Estaba en el aeropuerto, el rubio no se presentó en el departamento, y el no sería tan tonto como para interrumpir una boda.

Los chicos se ofrecieron a acompañarlo pero el se nego, seguramente Jimin los querría presentes en su boda.

Cuando se anunció su vuelo se levantó triste y tomo su maleta, en estos momentos Jimin ya estaría casado y probablemente de camino a su luna de miel.

Suspiro y comenzó a caminar pero fue detenido.

Kook– el rubio tomo su muñeco y le miro, el pelinegro estaba soprendido, detrás de el estaban todos los chicos.

Jimin– susurro.

Lo siento– se disculpo– soy tan egoísta que no puedo dejarte ir.

¿Qué sucede Jimin?– no comprendía, sabía que el rubio lo amaba pero había algo que lo impedía.

La llamada– comenzó a hablar– La persona detrás de esa llamada fue tu mamá– suspiro y continuo hablando– Tu mamá dijo que me extrañabas demasiado, dijo que no dejabas de pensar en mi y preguntándote cuando volvería, no puedo volver a Hotlovish Jungkook, me es imposible regresar, mi trabajo está aquí, tú eres un chico de Suecia, yo no, todo lo que amo está aquí, mi familia, mis amigos, mis sueños, absolutamente todo está aquí, así que decidí casarme para que me odiaras, ¿Por qué no lo haces Kook?, ¿Por qué no me odias?– susurro y con su manga limpió sus lágrimas.

Jimin– susurro– Yo pude venir aquí, Hotlovish dejo de ser un hogar para mí cuando te fuiste, me di cuenta que cualquier lugar en el que estés tu será mi hogar, no me importa mudarme a Corea por ti, podemos ir a Hotlovish en vacaciones– nego con la cabeza– Pudiste hablarlo conmigo y arreglar esto, era demasiado fácil hacerlo– abrazo al rubio y beso dulcemente su mejilla– tonto– le golpeó suavemente la cabeza.

Lo lamento– se disculpo avergonzado– No creía que querrías venir a Corea.

Te seguiría a cualquier lugar Jimin, incluso si vas a Luna te seguiría hasta allá– le sonrió.

Te amo Jungkook– lo beso en los labios y le sonrió.

Ew, tus besos saben salados– rio divertido y le limpió las lágrimas.

Me amas con mis besos salados– refunfuño.

Te amo con tus besos salados– le sonrió y beso castamente.

Supongo que nos tendremos que mudar– puchereo el pelirosa, interrumpiendo la burbuja que crearon ambos amantes.

No tienen que hacerlo– el pelinegro les sonrió.

Si tienen que hacerlo, les permití estar hasta que me casará solo porque dijeron que estarían conmigo para que los extrañará después– los miro enojado– y ni un solo día estuvieron conmigo– bufó enojado– Así que si se tienen que ir.

Está bien– bufó el castaño enojado.

A todo esto, Jimin, ¿Qué pasó con tu boda?– miro al rubio soprendido.

Aaa eso, la cancele cuando pasaste la primera noche aquí– se encogió de hombros y sonrió dulcemente.

¿Qué?– lo miro.

La cancele, desde que llegaste, sabía que no me podía casar estando aquí contigo– le sonrió.

Eres un tonto– golpeó suavemente el pecho del rubio.

Lo soy solo por ti Kook– beso castamente al pelinegro.

Estoy seguro que ya te he conocido antes Jimin– sonrió tiernamente y lo miro a los ojos– En Japón– susurro.

En Japón– asintio el rubio y beso sus cabellos.