Es esperable que el tipo de relación que mantenga con cada uno de mis amigos sea diferente, lo mismo que pasa entre ellos. Si hablo de confianza Yuta se lleva el premio, pese a ser la última persona que conocí es al único que seria capas de contarle hasta de un asesinato, el me echaría la bronca y me haría entraría en razón, pero nunca me abandonaría. Yuta es mi cable a tierra, aquella persona estable que se que aunque pase el tiempo estaremos los dos, el puede contar conmigo para cualquier cosa y se que de necesitarlo siempre lo tendré a él. Incluso creo que puedo llegar a afirmar que conozco mas a Yuta que a Inui y Kokonoi.

Eso es porque Yuta habla mucho.

Por otro lado esta Watanabe, ¿Cómo lo describo? El es ese amigo que sin importa la estupidez que estes planeando se suma, en especial si la considera divertida, no mi amigo mas sensato, pero si el mas divertido. Hasta el momento creo que es leal, pero nunca hemos pasado por una situación que implique que tenga que ponerse de un lado u otro, en esos casos desconozco que pasara.

Luego esta Inui, que si fuera a definir con una palabra nuestra relación seria “hermanos”. El fue mi primer amigo junto a Akane, fue la primera persona fuera de mi familia que sentí que era cercano a mi y hasta el día de hoy es el que mas se preocupa por mi. Luego del incendio creo que una parte de el comenzó a sobreprotegerme y a ayudarme de ser necesario, por esta razón muchas veces debo recordarle que no soy una niña indefensa. Aun recuerdo cuando decidí seguirlo en los Black Dragon, no estaba nada contento pero acabo aceptando luego de demostrarle que podía y sabia pelear, aun así insistio en enseñarme algunos trucos y serciorarse que efectivamente sabia defenderme.

En resumen el es como mi hermano y mi amigo mas antiguo, pero creo que el que menos me conoce. Siempre me ah costado contarle algunas cosas, como lo de Kokonoi o algunas opiniones con respecto a mi vida, pero esto simplemente por el temor del como reaccionaria. Al igual que con Watanabe, no tengo idea de hacia donde se inclinaría la balanza de Inui ante un conflicto, se que quizas suene mal que piense asi de el, pero es testauro, terco y en ocasiones bastante severo. Todo esto lo conoci desde afuera, ya que nunca discuti con él pero es suficiente para temer por su reaccion a un error mio.

Y hablando de errores… por ultimo esta Kokonoi.

—No te tapes la boca, me gusta escuchar —decía en mi oído sin dejar de moverse.

Lo llamare error no tanto por nuestra amistad si no por aquello que estamos haciendo ahora. Con él las cosas son más complicadas que con cualquier otro, partiendo del hecho de que tengo una relacion de amigos con derecho y acabando en el detalle que he estado enamorada de el desde los 12 años.

—No quiero que me escuchen —dije entre jadeos en el oído de mi amigo, el cual estaba concentrado en la suave piel de mi cuello.

—Puedo encargarme de eso— parecía estar sin aliento y realmente no entendí a que se refería, hasta que acelero el ritmo de las estocadas al tiempo que acaparaba mis labios en un beso. Trate de mover mis manos para tocarlo (realmente quería), pero estas no se movieron de donde se entraban. Pude sentir como el agarre de Koko sobre mis muñecas se ceñía aun mas para que se mantuvieran sobre mi cabeza.

Esto me esta volviendo loca.

A Kokonoi lo conocí al poco tiempo de acercarme a Seishu y se podría decir que es mi otro amigo mas antiguo, y en si siempre se preocupo por mi, en especial despues del incendio en la casa de Inui. Ahora bien, el nivel de confianza que tengo con él es extraño, porque le permití verme desnuda o que conociera uno que otro gusto culposo, pero nunca me atreví a contarle todo lo que si soy capas de contarle a Yuta.

Por otro lado, nuestra forma de ser y de pensar es muy diferente, el es una persona calculadora en general, pero muchas veces suele arriesgarse bastante ya que llega a ser sumamente obsesivo con lo que quiere, muchas veses llegando al punto de mandar su seguridad por la borda. Lo considero una persona muy decidida, sabe lo que quiere y hace lo posible para conseguirlo. Y aquí entro yo, suelo ser mas cuidadosa o incluso miedosa al hacer algo, incluso si encuentro una forma de conseguir mi meta suelo revisar otras opciones, muchas veces también soy un poco mas leal, no sacrificaría cualquier cosa por otra. Aun así creo que en lo único que coincidimos los dos en que somos valientes, por que de una u otra forma nos vimos empujados a tomar riesgos y elegimos salir de nuestra zona de confort.

Aunque para ser sincera yo suelo evitar hacer esto ultimo.

—¿Puedo ir arriba?

—Me encantaría —contesto Koko mientras ambos nos movíamos para acomodarnos según mi petición, lo escuche gruñir al momento que comenzaba descender sobre el marcando mi propio ritmo—. Mas rapido por favor, asi —suplico con una sonrisa y totalmente agitado. Esta pose me gustaba, pero solía cansarme con rapidez, así que el siempre acaba ayudándome agarrándome de las caderas y haciendo algo de fuerza para que subiera y bajara con mas velocidad. Esta vez no fue la excepción.

Aun recuerdo como empezó todo esto, tenia 13 años y nuestro curso había organizado una especie de fiesta en la casa de uno de nuestros compañeros, en ese entonces Kokonoi, Yuta y yo estábamos en el mismo salón por lo que estábamos invitados. La pasamos muy bien, era divertido, en un punto empezamos los típicos juegos que uno ve en las películas y quiere imitar, como lo es el de verdad o reto. Era gracioso lo que algunos llegaron a hacer con tal de no responder una pregunta o recibir un castigo peor que el reto en si, Koko justamente fue capas de besarme a mi contal de zafar del castigo, la consigna era besar a la chica mas linda de la habitación y lo mas triste es que se que yo no entraba en esa categoría, no para él por lo menos, y lo se porque lo conozco (ahora que lo pienso era mejor besarme a mi que correr desnudo por la manzana).

Pese a todo esto, me agrado que él fuera mi primer beso, incluso si solo fue por obligación los sentimientos que tenia hacia el me hicieron valorar positivamente el momento. Los días pasaron y nunca volvimos a tocar ese tema, hasta que Koko me pregunto de la nada si podia volver a besarme. En ese momento quise saber el porque de esa petición antes de darle una respuesta y este simplemente me dijo que quería probar algo, que si no quería estaba bien, pero claro que quería y lo deje.

Idiota.

A partir de ahí es que inicio todo, días después de eso el volvió a pedir un beso y otro y otro, repitiéndose en varias oportunidades donde los dos nos encontrábamos solos. De un día para el otro el contacto de nuestros labios comenzó a durar más e incluso él comenzó a dejar de pedirlos y simplemente tomarlos, aunque debo aclarar que nunca me opuse o dije algo. Me gustaba. Luego se agregaron caricias, primero era en zonas especificas como la cadera o cintura, para despues pasar a ser cualquier parte que este al alcance, aunque siempre sobre la ropa, hasta que un dia de verano las prendas nos permitieron tocar mas de la que acostumbramos y nos gusto a ambos.

A si nos mantuvimos hasta que cumplimos los 15 años donde cruzamos la línea, lo hicimos por primera vez en su casa un día cualquiera que sus padres no estaban. Me gustaría decir que esto me agrado, pero la sensación que me quedo cuando paso el momento de pasión fue algo fuerte: tristeza, desilusion, dolor… me dolía mucho el pecho aquel día y acabe llorando. Me sentia... como mi madre, como un mero objeto para el deseo ajeno y no lo tolere, aqui es donde confirme que todo aquello que me recordaba a mi madre lo rechazaba, y por desgracia el sexo entraba en la lista, incluso si era con alguien que queria. Tampoco ayudo el hecho de que sabia que Kokonoi no se habia acostado conmigo porque me quisiera como algo mas.

Aquella vez estaba destrozada y Koko estaba asustado de sobremanera, no sabia que me pasaba y yo no le explicaba nada, ¿cómo iba a explicarle lo que me pasaba? Acabó abrazándome hasta que me calme y me pidió perdón, el pensaba que me había lastimado pero en realidad no hizo nada, era mi culpa porque yo deje que avanzara.

No volvimos a tener contacto durante mucho tiempo hasta que un día se volvió a dar. En esa oportunidad no me afecto realmente, aunque Koko si parecía preocupado ya que no paraba de preguntarme si estaba bien y yo le dije que si una y otra vez. Aquella noche le pregunte algo cuya respuesta sabia, pero necesitaba escucharlo de el <<¿Que somos?>>, no tardo mucho en responder y en aclarar que éramos amigos. Para ser sincera balbuceo mucho y se notaba que no sabia que decirme, pero lo entendía y lo aceptaba, se que solo soy una vía de descarga para el, que el acostarse conmigo lo relaja, lo se porque despues de hacerlo habitualmente se quéda conmigo y comienza a contarme aquello que le agobia.

Si bien con el me gustaría tener algo más que una amistad, soy consiente que hasta el día de hoy el sigue queriendo a Akane, que incluso sin decirlo y pese a ser poco sano, el piensa en ella y yo lo acepte.

¿Por cuanto tiempo lo toleraras?

Realmente no lo se, por le momento dejo de molestarme acostarme con él, lo disfruto y muchas veces lo llego a anhelar, pero se que tarde o temprano el dolor crecerá y ya no lo tolerare, ahí será el fin de esta amistad con derechos. Pero por ahora solo me dejare llevar y vere hasta donde llega esto.

¿Te das cuenta que esto terminara mal?

Si, lo se, pero no se como pararlo sin que eso empiece, por esta razón es que tambien deje que siguiera… soy una tonta, a veces me arrepiento de haberle dicho que si a ese beso, a veces me arrepiento de haberme fijado en él teniendo millones de opciones. El quererlo duele, mi cerebro no razona bien cuando se trata de él y eso me molesta.

—Parece que hay un traidor dentro de la pandilla —escuche decir a koko, aunque me costo entenderlo ya que mi cuerpo amortiguo su voz.

Habíamos terminado hace un tiempo y nos encontrábamos vestidos descansando en mi cama, o bueno yo estaba vestido a él le faltaba la camisa. Debo recocer que la pose en la estaban me gustaron, yo me encontré boca arriba con Koko casi encima mío abrazándome por el pecho y su rostro en el hueco de mi cuello, era curioso que siempre buscara esa cercanía conmigo.

—Hay algunos sospechosos, pero hay que investigar bien —giro su rostro hacia mi, quedando su cabeza debajo de mi mentón, mientras que con mi mano le hacia una especie de mimos en el pelo —Taiju no esta nada contento con esto, aun me sorprende que no matara a los sospechosos.

—¿Por eso estabas estresado? —me sentí un poco cansada y creo que bastante relajada, por lo que mi voz sonó mas apagada de lo que me hubiera gustado

—Algo así, hay mas cosas en realidad, el tener que encargarme siempre de limpiar lo que hace la pandilla está agotan

La charla se extendio mas de lo que pensé, no se cuanto tiempo estuvimos así pero en algún punto invertimos posiciones y yo acabe recostada sobre el usando su pecho como almohada, mientras el dibujaba con los dedos formas en mi espalda. Cuando el se ponía así de mimoso mi mente solía engañarse y pensar que éramos una pareja.

Patético.

Lo se, es un poco patético pero que puedo decir, igualmente no duraba tanto esa mentira ya que casi automáticamente me repetía que las cosas eran totalmente diferentes y que todo eso solo es productor del estrés y las hormonas alborotadas. Somos adolescentes.

Pese a esto lo disfrute, la situación me había ayudado a olvidar mis problemas y me sentí tan cómoda que casi me quedo dormida sobre el, pero el sonido de la puerta abriéndose me hizo saltar del susto (¡¿que carajo, no tenia seguro?! ).

—¿Yuu podes teñirme el pelo? Ya tengo raic… —nunca en mi vida me levante tan rápido de la cama como en ese momento, es mas Koko también salto del susto y acabo en el suelo.

Observe a Yasu parado en el umbral de mi puerta mirándonos fijamente y con los ojos bien abiertos por la sorpresa. Mierda se puso colorado, seguramente yo también lo estaba.

—Mejor vuelvo despues, perdón —y se fue sin mas como alma que lleva el diablo.

Suspire para luego insultarme mentalmente por no cerrar yo la puerta, seguramente entre el calor del momento Koko pensó que lo había hecho pero en realidad no. Hablando de él, lo busque con la mirada para encontrarlo aun tirado en el piso y tapándose la boca para así sofocar las carcajadas que la situación le produjo. Estaba por decir algo al respecto, cuando escuche la puerta abrirse nuevamente y observe a Yasu asomar su cabeza por ahi.

—Cúbrete el cuello, tienes varias marcas —acto seguido volvió a salir del cuarto.

—Hijo de —no termine la frase y me acerque al espejo para confirmar lo dicho por mi hermano— ¿Que dijimos sobre dejar marcas en el cuerpo del otro? —fije mi vista en el causante de mis chupones, el cual parecía no notar mi enojo ya que ni siquiera me estaba viendo.

—Es la venganza —dijo una vez que logro pararse del suelo —.La ultima vez me arañaste la espalda —parecía divertirse con la situación y eso solo hizo que ciñera mas mi ceño —tómalo como el karma.

Su tono cargado de burla y la sonrisa que acompañó esas palabras me indignaron, al punto de acercarme para propinarle una piña en el estomago. No use mucha fuerza, pero si la suficiente para que este se encorvara y se apretara la zona. ¿Ahora quien se rie?

—No es lo mismo animal, lo tuyo no se nota —por si no le quedará claro que aquello no me pareció nada bonito —para la próxima voy a hacer lo mismo a ver si te gusta.

—Siempre me gusta que me muerdas — pese al dolor que habra estado sintiendo en el estomago el insiste en reírse y mas me enojaba.

Maldito pervertido fetichista de mierda.

Luego de este pequeño momento… vergonzoso, Koko acabo de vestirse y se marcho antes de que mas personas llegaran a casa. Me resulto gracioso que se llevara el libro que estaba leyendo, yo pense que no le habia gustado y que lo uso de escusa para venir, pero realmente lo queria terminar.

¿Por qué este detalle me gusta tanto? 

Suspire antes de salir de mi cuarto y afroqntar lo inevitable: Yasu. No estaba en el comedor por lo que solo me quedo revisar en su cuarto y ahí estaba el, recostado en la cama con su celular, trate de decir algo para excusarme por lo ocurrido, pero él hablo primero.

—No vi nada —menciono sin quitar la vista del teléfono — ¿Podrías teñirme el pelo? Ya tengo raíces y yo siempre me las hago mal.

Mi hermano es el mejor . Se que realmente no vio la gran cosa, pero no quería que mencionara nada a Maja o Aome ya que podría malinterpretarse (para otros creo que encontrar a tu hermana recostada sobre un chico sin camisa da a entender que quizás paso algo).

En fin, le dije que si y fuimos al comedor para poder hacerlo mas cómodamente. Como había mencionado, todos mis hermanos tienen este detalle del piebaldismo, en el caso de Yasu la mitad de su pelo es blanco y suele teñirlo, especialmente porque se nota mucho al llevarlo largo (me encanta como le quedan los moños altos).

Al cabo de un rato fueron apareciendo los demás comentando lo que hicieron y comencé con los preparativos de la cena, no había señales de Akane pero era normal por el horario, sin embargo cuando aparecio despues de las 11 de la noche con un semblante decaido y al borde del llanto me preocupe. Iba a preguntar el porque de su expresion, pero ella hablo antes de que pudiera hacerlo.

—Mi papá tuvo otra hija, hoy nació —no estaba llorando, pero no era necesario verlo para saber que queria hacerlo —.Mi media hermana, se que si no fuera por mi muerte el estaría con mi mamá y tal vez esa bebe hubiera sido mi hermana

No sabia que decir, solo me quede en silencio esperando a que continuara o me diera alguna pista de como reconfortarla (ahora que lo pensé no podía abrazarla o tocarla, solo hablar ).

—Extraño a mi familia, mi vieja vida…Yuu quiero irme de una vez ya no lo tolero.

La tristes que trasmitía, el deseo de realmente querer encontrar la paz me generaron tanta lastima, tanta pena por ella y pensé que si yo estuviera en su lugar no vería la hora de irme. Toda esa presión que sentí antes por este tema volvió, pero en esta oportunidad estaba mas decidida, el miedo o las dudas seguían ahí pero esta vez las ignoraba

Tengo que hablar con ellos.