Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

XIX

— Vegetta, llevas diez minutos dando vueltas de un lado a otro, me estás mareando— Luzu dijo.

— Estoy muy nervioso, estamos a punto de conocer a nuestros nietos— Vegetta respondió.

— Vegettita— Rubius lo calmó— Moviéndote como león enjaulado no haré que el tiempo pase más rápido—

— Así que ya siéntate a la verga o te meto un putazo— Quackity amenazó y Vegetta finalmente se sentó.

Tras otros cinco minutos de espera, una enfermera salió de la habitación donde Spreen y Roier estaban.

— Ya pueden pasar— La enfermera dijo.

Los cuatro adultos se levantaron y empezaron a caminar hacia la puerta, cuando la abrieron, se toparon con una cortina que les impedía ver la cama.

— ¿Era necesario poner esta cortina?— Preguntó Luzu.

— Sí— Spreen respondió.

— Os juro que es un dramático— Rubius dijo al mismo tiempo que abría las cortinas.

Frente a ellos cuatro, está a la cama donde Spreen estaba sentado, con Roier sentado en la orilla, cada uno sostenía a un bebé envuelto en una manta de color azul claro.

A los adultos se les iluminaron los ojos y se acercaron rápidamente.

— Miren esas pequeñas bolitas de grasa— Quackity dijo mientras se acercaba a ver a uno de sus nietos.

— Se ven tan lindos— Vegetta sonrió.

El bebé que Spreen sostenía estaba dormido, pero el bebé sostenido por Roier tenía sus ojos violeta abiertos, mirando de un lado a otro, acostumbrándose a su nuevo mundo.

— ¿Ya eligieron sus nombres?— Preguntó Luzu.

— Sí— Roier asintió y miró al bebé que cargaba— Esté pequeñín de aquí, se llama Bobby—

— Y este de aquí, es Ramón— Spreen. Dijo, arrullando al bebé dormido.

Rubius por su parte ya estaba fotografiando a los bebés con su celular.

— Le enviaré estás fotos a Brayan, él vendrá para el verano para conocerlos— Rubius dijo.

— Hombre, ver estos bebés me hacen querer otro hijo— Vegetta dijo, pero en tono de broma.

— Podríamos volver a tener hijos al mismo tiempo como la última vez— Luzu le siguió con el chiste.

— Pues si ustedes insisten— Rubius habló.

— Pues adivinen qué— Quackity dijo.

— ¿De qué están hablando?— Preguntó Luzu, mientras él y Vegetta miraban a los omegas, quienes sonreían hacia ellos.

— Estamos embarazados— Dijeron Rubius y Quackity al mismo tiempo.

— Verga wey— Dijo Roier.

Continuará...

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro