Capítulo 2: Esperanzas de un Nuevo Hogar

Hinata se despertó con un profundo suspiro, casi se sentía como si estuviera despertando de un mal sueño, y ninguno de los acontecimientos de ayer había realmente ocurrido, se dio la vuelta hacia la orilla de su nueva cama gigante para mirar a Naruto, que dormía en el suelo junto a la cama, ella no pudo evitar reírse de lo lindo que era su rostro era cuando él estaba durmiendo, para ella no había manera de que el chico con el que había soñado durante tanto tiempo ahora estuviera realmente durmiendo en la misma habitación que ella y por su fuera poco ellos se van a casar.

*¡Simplemente no puede ser posible! ¡Esto tiene que ser un sueño cruel!* Hinata pensó para sí misma, ella se agachó a su muslo pálido y se pellizcó duro, y en silencio quedó sin aliento cuando el dolor inundó su pierna *Sí estoy despierto y sin embargo lo ayer todavía se siente como si fuera un sueño…*

Escena retrospectiva

"De ninguna manera, ¡Esta casa es enorme!" Naruto exclamó, su fuerte voz resonó en toda la casa vacía de madera, Naruto sonrió cuando escuchó su voz hizo eco y luego procedió a gritar tan fuerte como pudo "¡Créanlo!" La voz de Naruto una vez más se hizo eco y Naruto se rio con diversión.

Hinata se sonrió ante las travesuras de Naruto, pero ella también estaba también impresionada por el tamaño de la casa, ella ha vivido en el clan Hyuuga toda su vida y nunca había visto una casa de esta dimensión.

"He estado construyendo esta casa de que Hinata cumplió doce preparándola para el día de hoy, pero nunca pensé que este día llegaría tan pronto, lamentablemente la casa no está completa aun, así ustedes dos tendrá que permanecer en el ala oeste hasta que se termine la construcción" Dijo Hiashi.

La mandíbula Hinata y de Naruto cayeron al suelo en cuanto Hiashi termino de hablar.

"¿As Así q que esto es so sólo el ala oeste?" Hinata preguntó con incredulidad.

"¡Es cool! Este lugar debe tener como nueve habitaciones" Naruto gritó emocionado.

"Seis habitaciones para ser exactos, y cuando se termine la construcción habrá trece habitaciones en total, además de tres onsen, una sala de estar y dos cocinas, El ala oeste sólo incluye la sala de estar, una cocina, un baño y un onsen, además no hemos tenido tiempo para preparar las decoraciones y muebles, de modo que sólo una habitación tiene muebles, afortunadamente es la habitación más grande y también es siendo su habitación. "

Hiashi dio un paso al lado de una gran puerta corredera de madera y se deslizó, ambos se quedaron sin aliento, la habitación era enorme, tenía alfombra de terciopelo suave, había dos hermosos aparadores tallados a mano en los lados este y oeste de la habitación, también hubo una gran puerta corredera de cristal que conducen directamente a la mitad de la mansión donde había un pequeño estanque, sin embargo, lo que llamó la atención a Naruto era la cama gigante en el medio de la habitación, tenía hojas suaves como la seda y Naruto podía decir con sólo mirar que iba a ser tan suave como una nube.

Hinata también había notado la cama, sin embargo tan inteligente como Hinata era, ella rápidamente se dio cuenta de un problema con la habitación.

Sólo había una cama…

La cara de Hinata se llenó de rubor "Ano… So Sólo hay una cama".

Naruto tragó saliva y se sonrojó también, el no había pensado en eso "Está bien, voy a dormir en una habitación diferente."

Hinata casi gritó, no quería perder la oportunidad de dormir en la misma habitación que Naruto, se mordió la lengua para contener su voz, Ella rápidamente quiso protestar la decisión de Naruto, pero ella no quería avergonzar a ella misma tampoco *¿Qué debo decir?* Pensó para sí misma.

"¡Por supuesto que no!" Hiashi gritó.

Ambos adolecentes saltaron ante la voz alzada de Hiashi y se volvieron para mirarlo a la cara.

"¡Ustedes dos se van a casar! Y ambos deben de dar la imagen de una pareja de casados, Ustedes se van a dormir en la misma habitación, la Honra del clan Hyuuga está en juego"

"Sí padre" Hinata se inclinó con respeto a su padre, pero por dentro estaba completamente animada, *¡Yay! Tengo la oportunidad de dormir en la misma habitación que Naruto después de todo… espera… voy a estar durmiendo en la habitación con Naruto… solos… en la misma cama… ¡oh no! Casi no puedo ni siquiera hablar con él ¿Cómo voy a manejar que yacer junto a él?* Pensaba nerviosamente la heredera Hyuuga.

*Relájate Hinata, ¡no se metas aún con eso! Además… si usted se desmaya ya estando en la cama, ¿Así que sería lo peor cosa que podría pasar?* Hinata respiró hondo, ella tenía razón, podía llegar a hacer esto, ¡Tenía que hacerlo! Ella estaba a punto de convertirse en la esposa de Naruto después de todo.

*Esposa* El solo pensarlo Hinata casi se desmaya y el calor en las mejillas eran bastantes fuerte hasta el punto que empezó a sentirse mareado.

"Ano… Voy a prepararme para entrar a la cama" Y con eso Hinata salió corriendo hacia el baño.

Hiashi y Naruto vieron como la chica se había escabullido de la situación y sus cejas quedaron levantadas, Naruto se encogió de hombros y se volvió para entrar en su nuevo cuarto magnifico, sin embargo Hiashi mantuvo un firme agarre en su hombro causando que se detuviera en seco.

"Espera Naruto, Hinata es mi hija mayor y heredera del clan Hyuuga, si arruinas esto te voy a matar" La voz de Hiashi era profunda y con capas de odio.

Naruto siendo tan acostumbrada a que la gente lo desprecian se encogió de hombros y sonrió a su pronto para ser suegro. "No te preocupes, Ella será mi primer prioridad"

Dejando caer su brazo del hombro de Naruto, Hiashi salió por la puerta, ahora Naruto y Hinata estaban completamente solos en su nueva casa gigante.

Naruto entró en su habitación y miró a su alrededor, para él acostarse en la cama grande y suave seria genial, pero sabía que la cama debe ir a Hinata, ya que la casa pertenecía a su familia, en ese entonces el agarró uno de las grandes mantas esponjosas e hizo su propia camita justo al lado de la puerta, luego bostezó y se acostó, él estaba sorprendido de lo cómodo era su pequeña cama improvisada, La manta era obviamente echa a mano y era la cosa más suave Naruto jamás había sentido, un solo toque a la alfombra dándose cuenta que también era muy suave y hecho una excelente almohadilla, Naruto no pudo evitar suspirar feliz, tirando de la manta a su alrededor, podría acostumbrarse a vivir así… unos minutos y ya estaba roncando.

Mientras tanto Hinata todavía estaba en el baño, se había puesto su pijama, eran un de pantalón de algodón blancos semitransparentes apretando su piel pálida y una camiseta sin mangas mismo color que su pantalón con tiras rosa pálido que va sobre los hombros., ella había estado debatiendo durante varios minutos sobre si debe usar un sostén o no, eran terriblemente incómodos para dormir, pero ella iba era dormir junto a Naruto, su mente había decidido finalmente no usar uno aunque con gran nerviosismo, no sabía cómo su 'Marido' iba a reaccionar, se cepilló los dientes, se peinó, y se rocía un poco de perfume nocturno en sí misma.

Hinata tomó una mirada más en el espejo y respiró hondo, abrió la puerta del baño y lentamente caminó hacia su habitación, deslizó la puerta y casi tropezó con el cuerpo inconsciente de Naruto.

La alegría de la chica se desinflo al instante, había pensado, casi esperaba que ella y Naruto estaría compartiendo la cama gigante, incluso se había utilizado su perfume especial y él sólo se había quedado dormido en el suelo, ¡Qué desperdicio! Sin embargo una pequeña parte de Hinata suspiró aliviada, no sabía cómo lo iba a manejar que durmieran en la misma cama que Naruto. Pero ahora no tenía que preocuparse por eso.

Hinata caminó con cuidado sobre Naruto y se desplomó en su nueva cama, ¡Qué día! Y Hinata sabía mañana iba a ser aún loco, no podía creer que iba a casarse con el chico de sus sueños, soy la chica más afortunada del mundo, Enserio… este colchón seguro que es cómodo.

Segundos después y Hinata estaba profundamente dormida.

Fin de la Escena Retrospectiva

Hinata sonrió para sus adentros, observó cómo el pecho de Naruto se subía y bajaba con cada respiración, era la cosa más linda que ella había visto y pronto iba a ser su marido, una idea le vino a la cabeza de Hinata y recordó que cada vez que ella se acercó a Naruto comenzaba a sentirse mareada y desmayarse, tenía que aprender a estar cerca de él y mantener su cordura, y qué hora más perfecto está ahí para entrenar entonces cuando duerme, Hinata sacó silenciosamente las mantas y se deslizó fuera de la cama, se las arregló para arrastrarse a su manera a la cama de Naruto sin despertarlo, el calor que emanaba Naruto la sorprendió ¡Era como un horno!

El rostro de la chica comenzó a ruborizarse mientras se obligaba a acercarse a Naruto, ella siguió moviéndose hasta que su cara estaba a centímetros de Naruto, vapor estaba prácticamente saliendo de las orejas de Hinata, y todo su rostro quemado rojo vivo y empezó a acercarse más, hasta que…

Naruto se movió "Hinata" susurró Naruto.

Hinata contuvo la respiración hasta que oyó los ronquidos leves de Naruto, suspiró con alivio, *Eso estuvo demasiado cerca ¿Acaso estaba Naruto soñando con ella?* Pensó para si misma, por primera vez en su vida, Hinata deseaba ser Ino, de esa manera se podría entrar en la cabeza de Naruto y ver lo que estaba pensando.

Naruto comenzó a moverse de nuevo, pero esta vez se dio la vuelta y comenzó a frotarse los ojos, Hinata se quedó sin aliento, se puso de pie y salió de la habitación, siguió corriendo hasta que ella estaba en el baño, cerrando la puerta detrás de ella y llego a apoyarse en contra de ella respirando con dificultad, lentamente fue deslizándose al suelo, su piel ya sentía el frío de la ausencia de calor del cuerpo de Naruto, negando con la cabeza pensó que necesitaba una ducha.

Mientras tanto Naruto estaba empezando a despertar, las imágenes de su estaban vividas "Hinata" Naruto se quedó sin aliento, ¿Acaba de gemir el nombre de Hinata en voz alta? Miró a su alrededor y suspiró aliviado cuando vio que Hinata no estaba en la habitación, ¿Qué había estado soñando? El podía recordar cada parte de ella, la imagen de Hinata en el agua y observaba a Hinata desnuda, Naruto solo negaba enfáticamente su cabeza la imagen, no sabía realmente que pesar de ello, pensando por unos momentos Naruto se encogió de hombros y se estiró, el extendió la mano para quitarse el su gorro sólo para descubrir que no estaba allí *Oh sí… necesito mover todas mis cosas en mi antigua casa en esta casa* Pensó el rubio.

Se fue Levantando lentamente y dirigió perezosamente al cuarto de baño, por toda la situación anterior no había ido al baño la noche anterior y su vejiga ya estaba a punto explotar, el rubio bostezó profundamente y se frotó los ojos, y al parecer aún estaba medio dormido, a tal punto que no se dio cuento de su entorno, ni tampoco pudo escuchar los sonidos de la regadera provenientes del baño.

Hinata acababa de terminar de enjuagar la espuma de su cuerpo desnudo, cerró el grifo y salió de la ducha, ella estaba en el proceso de alcanzar una toalla cuando oyó la manija de la puerta, su corazón le dio un vuelco al darse cuenta de lo que iba a suceder, trató de gritar una advertencia a Naruto, pero el grito se quedó atascado en la garganta.

La puerta se abrió y Naruto obviamente sintió el calor en el aire y se dio cuenta que algo andaba mal, levantó la mirada y sus ojos azules se encontraron con los lavanda de Hinata, una vez más ambos adolescentes fueron fuertemente hipnotizados por sus ojos, se sentía que el tiempo se detuvo y no podía apartar la mirada, pero el cerebro de Hinata por fin hizo clic y ella dejó escapar un fuerte grito, Naruto saltó la sorpresa, miró hacia abajo y finalmente se dio cuenta de que Hinata estaba desnuda, sin embargo no había agua o la oscuridad de la noche para bloquear su vista como la última vez en la cascada, el baño estaba totalmente iluminada, y Naruto no perdió un solo aspecto del cuerpo de Hinata.

Sus ojos vírgenes recorrieron el cuerpo de Hinata como si tuvieran voluntad propia, ña única chica desnuda que había visto en su vida antes de Hinata, era una revista que Naruto había utilizado para perfeccionar su jutsu sexy, sin embargo la realidad fue muy diferente, Era más asombroso de lo que podía imaginar, su forma curvilínea femenina denotaba sus caderas, su piel parecía suave como la seda, podía ver las gotas de agua sobre su cuerpo, sus pechos no eran tan grandes como la chica está en la revista, pero parecían encajar mejor y rebotaban cuando Hinata se movió y dos puntos rosado sobresalían de su piel pálida, donde se encontraba sus pezones ahora ya erectos por la falta de calor, parecían dos pequeñas cerezas encima de un suculento postre, y por último aquella parte que no debía ser mostrada a cualquier hombre, el lugar más frágil y delicado de una chica, que aún a su tierna edad de 13 años no sobresalía algún vello púbico, Hinata podía sentir la mirada furtiva del rubio, rápidamente agarró una toalla y lo utilizó para cubrir su frente, un intenso rubor pronto se cubrió el rostro.

El trance de Naruto se rompió y rápidamente salió corriendo del cuarto de baño. "¡L-lo siento!"

*¡Él me ha visto desnudo dos veces!* Hinata sintió ganas de llorar *Espera, no me desmaye… estaba tan cerca de el… y yo estaba desnudo, ¿Por qué no me desmaye?* Pensó la chica de cabello añil.

Ahora llena de curiosidad y con una sensación con la que ella no estaba familiarizada, se sentía temeraria, sentía que no tenía nada que perder y respirando hondo abrió la puerta del baño.

Naruto escuchó la puerta abierta y rápidamente se cubrió con las manos los ojos "Lo siento" murmuro el chico.

Hinata suspiró profundamente "Está bien Naruto-kun, no es tu culpa, además t-tú ya me has visto des-desnuda"

Naruto abrió los dedos un poco "¿No estás enojado conmigo?" Pregunto nerviosamente.

Hinata negó con la cabeza suavemente "Voy a ser su esposa después de todo, si quieres mirar, entonces adelante si quieres." Hinata soltó su agarre en su toalla y se cayó al suelo.

Naruto escuchó la toalla cayó al suelo y cerró los ojos con fuerza, sin embargo la curiosidad empezó a comer a Naruto hasta que no pudo aguantar más, poco a poco dejó caer las manos a los costados, lo primero que vio fue el rostro de Hinata, quien ahora baja cabeza, y con un grandioso rubor que contrastaba con su piel, sus ojos siguieron viajando por el cuerpo de Hinata, era tan diferente de su propio cuerpo, Naruto nunca había visto algo así *Se ve tan atractiva y apetecible* Eh… la sentía apetecible, eso era algo que jamás había sentido con Sakura-chan, en cuanto vino a la mente Sakura pensó *Espera… ¿Me gusta Sakura verdad? Como pensar en eso si me gusta ella, pero Hinata seguro que es mejor que Sakura, si esto hubiera sucedido a Sakura probablemente estaría en el hospital ahora mismo, en cambio con Hinata es diferente, se sentía tan natural, como si algo me impulsara a estar más cerca de Hinata-chan*

Mientras tanto con Hinata estaba despasando sus propios ojos por el cuerpo de su amado, pudo observar que en sus pantalones parecían estar más abultado de lo que solían ser y ella no podía entender por qué *¿Está subiendo de peso? No, parece que sólo es creció alrededor de un área específica*

De pronto se oyó un fuerte ruido de golpeteos en la puerta principal, Naruto y Hinata se quedaron sin aliento, Hinata se inclinó rápidamente, agarró su toalla y se la envolvió alrededor de ella, mientras corría a su habitación, Naruto siendo sus ropas fue a abrir la puerta, para encontrarse parado a Neji.

"Hiashi-sama, invita a usted y Hinata-sama a la casa principal, donde se servirá el desayuno" Neji dijo en un tono educado mientras se inclinaba cortésmente, de todos los gennin que había conocido, Naruto era a quien más respetaba Neji, él sabía que si había alguien que podía cambiar su primo, ese sería Naruto, después de todo Naruto fue quien lo había cambiad.

Cuando Neji termino de dar su mensaje se retiró, Naruto por otro lado estaba confundido *¿Por qué Neji hiso una reverencia a mí?*

Naruto se encogió de hombros y al cerrar la puerta su estómago rugió con fuerza, tal vez el desayuno no suena tal mal, el rubio volvió a su habitación encontrándose a una Hinata completamente vestida con su atuendo habitual, aunque sin embargo su rubor todavía no se había ido, pero para suerte de la chica el único pensamiento ahora del chico era llenar su estómago.

"Vamos Hinata ¡Es la hora del desayuno!" Naruto se acercó y tomó la mano de la chica, para luego medio arrastrándola a la puerta principal, Hinata no podía evitar ruborizarse ante su toque, ella nunca había sostenido la mano a un niño antes y la mano de Naruto era tan cálida.

Minutos más tarde, después de Hinata logro dirigir a Naruto a la casa correcta, ambos fueron sentados alrededor de una mesa grande junto con Neji y Hiashi, varios sirvientes y cocineros llegaron desde la cocina y se colocan varios platos humeantes delante de Naruto y Hinata, cuando el siervo sacó la tapa de la placa de Naruto se confundió.

El chico miraba con mucha curiosidad y escepticismo la comida "Um… ¿Hinata? ¿Qué es esto?" Preguntó Naruto.

Hinata miro al chico en shock, como era posible que no supiera que eran estas comidas, eso era un desayuno común "E-eso son huevos re-revueltos, jamón, to-tocino y pan-panqueques" Dijo mientras señalaba los alimentos, aunque en su mente aun procesaba lo que el amado rubio le dijo.

Para Hiashi no pasó desapercibido de que el rubio menciono *Hija, la vida como jinchuriki nunca es buena, muchas cosas que nosotros damos por sentado, para ellos tiende ser algo que desconocen* Pensó el jefe del clan mientras observaba la interacción del rubio con su pequeña.

Naruto tentativamente agarró un trozo de "tocino" y lo puso en su boca, al instante sus papilas gustativas se llenaron de sabor, un sabor que el conocía, tal como la carne de cerdo en el Ichiraku ramen, pero esto era aún mejor.

"Oh, wow! Hinata tienes que tratar con el tocino" Naruto entonces coloca el resto de su rebanada de tocino en la boca de la chica, quien ni siquiera tuvo tiempo de protestar.

En ese mismo momento Hinata no podía creer lo que estaba pasando, su futuro marido le dio de comer en la boca, aunque claro el chico no sabía nada de tacto pero al fin de cuentas se lo dio en la boca.

Ambos adolecentes comenzaron a alimentarse de sus comidas, y una que otra vez Naruto le daba a Hinata de sus propias aunque con un poco de tacto a comparación de la primera vez, y Hinata se podría decir que estaba en el séptimo cielo.

"¡Dios mío! ¡Estos panqueques son eran suave y dulce! ¿Qué es este líquido marrón en la parte superior de ellos? ¿Un tenedor? ¿Qué es un tenedor? ¡Los huevos estaban deliciosos!" Naruto no dejaba de hacer preguntas sobre la nueva y deliciosa comida que había probado.

La comisura de los labios del jefe del clan se levantó ligeramente ante la curiosidad del joven rubio "Pensé que te gustaría, estos son alimentos de costumbre aquí en el compuesto, y en cuanto en realizarlos son de forma sencilla, hay una tienda cercana al compuesto que vende estas comidas y sus ingredientes" Tomando un pedazo de papel Hiashi anoto "Aquí tienes la dirección".

Naruto rápidamente aceptó el pedazo de papel, iría sin duda a esa tienda, pero había algo más que se le estaba pasando, tenía un ligera impresión que algo faltaba ¿No se suponía que debía hacer algo hoy?

En ese momento su mente hiso clic "¡Oh sí!" De repente exclamó "Tengo que volver a mi antiguo apartamento y recoger mis cosas"

Hiashi asintió. "Tienes razón, Hinata ir con Uzumaki-san y ayudar a empacar sus cosas"

La chica de cabello añil asintió dócilmente, en fin de cuentas ella lo habría hecho si la necesidad de que su padre le había pedido, aunque ello le dio una razón legítima para estar con Naruto todo el día.

Ambos adolescentes se excusaron de la mesa y salieron del complejo Hyuuga, y caminaron hacia el departamento del rubio que solo tomaría unos minutos en llegar, pero ellos no tenían prisa en hacerlo.

Después de un largo silencio Naruto fue quien lo rompió "Así que ¿Hinata? Creí que tenías una hermana pequeña, pero yo no la vi durante el desayuno" Naruto dijo tratando de hacer una pequeña charla.

Hinata suspiró con tristeza "Yo no la veo muy a menudo, mi Padre la pone a través de un estricto entrenamiento"

"Oh, lo siento, realmente la debes extrañar"

"A veces, to-todavía la veo por la no-noche, s-sin embargo, no es t-tan ma-malo."

"Eso es bueno, me gustaría conocerla algún día, después de todo ella va a ser mi hermana en ley"

Hinata se sonrojó ante el comentario y pensó *Ella ya sabe acerca de ti, probablemente no debí dicho a Hanabi todas esas cosas*

"¡Aquí está!" Naruto gritó interrumpiendo los pensamientos de Hinata, puso la llave en la cerradura y entraron al antiguo apartamento del rubio.

Hinata se observó la casa, mientras que Naruto fue a empacar sus cosas en una caja, ella sabía que Naruto era huérfano y también que vivía solo, pero mientras más miraba alrededor del apartamento no podía evitar sentirse triste.

Había telarañas por todas partes, la pintura se estaba empezando a despegarse y las paredes tenia agujeros *Naruto debió de sentirse tan solo* Pensó con tristeza.

Segundos más tarde, Naruto salió de su habitación con la caja, que no era ni la mitad llena, había unos cuantos equipos, materiales de capacitación y una imagen de equipo de siete.

"Ya he terminado ¿Estás preparado para regresar?" Preguntó Naruto.

Hinata se sorprendió ¿Cómo podría alguien sobrevivir con tan poco? Naruto era increíble… ¿De dónde era capaz de sacar tanta fuerza?

Naruto tomo una de las manos de Hinata, él podía sentir la suavidad de ellas *Fueron sus manos así de pequeñas y que es este calor que siento en mi pecho* Pensó el rubio mientras apretaba la mano de la chica con suavidad, el sentía que si aplicaba más fuerza podrían romperse.

Dando la última mirada al apartamento Naruto, los recuerdos empezaron a llegar a su mente, recordó como el tercer Hokage le había dado esta casa después de ser expulsado del orfanato, él no tenía ningún lugar a donde ir y no había mucha gente dispuesta a ayudarlo, él recordó cómo los aldeanos solían tirar piedras a sus ventanas y la puerta, nunca había sido un lugar agradable para vivir, pero era su casa, un sentimiento de nostalgia cruzo su rostro, hasta que sintió un ligero apretón en su mano, y volviendo su mirada, miro a Hinata quien le daba una dulce sonrisa, y sus ojos le decían que todo iba a estar bien.

*Tal vez esto será mucho mejor de lo que imagine al principio* y con ese último pensamiento ambos se dirigieron a su nuevo hogar.

Varios minutos después, Naruto y Hinata estaban de vuelta en su propia habitación y estaban desempacando pertenencias de Naruto, el rubio puso su foto en la parte superior de uno de los aparadores de madera. Se quedó mirando la imagen, recordando lo que era estar en el equipo siete.

Hinata se dio cuenta de la tristeza de Naruto y trató de consolarlo, ella lo abrazo por la espalda y dijo "Naruto ¿Los echas de menos?"

Una tenue sonrisa cruzo su rostro "Sí, una vez que Sasuke se fue, Sakura se rompió, ahora apenas si deja el hospital, está constantemente entrenando bajo Ba-chan, y Kakashi-sensei siempre está en alguna misión, he estado solo durante bastante tiempo ahora".

Hinata situada justo detrás de Naruto apoyó la cabeza en su hombro "Sé que te sientes solo Naruto-kun, pero te prometo que siempre voy a estar aquí y nunca voy a dejar que te sientas de esa manera otra vez ¿No es eso lo que una esposa hace por su marido?"

Naruto se dio la vuelta y le regresó el abrazo de Hinata "Gracias Hinata-chan Eso significa mucho para mí."

Naruto puso su rostro hacia atrás y la miró a los ojos de Hinata, el tiempo se detuvo, el cuerpo de ambos lentamente se fueron acercando y en esos momentos Hinata no podía respirar *¿Nos va-vamos a be-besar?*.

De repente se produjo un fuerte golpe en la puerta (Una vez más).

Los jóvenes ninjas rompieron su abrazo y un rubor cubrió sus rostros, ellos fueron a la puerta principal y al abrirla observaron que Hiashi.

"Buenas tardes ¿Puedo entrar? Tenemos algunos asuntos que discutir"

"P-Por supuesto pa-padre, Vamos a ir a la sa-sala" Dijo Hinata observando que su padre casi parecía estar sin aliento *¿Qué ésta pasando?* Pensó la joven Hyuuga.

Una vez que todos estaban sentados en la sala Hiashi comenzó "He hablado con los ancianos del clan y se aparecieron con dos problemas."

Naruto y Hinata se miraron el uno al otro. "¿Qué pasa padre?"

"¿Qué nombre vas a tomar cuando te cases hija?"

Hinata ni siquiera había pensado en eso, sin embargo una vez que lo pensó, la respuesta parecía bastante simple.

"Hinata Uzumaki" Una vez Hinata dijo las palabras, algo hizo clic en su cabeza, ella y Naruto realmente se van a casar y apenas podía contener su emoción.

"No, usted es un Hyuuga y siempre serás un Hyuuga, Uzumaki-san deberá cambiar su nombre"

"¿QUÉ?" Gritaron al unísono.

"¡No! No es así como yo lo quiero, Padre, voy a tomar el nombre de Naruto-kun, es costumbre que la esposa toma el nombre de los esposos ¿No es así? Yo sería feliz de ser llamada Hinata Uzumaki"

Hiashi estaba consternado, nunca había visto a su hija contradecirlo de tal manera, ella siempre había hecho lo que se le dijo sin hacer preguntas *¿De dónde fue a encontrar esta nueva fuerza?* Pensó el jefe del clan.

"…"

"…"

"Ejem" Hiashi recuperando la compostura "Voy a tomar esto en consideración, el segundo problema es que la tradición requiere que uh… consumar el matrimonio después de la boda… en la luna de miel"

"…" Hinata se sonrojo furiosamente echando a andar mi imaginación y valla que tenía imaginación, mientras que Naruto lanzo una mirada confundida a ambos Hyuugas sin tener la mayor remota idea de lo que hablaban, en serio.

"Sin embargo, ustedes dos son a la vez muy jóvenes, por lo que hemos decidido posponer la boda hasta que esté a una edad más apropiada" Dijo el jefe del clan sin demostrar ninguna emoción en su rostro.

Aunque a Hinata no le importaba tanto, ellos todavía se iban a casar, no importaba cuándo, mientras ella estaba con Naruto era feliz.

"No nos importa". Naruto dijo después de compartir una mirada con Hinata.

Hiashi dijo y un poco la comisura de sus labios se levantaron ligeramente "Bien, ahora Hinata por favor vaya arriba"

Hinata estaba en shock, por primera vez en tantos años, vio a su padre sonreír, por el amor de KAMI, estamos hablando de siempre estoico Hyuuga Hiashi sonrió "P-Pero… ¿Padre?"

"Está bien Hinata, estaré allí pronto" Naruto dijo tratando de tranquilizar a la chica de cabello añil, ante ello ella no tubo de otra, asintió y se dirigió hacia las escaleras.

Una vez que Hinata ya no se encontraba a la vista, Hiashi metió la mano en el bolsillo, sacando una pequeña caja de color negro y le entregó la cajita a Naruto.

Naruto la abrió y al momento de verlo se quedó sin aliento, en el interior había un hermoso anillo de diamantes con incrustaciones de zafiro algo que le daba un toque único, tenía un pequeño diamante en él y en el interior del diamante que había una pequeña joya de lavanda, fue absolutamente impresionante.

"Es el anillo de compromiso de Hinata, una vez que me vaya usted suba con ella y entrégaselo a ella ¿Entiendes?" Preguntó Hiashi severamente.

"S-sí" Respondió el shockeado rubio

"Bien, te veré mañana… yerno" Hiashi hablo mientras volvió rápidamente a la salida.

Naruto caminó lentamente a su habitación, no podía apartar los ojos del anillo, debió de haber costado una fortuna.

"Hinata?" Naruto gritó al tiempo que abría la puerta corredera, Hinata en ese momento ya estaba en pijama acostada en la cama.

"Sí, Naruto? ¿Qué quería mi padre…?" La voz de Hinata se apagó cuando vio la cajita negra.

"N-Naruto… ¿Es eso un…" Las palabras no podían salir de los labios de la chica de ojos perlados.

"Sé que las circunstancias en la que estamos fueron extrañas y de cierta forma impactantes, pero sé que mi mente no me arrepiento de haberte visto en la cascada, porque gracias a ello pude llegar a conocerte un poco mejor, gracias a ello puedo tener a alguien cercano a mí, porque gracias a ello te tengo a ti" Hablaba Naruto aun incrédulo de lo que salía de su boca "¿Hinata? ¿Quieres casarte conmigo?" Naruto preguntó mientras sostenía el anillo.

El corazón de Hinata dio un vuelco, ella no creía que era posible ser que fuera tan feliz, las lágrimas de felicidad fluían de sus ojos "¡S-sí! ¡Por supuesto que sí!"

Naruto en piloto automático deslizó el anillo en el dedo anular de Hinata, causando que la chica casi gritara de alegría, una vez que el anillo estaba en su dedo, ella saltó de la cama y se abordó Naruto con un abrazo.

Este fue el día más feliz de su vida, Bueno… El día más feliz de su vida… ¡hasta ahora!