Sabrina.

Hoy todo el team estamos reunidos en mi casa, Jaden se irá hoy a vivir a Los Ángeles por Arisel. La verdad estoy muy triste porque lo extrañaré todo este tiempo pero a la vez estoy feliz porque sé que el estará feliz allá con ella.

—¿Por cuánto tiempo estarás en Los Ángeles? —pregunto una vez más con nostalgia.

—Solo estaré por un año aproximadamente, ya te dije —recuerda y hago puchero.

—Te voy a extrañar —reconozco una vez más y el me abraza.

—Me puedes ir a visitar con Tomás —sugiere.

—Probablemente —dispongo.

—Yo también tengo que decirles algo —anuncia Dylan —. Amelía y yo la próxima semana nos iremos a New York —lo miro incierta y luego miro a Amelía.

—¿Y eso? ¿Por qué? —interroga Sthep.

—El equipo de New York Yankees quieren hacer un contrato conmigo —informa y todos compartimos miradas de sorprendidos.

—¡Wow! ¡Felicidades amigo! —Jaden abraza Dylan.

—¿Por qué no lo comentaste antes?, es una exelente noticia —Francisco le choca los cinco y le regala una sonrisa.

—Estamos muy felices por ti... En sí, por ustedes —dice Sthep viendo a Amelía y a Dylan.

—Entonces, significa que... ¿El team los cachorros ha llegado a su fin? —mi vista se nubla debido a las lágrimas que estoy conteniendo. Nuestro entorno cambia inesperadamente a nostalgia.

Jaden en Los Ángeles, Amelía y Dylan en New York, Sthep y Francisco terminaron, y Sthep se niega a estar en el mismo lugar que el por ahora.

—Me temo a que sí. Hemos sido los mejores amigos desde jardín de niños —declara Amelía.

—Hemos estado todos juntos en las buenas, en las malas y aún en las peores —Sthep tiene los ojos llenos de lágrimas.

—¿Se acuerdan cuando nos escapamos del colegio y nos fuimos a la piscina? —hace recordar Dylan.

—O cuando creamos una coreografía vergonzosa para nuestra fiesta de graduación —menciona Francisco y no puedo evitar reír entre lágrimas mientras recordaba aquel día.

—Recuerdo la vez que falleció mi madre —Jaden deja escapar un sollozo y eso me motiva a dejar caer mis lágrimas —Todo mi mundo se había derrumbado, hasta intenté suicidarme, pero ustedes estuvieron ahí... Siempre estuvieron ahí para mí.

—Al igual que con la pérdida de Melanie, estuvieron todos ahí —miro a Amelía quien se encuentra con los ojos hinchados.

—Cuando tuve mi accidente también estuvieron ahí, más que nada tu Sthep —dice Francisco.

—Cuando Jaden se montaba en las mesas para bailar: Todos al estilo de peter la anguila, de peter la anguila, de peter la anguila —canta Dylan tratando de imitar aquellos pasos de Jaden cuando estaba en primaría y todos reímos unánimes.

—También cuando nos llevaron a dirección por haber sido complices de Brina, quien le había echado pegamento a la silla de la profesora de arte y cultura.

—Ese día valió la pena ir a dirección, ósea ¡Esa vieja me había reprobado! —suelto.

—Hemos vivido muchas experiencias juntos como amigos —demanda Sthep.

—Tal vez no tenga muchas experiencias con ustedes, pero, somos más que un simple team, somos una verdadera familia —agrega Tomás.

—Exacto. Somos una familia —compruebo y sonrío tristemente.

Es increíble como me desde que eramos unos mocosos formamos unas lindas amistades, las amistades más importantes de mi vida. Estos son los amigos verdaderos, los que siempre estuvieron ahí en todo momento, los que jamás te dieron la espalda, los que te apoyan en tus ideas locas y lo que a pesar de las dificultades siempre estuvieron ahí para ti.

Lo que me es difícil ahora es separarme de ellos me da miedo no volver a vernos unidos, pero tengo la esperanza de que volveremos a reunirnos como lo solíamos hacer.

—¿Volveremos a estar todos juntos? —pregunto solloza.

—Los cachorros siempre vuelven —repone Jaden.

Nos miramos unos a los otros con lágrimas en los ojos y nos unimos todos en un fuerte abrazo lleno de conmoción y sentimientos.

Espero que esto no sea una despedida para siempre si no para un volveremos a estar juntos.