MIDORIYA...

-Bien... comienza a hablar- exigió Katcchan

-Bueno...-All might tenia mas conocimiento de One for All que yo así que el fue quien explico.

Solo dijo lo escencial, que era un Quirk que se pasaba de generaciones y que nosotros mismos teníamos que hacerlo funcionar fortaleciendo nuestro cuerpo, explico sobre los primeros portadores que eran hermanos y la pelea que se ah llevado con cada portador, por ultimo explico su pelea... el como fue lastimado y el porque ya no pelea. Todoroki no me quitaba la vista de encima mientras la platica seguía al igual que Katcchan, la explicación termino ahí... All migh me concedería la parte de poder decirle a Todoroki con mis palabras que era el siguiente portador.

-Eso es todo- termino All might y el silencio se hizo muy incomodo.

Eramos 6 ahí solos, la mayoría sabia la verdad a medias y otros casi nada, Aizawa y Todoroki nos veían de manera acusatoria al ocultar todo esto; me resigne al final, suspire y esta vez me tocaba hablar a mi.

-Ya que estamos en ello... también tengo que decir algo- toda la atención fue hacia mi- cuando desapareci hace 4 años... estaba lastimado por una batalla y Tomura aprovecho esa oportunidad para secuestrarme... en ese entonces yo...

FLASHBACK...

Desperté en un lugar obscuro, apenas veía algo, tenia un olor a humedad. Como llegue aquí? Lo ultimo que recuerdo es estar peleando en la ciudad con unos ladrones, atrape a tres de ellos y el ultimo escapo al darme un golpe en la cabeza.

Aun me dolía donde fue el golpe, sentía unas pulsaciones, también estaba mareado pero la oscuridad tranquilizaba esa parte de mi.

Se abrió una puerta que ni siquiera sabia que habia, y la luz me molesto un poco provocando que bajara la mirada, no tarde mucho en escuchar pasos hacia mi y después sentir como me tomaban de la barbilla levantando con brusquedad mi cara.

-Ya despertaste...-reconocí la voz.

-Dabi...

-Hola Midoriya!- Toga salio detrás de Dabi y su voz me provoco de nuevo dolor de cabeza.

-Veo que aun estas debilitando, bueno... eso es en nuestro beneficio-argumento Dabi.

Tenia que planear como escapar de ahí pero nisiquiera podía concentrarme en lo que yo pensaba. Me distrage al escuchar nuevos pasos.

-Quien les dio permiso de verlo..- una voz ultratumba me provocó escalofríos.

-No necesitamos tu permiso para visitar a alguien que nosotros mismos encontramos...-argumento Dabi a la otra persona.

De un momento a otro el aroma abrumador que por fin se me hizo reconocible aumento, me sentí abrumado y a toda costa estaba evitando inhalar el aroma, llevaba mucho tiempo lejos de mi alpha y tener un aroma así de cerca no me ponía en buenas condiciones.

-Largo- ordeno Tomura después de amenazar con su aroma a todos ahí presentes.

Ambos obedecieron de mala gana al escucharlos gruñir cuando partian, Tomura se quedo en el umbral   de la puerta y sentía su mirada fija sobre mi.

-Que es lo que quieres- hable con cautela, desde la primera vez que nos encontramos sabia que tan peligroso era para no retarlo en tan malas condiciones.

-Sabes bien lo que busco

-Y sabes que no te lo daré

-No creo que estés en posición de negarte-fruncio el ceño.

-Solo te aprovechaste de que estaba herido...

Oí como gruño y se acerco rápidamente a mi, tomo mi barbilla con 3 dedos y me obligo a mirarlo, aunque estaba obscuro con la puerta abierta podía ver un poco mas.

-Pongo 2 dedos mas en tu rostro y estas acabado en este instante-amenazo.

-No lo harás...- sonreí con prepotencia aunque internamente moría de nervios- me necesitas vivo a menos que creas que no necesitas mi Quirk.

-Che...- me soltó bruscamente pero no se alejo de mi.

Posicionó sus manos en la pared atrás de mi rodeandome entre ellos, su mirada era intimidante y su aroma me asqueba por lo abrumador que era.

-Eres algo astuto...--sonrió de manera perturbadora provocando que temblara- pero veremos cuanto resistiras- se acerco a mi cuello y lamio desde mi manzana de adán hasta mi barbilla.

Se levanto de golpe y salio de ahí, no me había dado cuenta que deje de respirar hasta que la puerta se cerro, tenia que salir de ahí rápido... seria complicado porque nadie sabe donde estoy, así que estoy solo en esto.

Así fue unos días, no podia medir el tiempo al estar en un lugar tan obscuro pero Dabi o Toga me llevaban comida en la mañana y en la noche, tenían ordenado mantenerme débil así que no era mucha la comida y no había tratado mis heridas, aun estaba débil. Tomura no se acerco a mi desde eso día pero después de una semana por primera vez saldría de ese cuarto.

-Vamos levantate- me ordeno Dabi.

-Es necesario?- pregunte de manera débil.

-Tienes que salir un rato- me tomo del brazo y me levanto sin esfuerzo, estaba mas débil dd lo que pensaba si podían moverme de esa manera.

Me arrastró del brazo todo el camino, olía a humedad y las paredes estaban roforzadas, estábamos bajo tierra seguramente, no pude analizar mucho las cosas solo pude ver un cuarto con un hombre dentro... su aspecto era extraño, cubría la mitad de su rostro con una mascara en forma de pico, su mirada era pesada y su aroma intimidante, aparte la vista de inmediato y después de dos puertas mas llegamos a nuestro destino.

-Tienes que sobrevivir Midoriya, no será tan divertido si murieras ahora-su palabras me perturbarón un poco pero no pude pensarlo mucho.

Abrió la puerta y me dejo dentro, el no entro solo se fue y cerro la puerta; el lugar parecía una cantina pero el único que estaba ahí en un sillón era Tomura.

Al voltearme a ver temble, su mirada tenia destellos rojizos y sus ojeras lo hacían mas intimidante, no podía hablar... quede en shock al sentir una abrumadora amenaza de su parte.

-Que mierda tienes de especial?- grito y se acerco de manera lenta.

Estaba temblando, no podía evitarlo... Tomura parecía enojado pero era aterrador el como se veía tan tranquilo y su aroma daba a entender todo lo contrario.

Me tomo de la playera y me arrojo al sillón, sin previo aviso junto nuestros labios, fue cuando reaccione y trate de poner resistencia, pataleaba y trataba de empujar oponiendome al beso pero mordió mi boca sin cuidado y al gritar metió su lengua.

Se separo un poco pero aun me aprisionaba contra el sillón, sus manos las tenia algo alejadas de mi y lo agradecía... si me tocaba con ellas estaría acabado en cualquier instante.

-Que es tan atrayente en ti Midoriya? Porque todos necesitan algo de ti? Si mueres que crees que sudceda?

Su mano se acerco a mi y trate de evitarlo pero paso sus dedos sobre mi mejilla, me obligo de nuevo a abrir la boca y metió dos de ellos jugando con mi lengua. Estaba asustado y mis lagrimas empezaron a salir, paso su labios por mi hombro y sentía como encajaba su dientes.

Se posicionó entre mi piernas y se frotaba contra mi trasero de manera descarada, con mas insistencia trataba de huir pero oí como gruño en advertencia, si no hacia algo yo...

Sonó un celular, no podía creer que de verdad podría ser salvado, Tomura ni siquiera se movió cuando lo escucho pero la insistencia lo arto y se levanto a contestar de mala gana.

-Que?!- no escuchaba a la otra persona pero sus expresiones cada vez iban empeorando- "haré lo que quiera con el.... "
"si no lo toco no le pasara nada..."
"No puedes detenerme si le hago algo..."
"BIEN!!"

Me exalte con el ultimo grito que dio, no me volteo a ver, solo salio de ahí dando un portazo; no sabia lo que paso pero definitivamente me salvo quien sea que allá llamando.

-Mmmh.. parece que el niño mimado fue regañado- escuche una voz y me exalte.

-Dabi-no escuche cuando entro.

-Si bueno... solo vine por ti, parece que si Tomura te toca el regañado será el- se burló.

-Que sucedio?

-Nada que necesites saber- volvió a su actitud desinteresada- ahora volvamos a tu cuarto.

Me llevo de nuevo a el cuarto obscuro y me dejo ahí, los siguientes días mientras me llevaba de comer se quedaba un rato platicando y Toga se escabullia para hacer lo mismo, era entretenido hablar con ambos y parecía mas que eran de los bueno que de los malos... podría ser que les faltara una convivencia normal con el mundo y no estarían aquí... aunque quien sabe...

Así pasaron otras dos semanas y el día en que recuperaría mi libertad llego pero a cambio de algo que odiaría toda mi vida.