...

-tenemos que hablar-

Naruto estaba frente a Minato, quien estaba muy sentado en su escritorio, mirandolo serio.

-¿por qué entras así a mi oficina?-le preguntó algo molesto-

-no me importa tú sermón por algo tan vulgar-le confesó-será mejor que te quedes ahí y me escuches-minato fruncio el seño-

-¿que quieres?-

-¿cuando mierda me ibas a decir que había perdido la memoria?-minato no parecía sorprendido, la verdad era que se lo esperaba, su esposa le había contado que él se había enterado-y bien?-

-ese no es asunto tuyo, si vienes a lloriquear y a patalear, ve con tú madre-eso hizo que se desesperace y en un rapido movimiento golpeó la superficie del escritorio, logrando un gran estruendo-

-no me jodas!-gritó-!¿que clase de padre hace está mierda y le miente a su hijo?!además!¡¿por qué mierda le dijiste a hinata que había muerto?!-

Minato se quedó callado un momento y luego se levantó de su asiento.

-la clase de padre que quiere que su hijo tenga éxito y no se arruine por culpa de una mujer-naruto dejó liberar un quejido-el que le haya dicho eso fue sólo un capricho, me aseguraba de que no volviera a tú vida, claro que olvidaste todo, así que no valía la pena dejarte como heredero si no podias hacer el traba...!-un gran golpe en el estómago detuvo las palabras de minato y las dejó flotando en el aire, el Namikaze se quejó por el dolor-

-eres un desgraciado!arruinaste toda mi vida obligandome a estudiar algo que nunca quise por tu estupido capricho!cuando olvide todo me trataste como si fuera un bastardo e incluso me quitaste tú apellido!arruinaste la vida de la mujer que amo y me separaste de mi hijo!-naruto empezó inhalar sonoramente y todo su cuerpo se movia junto con su respiración-

Se alejó de minato y lo miró otra vez con el seño fruncido, apretó sus puños y se paró derecho.

-un hijo, eh?-murmuró el rubio mayor, el cual se volvió a incorporar en su posición anterior, se sentó en la silla detrás de su escritorio, evitando demostrar el dolor en el estómago-

-como le dije a mi madre, me alegra haber olvidado, así me liberé de tu apellido y pude hacer lo que me gusta, sólo por eso'ttebayo-minato lo miraba expectante-no quiero que me molestes más y no te metas con mi familia-se giró sobre sus talones y salió de la oficina sin nada más que decir-

Como él esperaba, nunca podría perdonar a su padre y mucho menos aceptarlo como el abuelo de su hijo.

Se dirigió a casa de su hermano, no tardo mucho porque no despegó el pie del acelerador por lo molesto que estaba, pensaba que la velocidada lo haría sentir mejor, lograr saciar el sentimiento que invadía su sistema.

Cuando abrió la puerta principal, de inmediato fruncio el seño. Su hermano estaba hablando sobre él, se encontraban sentados en el sofá, donde los dejó y el pequeño se reía de los comentarios que su hermano decía en contra de él.

-bueno y estuvo todo el día rojo como un tomate cuando uno de sus compañeros de secundaria...mmh...sai era su nombre, le dijo a todos que naruto tenía pequeño su amiguito, sabes a lo que me refiero-reía mientras le pegaba pequeños codazos en el pequeño brazo del rubio menor-

-¿que diría Miranda si le cuento que Menma Namikaze paso todo un año o más siendo llamado...?mmh...¿cómo era que te decian?¿Pulga?-menma lo miró con los ojos blancos y con sus mejillas rojas de vergüenza-

-YA!callate!-dijo levantandose y cubriendo sus oidos-

-¿Por qué pulga?-preguntó boruto confundido e inocente-

-no!no le digas!-le suplicó el azabache a su hermano-

-porque era el más bajo de su clase, literal, era más pequeño que todos incluyendo a las chicas'ttebayo-menma estaba tirado en piso cubriendose el rostro-

Boruto se rió contenido, naruto se acercó a él y lo tomó en sus brazos, llevándolo a la habitación a donde se iban a quedar esa noche.

La habitación era  espaciosa, con una cama de dos plazas con un cubrecama con un lindo estampado blanco, tenía dos nocheras en cada lado con una lampara de esas pegadas en la pared, un sillón individual y una cómoda con una televisión sobre ella.

Naruto dejó a boruto en la cama y le pidió que se pusiera la pijama y se cubriera con las frasadas, cuando naruto lo acomodo y arropó, se dispuso a salir de la habitación, pero el pequeño lo detuvo llamandolo.

-papá-naruto se detuvo en la puerta y lo miró con duda, el pequeño hizo un ademán y luego nego con la cabeza-no, nada olvidalo-dijo con una sonrisa-

-volveré pronto, voy a hablar con tu tío un momento-le dio una sonrisa y cerró la puerta dejando al pequeño ahí-

El rubio estaba al borde, rasco su nuca cansado despues de liberar un largo suspiro.

Al poco rato llego menma y le enseño una botella de vino y unas copas entre sus dedos, esbozando una gran sonrisa traviesa, naruto volvió a suspirar y negó incredulo la cabeza, con una sonrisa en su rostro.

Se sentaron en la terraza, donde habían un par de sillas y una mesa de vidrio entre ellas. Menma dejó la botella ahí junto a las copas y ambos se sentaron. Naruto se sentó de lado a la mesa y colocó su pie izquierdo sobre la rodilla de la pierna derecha y eso no era todo, sacó de su bolsillo una cajetilla de cigarros y con su boca sacó uno que se adomaba por la apertura.

Menma estudiaba cada movimiento, cómo si lo estuviera leyendo, naruto prendió el cigarrillo y tomó una de las copas que menma había llenado con vino y jugó con el liquido un rato mientras tomaba una fumada.

-¿quieres saber que pasó, verdad?-le preguntó de imprevisto el rubio a su hermano, que dio un pequeño saltó por la verdad que dijo su hermano-

-sé que terminó mal, eso es obvio por tu expresión y también, sé que tu no fumas-tomó un poco de su vino y miró al rubio-sólo lo haces cuando te pasa algo-

-comencé hace poco, cuando hinata tuvo su accidente'ttebayo-el rubio seguía sin darle una mirada a su hermano-

-lo suponía-Bufo el azabache-naruto, lo único que quiero decirte es que...-naruto lo interrumpió cuando su copa tocó en vidrio de la mesa-

-no tienes que decirme nada, eres mi hermano menor-le dijo friamente-tu no tienes problemas como yo los tuve, Dios, mi vida está hecha mierda, solo por boruto me mantengo de pie, si el no estuviera ahora estaría en un bar lamentandome por lo que le pasó al amor de mi vida-gimoteo molesto-

Menma no dijo nada, su hermano en verdad se estaba desmoronando, era claro que si hinata no despierta sería una gran problema para él.

-tal vez no hubiese sido así-opinó-naruto, no digas esas cosas tan deprimentes¿Te estas escuchando?nunca te habías quejado así conmigo, te aseguro que hinata va a despertar, más bien, para hacerlo oficial-menma se apoyó en la mesa y estiró su mano hacía naruto-

El rubio lo miró vacilante y luego miró hacía la mano de su hermano.

-y esto?-preguntó riendo-¿no era esa cosa que haciamos de niños?-

-Ah! ¿si lo recuerdas?siempre cuando prometiamos algo nos apretabamos las manos-

Naruto liberó una leve carcajada y acercó su mano a la de su hermano, hasta terminar enlazada en la de este.

-juro y prometo que tu mujercita..-

-¿Mujercita?-preguntó el rubio con una ceja enarcada-

-...tú novia va a despertar, no importa lo que pase, va despertar y tú-dijo recalcando el "tú"-vas a dejar de fumar-

Esta vez ambos rieron.

-bueno esta bien, entonces...lo juro y lo prometo, palabra de un Uzumaki!-dijo naruto con gran entusiasmo-

-palabra de un Namikaze-rió menma-.

Después de eso ambos siguieron bebiendo un poco más y naruto había apagado el cigarro. Se la pasaron hablando de anécdotas y algunas cosas futuras que querían hacer.

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-Sayonara...

El recuerdo retumba su cabeza y a los poco segundo, se fue alejando y oscurenciendo, aquellas luces que había visto se esfumaron y la oscuridad inundó todo a su alrededor.

Quien...?

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