POV NATHAN

Me despierto escuchando unos porrazos en la puerta. Cuando miro alrededor veo que no hay nadie. La cama de Max esta deshecha y una tenue luz verde ilumina la habitación, pero no mucho, solo lo suficiente como para ver que las persianas están subidas, pero sin embargo no se ve nada a través de ellas, solo negro. Estoy sudando y asustado, pero sin saber porqué. De repente la habitación cambia y es la habitación de mi antigua casa, la casa en la que vivíamos mi hermana melliza, mi hermana pequeña y mis padres. Pero esto es raro, mis padres no viven conmigo ahora, ni tampoco mi hermana pequeña. Me encuentro abriendo la puerta y corriendo por el largo pasillo hasta la habitación de Sam. Ella no puede estar aquí, está en un orfanato. Mi madre la abandonó allí.

-Sam -Digo al ver a mi pequeña hermana de tres años. Mi voz sale como un susurro, aunque yo pretendía gritar.
Gritar porque esto no es real. Pero si Sam está aquí, mi padre también, aunque este muerto.

Corro hasta su cuarto y lo veo durmiendo abrazado a mi madre. Me quedo observando durante unos minutos hasta que pestañeo y cuando vuelvo a abrir los ojos no están allí, estoy en el jardín, viendo como la casa está en llamas, justo como aquella noche de hace dos años. Isabelle está abrazada a mi mientras llora.
Escucho a mi madre gritar que Sam sigue dentro. Mi padre intenta entrar pero los bomberos le paran diciendo que es imposible que siga viva.
Intento correr hacia la entrada pero mis pies están pegados, intento gritar, pero apenas consigo abrir la boca. Lo único que puedo hacer es observar mi casa caerse a pedazos.
Mi padre consigue soltarte y corre como si en ello le fuese la vida, corre para salvar a su hija. Consigo moverme y corro detrás de él.

-¡Hijo, sal!
-No, no puedes hacerlo tu solo
-Por favor
-No, papá, vamos a por Sam

Mi padre me mira con lágrimas en los ojos por el humo.

-Vamos -me susurra

Apenas se puede respirar. Y a duras penas consigo ver las escaleras que llevan hacia la planta de arriba, donde están los cuartos, o lo que queda de ellas.
Solo hay tres escalones por lo que vamos a tener que impulsarnos para subir.

-Hijo impúlsame, la cojo y te la tiro y luego salimos corriendo.
-Vale, corre papá

Han pasado unos minutos que se me han hecho eternos hasta que por fin veo a mi padre aparecer por la la escalera.

-Perdona hijo -Dice sonriendo -Estaba atrapada, pero lo hemos conseguido. Cójela.

La consigo coger y me echo para atrás para que mi padre tenga espacio para saltar.

Estaba cogiendo impulso cuando de repente una viga se cayó a mis pies. No podía saltar, no tenia espacio en el que caer.

-Papá salta, no importa, quemará durante un momento, luego se pasará.

Mi padre me mira por una fracción de segundo. Está asustado. Vuelve a coger impulso, pero esta vez no tiene tanta suerte. La viga le cae encima. Está boca abajo por lo que solo puedo verle la cara. Suelto a Sam y empiezo a saltar para poder cogerle y tirarnos al suelo, pero mis dedos apenas rozan la madera. Lo sigo intentado hasta que escucho su grito por encima del llanto de mi hermana.

-¡Para! Hijo, no puedo andar, no siento las piernas ni los brazos, no creo que salga de esta...
-No, papá -Digo llorando
-...pero tu puedes, y tu hermana también, gracias a ti. Siéntete orgulloso. Te quiero hijo.
-Te quiero papá.

Lo veo sonreirme por última vez antes de apoyar la cabeza en el suelo y cerrar los ojos.

-¡No!

-¡No!

Todo ha sido una pesadilla. Una horrible pesadilla recordando ese horroroso día de hace dos años.

-Oye amigo, ¿Otra vez?

No contesto, solo asiento.

POV BROOKE

Me despierto escuchando unos porrazos en la puerta. Cuando miro alrededor veo que no hay nadie. Las camas están deshechas y estoy sola.

Voy a abrir la puerta, y me encuentro con una señora de unos cincuenta años con un aspecto un tanto... Enfadado.

-Buenos días -digo sonriendo
-Buenos días señorita Blue. ¿Sabe usted la hora que es?
-Las nueve y media, señora -Digo tras mirar el reloj.

Espera, las nueve y media. Se supone que la clase empezó hace media hora.

-Si, las nueve y media. Las clases han comenzado y usted no ha asistido por lo que estará castigada lo que queda de semana. Ayudará a limpiar el comedor. Y ahora le conviene ir a clases, sino tendrá otro castigo.
-Pero... No me ha sonado el despertador. Nadie me ha avisado de la hora que era, no tengo un despertador incorporado a mi cuerpo.
-Sus compañeras Britt e Isabelle me dijeron que Mel quedó en avisarle de que tenía que despertarse.
-Pero Mel no me dijo nada.
-Pues ella dijo que si, hace apenas unos veinte minutos, ¿estás acusando a tu compañera de ser una mentirosa?
-No, no te he dicho eso
-No le "he" dicho eso. Más respeto a tu directora. Y ahora ponte el  y ve a clases.

Cuando la directora se va de la habitación me ducho y me pongo el uniforme: una camisa blanca de manga larga, que si tenemos calor nos las remangamos, pero no nos dejan tenerlas de manga corta; una falda azul oscura, unos calcetines azules que pincan a horrores, y como no la corbata. Como no. La chaqueta la guardamos para el invierno, para cuando haga frío.
Cuando término de vestirme me hago una trenza y bajo el ascensor hasta llegar a mi taquilla, donde miro el horario. Ahora mismo me tocaría estar dando literatura, solo quedan diez minutos, menos mal porque no me gusta nada esta asignatura. Así que mejor me espero hasta la siguiente clase, mates. Se me dan bien.

Acaba de sonar el timbre, el el cambio de clases y veo a Britt, andar hacia mi, acompañada por Isabelle.
Las ignoro y sigo mi camino hasta la clase.
Entro y el profesor me para. Cuando han entrado todos me coge del hombro y dice:

-Buenos días, esta es vuestra nueva compañera, Brookin Blue
-Solo Brooke
-Está bien, cuéntanos algo sobre ti
-Me llamo Brooke, a secas. Tengo 17 años pero cumpliré los dieciocho en navidades. Vengo de España, tengo un hermano un año mayor que yo que ha repetido curso y ahora mismo esta en la clase de al lado, y un hermano pequeño que también está por este colegio.
-Gracias señorita Blue, y ahora prosigamos con la clase.

Me siento al lado de Britt, es el único sitio que encuentro.

-Brooke, ¿porqué no viniste a la primera clase?
-Estaba dormida, me quede sola y nadie me despertó.
-¿Qué? Pero si Mel dijo que te despertaría
-Pues no lo hizo, y además, ¿dónde estabas tu?
-Fui a la enfermería con Isabelle. Empecé a vomitar esta mañana.
-¿Estás bien? -empiezo a preocuparme.
-Si, ahora si. ¿Pero pensabas que yo te había dejado sola?
-Al principio si, pero ahora pienso que Mel lo hizo a propósito.
-No creo, se le habría olvidado.
-Me apuesto lo que quieras. Britt, Mel no me da buena espina.

Holaa, siento no haber actualizado antes, es que no tenia internet en mi casa.
Parece que Nathan e Isabelle son hermanos.
Y Brooke está siendo un poco desconfiada con Mel

Nos vemos en el próximo capítulo!! No olvidéis darle a la estrellitaa 😍😍😍