El camino rojo
Para ser el héroe de un futuro lejano tienes que saber el pasado deseado.
- Jeje, Lucifer, Lucifer, Lucifer, mira este dibujo de papá - expresó la encantadora niña mientras extendía el papel hacia el demonio con una sonrisa tierna en su rostro. Lucifer observó con atención el dibujo antes de responder: "Quiero verlo, hermana". Sin embargo, al tomarlo, una expresión de disgusto se reflejó en su rostro, quedando tan pálido como un vampiro. "¿Este es papá?", cuestionó con incredulidad.
La chica asintió felizmente, pero al hacerlo, el rostro del hombre se tiñó de un líquido oscuro, mientras la pequeña Jessie se tapaba el rostro y en un instante, el demonio arrebató el dibujo de sus manos y lo destruyó sin considerar la reacción de la niña.
- No vuelvas a dibujar a ese individuo, Jessie Ugedark - reclamó Lucifer con evidente ira, pero su enojo se vio interrumpido por el semblante de la chica.
La pobre niña se encontraba llorando a todo pulmón, Lucifer se miró en los ojos cristalinos de la chica y allí surgió una pequeña imagen en su memoria. Fue él mismo con el mismo Dios, el creador del cielo y la tierra, recordándole al niño Lucifer que debía seguir las reglas si no quería ser tratado de manera diferente. A pesar de no haber hecho nada inusual, una pequeña herida causada por el ángel que tenía a su lado lo llevó a enojarse y quejarse con su padre.
- Fue Gez Lucifer, papá, él fue quien me causó esta herida - se quejó el infante zodiacal Scorpio.
- Adrián, debes ser más compasivo con Lucifer, él no te causó esa herida a propósito, fue un error - le habló con delicadeza el señor de los cielos.
"Exijo justicia, él merece ser tratado de manera diferente, es un desalmado que solo piensa en su propio bien, papá", volvió a quejarse el chico Scorpio, mostrando orgullo al mirar a Gez Lucifer.
- Lo siento mucho, mi hijo Lucifer, pero Scorpio tiene razón - declaró el padre con calma.
- Eres un idiota, un completo idiota, papá - las lágrimas fluían mientras el joven Lucifer corría, sus pequeños cuernos revelaban su desdicha y los ángeles murmuraban: "Es un error, mírenlo".
...
- Lo siento, Jessie, lo lamento, hermana. ¿Te gustaría que te hablara sobre la grandeza de Dios? - propuso Lucifer, retomando su papel de hermano mayor.
- ¿Puedo hacerte todas las preguntas que desee? - inquirió la chica mientras observaba los ojos grises de su hermano Lucifer.
- Lo que desees, Jessie.
"Las lágrimas no nos hacen más débiles, simplemente nos fortalecen. Cada lágrima trae consigo sufrimiento, y por eso, será recompensado tarde o temprano. Solo espera".
...
La cabeza de Libra yacía en el suelo húmedo mientras Acuario disfrutaba de un juego de risas, sumergida en la diversión. Con sus últimas fuerzas, la cabeza de Libra emitió un débil susurro que alertó a Óscar.
- Acuario, ¿verdad? - dijo la cabeza, dejando un rastro de sangre en el suelo.
- Correcto, hermano Libra - la joven esperó brevemente mientras Libra luchaba por comunicarse, pero pronto todo llegó a su fin.
Al divisar a la joven, un aire de locura se apoderó de mi rostro, y con exclamaciones enérgicas, me levanté a pesar del dolor y la pérdida de sangre que casi me agotaba.
- Eres una verdadera psicópata, ¿por qué has hecho esto? - exclamé, moviéndome para ocultarme las profundas heridas causadas por Libra momentos antes.
- Cuando una divinidad mata a otra, recibe un castigo divino - la joven, colmada de furia se acercó al debilitado y al agarrar a Óscar por su camisa amarilla lo golpeó con una violencia tal que el chico quedó en trance. Golpe tras golpe, su rostro ensangrentado mostraba el resultado; sin embargo, era solo cuestión de tiempo antes de que cayera inconsciente y vencido.
- Por fin has sucumbido, Jessie Ugedark - susurró contemplando al chico desmayado, y con indiferencia arrojó su cuerpo al suelo, propinándole una fuerte patada en la espalda - no te permitiré que hagas lo que desees, Jessie Ugedark.
Pero la atención se desvió hacia la otra protagonista mientras Acuario continuaba golpeando a Óscar. corriendo por el laboratorio que parecía interminable. Cada pasillo conducía a otro, y este a un espacio aún mayor, sin indicios de estar en un lugar repetido. Brandon jadeaba mientras corría durante lo que parecía una eternidad.
- Debemos sacar a Óscar de dónde este.
La valiente Rita, seguía corriendo y su cuerpo mostraba claramente el cansancio, con el sudor cubriéndose poco a poco. Al susurrar algo, el profesor preocupado pensó que se refería a algo más.
- Óscar exhibe una gran fortaleza, lo cual me hace confiar en su capacidad para comunicarse con Libra de forma pacífica, evitando recurrir a la fuerza física - le expresó a Brandon mientras le daba palmadas en la espalda.
- Estoy convencido de ello, Rita, aunque prolongar la situación podría tener consecuencias negativas - respondió Brandon con cautela.
- Ten fe en Óscar, jajaja - volvio a golpear su espalda, pero en ese momento el sonido de una trompeta del juicio final interrumpió nuestra conversación. Ambos nos quedamos boquiabiertos al escuchar y en sintonía dijimos.
"Libra ha fallecido."
Mientras tanto, en un brutal escenario, Óscar continuaba siendo golpeado sin piedad, incluso estando inconsciente, por una chica con una mirada enloquecida y una risa desquiciada que eclipsaba el estruendo de la segunda trompeta del juicio final. La trompeta marca el regreso de la Salvadora, la segunda anuncia la muerte de un ser divino, y la tercera señala las traiciones divinas, donde ángeles y demonios se preparan para luchar por sus ideales.
Con cada palabra pronunciada, el cuerpo maltrecho de Óscar era sometido a más golpes, hasta que emitió su último aliento.
- Debes agradecérmelo, Jessie, he puesto fin a la guerra y evitado más derramamiento de sangre en vano. Felicidades por la salvación del archipiélago de TEARRLAD, jajaja - exclamó la chica con su risa siniestra - finalmente los angeles podremos vivir en paz.
En los rincones de su mente resonaban las voces de los demonios, dejando una marca imborrable.
- Hijo, recuerda que las guerras son destructivas, solo traen sufrimiento y pérdida. ¿Estás dispuesto a salvarla? Es fácil decirlo, pero difícil llevarlo a cabo - susurró un hombre con ojos cansados.
- Lo haré, Papá - respondió Óscar sumergido en sus pensamientos, enfrentando la oscuridad interna que lo atormentaba. En su sueño recurrente, reflexionaba sobre su responsabilidad. El líquido oscuro simbolizaba la maldad de los demonios y humanos en búsqueda de libertad. TEARRLAD se convirtió en el escenario de lágrimas y sacrificios, ansiosos por la anhelada libertad. Óscar debía poner fin a la guerra eterna que asolaba el país.
"Libertad, libertad, libertad".
El arrogante Óscar abrió sus ojos de par en par, teñidos de un rojo más intenso que en el pasado, mientras los cielos se oscurecían y los mares se agitaban por la lluvia caída. A pesar de ser golpeado por la diosa acuario, el joven sonrió. Las circunstancias parecían agravarse, con acuario en un frenesí pateando al próximo salvador de TEARRLAD. Sin embargo, Óscar se incorporó con delicadeza y apoyó su pie en el suelo, tomando desprevenida a la chica. "Aún estás con vida, ¿verdad?" dijo ella con una risa sarcástica en su momento de triunfo y desequilibrio.
Los truenos carmesí sacudían los cielos, mientras la lluvia arreciaba y el protagonista se veía envuelto por un líquido transparente. Acuario, con temblores en las manos y el rostro, observaba a Óscar con asombro. Aunque divisaba la sangre en sus zapatos amarillos, ella volvía a sonreír. Tras propinarle una patada en el estómago, Óscar se puso de pie con una mano en su ojo. Al mirarla sin expresión alguna, la chica quedó petrificada, como si algo excepcional estuviera sucediendo.
La angustia invadió a Acuario al contemplar cómo el joven de ojos rojos reflejaba disgusto en sus gestos y respiraciones entrecortadas al verlo. La tenue iluminación de la cueva resultaba insuficiente para escapar fácilmente de aquel lugar, pero fue precisamente ese intenso ataque de ansiedad lo que le brindó a Óscar la oportunidad de sonreír y de aprovechar los sentimientos encontrados para reír en locura.
- Arrodíllate - susurró el imperturbable salvador.
Sus palabras resonaron en la chica, que sintió renacer el miedo en su interior. Mi figura cambió ante ella, mostrándole una joven de ojos rojos que se acercaba con pasos lentos, envuelta en la ira liberada de los demonios injustamente oprimidos en TEARRLAD. Arrodillándose en medio de la tormenta que azotaba el laboratorio, la chica escuchó mis palabras susurradas al ritmo de los truenos rojizos y mi corazón latente.
- Estoy cansado de que los míos vivan en la miseria por puros intereses egoístas. Estoy harto de que los ángeles dominen incluso a la humanidad con su poderío. No tolero que no se nos dé voz ni se escuchen nuestras opiniones. Anhelo la libertad, el sueño de la libertad para todos incluyendo la de ella. Si Dios opta por imponer su voluntad sin considerar la libertad de los demás, yo mismo "lo mataré" - murmurré en el oído de la aterrada chica, quien negó vehementemente y comenzó a gritar.
- No eres humano, no eres mortal, eres un ser monstruoso. Mitad ángel, mitad demonio, equiparable a Lucifer. Un ser imperfecto - exclamó ella al presenciar cómo Óscar se retiraba del lugar, deteniéndose de manera repentina para realizar una revelación impactante.
- ¿Te percatas de la ironía que implica la mortalidad? - expresé entre risas. Mientras que los dioses nacen con una perfección innata, los mortales llegan a este mundo con una fragilidad y debilidad inherentes. No obstante, al enfrentar desafíos y superar adversidades, encuentran el coraje para levantarse y, en base al sufrimiento, experimentan un crecimiento constante. Esa es realmente la fascinación que subyace en la condición mortal: la oportunidad de evolucionar de manera continua, a diferencia de los dioses con su perfección inmutable. Además de esto, ustedes comparten con los humanos el temor a lo desconocido. Esa incapacidad para temer a lo anormal fue, en su momento, la razón detrás de su ataque a Lucifer, ¿verdad? El miedo te paraliza e impide que te muevas. Si tan solo pudieras tener una segunda oportunidad, las cosas podrían ser distintas. Pero, a diferencia de Jessie Ugedark, yo no me comprometo a acabar contigo. Dejar que vivas con ese dolor y esa humillación de que una diosa capaz de rivalizar incluso con Lucifer sintiese temor hacia un simple chico debido a tu propia cobardía. Sin duda, los dioses también tienen sus propias imperfecciones y ese es el miedo a lo desconocido.
Al caminar por los oscuros y húmedos pasillos, mi cuerpo finalmente sucumbió al colapso. La pérdida de sangre, combinada con el esfuerzo extremo, hizo que mi caída fuera inevitable. Mientras trataba de arrastrarme, una joven de ojos morados se acercó y, con gran esfuerzo, comenzó a cargar mi cuerpo. Todo a mi alrededor giraba y, a pesar de mis intentos por sobrevivir, me resultaba imposible seguir adelante. Con mis ojos cansados, cerré los párpados, necesitando un breve descanso.
- Serás el próximo salvador de TEARRLAD, papá me lo dijo... - murmuró la joven mientras luchaba por cargar el peso de nuestro protagonista - Al menos, permíteme cumplir tu último deseo. Si debo dar mi vida a cambio, lo haré - continuó.
A pesar de tener los ojos cansados los abrí dándome una impresión de esto ya que pude ver las lágrimas de la chica caer sobre su rostro. Al intentar abrir los ojos al completo una leve iluminación proveniente de un foco se interponía en mi visión. La débil chica y yo estábamos unidos en un esfuerzo común, ninguno de nosotros tenía intenciones dañinas.
Su sudor, sus suspiros y, sobre todo, sus lágrimas hablaban por ella. La chica estaba cumpliendo la última voluntad de su padre, aunque nunca la hubiera conocido, su parecido con Libra era extrañamente evidente. En un susurro casi inaudible, apenas perceptible, murmuré: "Eres la hija de Libra".
Sus lágrimas suplicaban piedad, su sonrisa forzada revelaba "libertad". Su decisión de llevarme con mi amada ángel, supuestamente Libra, conmovió su corazón. Era evidente que estaba decidida a cumplir la última voluntad de su padre para liberar TEARRLAD de una vez por todas.
A pesar de las lágrimas derramadas, la sonrisa forzada de la joven me recordó a un momento de mi propia historia, cuando también sufrí la pérdida de seres queridos. Decidí unirme a su causa para salvar a TEARRLAD y evitar que otros sufrieran como nosotros. Mientras avanzábamos por los pasillos llenos de sangre, decidí que Scorpio o Brandon serían los responsables de estas desgracias y con un pequeño susurro le dije:
- Chica, sigue el rastro de sangre en las paredes, por favor - le pedí con urgencia. Con determinación, ella nego y continuó llevándome a través de aquel ambiente lúgubre y desolado, donde cada rincón parecía albergar la muerte. Sabía que si nos atrapaban, moriríamos, pero si conseguíamos reunirnos con los demás, encontraríamos la fuerza para seguir adelante.
Era común encontrarse en desacuerdo con la chica, pero al entrar a la habitación, extendió sus manos con un gesto de cansancio y exclamó: "¡Tarán, aquí están!". Mis ojos se abrieron de par en par y, al acercarse Rita, me tomó en brazos como a una princesa y me cubrió la cara para que pudiera descansar. Mi última visión fue la de una modesta habitación con una cama normal, pero al sentir un pinchazo en mi mano e intentar mirar, Rita lo impidió.
- Él es sangre O positivo. Recuerda y Gracias por todo, Brandi. Te debo más de una, de verdad, muchas gracias - agradece Brandon.
- Gracias a ustedes dos. Si no fuera por ustedes, tarde o temprano los ángeles me atraparían - respondió Brandi - más que todo por la razón de que ya no les soy útil.
Con los ojos cerrados, escuchaba las voces y sentía cada movimiento, cada segundo era más suave que el anterior. La sangre fluía de la inyección, Brandon había mencionado mi tipo de sangre para hacerme una transfusión. Sentía la mano suave de Rita entre la mía, enlazando nuestros dedos.
- Brandi, no entiendo por qué nos ayudaste. Me gustaría saber el motivo - se sinceró Brandon con un cigarrillo en la mano.
- Los Zodiacales me matarán al saber saber que tengo el mismo potencial que papá al igual que información sumamente importante - explicó Brandi de manera concisa.
- Óscar está dormido, podemos esperar a que sane sus heridas - interrumpió Rita la charla entre los dos.
- Rita, te envidio. Tienes algo que amar y defender, mientras que personas como yo solo tenemos nuestra existencia - expresó Brandi.
Brandon miró a Brandi y le preguntó por qué no sentía resentimientos por Óscar, la chica por su parte, compartió una emotiva historia sobre la difícil situación de su padre y su dolorosa pérdida.
- me duele saber que murió pero de poco sirve pensar compartir lo que siento ya que papá se encontraba dañado tanto psicológicamente como físicamente, era lo común sacarlo de ese infierno creado por leo.
La chica, mirando las cámaras de seguridad en su monitor, identificó la ubicación de Scorpio en el segundo piso y señaló que estaban haciendo un gran trabajo neutralizando a los esbirros de su padre. Los ánimos estaban en alza, y nos preparamos para enfrentar el desafío que se avecinaba en el piso cinco.
Narra Rita.
Al percatarme de la expresión contrariada en el rostro de la joven, salí a su zaga, notando claramente su disconformidad con la situación.
- Ri, eso implica que Tauro y Capricornio estarán más alerta a nuestras acciones. Todo este plan podría desbaratarse con facilidad si no estamos atentos a los acontecimientos. Sugiero que esperemos a que Óscar se recupere y finalmente escapemos hacia allí. ¿Qué opinan? - propuso Brandi.
- No estoy seguro de eso, Brandi. Existen posibilidades de que las cosas se tuerzan si nos cruzamos. Además, Óscar no se encuentra en su mejor estado. En resumen, debemos ser cautos y protegerlo en situaciones de necesidad y sobre todo por la llegada de Tauro y Acuario, además en este lugar solamente hay una maldita salida - expresó Brandon.
- Tomo esos factores en consideración. No obstante, si permanecemos aquí por mucho tiempo, Acuario podría hallar la forma de vencer a Scorpio y trabajarán en conjunto, dificultando aún más tu victoria. ¿Me equivoco, Brandon? - apuntó Brandi.
- ¿Me estás desafiando? ¿Piensas que no soy capaz de lidiar con unos dioses inútiles? - desafió Brandon con orgullo y algunas bromas de mal gusto.
La tensión entre los jóvenes me mantenía en vilo, sin saber cómo intervenir. Intenté poner fin a la disputa, pero Brandi mostró su determinación con un gesto de desdén hacia Brandon.
- Tu eres un maldito y simple humano incapaz de nada. Si piensas que los mortales podrán vencer a los dioses, adelante, pero no pidas ayuda cuando resultes mutilado como una marica - afirmó Brandi con firmeza.
- Eres una chica débil. ¿Qué sabrás tú? Podría eliminarte con solo chasquear los dedos - declaró Brandon. A pesar de su amenaza, la respuesta de la joven fue de indiferencia y hasta llegó a bostezar frente a la provocación.
- No siento ni un poco de temor hacia un individuo drogadicto que cree que sus amenazas tendrán algún efecto. Más bien, deberías sentir vergüenza de discutir con una joven de quince años. Qué madurez demuestras, profesor Brandon - replicó la chica con aplomo.
Viendo cómo la discusión se seguía intensificando, me aproximé a ellos con una sonrisa leve y traté de desviar la situación cambiando rápidamente de tema.
- Discúlpenme, soy Rita, y me gustan las rosas y otros temas sin importancia - interrumpí con una banalidad improvisada.
- ¿Qué te pico Ri? - respondió Brandi por la interrupción de Rita.
- Rita, me agrada. Vamos a sacarla de este lugar - comentó uno de los presentes, dando paso a una nueva dirección en la conversación.
Suspiré profundamente y, al inhalar una bocanada de aire, escuché cómo Óscar despertaba con una respiración suave. Nos observaba y, al intentar hablar, fuimos interrumpidos por un golpe en la puerta. Brandi gritó al no ver a nadie en las cámaras y decidió marcharse al ángel que tocó la puerta. Mientras Rita colocaba su oído en la puerta para escuchar el sonido de los pasos alejándose.
El silencio reinaba entre nosotros y la respiración agitada de Brandon nos mantenía en tensión. La adrenalina y el miedo a causar más estragos con nuestra simple presencia se apoderaron de nosotros. El sudor se deslizaba por nuestras caras, pero Óscar se puso de pie, retirando las agujas de su cuerpo y sanando sus heridas de manera directa y precisa con sus habilidades demoníacas. Aunque al principio le costaba caminar, al recuperar su compostura decidió cerrar los ojos. Nuestras miradas se centraron en Óscar y, al abrir la boca, nos llenó de incertidumbre. Su rostro impasible, las ojeras y la mirada vacía sugerían una reacción negativa. Todos pensábamos que había sido él el responsable de la muerte de Libra. Mientras exploraba la habitación, Óscar no se mostraba sorprendido de ser observado, pero al sentir nuestras miradas en su nuca, suspiró y jugueteó con su cabello antes de girarse con una aguja entre sus dedos.
- No fui yo quien lo mató, fue Acuario - afirmé.
Al escuchar esas palabras, suspiró Rita, Brandon soltó su cigarro con una sonrisa, y Brandi sonrió levemente antes de volver su atención a las cámaras. Rita se acercó a Óscar con una sonrisa y de esta manera decidió seguir mi ejemplo. Al mirar a Brandon, hizo un gesto con la boca indicando que era hora de marcharnos. Brandon comprendió e informando a Brandi de nuestra partida, habló de manera concisa y directa.
- El ascensor está rodeado, pero podríamos tomar una ruta menos peligrosa. ¿Qué les parece? Conozco este lugar como la palma de mi maldita mano y será sencillo. Scorpio está con sus dos aliados en el segundo piso, a punto de subir al primero y salir de esta porquería de una vez por todas, Aunque por desgracia solamente hay una salida.
- No puedes traicionar, de lo contrario, irán por ti. ¿No es así, Brandi? Ese es tu nombre, ¿verdad? Parece que Rita y Brandon ya te conocen.
- Sí, nos encontramos hace poco y te busqué para evitar conflictos con los angeles o al menos hasta cierto punto, piensa que si veían a Brandon y a Rita realmente estaría jodida. Salgamos de esta mierda antes de que las cosas empeoren.
- llevabas un buen rato despierto ¿No? - interrumpe la orgullosa Rita.
- me conoces más de lo que pensé - respondí.
...
Hace quinientos quince años, Lucifer, mejor conocido como "Gez", fue el primer hijo de Dios. Siendo el menos destacado debido a la presencia de cuernos en su cabeza, los demás lo consideraban un error y lo culpaban constantemente. Un día, sin previo aviso, entre risas y movimientos bruscos, tomó a la última hija de Dios, en ese momento, Jessie Ugedark. Nunca hubo una razón clara detrás de este acto. ¿Sería un acto de rehen? ¿O acaso algo más complejo?
En ese entonces, yo era solo un niño de ocho años. Desperté con los gritos de mi padre reclamando "atrapen al pecador". Me levanté junto a mis hermanos y presencié a los ángeles atacando a Lucifer con escudos y espadas. Pero, ¿qué sabía yo de todo aquello?
Recuerdo que mi padre me levantó en su regazo y me tarareaba una dulce canción. Yo me dormí en sus brazos poco después, pero un susurro casi imperceptible me sorprendió. "Scorpio, Scorpio, Adrián..." fue mi hermano en ese momento, el tierno y débil Jhonatan López, conocido como Piscis, el hijo más débil de Dios. Él me levantó y juntos observamos cómo los ángeles buscaban al traidor Lucifer.
Mi hermano me guió hacia un profundo bosque, ignorando los gritos de los ángeles. Una ruta cubierta de grandes árboles se abría ante nosotros, pero la oscuridad dificultaba nuestro avance. A lo lejos, pudimos ver a Lucifer intentando escapar. Un golpe preciso en su ojo de una rama lo hizo gemir de dolor, pero continuamos observando.
Finalmente, un resbalón hizo que Lucifer cayera desde una montaña. Vivíamos en lo alto de la montaña de TEARRLAD, tan grande que las nubes casi tapaban los árboles y la vegetación debajo de ella.
Entre susurros silenciosos, Piscis habló: "¿No te intriga lo que hay debajo?" Con una mirada curiosa lo observé hacia sus ojos azules, lancé una piedra desde el borde, escuchando el sonido de su rodar.
"Estoy intrigado"
susurré en ese momento.
Corriendo por los pasillos, Betty y Ruffi seguían inquiriendo sobre la historia. ¿Los ángeles vivían anteriormente en las enormes montañas de TEARRLAD? Las preguntas surgían, y entre risas les dije: "Si les dijera esto, ¿me creerían?"
Ruffi, con seriedad, apretó sus puños y respiró hondo dos veces, claramente reflexionando. "¿Entonces, qué eres tú? ¿Los ángeles son humanos?"
"Antes de ser mortales, sí" respondí.
En ocasiones, nuestros pensamientos se ven inmersos en un conflicto, cuestionando si somos virtuosos o malévolos, si en un relato nos convertimos en el héroe o en la misma figura recurrente. ¿Actuamos en beneficio o en detrimento? Esta controversia resulta poco relevante, pues siempre acabamos perjudicando a otros y, eventualmente, alguien de pureza inmaculada surgirá para redimirnos.
Anhelamos la libertad, anhelamos liberarnos de las ataduras que nos construye, incluso de aquellas invisibles que aún no se han manifestado, que nos cortan la libertad de expresión y la autodeterminación, imponiéndose pautas divinas. Deseo simplemente respirar y vivir como una mariposa, surcando los cielos sin restricciones ni injerencias. Este es mi anhelo.
Jessie Ugedark, te imploramos que liberes una vez más a TEARRLAD, anhelamos poder existir en un estado de plena libertad.
Libros descubiertos ideas preocupantes y un pasado todavía nublado.
Para ser el héroe de un futuro lejano tienes que saber el pasado deseado.
¿Cuál es el pasado?
¿Cuál es la Libertad?
Descubre el pasado hijo
Desentierra a tus aliados
Ellos saben más de lo que tú mismo crees
Recuérdame
No dejes que tus recuerdos sean cubiertos por una cortina de humo
Mi corazón se encontraba en absoluto desasosiego, aquellos interminables pasillos finalmente llegaban a su conclusión gracias a la asistencia de Brandi. Nos íbamos aproximando cada vez más a Scorpio, Betty y Ruffi, a pesar de que mi cuerpo seguía maltrecho, la felicidad se desvanecía con la presencia de atacantes en los corredores. A medida que nos acercábamos, más ángeles dispuestos a atacarnos surgían. No obstante, con el apoyo de Rita y Brandon logramos deshacernos de todos los entrometidos. En medio de la penumbra y nuestros jadeos fatigados, nos vimos compelidos a reflexionar sobre la distancia que aún nos quedaba por recorrer.
- ¿Estamos lejos aún? - inquirió Rita valientemente mientras palpaba sus rodillas y su pecho, que se movían al compás de su fatigosa respiración - no soy buena para correr - dijo.
- Estamos cerca, Rita unos minutos más y nos encontraremos con los demás - respondió Brandi, empapada de sudor.
A pesar de mi agotamiento físico, mientras corríamos, mi mente empezaba a despejarse.
- Oye Brandi, ¿cuánto sabes sobre los demonios y los ángeles? - pregunté durante la carrera.
Brandi, aunque estaba adelantada, me miró y con cierta fatiga, se dispuso a conversar sobre el tema.
Los demonios y ángeles son seres similares.
En más de un sentido, ambos poseen cuerpos y metas por alcanzar que pueden evolucionar para satisfacer sus necesidades, ya que un ángel es un ser humano.
Pese a la detallada explicación de Brandi, el protagonista percibía que aún había más por descubrir. No entendía el mensaje de Rita en ese instante, pero Óscar intentó aportar a la conversación.
- ¿Por qué Libra me secuestro cuando era niño? - cuestioné, anhelando obtener información sustancial.
Brandi exhaló y con delicadeza empezó a destacar detalles importantes.
- Leo ha tramado todo esto. Los demonios requieren detonantes para desatar sus potencias divinas, y según la leyenda, Jessie Ugedark crecerá en el dolor y florecerá en la destrucción. Puede parecer redundante seguir explicando, pero existe algo aún más intrigante: Leo ha usado a todos ustedes desde el maldito principio incluyendo tu secuestro, Óscar. Solo debes recordar tu pasado y el de tus aliados para descubrir lo que verdaderamente se ocultan en su interior.
Las potentes luces del segundo piso inundaron nuestro campo visual al salir de un extenso pasillo que parecía interminable. Nos encontramos con la presencia de Betty, Ruffi y Scorpio. La mirada de Betty parecía estar guiada por el destino, ya que se posó únicamente en Rita y Óscar. El tiempo que pasó fue suficiente para detenerse. Fue Rita la primera en abalanzarse sobre Betty con un abrazo, derribando a la hermana adoptiva de Óscar al suelo en medio de caricias que se prolongaron a pesar de haber pasado poco tiempo.
- ¡Dios, Betty, eres tan tierna y bonita! ¡Te extrañé tanto! ¡No me abandones o te mataré, querida! - se sentia como un pequeño perro al ver a su dueño regresar a casa en tan poco tiempo.
- ¿Tiene eso algun sentido? - susurró Betty, todavía en el suelo tras la caída. A pesar del impacto al caer al suelo, sentia la ternura por la efusividad de Rita al saludar. Parecía que el miedo la llevó a pensar en otras cosas. Con mi mano derecha acaricio su cabello, pero su estatura más bien le causó gracia, parecía una niña pequeña. - Ya, está bien Rita - dijo suavemente.
- Al menos estás bien - murmuré mostrándome un poco antipático. Me apoyé en la pared y la saludé con una pequeña sonrisa - Estás bien.
- Vamos, Óscar, saluda a tu hermana con un abrazo. ¿No te alegra que esté bien? - dijo Rita de manera inmadura. Se levantó del suelo con algo de torpeza y limpio su pantalón marrón.
- No es necesario, Rita, tranquila - trato Betty de disminuir la efusividad del reencuentro.
- ¿Sabes qué? No, son los únicos - Ruffi parecía un poco desesperado al presenciar la escena. Decidió romper la cálida bienvenida, pero Rita se acercó lentamente a él y le dio un saludo con un golpe en la cabeza.
- Hola, Ruffi, también a ti - dijo Rita.
- ¡Eso se sintió forzado! ¿Lo sabías? - exclamó Ruffi.
Mientras Scorpio rompió el silencio de la calurosa bienvenida, decidió expresar las verdades del momento con un atisbo de desesperación. Brandi, a su vez, respondió a sus comentarios con un sentido de urgencia: "Debemos abandonar este lugar. Después tendrán todo el tiempo del mundo para sus inútiles bienvenidas".
Rita, imbuida en la perfección absoluta, se acerco a Scorpio con los brazos extendidos en un gesto de cálido abrazo. Sin embargo, él se separó con una mano y negó con la cabeza. A pesar de su fría personalidad, optó por seguir solo por los pasillos, interrumpiendo nuevamente el breve reposo de todos. Brandi levantó los hombros en señal de interrogación, pero antes de que pudiera continuar, Ruffi fue el primero en comentar sobre lo que estaba sucediendo.
- Después de todo, tiene sentido. Quiero llegar a casa y asegurarme de que mamá esté bien. ¿Qué tal si nos damos un respiro después de salir de aquí? - propuso Ruffi.
- Para bien o para mal, tienes razón, Ruffi. Mejor continuemos. Las cosas aún no han terminado. Primero salimos y luego nos merecemos una reconfortante ducha caliente ¿O no Ruffi?- sugirió Betty, estirando suavemente los brazos. La joven saltaba de un lado a otro para recuperar el calor en su cuerpo, ya que el lugar era excepcionalmente frío.
- ¿Y yo que tengo que ver allí? - preguntó Ruffi
- no lo sé, tu dime - detalló Betty su figura bien formada con un poco de lujuria.
A medida que continuamos siguiendo a los demás, los pasillos parecían estrecharse y resplandecer con mayor intensidad. Recorriendo piso tras piso, la interminable angustia finalmente llegó a su término al llegar al último y crucial nivel. La salida se vislumbraba, abierta y desprovista de individuos o vigilantes. Resultaba evidente que las circunstancias no serían tan simples, pero una joven blanca de ojos marrones nacida bajo el signo de Tauro entró por la puerta para confirmar nuestra teoría elemental.
La muchacha parecía serena y, sin mediar palabra, optó por atacar a Óscar de manera contundente y sin dudarlo. A pesar del agotamiento que afligían al infortunado muchacho, intervino Rita y le dirigió un golpe firme en el rostro, haciendo que retrocediera.
Tauro: ¿?
- Duele, Piscis - lamentó la joven al pararse el lugar del impacto, para luego mirarla con ojos enloquecidos y lágrimas en ellos - Rita, no has cambiado en absoluto, eres tan hermosa como la primera vez que te ví - replicó con su sonrisa. Ruffi intentó intervenir, pero Rita prefirió detenerlo con un gesto, evitando así un enfrentamiento innecesario.
- Rita está en nuestro camino déjame intervenir por ti - propuso Ruffi jugando con sus nudillos.
- Salgamos de este lugar Ruffi nada de peleas innecesarias - sugería Rita, mientras los demás avanzaban hacia la salida con calma, con un paso pausado preparados por la reacción de la chica de ojos marrones. Su reacción fue simplemente sonreír y reír de manera exagerada.
- El destino nos volverá a separar, Óscar Sword más no será por mucho tiempo, Tauro ya te tiene en la mira - se inquirió a ella misma.
Óscar giró la cabeza, pero un ataque agresivo con un hacha voló cerca de mi rostro. Si Ruffi no hubiera intervenido con su mano en mi camino, no quiero ni imaginar lo que habría sucedido. Suspiré y, en medio de un silencio abrumador en la habitación, me di la vuelta.
- el poderío de las fuertes rocas reside en mi - diría cáncer al dar la vista en su mano cubierta de roca .
La escena entro en mi con preocupación. Acuario estaba detrás de ellos, Brandon envolvía su brazo en llamas, mientras Scorpio sujetaba su otra mano con firmeza.
- Brandon, no quiero más muertes innecesarias. Hemos cumplido nuestra misión, por favor, no más - suplicó Scorpio entre sudor.
Brandon se mostró irritado, pero Betty decidió intervenir, recordando su primera interacción.
- Debemos irnos, hemos hecho lo que debíamos. Ellos ya no son nuestro problema.
Narra Rita.
Óscar respiraba con fuerza mientras los puños de Brandi se tensan. Ruffi le tocó el hombro y le preguntó con torpeza si se encontraba bien. Al recordar el comentario de Óscar sobre la muerte de libra por parte de Acuario, me decidí a acercarme. Acuario estaba lista para pelear, pero Capricornio emergió de las sombras, con la habilidad de ocultarse sin ser detectado.
Me acerqué y al hablar, mi mano se tensó. La chica esperaba a que iniciáramos algo más. Óscar y Ruffi mostraron preocupación, pero la chica respiró suavemente y habló.
- Regresen a donde pertenecen. No queremos más peleas, solo queremos descansar - repliqué moviendo mi mano a un lado.
- La única forma de acabar con la guerra es acabar de una vez por todas con el salvador - declaró acuario.
- ...Oye, Brandi, deja de actuar. ¿Quieres que le dé un golpe a esta persona? - pregunté al mirar el semblante vacío de la chica - deja de aparentar ser madura y pide "justicia" Brandi.
Brandi quedó impactada al escuchar mi propuesta, pero algo dentro de ella anhelaba buscar justicia de alguna manera. Al escuchar mi grito, Brandi respondió con un firme "exijo justicia". Acuario, sin intenciones de defenderse, cerró los ojos y respiró suavemente, esperando el golpe que yo había sugerido.
Cuando la alegría se desvanezca, seremos quienes la rescatemos. Hace quinientos años, una joven anhelaba la libertad y, aunque falleció, la reencarnación de la salvación nos sonríe para brindarnos esa esperanza perdida. Las lágrimas no nos debilitan, en la devastación nos impulsas con tu sueño inocente. Los sueños más puros son los que se cumplen, mientras que los sueños maduros solo traen desilusión y daño a otros. Los sueños inocentes buscan el verdadero final feliz para todos.
Por favor, vuelve a iluminar con tu sonrisa, Rita López, salva-nos con tus lágrimas, piscis, una vez más, por favor.
Nos enseñaste que llorar nos fortalece, que las risas nacidas del sufrimiento son las más hermosas, pues poseen la fuerza de seguir adelante a pesar del dolor, manteniendo viva la esperanza de tu sueño inocente.
Rita López es nuestra redentora.
Por favor, sonríe nuevamente, Óscar Ugedark. Nos enseñaste que, incluso en lo más profundo de la desesperación, podemos anhelar la libertad y que existen personas dispuestas a sacrificarse por los demás.
Óscar Ugedark es nuestra salvación.
Por favor, sueños inocentes, libéranos una vez más de las cadenas y permítenos reír, moviéndonos hacia adelante una vez más. Te lo suplicamos.
Rita López, reencarnación de Jhonatan López.
Óscar Ugedark, reencarnación de Jessie Ugedark.
Por favor, permítenos ser tus héroes por una vez en la vida.
Una vez más, apelamos a TEARRLAD para alcanzar la plena libertad. No permitiremos que nuestro hogar sea sinónimo de cadenas y opresión, no toleraremos esta situación nuevamente. Que la flor roja continúe sonriendo, que el cometa amarillo siga iluminando nuestro camino. ¡TEARRLAD, danos la libertad que anhelamos!
- Lo siento papá.
El impacto fue tan contundente que el viento envolvió mi puño izquierdo, simbolizando la capacidad de actuar sin restricciones y el anhelo de libertad en nombre de aquellos silenciados en su lucha sin voz ni juicio. Me erijo como la guía que orienta a los que no se atreven a hablar, comprometiéndome a salvar a TEARRLAD cueste lo que cueste.
Brandi, con movimientos apagados y ojos cubiertos de lágrimas, respiraba con ferocidad, reflejando la impotencia de ser débil y frágil. Los comentarios de Rita resonaban en ella, removiendo el rencor por la muerte de su padre y la sensación de debilidad que la invadía. Cansada de esta situación, sus emociones colapsaron sobre sí misma mientras su pequeño cuerpo temblaba exigiendo justicia.
- mierda - susurró la madura Betty al ver el gran lío que se metieron.
El golpe impactó en el rostro de Acuario, trayendo recuerdos olvidados de Libra bajo la guía de Rita. Capricornio, en silencio y atónito, observaba el contundente golpe de Rita López que desfiguró la mandíbula de Acuario. Su puño manchado de un líquido oscuro parecía convocar a los demonios sedientos de venganza. ¿Qué habría motivado a aquella joven a actuar así?
El cuerpo de Acuario se heló al momento por la brisa fría, manteniéndola inmóvil y evitando interrumpir su escape. Me acerqué a Brandi y tapé su rostro mientras hablaba, protegiendo su vulnerabilidad de miradas indiscretas.
- Me expresaré por los que carecen de voz. Desafío a los seres divinos tal como lo hice en épocas antiguas... Tranquila, Rita López está aquí.
Las risas de mis compañeros resonaron en el lugar a diferencia de Betty que parecía preocupada por lo que vendrá después pero me enfoqué en escuchar a Brandi, quien con sus manos limpiaba sus ojos para ocultar su debilidad.
- Lamento profundamente, padre, mi falta de empatía y mi actitud egoísta. Desearía haber prestado mayor atención a tus opiniones y comportamientos. ruego que me perdones por mi semejanza con los ángeles. Me comporté de manera desconsiderada por nuestros pensamientos, y por ello, pido disculpas. Lo siento papá - murmuraba la joven, abrumada por las lágrimas y la impotencia generadas por sus acciones pasadas - ¡Lo siento Edgar López!.
La voz de un zodiacal proveniente de las sombras rompió el silencio en un instante.
- ¿Quién rayos eres tú? - cuestionó Capricornio entre las sombras, sorprendido por la mera presencia de la nueva redentora de TEARRLAD.
- Soy Rita López y seré la salvadora de TEARRLAD.
Los demás miembros del Zodiaco se sumieron en silencio mientras la chica de ojos marrones extendía uno de sus brazos hacia su hacha, ansiosa por seguir las indicaciones de Acuario, que prometían ser la solución definitiva a sus problemas.
Rita observaba a sus compañeros, listos para reaccionar con violencia en cualquier momento. Ruffi, en particular, tenía los puños cubiertos de grandes rocas que auguraban un golpe devastador. Sin embargo, Acuario al romper el hielo optó por dejarlos ir pacíficamente, consciente de que una confrontación solo traería pérdidas para todos.
Con una risa irónica, les instó a abandonar el lugar de una vez por todas, sabiendo que la sabiduría y la prudencia eran armas mucho más poderosas que la fuerza bruta.
...
Me dijeron que las adversidades serían inevitables, que todo logro implica sacrificios, que la libertad es una ilusión, una mentira irrefutable. Anhelo la libertad nuevamente como aquella joven que liberó a los demonios atados a la ausencia de libertad.
En la nación donde la diversidad de pensamiento es aceptada, en la tierra de los maltratados que claman por justicia, las cadenas son alzadas con el grito de "libertad". Oh, Jessie Ugedark, flor roja, extiende nuevamente tus manos y toca las nuestras. Te suplicamos, mantén tu risa en medio de las lágrimas y la desolación interminable, tú eres la única que resplandece en rojo de determinación. Sonríe para que reavivemos la esperanza, anhelando la libertad.
Anhelando la libertad de nuestro hogar
TEARRLAD serás libre nuevamente.
Última edición
07/12/2024
Capitulo seis
...Camino rojo...
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