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El tiempo que pasaba con Chaeyoung cada vez se hacía más corto entre todas las entrevistas y promociones que cada una tenía por su cuenta. Mina debía admitir que la serie le abrió muchas más ofertas de trabajo y ahora incluso estaba a punto de firmar con una agencia que quería representarla.

Digamos que todo estaba saliendo como ella siempre lo había querido.

Sin embargo había algo que no le permitía disfrutar de su completa felicidad.

Y ese algo, o mejor dicho alguien, era Son Chaeyoung.

Mina la extrañaba demasiado, se sentía muy tonta por querer llamarla o ir a visitarla impulsivamente, pero sentía la necesidad de abrazarla y pasar tiempo a su lado. Sus sentimientos por Chaeyoung la hacían pensar en ella todo el tiempo, aunque no lo admitiera abiertamente.

— Debo irme ya, Seulgi y yo haremos una coreografía para un grupo popular hoy — comentó Momo mientras terminaba de arreglar su mochila, Mina solo la observaba desde el sofá, sin demasiados ánimos —, ¿otra vez no pudiste dormir?

— Por tu culpa ahora me siento terriblemente mal por mentirle a Chaeyoung, estuve toda la noche pensando en eso — Momo la miró ofendida

— ¡Pero si yo fui quien te dijo que era una mala idea desde el principio! — se quejó, Mina hizo un puchero —. De todas formas, y viéndolo por el lado positivo, al menos ahora ya no le estás mintiendo. Se nota de aquí a Júpiter que Chaeyoung te ha conquistado y vaya que te tiene en la palma de su pequeña mano.

— Eso no es cierto — se defendió rápidamente

— Mina, ya superamos esto. Te gusta Chaeyoung y eso está bien, te diría algo más pero literalmente participaste en una serie donde tu personaje trata de dar visibilidad a este tipo de sentimientos y conversaciones — Momo observó la hora en su teléfono antes de levantarse — Me voy ya o llegaré tarde.

— Momo

— ¿Qué ocurre?

— ¿Realmente se nota que me gusta Chaeyoung? — Momo rió mientras tomaba su mochila

— Te conozco desde que tengo memoria Minari, y déjame decirte que nadie te había hecho sentir ni la mitad de lo que sientes por Chaeyoung. No esperes más y ve por tu chica o alguien más podría quitártela — Mina frunció el ceño

— ¿Por qué lo dices?

— Seulgi es admiradora de Nayeon, y me comentó que hoy llegaba a Seúl.

— ¡¿Nayeon está en Corea?! — Momo asintió abriendo la puerta de salida —. Y no es por ser chismosa ni nada, pero hoy vi unas publicaciones donde comentaban que había vuelto porque tenía  algo que hacer junto a Chaeyoung.

— Mentirosa — Momo se encogió de hombros

— Búscalo en tu teléfono, no tengo por qué mentirte Minari, más bien te deseo mucha suerte, la vas a necesitar si competirás con el ship más popular de tu enana. ¡Te veo en la noche!

Apenas Momo salió del departamento, Mina tomó su teléfono y entró a twitter para corroborar lo dicho por su amiga.

Realmente la búsqueda no fue complicada porque apenas abrió twitter Chaeyoung y Nayeon estaban en tendencia. Su corazón latía con fuerza mientras deslizaba el dedo por la pantalla. Un nudo se formó en su estómago mientras observaba las imágenes de Nayeon sonriente en las fotos que claramente eran antiguas, ya que el cabello de Chaeyoung era distinto, pero junto a esta estaban fotos de Nayeon en el aeropuerto con la fecha de hoy y, como descripción, la mención de una reunión que tendría junto Chaeyoung. Todo esto publicado por una cuenta oficial.

Un torrente de emociones la invadió: celos, inseguridad, miedo. ¿Qué significaba la presencia de Nayeon nuevamente en la vida de Chaeyoung?

La idea de perder a Chaeyoung la llenaba de pánico. Ella estaba muy insegura de sus sentimientos y por supuesto no podría competir con alguien como Nayeon; segura de sí misma, bonita y con un espacio especial en el corazón de la rubia.

— ¿Seguirá aún con su novia? — pensó en voz alta mientras buscaba toda noticia de Nayeon con la chica estadounidense.

Sin embargo no había nada, desde la última vez que se les vió, cuando Mina se enteró, no había ni una sola publicación más acerca de una ruptura o cualquier indicio de pelea.

Sin pensarlo más, Mina tomó su abrigo y salió apresuradamente de su departamento. Necesitaba respuestas, necesitaba ser honesta con Chaeyoung o tal vez podría ser demasiado tarde.

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El camino hacia la casa de Chaeyoung fue una mezcla de emociones encontradas, probablemente ni siquiera estaba pensando en lo que hacía, pero necesitaba ver a la coreana.

Cuando finalmente llegó a la puerta de Chaeyoung, Mina contuvo la respiración antes de llamar al timbre. Cada segundo que pasaba se sentía como una eternidad, hasta que finalmente la puerta se abrió y Chaeyoung apareció frente a ella, com una sonrisa brillante iluminando su rostro.

— Oh, Mina, no esperaba verte aquí — dijo, sorprendida por la visita inesperada de la japonesa.

Mina luchó por encontrar las palabras adecuadas, su corazón latiendo con fuerza en su pecho.

— Lo siento, es solo que necesitaba hablar contigo — Chaeyoung frunció el ceño.

— Entiendo, adelante — Mina agradeció mientras Chaeyoung abría la puerta por completo para que pueda entrar al lugar.

Una vez llegó hasta la sala, y antes de que pudiera conversar con Chaeyoung, Mina se encontró frente a frente con una, siendo honesta, hermosa chica de cabellos castaños, quien la miraba con curiosidad desde el sofá.

El aire se cargó de tensión mientras Mina luchaba por encontrar el coraje para romper el silencio

— Lo siento, ¿interrumpí algo? — preguntó Mina. Realmente no esperaba que Nayeon estuviera en casa de Chaeyoung, se supone que apenas había llegado a Corea, ¿no tendría que descansar o algo por el estilo?

— ¿Tú eres Myoui Mina, no es así? No interrumpes nada, no te preocupes por eso. Soy Im Nayeon, una vieja amiga de Chaeyoung, es un placer conocerte — la chica extendió su mano hacia ella con una sonrisa, Mina estrechó sus manos mientras sonreía un poco incómoda.

— El placer es mío — fue lo único que atinó a responder.

— Bueno yo ya estaba por irme — agregó Nayeon mientras tomaba su bolso —, Chae recuerda lo que hablamos, por favor no tardes, te veré el fin de semana — Chaeyoung asintió con una sonrisa mientras Nayeon se despedía de Mina

— Estaré allí, lo prometo.

Cuando Nayeon salió de la casa de Chaeyoung, Mina se quedó mirando por la ventana, observando cómo el auto de la chica desaparecía lentamente de su vista. Una mezcla de celos y alivio se agitaba en su pecho, sintiendo la tensión en cada fibra de su ser.

— ¿Y bien? ¿Qué era lo que necesitabas hablar, Mina? — preguntó la rubia mirando las actitudes de la japonesa, bastante confundida mientras se apoyaba en el sofá.

— Pensé que tenías la agenda llena toda la semana — dijo Mina

— ¿Perdón? — la confusión de Chaeyoung fue notoria ante el comentario directo de la nipona.

— Hace semanas que ya no nos vemos y si lo hacemos es solo para entrevistas o sesiones de fotos grupales. Cuando te pregunté si podíamos salir juntas, dijiste que esta semana estabas ocupada pero por lo visto sí saldrás con Nayeon — Chaeyoung se cruzó de brazos escuchándola —, ¿por qué me estás evitando Son? Creí que yo te gustaba

— Y lo haces, me gustas mucho, Mina, ¿pero qué esperabas que hiciera después de cómo le respondiste a Momo? — el rostro de Mina era de total confusión

— No sé a qué te refieres

— "No hubo ningún beso, eso es seguro", ¿ahora lo recuerdas o debo ser más clara? — las expresiones de Chaeyoung eran difíciles de descifrar, Mina por su parte solo trataba de entenderla —, y ni siquiera es que esté molesta exactamente por lo que dijiste, ya que en Tailandia al menos no ocurrió nada, ¿pero la forma en la que lo dijiste? Como si la sola idea fuera desagradable.

— No lo dije con esa intención — aclaró rápidamente, Chaeyoung chasqueó con su lengua

— ¿Y cuál es tu intención exactamente, Mina? Porque realmente ya no te entiendo. Cuando estamos las dos solas pareces sentir lo mismo que yo, pero llega una sola persona más y yo solo soy una amiga más como lo es Momo o Sana — Mina agachó su mirada sin responder —, no soy tu juguete, Myoui, y tampoco quiero entrar en tus juegos.

— Chaeyoung, lo siento, pero realmente todo esto es nuevo para mí. Nunca antes había sentido algo así por alguien, y supongo que me asusté — confesó, levantando su mirada para poder verla y, por primera vez, intentar ser sincera —. Realmente sé que lo que siento por ti es cierto, me gustas y estoy dispuesta a intentarlo contigo si me lo permites.

Chaeyoung, quien se había mantenido escuchándola a unos cuantos pasos de ella soltó un suspiro y se acercó para rodear su cintura con sus brazos abrazándola con cariño.

— ¿Estás segura de lo que dices? Porque no me gustaría que te estés presionando solo por los fans o-...

— Chaeyoung, sé que quiero estar contigo — Mina la interrumpió, acunando su rostro con sus manos —, quiero ser tu novia, Son, y quiero que tú seas la mía

Chaeyoung le sonrió tímidamente, quizá más nerviosa de lo que demostraba estar, dejando escapar un suspiro de alivio mientras sus ojos brillaban con emoción contemplando la sonrisa de Mina con ternura.

Ambas se miraron durante un breve momento, dejando que la tensión y la emoción llenaran el aire entre ellas. Entonces, Chaeyoung dio un paso adelante, su corazón latiendo con fuerza en su pecho. Con suavidad, colocó una mano en la mejilla de Mina, acariciándola con cariño.

— Mina, ¿te gustaría ser mi novia? — susurró, con una sonrisa nerviosa bailando en sus labios.

Mina sostuvo la mirada de Chaeyoung, sintiendo una oleada de calor recorrer su cuerpo. Sin decir una palabra, se inclinó lentamente hacia adelante, acercando sus labios a los de la coreana con delicadeza. Sus labios encontrándose en un beso suave pero lleno de significado, sellando su compromiso la una con la otra.

Después de un momento que pareció durar una eternidad, se separaron lentamente, pero sus manos seguían entrelazadas, sin querer soltar a la otra.

— Dios haces que me ponga muy tímida a tu lado — se quejó Chaeyoung, abrazándola y escondiéndose en el cuello de la pelinegra. Mina rió mientras la abrazaba de vuelta.

— Eres una ternura, Son Chaeyoung — la mencionada solo se quejó, totalmente en desacuerdo.

— ¿Quieres quedarte a ver una película conmigo?, tengo el día libre

— Creí que hoy irías con Somi y Bangchan al evento de los Kim — Chaeyoung rió

— Se supone, pero si te quieres quedar conmigo entonces me daré el día libre — Mina rodó los ojos soltando una risa

— Debes ir al evento, ya te comprometiste. Nosotras podemos hacer algo luego

— ¿Y si me acompañas? — preguntó esperanzada, Mina dudó su respuesta —, vamos Minari, será menos aburrido si vas conmigo.

— Primero tengo una reunión con la empresa que quiere representarme, después, y solo si Somi está de acuerdo, entonces estaré encantada de acompañarte — Chaeyoung dejó un rápido beso en sus labios asintiendo

— La llamaré entonces, por cierto, ¿cómo va lo de la empresa? ¿Ya es seguro que estás dentro? — Mina se encogió de hombros

— No lo sé, aún voy a leer bien el contrato con la abogada que Somi me recomendó, pero hasta ahora creo que todo va en orden

— Eso es realmente bueno, bonita — dejó un beso en la frente de Mina, y luego se cruzó d abrazos para mirarla —. A todo esto, ¿por qué viniste hasta aquí exactamente? No me mal entiendas, estoy agradecida de que lo hicieras, pero es extraño que vinieras justo cuando Nayeon llegó esta mañana a Corea, ¿o es pura casualidad? — la expresión de Chaeyoung era de completa burla.

— Yo no sabía que Nayeon había vuelto a Corea — Chaeyoung entrecerró sus ojos retándola —, bueno, quizá Momo lo comentó vagamente esta mañana.

— ¿Y viniste hasta aquí porque te preocupaba la presencia de Nayeon? — preguntó Chaeyoung, mirando fijamente a Mina.

— No vine exactamente por Nayeon, vine por ti. Quizá me preocupaba lo que podía significar su regreso para ti, realmente me sorprendí cuando la vi aquí, no lo esperaba — confesó Mina, evitando el contacto visual con la chica de cabellos rubios.

Chaeyoung pareció sorprendida por la respuesta de Mina, pero una sonrisa cálida se formó en sus labios.

— Te lo dije antes y te lo diré ahora, Minari. Nayeon es parte de mi pasado, un lindo pasado que ahora mismo es solo eso. Yo quiero que mi presente y mi futuro sean contigo y nadie más — respondió Chaeyoung, acariciando suavemente la mejilla de Mina

La japonesa sintió un alivio instantáneo al escuchar las palabras de Chaeyoung. Sabía que no podía competir con el pasado de Chaeyoung, pero estaba dispuesta a luchar por su lugar en su vida.

— Gracias, Chaeng. Me alegra escuchar eso —respondió, sonriendo con sinceridad. —, ¿y de qué se trata el evento al que irás con ella?

— Creí que Momo te había dicho algo "vagamente" — Mina le dio un pequeño golpe en su hombro quejándose —, eres una celosa, Myoui.

— Está bien, no me digas entonces — la retó. Chaeyoung se acercó y entre risas le dió otro beso suave en los labios.

— El elenco de la serie en la que trabajé con Nayeon hará una reunión en casa de una amiga, y Nayeon vino a obligarme a ir, es todo

— ¿No pensabas ir antes? — Chaeyoung negó.

— Ya había escuchado de la reunión pero no tenía muchos ánimos, además tengo un evento al día siguiente y no puedo faltar. Sin embargo, y ya que Nayeon ha venido hasta aquí, no puedo negarme.

— Que obediente eh — Chaeyoung rió abrazándola

— Deja de ser celosa, Minari — besó su mejilla sonriente —, soy tu novia, no de ella.

— Se sintió muy bien escucharlo

— Se sintió muy bien decirlo — ambas rieron tímidas

— Por cierto, Chae — Mina llamó su atención apenas se separaron — Solo voy a pedirte un poco de tiempo para entender mis propios sentimientos y para aprender a manejarlos antes de decirle a los demás. No quiero perderte y enserio quiero hacer las cosas bien, pero me gustaría tener cuidado con los medios, me sentiría muy mal si comenzaran a decir que me estoy aprovechando de tu fama o que hacemos esto solo para promocionar la serie — comentó Mina, tomando la mano de Chaeyoung con ternura

— Hasta cierto punto lo entiendo Minari pero también creo que sería importante que no ocultemos nuestra relación por completo, al menos no con nuestros amigos cercanos. No podemos dejar que los medios dicten cómo vivimos nuestras vidas. Pero sí, podemos ser discretas al respecto. Tomémonos el tiempo que necesitemos para entender esto juntas. Lo importante es que estemos cómodas y seguras con la otra — respondió Chaeyoung con calma, apretando la mano de Mina con cariño.

Mina asintió, sintiendo un alivio aún mayor al escuchar las palabras comprensivas de Chaeyoung

— ¿Entonces estaría bien si se lo contamos a Somi y Bangchan? — preguntó la coreana

— Estaría bien, también se lo diré a Momo, estará muy feliz por nosotras — Chaeyoung asintió sonriendo antes de dejar un beso en su frente

— ¿Me dejarías acompañarte a tu sesión de fotos? Prometo no estorbar — Mina rió cuando Chaeyoung la miró con un puchero

— Va a haber mucha gente, linda

— Vamos Minari, mantendré la compostura — prometió, dejando pequeños besos en su barbilla mientras la abrazaba

— Está bien, puedes venir. De todas formas trataré de que sea una sesión de fotos rápida, no quiero que te aburras demasiado — Chaeyoung asintió emocionada

— Gracias, ahora espérame aquí, iré a cambiarme y luego nos vamos — Mina rió, sintiéndose feliz de tener a Chaeyoung a su lado.

— Aquí te espero

Cuando Chaeyoung se fue a su habitación, Mina se sentó en el sofá esperándola, tratando de procesar todo lo que había pasado en tan poco tiempo.

No se arrepentía de todo lo que había dicho, pero sin duda no era lo que esperaba cuando había decidido venir aquí en primer lugar. Se supone que ya había hablado con Momo acerca de sincerarse con Chaeyoung y decirle toda la verdad, pero tras pensar en el regreso de Nayeon, digamos que las cosas se desviaron un poco de su ruta original.

— Ya estoy lista, ¿vamos? — Mina se levantó asintiéndole mientras tomaba su mano.

Bueno, quizá sería para una próxima oportunidad.

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