Espero que les guste~

Nota: Aun tengo el libro de "Pequeño Troll", el otro AU que se me ocurrió ¿Aun les gustaría leerlo?

John Dory es el primero en notar que algo esta sucediendo.

Branch lucia tan feliz de tenerlos a todos allí, con una gran sonrisa que parecía imposible de borrar y ojos brillantes que siempre los miraban, emocionado cada vez que veía a uno de ellos cerca pero es difícil no notar que por momentos, luce pensativo, mirando a la nada. A veces solo parece resignado, aceptando lo que sea que estuviera corriendo por su hiperactiva mente de niño, y en otras luce triste, con el poco color de su cuerpo oscureciéndose.

Todos no tardan mucho en notar y aunque preguntan, amables y tentativos, Branch es rápido en sonreírles y restarle importancia al asunto, logrando de alguna manera mantener su color solido, no brillante como antes pero si presente.

Su hermanito es horriblemente bueno para ocultar sus sentimientos y eso manda una punzada de dolor en su corazón.

Están preocupados.

-¿Sabes donde...?- Bruce hace un gesto hacia sus hermanos. Las cosas entre ellos habían mejorado, con mucho esfuerzo si debían ser sinceros, pero al menos, los pequeños comentarios ya no causaban una pelea a gritos o algo así.

-Esta afuera, con Rhonda- Clay señala. Habían salido a buscarlo cuando no respondió a sus llamados, solo para encontrarlo al lado del vehículo/mascota del mayor, acariciándola con manos cuidadosa.

-¿Creen que este bien?- Floyd retuerce sus dedos, ansioso y nervioso, preocupado por el menor que actúa algo distante desde hace unos días.

-Hay algo rondando por esa cabeza suya- John Dory se masajea las cienes. Había visto esa actitud antes, en las primeras semanas de su recuperación, y teme por los problemas pensamientos negativos que deben estar invadiendo su mente. -Venga, hablemos con él- hizo un gesto y avanzó, ellos compartiendo una mirada antes de seguirlo.

Mientras tanto, Branch tiene muchos pensamientos corriendo por su cabeza.

Esta tan feliz de tener a todos sus hermanos de vuelta, de poder abrazarlos y verlos, de poder escucharlos hablar y cantar, de simplemente poder crear recuerdos y buenos momentos con ellos. No había esperado que John Dory consiguiera traer a los demás, pensó que solo iba a darles sus cartas y darles la mala noticia sobre la muerte de la abuela, pero ellos vinieron, realmente vinieron, solo para verlo. Lo hace sentir cálido y especial, querido y amado, sensaciones a los que se aferra con ambas manos y no quiere soltar.

Aunque adora cada pequeños momento que puede tener con ellos ahora, eso no calla por completo las dudas que resuenan en su cabeza.

No se siente correcto tenerlos allí, no después de escuchar lo que hicieron durante sus años separados y de lo que aun querían hacer. Todo hicieron una vida, se establecieron objetivos que quieren cumplir, sueños que quieren alcanzar y él se siente casi como un ancla que les impide conseguirlos.

No quiere frenarlos, no quiere obligarlos a quedarse y que todo volviera a estar mal.

-¿Branch?- el menor agita ligeramente una de sus orejas en señal de que escucha pero no se voltea, solo se acurruca. -¿Estás bien, bebé?- JD se siente lentamente al lado ajeno, preocupado ante el tono de piel apagado y la expresión pensativa. -¿Qué esta pasando por esa cabeza tuya?- extiende la mano y acaricia suavemente su cabello, contento de verlo apoyarse en el toque. 

-¿Qué va a suceder ahora?- se atreve a preguntar después de unos segundos de duda, mirando al mayor con curiosidad, esperando una respuesta.

-¿A qué te refieres?- él luce confundido, ladeando apenas la cabeza, genuinamente curioso y el menor siente las palabras venir antes de que pudiera pensarlas.

-Quiero decir, no vamos a vivir juntos ahora- es una realidad, lo sabe, porque por mucho que los quiera tener allí, no cree que sea justo para ellos. -Todos tiene una vida- excepto él y eso es lo que lo aterra. -Eres un viajero, hay tantos lugares para ver y conocer que no puede solo...quedarte aquí- John Dory abre los ojos con sorpresa ante eso. Esta preocupado, temiendo hacia donde se dirige el tren de pensamiento de su hermanito, pero deja que divague, parece necesitarlo. -Brandy y Bruce van a tener una gran familia en algún momento, van a necesitar todo el espacio posible- los había escuchado hablar sobre tener hijos y con solo imaginarlos, se siente como un intruso. -Clay tiene que ir a ayudar a Viva y a su gente- esta feliz que su hermano fuera a ayudar a más trolls que se perdieron en el camino. -Y Floyd apenas empieza a ser solista- a escuchado sus canciones y le gustan, incluso si algunas son demasiado sentimentales para su gusto. -Yo no...- duda, agitando las manos, haciendo un puchero. -...no quiero que se queden aquí...solo por mi...- se acurruca en su lugar, sintiendo que los demás se unen, tarareando apenas ante la mano que acaricia suavemente su espalda. -...y que todo vuelva a explotar- murmura miedo. Los recuperó, lograron llevarse bien, y no quiere que vuelvan a pelear.

-Oh, Bitty B...- Floyd lo abraza con todo el cariño que tiene, queriendo quitar todas esas inseguridades pero sin saber como empezar.

-¿Te preocupa lo que sucederá...cuando cada quien vuelva a su vida?- Clay pregunta con mucha cautela, queriendo asegurarse de entender ante de meter la pata o algo por el estilo.

-No tienes que preocuparte por eso...- Bruce logra agarrar una de las pequeñas manos entre las suyas al verlo asentir, dándole un apretón, sonriendo ante los ojos azules que lo miran. -...aun seremos una familia, sin importar donde esté cada uno-

-¿En serio?- los mira con los ojos bien abiertos, esperanzado. -¿Incluso si estamos separados?-

-¡Por supuesto!- no dudaron en asentir porque siendo sinceros, ninguno de ellos quiere volver a como eran las cosas antes. Branch tiene razón en algo, no pueden vivir juntos, no cuando cada quien aún tiene cosas que quiere hacer, pero eso no significa que vuelvan a desconectarse por completo.

-Puede que no estemos juntos todo el tiempo...- el de cabello verde claro sonríe. -...pero nos mantendremos en contacto y nos visitaremos cada vez que podamos-

-Es cierto- el de cabello rosa al fin soltó al menor, asintiendo con entusiasmo. -Somos hermanos después de todo...- se inclino para dejar un beso contra la frente ajena. -...no podemos romper ese tipo de lazo así nada más- y ninguno tuvo problemas para asentir ante eso, totalmente de acuerdo.

-¿Y qué va a pasar conmigo? Soy muy pequeño- y es muy consiente que ninguno está dispuesto a dejarlo solo, algo que agradece. Ya estuvo solo una vez, deprimido, y no quiere volver a eso, incluso si ahora se siente mejor.

-Oh, mi bebé Branch...- el menor chilla cuando es aplastado de manera juguetona entre los brazos de JD, riendo ante la mejilla ligeramente áspera que se frota contra la suya. -...solo tu crees que te dejaré ir así nada más- bufo con diversión, sosteniendo al menor por debajo de sus brazos, separándolo solo para verlo a los ojos. -Eres mío- lo dijo con firmeza, manteniendo una gran sonrisa en su rostro. -A donde uno vaya, el otro lo seguirá- lo sentó, aliviado de verlo más animado.

-¿Vamos a viajar?- el color cían en su pequeño cuerpo se hace más sólido y brillante ante el alivio que lo inunda.

-A donde quieras- su sonrisa de alguna manera se agranda, contento ante la sonrisa que puede dibujar en el adorable rostro del menor.

-¿Podemos visitar a Trollex y Synth?- su emoción iba en aumento y eso era notable.

-No respiramos bajo el agua pero veremos como solucionamos ese detalle- JD hizo una ligera mueca que se encargo de ocultar rápidamente.

-Espero que no les importe algo de compañía- Floyd habla de repente, llamando su atención, el par mirándolo con los ojos bien abiertos al registrar del todo sus palabras.

-¿Vendrás con nosotros?- Branch casi chillo, agarrando la mano ajena, feliz de tener a otro de sus hermanos en su viaje.

-¿Y tu carrera de solista?- JD enarco una ceja, ligeramente preocupado, pero sin poder notar rastro de duda en su hermano.

-Es mejor viajar con buena compañía- sonrió, dándole un suave apretón a la pequeña mano que agarraba la suya, decidido. -Además, siempre puedo hacer algún concierto en el camino o algo así- le resto importancia. Iba a seguir escribiendo cada vez que pudiera y cantaría si tenía la oportunidad pero por el momento, viajar con sus hermanos y ver cosas nuevas sonaba mucho mejor que una carrera en solitario.

-Más les vale que vengan a visitarme o los buscaré- Bruce agito el puño como falsa amenaza, bufando a los pocos segundos, riendo. -Tendrán que conocer a sus sobrinos- ninguno de ellos pudo evitar toser para esconder su sorpresa, intentando imaginar como podrían verse los hijos de un troll y una isleña. Eso sería interesante de ver.

-¡También tienen que visitarme!- Clay rio, luciendo emocionado. -Arreglaré ese viejo campo de golf y lo convertiré en un lugar super seguro, a prueba de bertenos ¡Ya lo verán!- declaró y pronto, estaban hablando, emocionados por el futuro que tendrían.

Al mismo tiempo, algo en el interior de Branch se estremeció hasta liberarse, permitiendo que el color volviera a su piel y cabello, llenándolo de calidez y felicidad.