Santa Biblia Reina Valera 1960 - Juan 11
21 Y Marta dijo a Jesús: Señor, si hubieses estado aquí, mi hermano no habría muerto.

—más te vale que te apures, no querrás amanecer aquí firmando todas esas hojas. —me dice Fabricio.

—¿Osea que quieres que las firme todas ahora? —pregunto incrédula.

—por supuesto —responde —y agradece que estoy siendo noble contigo.

«Si eso es lo noble, no me imagino lo...».

Le doy una mirada a Jason el cual permanece en silencio viendo la situación.

—¿Siempre es así? —le preguntó.

Él niega con la cabeza.

—por veces es peor —responde.

«Que agradezca que amo a Dios, porque de lo contrario ya lo habría tirado por este puente».

«Solo es un oportunista que se aprovecha de mi situación».

Pero algún día llegará la hora de que pague por todo lo que ha hecho, de eso estoy mas que segura.

—voy a estar en el auto —avisa Fabricio —cuando termines de firmar, me avisas.

Yo le dedicó una mirada fulminante la cual suavizó con una falsa sonrisa.

Él se lo toma a bien y se va a su auto.

Yo mientras tanto me quedo con Jason, el cual amablemente se queda alumbrandome.

Sigo leyendo las hojas, pero al ver que siempre dicen lo mismo, decido mejor para ahorrar tiempo limitarme solamente a firmar sin leer nada.

Así es como logro que me rinda mucho más.

Una hora después.

«Increíble».

Finalmente logré firmar todas esas hojas.

Nunca me había sentido tan hasteada de escribir mi nombre.

—¡Ya está! —digo en voz alta.

—¿No te parece que debiste haber leído antes de firmar? —pregunta Jason.

—pero que voy a leer si todas las hojas dicen lo mismo —respondo con cansancio.

De tanto firmar, me dió mucho sueño, además aquí ha estás horas de la noche está haciendo bastante frío.

—Linda —dice Jason en tono suave —ya que estamos aquí, podríamos aprovechar para hablar un poco de nosostros.

Se acerca un poco más a mi.

Yo instintivamente también me alejo de él.

—lo siento Jason —le digo —pero no existe un nosotros.

—¿No me digas que todavía sigues enamorada de ese J2?. —pregunta mirandome fijamente.

Quisiera decir que no es eso, pero lamentablemente si lo es, no sé que me pasa, pero simplemente no lo puedo sacar de mi cabeza.

—supongo que tú silencio significa que todavía lo amas —dice al ver que me he quedado callada.

—lo siento, pero no he podido y creo que ya no podré sacarlo de mi cabeza. —digo mirando el cielo.

Me duele ser tan dura con Jason, a pesar de todo se ve que es un buen hombre, pero que se puede hacer cuando el corazón no quiere a esa persona, además él no comparte la misma fe que yo

—¿Eso significa que nunca me darás una oportunidad?. —pregunta dolido.

Volteo a verlo y puedo ver en su mirada mucha tristeza, a pesar de que solo lo veo por la luz de la luna.

—no, —respondo —nunca te daré una oportunidad.

—¿Ni siquiera por misericordia? —vuelve a insistir.

Me cuesta responder, pero tengo que ser lo más sincera posible, no quiero que se haga ilusiones conmigo.

—ni siquiera por eso —respondo muy segura de mi misma.

En ese momento el semblante de Jason cambia y se endurece.

—entonces yo tampoco te tendré misericordia —contesta.

Quise saber el significado de sus palabras, incluso abrí mis labios para preguntar, pero él no me dió tiempo de nada.

Se acercó a mi rápidamente y cuando me di cuenta ya me tenía en sus brazos.

Hice mi mayor esfuerzo por safarme, pero él era mucho más fuerte, además sabía bloquear mis movimientos.

—¡¡¿Que haces?!! —pregunto alarmada cuando veo que me está subiendo por encima de la baranda.

Él no responde.

Eso hace que me ponga más asustada.

—¡¡No te atrevas!! —le digo cuando veo cuales son sus negras intenciones —¡¡Por favor!! —le suplico.

Pero él no me hace caso, es como si no le importará nada y a pesar de todos mis ruegos, aún así me lanzo abajo.

—¡¡Bienvenida a los J5!!, ¡¡Eres la chica J2!!. —fue lo último que escuché decir.

Mientras que bajaba no tuve tiempo de pensar en nada.

La velocidad en la que descendía solo me hizo cerrar los ojos y esperar mi triste fin.

«Debí de haber suponido que esto era una trampa».

De repente siento el agua helada por todo mi cuerpo y poco a poco comienzo a descender a la profundidad.

Quise nadar hacia arriba, pero el frío era tanto que mi cuerpo se congelo de tal manera que no me podía mover, fue así que después de tanto luchar al final me dejé llevar, comenzando a tomar agua.

Narra Erick:

Una hora antes.

Estaba sentado en el mueble de la sala viendo una película con Elisa.

Me encuentro en la casa de mis padres biológicos, como todos ya saben, mis padres adoptivos me desheredaron por la sencilla razón de que no renuncie a Dios.

Y cuando digo que me desheredaron, me refiero a que me dejaron en la calle, solo les faltó pedirme la ropa que llevaba puesta.

Me quitaron el apartamento, los autos, las motos, bloquearon mis cuentas bancarias, ni siquiera me dejaron lo que yo había logrado con mi propio esfuerzo.

Me dejaron prácticamente en la miseria.

Para colmo de males la mayoría de mis amigos me dieron la espalda cuando más lo necesite, pero eso lo narraré cuando tenga mi propia historia.

Mi teléfono vibra dándome a entender que ha llegado un mensaje.

Lo saco de mi bolsillo y me doy cuenta de que es un wapsat de Emma.

¿Quien es Emma?.

Para los que no saben.

Emma es una chica de la iglesia, por cierto muy juiciosa, la cual asegura Elisa que está perdidamente enamorada de mi, entre otras chicas.

La verdad es que yo no le presto atención a eso.

Ahora me he preocupado por buscar el rostro de Dios, aunque sería un mentiroso si no confieso que a Jiseth si le pongo cuidado, aunque la mayoría de tiempo ella solo me ignora, pero bueno.

Aunque debo de reconocer que en este tiempo difícil cuando todos me dieron la espalda, ella estuvo muy pendiente de mi.

Ni siquiera me molestó en abrir el mensaje de Emma, además ya está tarde para hablar con una joven de la iglesia por wapsat, eso no es bueno.

Más bien me voy a ver el chat de Jiseth, le escribí unas horas atrás deseándole una buena noche.

Al ver el chat me doy cuenta de que leyó el mensaje, pero no lo respondió, me dejó en visto.

No sé porque si siempre lo hace y estoy acostumbrado a esto, aún así me duele el pecho.

De pronto Elisa estira la mano y me quita el teléfono sin darme tiempo a nada.

Mira la pantalla del teléfono y bufa con fastidio.

—¿Otra vez con lo mismo Erick? —me dice molesta.

Yo no le respondo nada.

—¿Es que eres tonto o te haces? —pregunta —¿Acaso no te das cuenta que esa chica es una ciega que ni siquiera te nota?.

Sigo sin decir nada.

—tu eres el único tonto que andá detrás de ella como perro faldero —sigue diciendo.

Eso dolió.

—deberías de abrir los ojos de una buena vez y darte cuenta que esa chica nunca te querrá. —sigue regañándome —mas bien deberias de darle una oportunidad a Emma, ella si se interesa por ti, incluso te escribe siempre y tú ni siquiera miras sus mensajes.

Se pone de pie y se va con mi teléfono.

—¿A donde vas? —pregunto alarmado.

—para el baño —responde.

—dame mi teléfono —le pido.

Ella me ignora y se encierra con el en el baño.

Minutos después.

—he vuelto —dice sentándose en el mueble y entregándome el teléfono.

Lo tomo en mis manos y me doy cuenta de que está en Wapsat.

Veo que le ha respondido los mensajes a Emma.

Emma:hola Erick buenas noches🤗.

Ese fue el mensaje que ella me envió hoy y Elisa se tomó la libertad de responder por mi.

Yo:hola ☺️.

Yo:¿Como estas?.

Emma: pensé que no me responderías como siempre lo haces.

Emma: estoy súper bien, feliz de poder hablar contigo 😍😍😍.

Yo:lamento lo de antes, es que he estado un poco ocupado y por eso no había leído tus mensajes.

Yo: también estoy muy feliz de poder hablarte, me siento tan privilegiado de hablar con una mujer tan hermosa como tú.

Me paso las manos por la cara de la vergüenza tan grande que siento.

Posiblemente esa chica piense que soy igual de enamorado que Fabricio.

Emma: gracias 🥰🥰🥰, tú también eres muy guapo, por cierto quería saber si mañana después del culto podríamos charlar un rato tu y yo?.

Yo:por supuesto, no hay problema.

«Definitivamente Elisa se merece que la cuelgue».

Emma: gracias, gracias, gracias 🥰🥰🥰.

Yo:vay😘. Que descanses y tengas dulces sueños.

Ni siquiera a Jiseth le escribo así.

Emma: igualmente 😘.

Fin de los mensajes.

Miro a Elisa la cual está mirando la película como si nada.

Tengo unas ganas de...

Mejor no lo digo.

—¿Como pudiste? —le reclamo enfadado en voz baja —¿No te das cuenta que pusiste mi testimonio por el suelo? —le reclamo.

—deja de exagerar las cosas —me dice sin prestarme atención —solo te di una ayudita.

—¿Ayudita?. —repito.

Quisiera gritarle, pero no lo hago por temor a Dios, además también ya es tarde de la noche y mis padres están descansando.

«Solo a Elisa se le ocurre hacer esta clase de cosas».

Aveces sale con unas inmadureces que parece que no fuera cristiana, como en este caso.

¿Como se le va a ocurrir mandarle caritas dando picos a la hermana Emma?.

«Ahora esa hermana se va a hacer ilusiones conmigo».

—mañana hablaré con ella y le diré que todo fue una broma tuya —le digo serio poniéndome de pie.

Comienzo a caminar hacia mi habitación.

Por razones así es que quiero irme a vivir solo, no soporto que Elisa invada mi espacio personal.

Yo la quiero mucho como mi hermana, pero eso que se meta en mi wapsat a escribir por mi, también que esculque mis cosas y haga otras cosas más, hacen que no la quiera cerca por tanto tiempo.

De repente corre hacia mi y me abraza por la espalda.

—no por favor —me ruega. —no le vayas a decir que fui yo, de lo contrario me acusara con mis padres y ya sabes cómo son ellos, posiblemente me pongan en disciplina.

—pues te lo mereces —digo con dureza.

—claro —deja de abrazarme —pues como eres el favorito de papá y mamá, no te importa fregarme la vida y hacer que pelee con ellos.

«Ya va a empezar con lo mismo de siempre».

Siempre se la pasa quejándose que mis padres me prefieren más a mi que a ella, cuando eso no es verdad.

Es solo que con ella son más severos por cuánto sale mucho, además es mujer y necesita de más cuidado.

Lo único que quieren es que ella no la vaya a embarrar, eso es todo.

Afortunadamente conmigo no tienen ese problema.

Yo ya vengo del mundo y no quiero volver allá.

Mi teléfono vibra anunciando la llegada de otro mensaje.

Ruego mentalmente que no sea Emma.

De verdad que ella es una gran chica, pero no quiero herirla.

Afortunadamente cuando miro el teléfono me doy cuenta que es un mensaje en el grupo de los J5.

J3:hoy es el día donde se realizará la ceremonia de ingreso para nuestra nueva integrante como lo es Linda, la cual vendrá a ser la chica J2.

Dejó a Elisa ahí y me voy hacia mi habitación mientras respondo el mensaje.

Yo:¿Enserio?🧐.

Yo:hablas como si se tratara de un ritual.

Yo:¿Cómo la convenciste de que entrara al grupo?.

En eso más integrantes se incluyeron en la conversación.

J2: Fabricio 😠, ¡No te atrevas a meterte con Linda!.

J2:yo no creo que ella allá firmado el contrato para entrar en al grupo de los J5.

J3:¡Ja!, si vieras todo lo que está dispuesta a hacer por amor.

Chica J1:yo creo que es una trampa.

J1:de eso estoy mas que seguro.

J2:¿Dónde estás J3?.

En ese momento Fabricio nos manda una foto en la cual vemos a Linda acompañada de Jason, el cual le está alumbrando mientras ella firma unas hojas.

«Tal parece que si es voluntario».

Nuevamente comienzan a escribir.

J2:¡No te atrevas a atentar contra la integridad de Linda!.

Le advierte a J3.

J3:😌😄.

«Esas caritas no me gustan nada».

Guardo mi teléfono en mi bolsillo, busco un saco en mi closet y salgo de ahí rápidamente con el anhelo de llegar a tiempo a dónde está Linda.

Yo creo que Jak con los demás también han de estar llendo para allá, en especial J2, es el que más se ve preocupado.

Narra Deimond.

Conduje mi auto a toda velocidad, ni siquiera en las carreras ilegales en las que participe un tiempo atrás, había corrido tanto como hoy.

Incluso perdí la cuenta de todos los semáforos que me pase en rojo, afortunadamente ninguno de los policías se atrevió a detenerme, pero supongo que me tomaron muchas fotomultas.

Más todo ha sido por una justa causa.

Quiero llegar a tiempo y librar a Linda de esos desquiciados.

Sé que Fabricio no le tendrá misericordia y si Jason no logro lo que quería con ella, entonces va a estar del lado opuesto.

Llego al lugar y efectivamente Jason tiene a Linda en brazos con la intención de arrojarla del puente

Me bajo del auto viendo cómo ella lucha por safarse y pide misericordia.

—¡¡Jason no!! —le grito corriendo hacia ellos.

Tristemente cuando llegue, él desgraciado la había arrojado.

Solo la ví caer de tan grande altura en aquellas aguas heladas.