#2
-Ivette, que bueno que viniste- dijo Marcus, emocionado.
Lo quería mucho, es mi mejor amigo y somos inseparables.
-No me perdería esta fiesta por nada- le dije.
-¿Vamos?, quiero enseñarte un lugar- dijo tomando mi mano.
-Pero la fiesta y tus invitados- dije dudosa- No creo que debamos irnos..
-Será sólo unos minutos, anda- me jalo hacia su otro jardín.
Marcus, vivía en una mansión enorme y cuando iva a su casa imaginaba que estaba en un castillo. La fiesta era en el jardín trasero, pero el terreno era más grande y lo dividieron en dos jardines y un establo, para los caballos. Marcus, me llevo a un pequeño vosque y paramos en un enorme árbol.
-Ya llegamos!- dijo y yo enarque una ceja. Era un hábito mío, levantar una ceja cuando estoy confundida.
-Un árbol- dije sin importancia.
-Mira hacia arriba- dijo con una sonrisa traviesa. Levanté la vista para ver en la copa del arbol entre las ramas una casa del árbol. Las comisurasde mis labios se alzaron creando una sonrisa de mi parte- Es una casa del árbol, papá la mando a construir para mí. Vamos a subir- dijo y subimos por unas escaleras pegadas al tranco son árbol. Ya arriba suspire, encantada. Mire el lugar y tenía un sofá, estanterías con juegos de mesa y juguetes en un rincón. Al lado del sofá avia un espejo enorme con luses de Navidad adornandolo. Me quedé mirando mi reflejó.
El vestido de fiesta que eligió mi madre era hermoso, pero me avia despeinado el cabello al trepar asta aquí. Ñee, sigo siendo hermosa.
-Te gusta?, mandé a que lo pusieran porque quería invitarte a venir- dijo el castaño, refiriéndose al espejo- este será nuestro refugió, genial verdad- se acercó a mi para abrazarme y yo le correspondí. Aún abrazados mire nuestro reflejo por el espejo, seguía estando hermosa...como siempre.
...11 años despues...
Me levanté a regaña dientes porque el bendito despertador no dejaba de sonar. Me dirigí al baño para prepararme para el Instituto. Me puse el uniforme pero como siempre, en vez de usar medias y corbata azules, que son los colores originales, me puso un lazo fino rosa en vez de la corbata y unas medias largas del mismo color.
Total, no me dirán nada, todas las chicas usan colores diferentes para verse mejor en el pedazo de costal, que el director considera como "uniformes".
-Ivette, tu padre está en la entrada para llevarte a la escuela- dijo mi madre, hablando por el celular. Yo sólo asenti con la cabeza.
Odiaba que mis padres se hayan divorciado, pero e aprendido que son cosas que pasan en la vida.
Salí de casa y me subo al coche de mi daddy para que me lleve al Instituto.
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