El tercer y cuarto tiempo había al fin comenzado, la táctica había sido puesta mas no se pudo utilizar por completo por la desincronización del equipo, pero Aomine Daiki habían quedado sorprendido porque por cierto momentos los habían sobrepasado logrando que sonría levemente en medio del partido.

Mientras que Nova no estaba muy conforme pero tan solo se había dedicado a suspirar, no podía pedir mucho del equipo por ende, al ver el esfuerzo y la monstruosidad del juego del moreno, encendiendo levemente una chispa que parecía oculta en ella desde hace tiempo.

Sin embargo, al notar como Kagami se ponía cada vez mas lento en el juego por el cansancio, y cada cesta que dejaba a ver ganar, Nova sabía perfectamente del juego callejero que estaba observando, aquello la aburrió de inmediato.

—Necesito comer...

Murmura entredientes al ver la conversación seria de Aomine contra Taiga y Kuroko. Ya no podía estar allí observando, pero cuando cambiaron al pelirrojo tan solo se detuvo antes de levantarse. Debía quedarse a ver como adulta seria.

Pero desde que comenzó el juego del moreno las cosas estaban cansinas, ese brillo que guardaba entre los juegos al ver algún "enemigo" lo emocionante para bien pero luego eaa chispa se apagaba y todo era aburrido de observar. Pero cuando escuchó el grito del capitán, se sonroja un poco pero intenta hacer la porra.

—¡Seirin! ¡Seirin!

Mas luego de tanto esfuerzo, nada fui posible para ganar ese partido, la academia Touoo ganó con 112 a 55 puntos de Seirin.

Aquel día nadie lloró, pero había sido uno de los partidos mas persistentes que pudo notar la basquetbolista rusa paraguaya

[...]

Entre el tiempo culmino del partido, Nova se levantó de la banca y se dirigió hacia su mochila quitando una bolsa de papitas fritas.

Acompañó al equipo hasta el salon de descanso, mas no ingresó en ese, sino que pidió disculpas a Riko y se retiró por una llamada urgente. Esta algo decaída no le tomó importancia y la dejó ir.

Sin embargo, Nova al salir del lugar se colocó una capucha negra y fue detenida en el trayectoria a la salida.

Aomine Daiki la habías abrazado por los hombros, tensándola.

—Al final, perdieron. Es una lastima parecían buenos.

—A veces hay que perder muchas veces antes de ganar realmente.

Esas fueron las únicas palabras que habían dicho ambos en aquel camino hacia un auto estacionado en la entrada del lugar. Noiz había salido a recibirla pero grande fue su sorpresa ante la compañía del moreno a su mejor amiga.

—Espero que la proxima vez sigas con esa sonrisa en el juego, este que ganaste realmente fue un juego aburrido. —admitió Nova mientras quitaba de sus hombros los brazos del moreno.

—Claro que será mejor, encontraré mejores competidores.

—No se trata de eso imbécil. Cuando lo descubras, tal vez me veas de nuevo.—chasquea la lengua molesta, tirando su mochila dentro del auto negro.

—Espera...—dice Aomine agarrando la muñeca de Nova.

—Que?

—¿Por qué pareces mas deprimida ahora?

—Tal vez sea porque creí ver luz en alguien como tu, pero ya veo porque la sombra se ha ido.

—Kuroko se quiso ir porque fue débil, no supo seguirme.

Se molesta Aomine con la frase que dijo Nova, sin embargo, esta se carcajea friamente y sin sentimientos dejando ver una mirada mas fría que el propio ex-capital de la Generacion Milagrosa. Estremeciendo al peliazul al estar reteniendola.

—Eres tu quien dejaste de brillar, un juego lleno de egoísmo, el hecho de que "yo solo puedo vencerme" eso... Acabó por debilitar un amistad. Pero bueno, no es mi asunto. Ver como mueren las aficiones a mi alrededor es normal. Despues de todo son niños aun.

Escupió la verdad mas toxica, haciendo retroceder al jugador, soltándola, sin poder creer que aquello habían dicho la persona que lo habían ganado anteriormente.

—Definitivamente no eres nadie para decir eso.

—Alejate de mi, y nunca mas escucharas la verdad.

Aquella noche, Nova al subir con Noiz en aquel auto, las cosas que Aomine pensaba de ella, fueron disminuidas, el interes habían decaído, pero tan solo muy en el fondo sabía que tenía razón, un poco. Pero no del todo.

[...]

Una semana había estado fuera de la ciudad, se había ido a Akita, por la misma razón de haber golpeado a Taiga por su forma cavernícola de ver un partido perdido. Actualmente se encontraba comiendo dulces con Murasakibara.

—Asi que... Viniste porque discutiste con Taiga.

—Tal vez.

Los crujidos de las papitas fritas se escuchaban entre cada conversación, el pelimorado tan solo se dedicaba a comer, la ultima vez que habían charlado con Nova había sido frustrante para él, ya que lo tentó cruelmente con comida, estando lejos no podía comer lo que ella le había compartido.

—Debes saber que los asuntos relaciones con Taiga hace tiempo no me incumben...

—Pero igualmente sigues hablando de él, es irónico, Ice.

—Tks... Es tu culpa.

—Crunch...Crunch... ¿Porque te interesa tanto el basket si ya no lo juegas?

Nova ni siquiera levantó la mirada de las papitas al escuchar aquella pregunta. Siguió comiendo y lamiendo sus dedos quitando la sal extra de los mismos. Dando un especie de hambre al pelimorado.

—No hagas eso...

Se inquietó Atsushi deteniendo las manos de la chica. Mientras Himuro los observaba cansado, aquel día habían entrenado mucho en la cancha.

—Sinceramente porque les tengo envidia, que mas quisiera yo volver a jugar como vosotros. Libres sin obligaciones de por medio, sin riesgos ni complicaciones reales interfiriendo en su dia a dia.

Contestó con el ceño fruncido, mientras amagaba con morder las manos de atsushi pero este tan solo la suelta asustado y con el ceño fruncido.

—Muro-cchin... Nova me quiso morder.

—Little Cloud, no seas salvaje.

—Oblígame.

—Por ser bruta nos harás una cena deliciosa esta noche.

Himuro sonríe levemente, cuando Nova lo mira con ganas de asesinarlo.

—Q-ue...—empezó a decir pero fue interrumpida.

—¿Novacchin sabe cocinar?

—Así es Atsushi. Es la mejor, de ella se aprende mejor.

—Ah...

—¿Es cierto Novacchin?

—Si, aunque las comidas que suelo cocinar no son las convencionales de aqui. ¿Igual quieren cenar?—Nova levanta la ceja derecha preguntando.

—Si~ quisiera ver eso, y ser el juez de las comidas que puedes hcer Novacchin

—Así al menos te relajas un poco. Ya que, después de todo viniste a eso, con nosotros.

Siendo así como Murasakibara atsushi conoció la comida tradicional del paraguay el mbeju, cosa que fue realmente chistoso. Ya que su rostro era totalmente desconcertado pero una vez que lo comió. Se maravilló y pidió que Nova le enseñara a cocinar esa delicia.

Después de todo, aquello le servía de tranquilizante. Mientras que Nova estaba en Akita, las cosas con Taiga no iban tan bien, ya que Teppei habían empezado a ver la actitud desagradable del pelirrojo con el equipo mismo. Tanto Kuroko como Taiga necesitaban ayuda, y esa no era de Nova.

Nova no iba a poder ayudarlos aunque se dediciera a hacerlo, despues de todo, ella hace tiempo había elegido el camino del cobarde y no por elección justa.

[...]
perdón por recien actualizar, espero que les haya gustado. Pronto se acerca el momento mas loco de la historia.
¿Que pasará cuando Alexandra García llegue a Japón?
¿Que pasará cuando vea Nova?

Nos leemos pronto.