la mejor alumna de mi clase... bueno, de todas. Siempre estás atenta y vas a cada uno de nuestros viajes, y Christian es completamente nuevo, sé que necesitará a alguien que realmente sepa lo que hace para guiarlo.

Estoy en la posición más incómoda y mortífera de mi miserable vida.

—Entiendo los motivos, pero quiero insistir, no me siento en condiciones para hacer esto... — estoy a punto de hincarme y rogar por un cambio de pareja.

—¿Todo bien? — hay una tercera voz y siento escalofríos cuando una mano se pone sobre mi espalda.

Cuando volteo mi instinto de conservación no sabe si hacerse el muerto o salir corriendo, pero mi cuerpo termina rígido donde estoy 

—Pues... — el profesor no sabe que responder —, Aradia no se siente cómoda con la decisión que tomé acerca de ser tu pareja, y bueno... tengo que preguntarte si estás de acuerdo con que hagamos un cambio... — propone.

—En realidad no, conozco a Aradia y tengo deseos por trabajar a su lado, no me gustaría tener a alguien más para esto — se niega y mi esperanza muere con eso.

Al notar que mis intentos han sido en vano, decido dar la vuelta y volver a mi lugar, pues donde estoy no conseguiré nada.

Mi muñeca es aprisionada por una mano, y cuando miro tengo el rostro de Christian rozando el mío.

—¿Crees que huir de mí va a ser tan fácil? — pregunta con voz átona, que me acaricia el rostro y me congela la sangre.

—Suéltame — pido jalando mi brazo, pero no consigo lo que quiero.

—No te olvidaste de mí, ¿verdad?

—No — niego tensa y aguantando las lágrimas dentro de mis ojos.

—Yo tampoco me olvidé de ti — ronronea con voz ronca.

—Suéltame ya, Christian — exijo intentando alejarme, pero su mano se niega a liberarme.

—¿Por qué no te relajas? — pide tranquilamente, y nadie nota que estoy en apuros ya que no somos los únicos en estar de pie hablando.

—Sólo quiero irme.

—Lo sé, y yo quisiera permitírtelo, pero no puedo.

—Solo suéltame, hazlo ya.

—Te soltaré a cambio de una cosa — negocia.

—¿Qué cosa?

—Sal conmigo esta noche — propone.

—La primera vez dijiste lo mismo — recuerdo.

—Sí, lo hice, y podríamos cambiar el final de esta salida, sólo tienes que poner de tu parte.

Tiro con fuerza de mi brazo, y cuando me libero le suelto una cachetada tan fuerte que suena en cada rincón del lugar.

—Aléjate de mí — sentencio señalando con el dedo índice —, aléjate tanto como den las paredes de este lugar.

Le dedico una mirada llena de odio y resentimiento y me apresuro a volver a mi lugar antes de que pueda hacer algo.

—Estoy un poco sorprendido — expresa Bael —. No me golpeaste ni la vez que te robé la toalla del baño, así que me pregunto que cosa tan malvada pudo hacer ese tipo para recibir un acto tan atroz de tu parte.

La pregunta suena tan burlesca que me entran ganas de enseñarle gráficamente como golpeé a Christian.

Pero al final solo me quedo callada.

Mi estado de tensión de las últimas horas me tiene exhausta, más con este último enfrentamiento.

Solo deseo ir a casa.

Encerrarme en mi habitación y no volver a salir de allí nunca más.

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Siguiente actualización, jueves 03 de junio. ⚜️