EDGAR

Caminé a la cafetería acompañado de Robert. Teníamos hambre y queríamos aprovechar el receso de 20 minutos que nos daban.

Al entrar busqué con la mirada a Melody, hasta que la vi sentada con una chica en una mesa del fondo.

- ella es la chica de la que te conté - le dije a mi amigo dirigiendo mi mirada hacia ella y apuntándola.

- ¿la chica de pelo corto de allá? - me preguntó mirándola también.

- sí - respondí.

- diablos, es muy bonita, viejo -

- lo es - le dije cautivado observándola sonreír.

- ¿así de bonita era cuando la conociste a la edad de 14 años?

- siempre ha sido así de hermosa -

- pero no te embobes tanto amigo - me dijo y me cerró la boca.

- cállate - le dije bromeando.

- ve con ella Edgar -

- no, ella está con su amiga, no la interrumpiré -

- no me vengas con esos cuentos, ve si tanto te gusta -

- ay porfavor, no me gusta -

- ¿lo vas a negar ahora? -

- bueno, esque pasaron tantas cosas entre ella y yo en el pasado que no sé... -

- ¿no sabes o no lo quieres aceptar Edgar? -

- no es eso Rob, tal vez las cosas entre ella y yo no funcionarían, no quiero volver a lastimar su tierno y blando corazón-

- ¿y la dejarás ir para volver a perderla?, ¿acaso no me dijiste que estabas arrepentido de haberla usado cuando pasó lo que pasó hace 3 años; y que querías volver a verla para tenerla? -

- sí dije eso, pero la verdad es que soy un cobarde - le dije desanimado.

- pues no lo serás más, irás a donde está y hablarás con ella, le pedirás perdón, le dirás lo mucho que te arrepientes de haberla dañado cuando era tan solo una niña -

- no puedo, de verdad no puedo hacerlo, no tengo el coraje para arreglar el mal que hice -

- ¿la quieres? -

- sí, la... quiero - respondí sonriendo al recordar la primera vez que la vi.

- entonces si la quieres ¡ve con ella y conquistala hermano!, estoy seguro de que ella sigue enamorada de ti -

- ¿crees que ella va seguir enamorada de mí después de que me dijera te quiero y yo no le respondiera nada porque solo la estaba usando? - exploté lleno de temor.

- la quieres ¿no? - me preguntó de nuevo y asentí con la cabeza - entonces ve a ella, dile que lo lamentas mucho, que siempre la quisiste, y así vemos entonces que es lo que ella siente -

- está bien, te haré caso, porque la última vez que me diste un consejo y no lo seguí, perdí a Melody -

- me alegro viejo, has cambiado, y para bien -

- gracias hermano, ¿te parece si los presento para que conozca a mi mejor amigo y tú conozcas a la chica de mi vida? -

- porsupuesto, vamos - me dijo aceptando y me dio una palmada en mi espalda mostrando apoyo.

Caminamos hasta donde estaba Melody con otra chica hablando y saludé amablemente:

- hola Melody, ¿cómo te va? -

Ella levantó la cabeza para verme y sonrió enormemente.

- hola Ed, muy bien ¿y a ti? - contestó ella con una expresión de alegría inmensa en su rostro - ay perdona, no te llamaré Ed de nuevo, eso era antes cuando... bueno eso no importa ¿te molesta si te llamo así? -

- no, para nada Melody, Ed me parece perfecto - le dije con una sonrisa cordial.

Ella asintió con una leve sonrisa.
Como amaba verla sonreír.
Y pensar que un día yo fui la causa de que se borrará esa sonrisa para ser reemplazada por una carita triste y un corazón roto y decepcionado.

- soy Robert, él mejor amigo de Edgar, mucho gusto en conocerte Melody - se presentó mi amigo.

- mucho gusto Robert - contestó ella algo tímida pero gentil.

- ella es mi nueva amiga, Ciara - dijo Melody presentándonos a su compañera.

- hola, mucho gusto Ciara - le dijo Robert mirándola de una manera extraña que yo conocía bien, le gustó esta chica.

- ho-hola, es un gusto también - le dijo ella balbuceando un poco.

¿Estos dos se gustaban?

- hola - la saludé también.

- hola - dijo ella aún nerviosa por mi amigo, y se levantó de su silla para irse.

- ¿estás bien Ciara? ¿quieres que te acompañe? - le dijo Melody preocupada por ella, era una dulzura.

- no, quédate con tu amigo, iré por algo que olvide en el salón - dijo ella, cosa que me sonó a excusa.

- voy contigo - le dijo Robert de inmediato ofreciéndole su compañía.

Logré observar que él le hechó una mirada de "vamonós, déjalos solos".

- ah... sí, vamos Robert- le dijo ella asintiendo y guiñandome el ojo.
Los dos lo habían hecho a propósito.

Entonces ellos se fueron y decidí hacer lo que me dijo Rob que hiciera.

- ¿puedo sentarme? - le dije a Melody.

- sí, claro, siéntate - me dijo ella sonriendo de una manera hermosa y cautivadora.

Me senté a su lado y le sonreí simpático.

- ¿cómo has estado? - dijimos al unísono.

- tú primero dime - me dijo ella riéndose de nuestra "telepatía".

- pues... estoy excelente - le dije con una risita coqueta.

- me alegro Ed -

- ¿y tú? ¿cómo estás? -

- muy contenta si te soy sincera -

- que bueno... - le dije y ella solo sonreía - y ¿cuál es la razón de que estés contenta? -

- tú - respondió.
Esa palabra, aunque fuera una sola me llenó el corazón de regocijo.

- ¿yo? - pregunté con un tono de voz incrédulo.

- sí, estoy muy contenta de que nos reencontraramos -

- ¿de verdad?, ¿no estás... molesta? -

- ¿molesta?, no, ¿porqué piensas eso? -

- por lo que pasó hace tiempo entre tú y yo -

- ¿hablas de cuando me usaste? ¿no? - me dijo sonando algo resentida.

Abrí los ojos sorprendido.
Estaba molesta todavía por lo que le hice.
Mis sospechas resultaron ser verdad.
Estoy perdido sin ella.

- sí, habló de eso - finalmente después de un silencio contesté - y quiero que sepas que me arrepiento mucho de haberte tratado así, de haberte usado, no te merecías eso, perdóname Melody, quiero estar contigo de nuevo y hablar como antes -

- estaba bromeando Ed, lo que pasó en el pasado ya no importa, si no el ahora, yo te perdoné hace años así que no te preocupes -

- ¿podemos ser amigos de nuevo? como antes - le pregunté ansioso.

Aunque me gustaría ser algo más que eso.

- sii - asintió ella muy contenta.

- genial, y oye emm... sobre la carta que me entregaste la última vez que nos vimos... eh... -

- ¿qué pasa con eso?, ¿aún la tienes?, ¿la desechaste a la basura?-

- la tengo guardada en un cajón, nunca la tiré - le aseguré y ella sonrió mostrando tranquilidad - Melody aunque no recibiste ninguna respuesta de mi parte, quise decirte tantas cosas, me abriste los ojos con todo lo que me escribiste ahí, me dolió tanto no poder disculparme porque tus papás nos prohibieron buscarnos,
tuve que guardarme todo lo que un día quise decirte -

- no tienes que callarlo más, dímelo, ahora estoy aquí, quiero escucharlo todo - dijo entusiasmada.
Mi corazón se lleno de regocijo al escucharla decir eso.

- ¿de verdad?, ¿aún te interesa escucharme?, ¿después de todo lo que pasó? -

- sí, quiero saberlo - dijo ella con una sonrisa que me brindaba paz.

Sonó el timbre, el receso se había acabado.

- me tengo que ir a clases, pero te lo diré todo después - le dije y me paré para irme.

- ¿quieres salir mañana y me lo cuentas todo? - me preguntó ella.

- ¿a dónde quieres ir? - le pregunté.

- vayamos al parque y hablemos ahí -

- ya se a cual parque te llevaré - le dije recordando el parque que estaba por mi casa.

- ¿ah si? -

- sí, nos vemos mañana Melody - le dije y me acerqué para tomar su mano y estrecharla.

- nos vemos mañana Ed - me dijo y caminé hacia las escaleras para ir a mi aula.