Atenea

Llegamos y Patrick me dijo que no había podido separar otra habitación el el Four Seasons

Osea es uno de los hoteles más grandes y no tiene habitaciones disponibles. Me pareció un poco raro pero tampoco podía ponerme exigente, me estaba pagando todo. 

Obvio a cambio de mi trabajo, pero creo que ningún sueldo puede pagarte 2 meses de hospedaje en el penthouse del hotel más renombrado.

Patrick

Mamá me enseñó a luchar por lo que quiero y mi primera carta jugada es lo de la habitación. El penthouse es enorme y podemos tener independencia. Hay una sola cama , pero es king y podríamos acomodarnos.

Si ella no quiere, me ofreceré a dormir en el sofá cama de la sala, aunque creo que mis ojitos de gatito apenado podrían convencerla de hacerme un lugarcito en la cama. Esa será mi segunda carta.

Espero no tener que agotar toda mi baraja de cartas sin siquiera conseguir un beso. Sé que un beso la podría hacer que me vea de otro modo. 

Una tarde después de tomar un aperitivo en el balcón de nuestro Penthouse le digo

-¿Sabes? - le digo - Todas las chicas de la oficina, del hotel y de la calle mueren por hablarme y acercarse a mí 

-Cuánta molestia y humildad - me dice irónica

-Pero hay un problema , la única chica que a mi me gusta solo rechaza estar cerca de mi

-¿No te habla? - me pregunta ella, no sé si se da cuenta y me sigue el juego o está más perdida que Dori

-Habla, pero no exactamente a mí, parece que hablara sola, se pregunta y sé contesta. Es demasiado autosuficiente.

-¿Y eso te intimida?, ¿La primera chica que no se pone nerviosa frente a ti? ¿Qué no tartamudea o piensa mil veces antes de hablar?

-Ella es demasiado segura pero eso la hace más atractiva. Me intimida su sensualidad. Es muy sensual y no lo sabe

-¿Y no has pensado que quizá no te da bola porque tiene a alguien?

-¿A alguien? Lo dudo. 

-¿No que era hermosa y especial? De seguro tiene a alguien

Ok. No me está entendiendo la indirecta. Tendré que hacer como el dermatólogo. Directo al grano. 

-Esa chica me encanta desde hace un buen tiempo, pero me ha pasado a la friendzone, vengo compartiendo con ella noches y días desde hace 2 semanas y han sido las 2 semanas más especiales de mi vida.

-¿Qué dices? ¿Y cómo yo no me di ni cuenta? ¿Tienes alquilado otro cuartito aquí para tus conquistas?

-No sé si es testaruda o se hace la desentendida, me le he insinuado muchas veces ¿Sabes?

-No sabría, quizás eres malo ligando. Puedes practicar conmigo - me sugiere

Atenea

No sé que hacer, Patrick creo que quiere declararme su amor, o bueno la atracción que siente por mi y yo solo estoy intentando que eso suceda.

Estoy haciéndome la que no entiendo y creo que es otra persona lo peor es que mi estrategia para alejarlo lo está haciendo que se aproxime más, lo veo venir, tomarme el labio inferior con el pulgar, mirarme profundamente y siento que me va a besar. 

Lo empujo con mis manos y evado su cuerpo 

Él voltea y me pregunta

-Perdón ¿Muy mandado?

-Si haces eso con la chica solo te ganaras una bofetada.

-¿Me enseñarías a conquistarla? - me pregunta y yo no puedo negarme. Fui yo la que le dio la idea. Pésima idea pensándolo bien.

Qué voy a hacer si lo veo intentar seducirme, lo estaría haciendo realmente sin necesidad de fingir, quiere llegar a mí, a mi corazón, aquel espacio en el que le tengo prohibida la entrada.

Los guardias de mi corazón tienen su nombre en la lista negra de los no recibidos. Porque mi cerebro dio la orden de no complicar las cosas.

Pero si quizás y solo quizás el dejarlo entrar no hace más que arreglar las cosas, disipar la tensión y fundirnos en un amor verdadero, en uno que sí podría funcionar. ¿No eran esos los planes de Teté? que nos diéramos esa oportunidad.