Prólogo
Ya hemos pasado en este estado por algunos días. No ha pasado más de una semana, de eso estoy seguro. Pero… a veces parece que han pasado meses.
Seguimos avanzando al Castillo de JunoKazemon, pero sin un mapa simplemente estamos caminando en la deriva. El mapa que está en mi Xros Loader no sirve; simplemente nos ha mostrado que estamos en medio de la nada.
Y la situación en la que todos estamos no es tan agradable como creíamos. La herida en la pierna de Tsuyo, a pesar de que con las plantas medicinales que le ha dado Gabumon ha llegado a curarse, sigue siendo una molestia que lo mantiene en un estado de fatiga aún mayor a antes de que pelearamos contra KaiserGreymon. Si seguimos con este problema, Tsuyo no podrá seguir avanzando hasta el Castillo, así que hay que pensar rápido en una solución.
Merrick también está preocupado, en especial por el estado de Tsuyo. Sabe que yo estoy bien, ya que no salí muy herida en la pelea contra KaiserGreymon, así que está enfocando su atención al chico. También le preocupa el hecho de que Gabumon simplemente nos dice que sigamos avanzando, pero no hayamos llegado a ningún sitio en particular; literalmente, estamos vagando en este inmenso bosque, sin rumbo ni dirección. Hubiera sido bueno haber cargado con un mapa, o al menos investigar rápidamente donde podría ser la dirección del camino que seguramente nos llevará al Castillo.
Yo también estoy preocupada, pero no tanto por nosotros y nuestro rumbo sin fin. Lo que me ha preocupado más estos días es el hecho de saber cómo están los demás chicos. Nos enteramos, por los mensajes del grupo de WhatsApp, que un día después de nuestra huida Misti desapareció, pero regresó otro día después; sabemos que Sakeno salió a buscarla, pero no regresó, y que Kino formó un equipo de búsqueda y salieron a buscar a Sakeno, pero tampoco han regresado.
Lo bueno que ocurrió en aquel día, fue enterarnos que los Yaumon que amenazaban el pueblo fueron erradicados; al parecer, KaiserGreymon si fue el responsable por haber eliminado a aquellos perros que iban a atacar al campamento. Me alegro mucho esa noticia, pero el hecho de que haya 5 Elegidos fuera del campamento me pone un tanto nerviosa; tan solo espero que en este largo tiempo no sean atacados por muchos demonios, ya que de lo contrario podrían salir heridos.
Otra cuestión que me preocupa mucho es que ya llevamos tiempo sin ver a nuestros compañeros. Me gustaría poder verlos cara a cara, pero está misión lo impide. Primero debemos encontrar a JunoKazemon para que nos guíe en nuestra futura misión, y después podamos saber cómo pelear contra los demonios y acabar con esta guerra.
En especial… tengo muchas ganas de volver a ver a Taiki. Quiero volver a ver a mi amor…
Después de que en aquel día me declarara su amor… ¡En serio fue tan hermoso aquel día! Estábamos caminando para ir a mi casa; bueno, pasaron muchas cosas antes de que finalmente se me declarara.
Habíamos tenido, ambos por separado, mucha tarea y cosas que hacer, así que nos vimos en su casa para trabajar y nos quedamos ahí, hasta que nos quedamos dormidos ambos, y despertamos como a las 6 o 7 de la tarde. Entonces, él se ofreció a acompañarme hasta mi casa, la cual en realidad no estaba muy lejos; bien podía ir sola, pero cuando se ofreció a llevarme le dije que si para ver… si podía conseguir al menos una oportunidad de después invitarlo a una cita.
Caminamos ambos hasta mi hogar, envueltos en un extraño y, hasta cierto punto, incómodo silencio. Ninguno dijo ni una sola palabras, sino hasta que llegamos a mi casa. Y entonces, lo confesó: me dijo que le gustaba desde hace tiempo, y me pidió que fuéramos novios.
Honestamente, me sentí un poco sorprendida, ya que no esperaba que lo que sentía por él fuera correspondido. Estaba esperando que, de alguna forma triste o al menos memorablemente feliz él me rechazara, explicando algo de que solo somos amigos, o que está ocupado, que hay alguien más por ahí, o cualquier excusa tonta. Pero no: mis sentimientos eran correspondidos, por lo que estuve a punto de llorar por sentir que realmente podíamos llegar a algo. Pero, mis lágrimas no salieron: estaba frente a él, y no debía mostrar esa parte romántica de mi. Ya tendría después más tiempo para hacerlo; por ejemplo, podría usar está misión de JunoKazemon para enamorarlo de nuevo, algo que siempre quise intentar, y en especial con él.
Después de que se me confesó, rápidamente estuvo a punto de retractarse y decir alguna tontería que suele decir cuando está nervioso; si no mal recuerdo, estaba a punto de entrar él solo a la friendzone. Honestamente, esa jugada era muy tonta de su parte, así que no lo dejé seguir, y rápidamente le robe un beso en sus labios.
Pude notar de inmediato que a él también le sorprendió el hecho de que sus sentimientos fueran correspondidos, pero fue capaz de corresponder mi acto. Finalizamos, y ambos cerramos el momento con un "si, seremos novios". No con esas palabras literales, pero si de ese modo. Entonces, entré a mi casa, y ahí me quedé realmente feliz, después de también haber hecho una cita con él para empezar nuestra relación, la cual siento que podría profundizar en este tiempo que estemos en el Digital World.
Pero, entonces ocurrió… ocurrió aquel incidente que hizo que terminaramos en esta situación.
- Hey, Akari…
- ¡! Espera Merrick-san. Estoy ocupada, ya sabes…
- ¡Siempre estás ocupada haciendo pipi! - está vez reclamó Coronamon. Me recuerda un poco a cómo se comportaba antes Kiriha, pero… tal vez él tenía un poco más de humildad de vez en cuando.
- Lo sé. Solo… por favor, déjenme terminar…
- Está bien. - oí los pasos del chico caminar hacia otra dirección, y seguí dando mi reporte.
‹ ¿? ¿Entonces… siempre te la pasas haciendo "pipí" para dar tus reportes?
- No siempre es así… - le confesé al chico detrás del holograma que salía de mi brazalete - Algunas veces realmente hago pipí. Está vez no es así…
‹ De acuerdo… Entonces, ¿Qué me decías? ›
- ¡Oh sí! Estaba revisando el mapa en mi Xros Loader, pero… o, se volvió obsoleto esto, o|
‹ No, está bien el Xros Loader. Los demás Hunters han mostrado ese problema en sus dispositivos. Pero, la verdad es que al parecer están a mitad de ella nada ›
- Si es eso… Pero, ¿Sabes que tan lejos estamos del Castillo? Digo, tú que tienes tu mapita ese que es mejor que el que tengo…
‹ Déjame checarlo › el chico del otro lado acudió a una computadora, y tecleó varias cosas, antes de voltear a decirme ‹ ¡Vaya! Están muy cerca… ›
- ¿? ¿Del Castillo?
‹ No exactamente; verás, por la información que trajeron Tai y Yamato, JunoKazemon construyó por todo el bosque unos caminos de piedra, y por medio de ellos llegas al Castillo de JunoKazemon. Ahora mismo están muy cerca de uno de esos caminos, y si lo siguen en dirección al suroeste, los llevará al Castillo ›
- Entendido, ¿Y qué tan cerca estamos del camino?
‹ Si no se detienen, llegarán antes de que caiga la noche ›
- Y, el camino… ¿Qué tan lejos está del Castillo?
‹ Déjame ver… si esta cosa soporta todo el mapa › volvió a teclear algunas cosas, y me habló con cierta decepción ‹ Lo siento, el mapa es muy grande. Pero, trata de contactarme cuando ya hayan recorrido un buen tramo de ese camino de piedra; tal vez mañana a esta misma hora, y tal vez pueda ayudarte. ›
- Está bien… ¡Oye! ¿Sabes en dónde se encuentra Kiriha?
‹ ¿Kiriha?… Ni idea. Solo estamos unos pocos aquí: Jian, Kari, JP, Tadashi, Amaya y yo. Todos los demás están afuera en sus misiones… ›
- Ya veo. Y, supongo que no sabes nada de Tai.
‹ De él… ¡Si! Estuvo aquí, pero tan solo vino por recursos y regresó a su misión. Creo que estaba en medio de algo importante, porque si estaba muy apresurado. ›
- Ya veo… Y… - estaba a punto de decir algo más, pero… no creo que sea importante - Bien, eso es todo por hoy… ¡Espera! Acabo de recordar algo más - en ese momento recordé algo "importante". - Takuya, ¿No quieres que le mandé saludos a tu Izumi?
El chico castaño me miró con una sonrisa amplia.
‹ No tienes que preocuparte por eso: ella es mi novia, así que yo mismo le puedo mandar saludos ›
- Jeje, como digas… - le solté una sonrisa - Nos vemos en unos días.
‹ ¡Hasta luego! › terminé la llamada, y al mismo tiempo asomé mi cabeza por el arbusto.
- ¡Chicos! Ya terminé.
- ¡Aleluya! - exclamó Coronamon con un tono bastante molesto.
- Estuve… viendo el mapa… - confesé, mientras me acercaba a ellos y les decía todo lo que Takuya me dijo - Hay un camino cerca de aquí; si nos movemos sin parar, llegaremos antes del anochecer.
- ¿? ¿Sabes si el camino es de piedra, o algo así?
- No lo podría decir con seguridad. En el mapa solamente aparece un camino, pero no puedo ver exactamente de que es… - saqué el mapa de mi Xros Loader, y comencé a recorrerlo hasta topar al camino del que hablaba Takuya.
Le mostré el mapa a Gabumon, y de inmediato reaccionó de manera positiva.
- Bien… Si estoy en lo correcto, ese camino nos llevará hacia el Castillo de JunoKazemon… ¡Sigamos!
- ¿En serio? - Merrick-san y Tsuyo estaban emocionados por esas noticias.
- Si… ¡Llegaremos rápido! ¡Y podremos entonces conocer los pasos a seguir para nuestra misión!
- A veces me cuesta creer que apenas vamos a empezar a pelear contra los demonios de manera seria - comentó con un tono demasiado apático Tsuyo. Con puse mi mano sobre su hombro.
- No te preocupes. La espera valdrá la pena…
- Eso espero. Y, también espero que mi pierna logré aguantar hasta el anochecer… - comentó, mientras toros el grupo comenzó a movilizarse.
Entonces, yo recordé otro elemento que había estado muy presente en mi y que hasta ahora le había dado importancia.
Pase mi mano por mi cabello pelirrojo, y rápidamente noté que había crecido; lo más impresionante era el hecho de que llevábamos en el Digital World, a lo mucho, tan solo 2 semanas, pero mi cabello ya había crecido. También sentí mi busto un poco más pesado a jando llegamos, y los pantalones que traía ya estaban cortos (tan solo porque podía ver cómo medio centímetro de mis piernas quedaban al descubierto con mi pantalón completamente estirado).
- Bien. - dije para mí misma - tal vez esto justifique nuestra teoría… - dicho esto, comencé a caminar siguiendo a los chicos, y en mi cabeza tan solo retumbó la imagen del chico a quien tanto amo: Taiki Kudou… - Ahora que lo pienso… ¿Cómo podría empezar para volver a enamorarlo? Tal vez un cambio de estilo… le preguntaré a Hikari cuando regresemos… ¡O mejor ahora! Hay que aprovechar el Whats…
Saque mi teléfono, y mientras los chicos caminaban, yo estaba texteando unos mensajes a Hikari, para empezar mi misión personal de volver a enamorar a mi amado, y que nuestra relación tenga ese bello toque de romanticismo…
ASFD
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