Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo II

Nunca había visto a alguien tan aislado, apartado y tan antipático en mi vida. Bueno, quizás si...yo misma. Pero digamos que nunca había visto a alguien más con actitudes como las mías, pero multiplicadas por mil.

Las últimas semanas noté todo eso en Dominik, y como no iba a notarlo si se sentaba a mi lado. Era realmente odioso, y no exagero. 

Alguien le hablaba y no contestaba, hacía como que no oía nada, le volvían a hablar y les contestaba ''no me dirijas la palabra a menos que yo te hable primero'' y se volteaba. Se pasaba los recreos, completamente solo. No parecía tener interés en socializar con nadie. Y bueno, a mi me hablaba, pero...únicamente para ofenderme, y terminar armando peleas siempre, porque créanme, que yo no estaba para aguantar a tipos como él.

—El trabajo se realizará en tríos —habló el profesor, refiriéndose al proyecto del que había hablado previamente —Armen los tríos rápido. Llamaré para que me digan con quien harán grupo

—Eh, profesor —alguien habló. No supe de quién era esa voz, puesto que tenía la vista gacha, inspirada en mi dibujo.

—¿Qué pasa ahora, señor Santorski? —ah, debía imaginarlo.

—Nada, solo que no quiero formar grupo con nadie —respondió como si fuese un hecho, no una petición —Y no me agrada nadie

—Señor, usted debe formar grupo, porque yo soy quién manda aquí y debe acatar lo que digo

—Bien, pero quiero hacer el trabajo solo.

—No lo creo, hágalo con Monika, es su compañera de puesto, de seguro congeniarán bien en esto —espetó el profesor, y si dirigió a su mesón. Dominik me quedó mirando por unos segundos y luego siguió viendo su cuaderno.

Genial, ahora tendría que hacer el trabajo con él, y pelear cada cinco minutos. ¡Qué alegría!

Nótese mi sarcasmo.

—Supongo que no querrás hacer el trabajo conmigo...así que si quieres, puedes hacerlo con alguien más —le sonreí fingidamente

—¿Porque querría yo eso? —preguntó molesto

—Pues...¿Por ser como eres? Mira, solo te estoy aliviando las cosas, ve con otro grupo, no es necesario que le hagas caso al profesor —respondí, tratando de ser amigable, pero este chico se tomaba todo a mal

—Pues, en el caso que si quiero hacer el trabajo contigo, no me puedes echar de tu grupo —su tono era muy arrogante

—¡Está bien! —exclamé —Sólo estaba intentando ser buena contigo, y por eso te lo digo. Si quieres, no le haces caso al profesor y... —en eso Dominik esbozó una pequeña sonrisa burlona.

¿De que se ríe?

—¿Qué?—pregunté extraña, mientras el idiota seguía riéndose 

—¿Perdón? —hum...la voz del profesor atrás mío, por eso se ríe... —¿Con que no debe hacerme caso? ¿Está incitando a que no me haga caso? Él hará el trabajo con usted y punto

—Está bien...está bien —respondí fastidiada, rodando los ojos—. Y no era lo que quería decir, yo...

—No, no se explique. Sólo haga el trabajo con él y otro compañero o compañera, ¿entendido?

—Si —miré de reojo a Dominik, y ya no daba más para soltar una carcajada, solo le dirigí una mirada de odio y volví la mirada al profesor —Haré el jodi... —me callé —El trabajo con él.

—Muy bien —se alejó

Dominik comenzó a reír sin contenerse. Si, se estaba riendo de mi, en mi cara.

—Deja de reír, idiota

—No quiero

—Pues te callas, me fastidia tu risa —respondí, ya molesta.

—Pues cállame entonces —sonrió de una forma... diferente a sus sonrisas arrogantes o fingidas que me dirigía siempre. 

Demonios, y su mirada me estaba haciendo sentir extraña.

Me sonrojé un poco, gracias al cielo no soy tan blanca, y no se nota cuando me pongo roja.

—Sólo...sólo hagamos el trabajo, ¿sí? —respondí sin mirarlo

No dijo nada, pero al parecer notó mi nerviosismo, pues cuando alcé la mirada, sonrió con suficiencia, como si lo que hubiese dicho fuera con esa intención.

●●●

Pasaban los días, todo marchaba normal en la escuela, y con normal me refería a nada interesante. O sea, lo rutinario.

Llegaba a la escuela. Me iba directamente a mi silla. Me quedaba plantada allí como un muñeco, y me aburría hasta que comenzaran las clases, o llegaba Janine, lo que pasara primero.

Aunque...

Mi rutina había cambiado un poco a decir verdad.

Ahora cada vez que entraba en el salón, encontraba a Dominik sentado dibujando, o escuchando música solo. Dejaba mi mochila sobre la mesa y él lanzaba alguna de sus frases sarcásticas que me hacían enojar, pero ya estaba acostumbrada y hasta me hacían gracia a veces.

Otras veces no, y me daban ganas de golpearlo, pero ya qué.

Tenía un sentido del humor parecido al mío. Bastante sarcástico. 

El otro día, me di cuenta que teníamos bastantes cosas en común...los mismos libros, la misma música y para que decir sobre la actitud. Pero aún así, no nos podemos llevar bien. Es como mezclar agua con aceite; aunque los dos son líquidos, no se pueden juntar.

O algo así, no soy buena en química.

—Hola Janine —saludé a mi amiga, que se acercaba hacía mi

—Hola Moni...—me miró extrañada —¿Porque estás al lado de él?

—Tengo nombre —respondió Dominik, serio, sin despegar la vista de lo que hacía

—¡Bien! ¿por que estás con Dominik? —remarcó el nombre

—No estoy hablando con él...solo estoy escuchando música en mi puesto —respondí

—Pues...hay un montón de puestos desocupados a los que podrías ir —respondió Dominik sin quitar la mirada de su libro—.  Admítelo, buscas excusas para estar cerca de mí

Reí con ganas, volteando a él

—Sí, claro, es que este hombre me quita el sueño y no puedo evitar acercarme a él —respondí sarcástica —Ni en tus sueños o en mis pesadillas, yo estoy aquí por que es mi puesto por lo que tengo derecho a estar

—Como digas, bonita —sonrió

—Ok... —Janine me miró desentendida —No fue buena idea que los sentaran juntos, chocan todo el tiempo —miró hacía el libro de Dominik —¿Y Qué lees Dominik? —trató de cambiar el tema

—No te importa —respondió cortante

—No, de echo este chico choca con todo el mundo —me tomó del brazo —Vámonos, la mala vibra se pega

—Uf... amiga, si fuera por eso tu ya estarías muy mal conmigo —reí

—Tu eres pasable al lado de él

—Siguen aquí ¿saben? Si quieren hablar de mi, al menos que no me dé cuenta —reclamó Dominik

—Salgamos ya ... —Janine me arrastró del brazo, hacía afuera

●●●

Cuando sonó el timbre, que fue más o menos unos diez minutos después de que fuimos al patio, volvimos al salón de clases, y como el profesor ya estaba allí, nos ubicamos rápidamente en nuestros puestos. Dominik no estaba allí, pero si sus cosas.

Levanté mi mochila, y cuando lo hice noté que cayó al suelo una hoja. Al levantarla quedé realmente sorprendida. Era un dibujo. Pero no cualquier dibujo. Era yo, perfectamente dibujada en lápiz grafito. Estaba muy detallado.

Y yo...me veía feliz en aquel dibujo. Era solo de los hombros para arriba. Abajo, tenía una frase.

''Pocos ven lo que somos, pero todos ven lo que aparentamos

Nicolás Maquiavelo''

¿Quién habrá estado perdiendo el tiempo en algo como esto, para dármelo a mi? En fin, es de esos detalles que te tomas con alguien que conoces bien, o te importa mucho. Y yo que sepa, no le importaba a nadie.

Es como si la persona que la hubiese escrito, me conociera bien y supiera lo que siento por dentro. Pero eso era imposible, pues la única que realmente me conocía aquí, era Janine.

Y no creo que ella me anduviese dibujando. Sería extraño.

Al salir de clases, con el último timbre, ordené mis cosas y Janine se despidió de mí.

Estaba a punto de irme pero, recordé que debía devolver un libro a la biblioteca. Bajé con el libro, lo entregué y luego volví al salón por mis cosas. Al entrar, vi a Dominik dentro.

—Llegas un poco atrasado a las clases —sonreí —¿Qué te paso?, ¿Porqué no llegaste?

—¿Porque tanto interés en mi? —respondió tomando su bolso—. ¿Te preocupaste por mí acaso?—se acercó hacia donde yo estaba

—Pues no, solo tengo curiosidad —me alejé de él y fui por mis cosas

—¿Por qué te escapas? —habló mientras yo iba por mis cosas 

—¿Ah? ¿de que hablas? —me tomó por sorpresa con su pregunta.

No tenía sentido lo que acababa de decir.

—Fui hacia ti, y te fuiste casi corriendo a buscar tus cosas... no te voy a hacer nada, si es lo que piensas —me miró esperando respuesta

Me paré en seco y volteé hasta él

—¿Y que esperas? ¿Que me quede quieta viendo lo que haces? Tengo que irme, ya tocaron hace rato —me dirigía hasta la puerta pero me tomó del brazo —Qué demo... Dominik, ¿Qué demonios haces?

No respondió nada. Me quedó mirando como totalmente distraído por algo que viera en mis ojos, pues no despegaba la mirada de ellos. Y yo por mi parte, sin darme cuenta me quedé perdida en sus ojos...¿grises? ¿azules? No sabría decirlo con exactitud, pero eran bastante llamativos.

Esperen, ¿Qué estaba haciendo? ¿porqué se estaba acercando tanto?

Atrás, maldita sea. 

Demonios, mi corazón iba a romper mi pecho y iba a salir corriendo, estaba latiendo tan fuerte que yo creo que se escuchaba hasta la otra cuadra. 

Me estaba poniendo nerviosa su estúpida cercanía. Por un momento creí que se acercaba a besarme...

Pero no, seguro eran impresiones mías, quizás solo me iba a hacer una de sus estúpidas bromas. Pero no lo lograría.

Me alejé de él

—No se que te pasa, ¿Te drogaste o algo? Bueno, hablando de drogas, tengo que irme ¡Adiós! —Exclamé atropellada, y torpemente.

Me dirigí a la puerta, sin darle tiempo a Dominik de decirme nada, y me fui como un rayo en dirección a la salida, pero choqué con la puerta del salón.

Dios mio

Volteé a ver a Dominik, que parecía serio pero a punto de reírse

—Adiós —repetí, y sonreí nerviosa de lado

Ahora sí, miré bien al frente, y salí de allí rumbo a la salida de la escuela. 

Realmente no sabía cómo reaccionar ante situaciones tan...¿Intensas? ¿Incómodas?. Tampoco sabría cómo describirlas.

Y por último.

¿Qué rayos tienen que ver las drogas, con irme de allí? tendría que pensar bien las cosas que digo, cuando estoy nerviosa.

--

N/A: Monika en multimedia 

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro