Era un día fresco, con la cantidad necesaria de sol pero sin llegar a molestar y con el viento soplando para crear una brisa demasiado refrescante para poder relajarse mejor, a pesar de este clima tan agradable que se presentaba hoy, mi ansiedad estaba al máximo- Tienes que relajarte un poco, hermanita... Todo saldrá bien- Dijo Dexter aun con la mirada fija en el camino- Claro, tu suegros te adoran, a mi me tienen como "El capricho de Apple" -Todo comenzó hace una semana.

    Ese día Apple había amanecido en mi dormitorio ya que... Pasamos la noche anterior juntas, mientras yo aún seguía durmiendo ella se encontraba en la cocina preparando el desayuno, por el aroma de la comida mi compañera se despertó y dirigió su camino hacia la cocina para ver de dónde provenía ese exquisito aroma- Buenos días Daaa... ¿Apple?- Dijo Rosabella con un poco de confusión al ver que se encontraba la rubia en la cocina, vistiendo nada mas con una de mis sudaderas que le dejaban un poco por debajo de las caderas- Buenos días Rosabella, te prepare el desayuno, Darling dijo que eras vegetariana pero no quería arriesgarme así que los prepare veganos- Dijo dejando un plato de panqueques frente a ella- Muchas gracias, Apple- Tomo un tenedor para poder coger un bocado de su comida, el cual degusto con mucho entusiasmo- ¡Están riquísimos!- Dijo para llevar otro trozo a su boca- Me alegro que te gustara, guarde un poco de mezcla en la nevera por si querías preparar mas luego- Dicho esto tomo los que había preparado para mi al igual que dos vasos de jugo y los coloco en una charola para llevarlos a mi habitación- ¡Si terminas con Darling deberías de salir conmigo!.

    Abrio la puerta con cuidado de no despertarme, fue mas o menos sencillo para ella dado que dejo la puerta entrejunta, con cuidado dejo la bandeja en mi escritorio y se fue acercando a mi cama- Darling... Amor despierta...- Ya para ese momento me había despertado pero preferí seguir fingiendo un rato mas- Mmm... Cinco minutos mas...- Sentí que esta vez me movió un poco, tratando de despertarme, pero como estaba un poco mas atenta a lo que hacia, la tome del brazo jalándole un poco para que cayera en la cama conmigo, a pesar de sus protestas, le abrace dejando mi rostro entre su hombro y cuello- Te ves hermosa con mi sudadera... Me dan ganas de repetir lo de anoche...- Dije dándole un beso en su cuello a lo cual ella dio un pequeño salto por el asombro.

    Luego de estar un rato así me dispuse a comer ese delicioso desayuno que me había preparado mi linda catira- ¿Te gusta?- Pregunto al estar sentada junto a mi dando un mordisco al trozo que se llevaba a su boca- Por supuesto, está muy bueno...- Dije después de tragar para seguir comiendo, ella solo me dedico una sonrisa y un beso en la mejilla- ¿Sabes? Hay algo que tengo que preguntarte- Su forma de decirlo fue un tanto... Como si en vez de querer preguntarme algo es más como si quisiera pedirme algo- ¿Estarás libre el próximo fin de semana?- Tal vez una señal de que algo no iba como debía es que me hizo ojitos de perro al preguntarme- Pues... No tengo planes ni entrenamiento, así que creo que estaré libre- Fui sincera, no tenía nada planeado al menos que las locas de mis amigas me arrastraran a algo- Excelente ¿Te gustaría ir a pasar el fin de semana en casa de mis abuelos? Irían mis padres y también estarán Dexter y Raven- Ok... Allí estaba el problema, no es que le tuviera miedo a su familia, sus abuelos eran increíbles, la señora Evelyn nos sacó de apuros muchas veces y su abuelo siempre era alguien muy animado para su edad, el problema eran sus padres... Su papá no tanto pero su mamá... Era tan intensa como la mía y después de todo lo ocurrido sabía que yo no era precisamente de su agrado.

-Oye, pero al final accediste a venir, así que debes de tener una buena razón- Dijo el chico de lentes al girar en la intersección, ya estábamos casi llegando a la casa de los abuelos de Apple- Claro, es más que probable que sea yo la que se case con Apple, no me mal entiendas... Quiero hacerlo pero es casi seguro que eso le dé un infarto a su madre- Me recline en el asiento esperado por llegar- No te preocupes, todo saldrá bien, confía en mi- Dijo revolviendo mi cabello como suele hacerlo para poder bromear conmigo.

    La casa de Raven era un lugar especial para todo nuestro grupo de amigos, en caso de cualquier reunión ella era quien prestaba su hogar como lugar y su madre era verdaderamente un amor de persona con todos nosotros, como la vez en que nos quedamos atorados en el trafico cuando regresábamos de la playa y la señora Evelyn dijo que nos quedáramos a dormir en su casa, al día siguiente el señor Marcus nos tenía preparado una parrilla en el jardín... Esa lugar tenía tantos recuerdos para nosotros, no logro si quiera imaginar la cantidad que deben de tener esa familia para ellos mismos- Descuida, todo saldrá bien- Dijo mi hermano con una de sus sonrisas típicas, algo que caracterizaba a los Charming, era su encanto natural y aunque muchos digan que su sonrisa no es la típica de nuestra familia, para mi es lo mas reconfortante que hay- Gracias...- Quien nos recibió fue nada mas y nada menos que la señora Evie, estaba vistiendo unos jeans con una camiseta negra, su estilo era acorde a su edad y le dejaba ver que no le afectaban los comentarios ajenos.

-¡Si son mis Charming favoritos!- Grito antes de emoción antes de darnos un fuerte abrazo a los dos y al separarse me dio un beso en la frente- Pero miren como está, esta princesa... Creciste desde la última vez, ¿Verdad?- Solo pudimos dar una leve risilla mi hermano y yo, pues la última vez que la vi, fue este verano antes de entrar a la universidad, nos llevo hasta el interior de la casa, pasando hacia la sala de estar donde se encontraban, mi suegro y el abuelo de Apple, este último un señor mayor con un pequeño bigote blanco, arreglado y las mejillas algo sonrosadas, por otro lado mi suegro era un hombre de cabellera rubia, ojos azules y con una contextura promedia; típico estereotipo americano- ¡Si son mi dúo de hermanos preferido!- Dijo el señor Marcus con entusiasmo, dejando su vaso en la mesita de centro y levantándose para poder saludarnos, a mi hermano con un fuerte apretón de manos y un abrazo (Espero llevarme así de bien con mi suegro), mientras que yo recibía un fuerte abrazo.

-Espero que Raven los esté tratando bien a los dos, porque si no va a tener unos cuantos problemas- Dijo en un tono bromista- ¡Papá!- Dijo la mencionada un tanto fastidiada al entrar en la habitación, se acercó a nosotros para depositar un tierno beso en la mejilla de mi hermano, aprovechando que ellos se quedaron hablando con el señor White, trate de acercarme al padre de mi novia, no es que no conociera de antes al señor, es que... Bueno, ahora era mi suegro y es un poco más complicado de lo usual, es decir, Apple y yo podríamos estar comprometidas.

-Buenos días Señor Prince- Dije extendiéndole la mano para poder estrechar la suya, este no se levantó de su asiento, simplemente dejo su vaso de lado y en con un semblante serie me dio un apretón de manos algo firme- Es un gusto verla, señorita Charming- Ok, aparentemente si me odio, nunca me llamo de esa forma, siempre que se refería a mi como Darling- ¿Cómo van las clases?- Pregunto nuevamente para después volver agarrar su vaso- Bien, señor... A veces se pone un tanto ajetreado al final con los exámenes y los entrenamientos, pero no he tenido ninguna baja- Mis plegarias por ser salvada de esta situación fueron escuchadas cuando Raven me pide que le acompañe a la cocina.

- No tienes porque ponerte tan nerviosa- Dijo la chica gótica mientras me llevaba al lugar donde estaban las demás- De todas formas tu mamá me odia pero eso no evita que este con tu hermano- Muy bien, eso no me ayuda para nada... Que no me ponga nerviosa con que me odien y tú me dices eso, es como darle carne a un vegetariano.

-¡Darling!- Mi linda princesa se levantó desde donde estaba, acercándose a mi para rodear mi cuello con sus brazos y darme un pequeño beso en los labios, demasiado corto para mi gusto, pero teniendo en cuenta que su madre estaba allí presente no esperaba que lo hiciera- Me alegra de que hayas venido- Dijo sonriendo de una forma sincera, me acomode para poder sacar de la bolsa que traía el pequeño ramo de flores que traía para ella... Pero estas se habían aplastado un poco, creo que por tantos abrazos o por el hecho de que las guarde en aquella bolsa sin pensar bien antes.

-Te traía unas flores pero... Creo que se dañaron con el viaje- Dije un tanto nerviosa a lo cual ella solo dio una leve risilla- No importa mientras sean de tu parte- Tomo el ramo con delicadeza a pesar del estado de estas.

-Parece que eso fue algo muy descuidado para una dama, señorita Charming- Dijo la señora White que se encontraba quitándole la piel a unas papas, en la mesa, los abuelos de Apple no tenían empleados domésticos en su casa porque creían que era mejor realizar esas actividades ellos mismos.

-No seas tan mala con la niña, tuvo un lindo gesto- Intervino la señora Evelyn mientras sacaba algunas cosas de la nevera, rebusque en la bolsa sacando una pequeña caja de chocolates blancos y extendí la mano hacia la señora White.

-Este... Le traje este presente, recordé que son los que les guste y pensé que... Sería un buen regalo- Ella me miro de forma sería, tomo la caja y la dejo a un lado en la mesa, por un momento creo haber escuchado un "gracias" de su parte, pero estaba casi al borde de ser un suspiro, así que no estaba del todo segura.

    Apple regreso a la labor junto a las demás personas allí presentes, justo cuando me iba a unir a ellas, el señor Marcus asomo su cabeza por la entrada seguido de mi hermano- Darling, estare con Dexter resolviendo un problema del servidor y Prince se quedara solo ¿Podrías ayudarlo con la parrilla un momento?- Ok, aquí estaba mi suegra que me odia pero al menos me hacía compañía, una de mis mejores amigas, mi novia y una de las madres más chévere de todas... Por otro lado estaba mi suegro que si estaría sola con él, de igual manera no quería decepcionar al señor Marcus así que...- Por supuesto- Dije pasando a un lado de él, para dirigirme hacia el patio donde ya se encontraba el hombre rubio junto a la parrillera, vi la botella de queroseno en el piso, la tome y camine hasta él.

-Aquí tiene- Dije al entregarle el envase, el cual tomo y comenzó a esparcirlo sobre el carbón, cerrando de nuevo la rejilla y prendiendo con el encendedor- Muchas gracias, lo estuve buscando un rato, pero no pude encontrarlo- Empezó a regular la temperatura de la llama, hasta que quedo en un punto estable- ¿Has hecho parrilla así antes?- Me pregunto al tomar uno de los trozos de carne que ya estaba marinada y con los condimentos necesarios- Si, señor... Cuando iba a la playa con mi papá y las veces que iba de viaje con los chicos- Dije ya un poco mas calmada, mientras él terminaba de colocar los trozos de carne- Mi papá solía llevarme de campamento cuando era pequeño, hacíamos una fogata y con una cacerola preparábamos el almuerzo... Recuerdo un verano en el que íbamos de pesca y no conseguimos ningún pescado, de regreso a casa pasamos por una pescadería y compramos un par de atunes para llevarle a mi madre... Sé que se dio cuenta de lo que hicimos, pero aun así los preparo como si no fuera verdad.

-Y... ¿Se divirtió a pesar de eso?-Le pregunte, acercando las pinzas a uno de los trozos de carne para darle la vuelta.

-Por supuesto, para mi pasar el tiempo con mi padre era lo mas importante, llevar un atún a la casa era algo de segundo plano... Mi papá me enseño que vale mas el tiempo que pasas con las personas que quieres que los planes- Sonreí un poco al recordar como fue que le pedí noviazgo a Apple- ¿Me entiendes?

-Si... Cuando le pregunte a Apple si quería ser mi novia fue un tanto cómico, tenía todo el día planeado pero no salió como esperaba... Así que nos quedamos en su cuarto viendo una película y se lo pregunte allí...- Sentí como el color subía a mis mejillas luego de recordar ese momento- Sé que pude esperar en otra ocasión pero debía de verla, sus ojos hipnotizan a cualquiera y su sonrisa es tan...- Al recordar con quien estaba hablando, voltee la cabeza para verle, ese hombre que tenía un semblante serio desde que llegue, ahora mostraba una sonrisa genuina- Lo lamento... No quise divagar tanto...-

-Descuida, no me molesta...- Dejo de lado las pinzas para que la carne se cocinara bien por el otro lado- ¿Tu en verdad amas a mi hija?- A pesar de que su pregunta me sorprendió un poco, no dude ni un momento en responder aquello- La amo con todo mi corazón- Nuevamente otra pregunta que me sorprendió de su parte- ¿Me aseguras de que ella estará bien contigo?- Hasta yo me había hecho esa pregunta incontables veces, cuando solo podía mirarla desde lejos sin acercarme a ella- Le aseguro que siempre la protegeré y amare como no se imagina, no puede asegurarle que no tendremos problemas a futuro o que no pelearemos, porque esto es la vida real y no un cuento de hadas... Pero no nunca la lastimaría con intención y siempre estaré allí para hacerle de apoyo en las buenas y las malas... Sé que aún hay muchas personas con prejuicios, entre ellas mi propia madre, sin embargo no dejare que le hagan daño- el señor Prince, se acercó a la hielera, saco una lata de refresco y otra de cerveza, me entrego la de refresco y abrió la otra lata para darle un sorbo.

-Seré sincero contigo, no me enloquece la idea de que mi hija salga con una mujer, me crie en una época donde las personas con esos gustos eran repudiadas como no te imaginas, donde era mal visto que una mujer fuera madre soltera o que hiciera deportes, en aquella época se hubieran vuelto locos al ver que tome el apellido de mi esposa... Pero sinceramente eso no me molesta, digo, me impacto un poco el momento en que ella nos dijo que se enamoró de ti y que si se iba a casar Charming debías ser tu...- Me encanto escuchar eso último, realmente sería más lindo si fuera de parte de mi rubia pero eso será a su tiempo- Sin ofender a tu familia ni nada, pero en verdad odiaba la idea de que Daring se casara con mi pequeña... Y tus respuestas, fueron realistas, no quiero alguien que pinte ilusiones a mi hija y le rompa el corazón, quiero alguien que le ame y no le haga daño... Así que por mi parte tienes permiso de salir con mi hija- Extendió su lata a lo cual yo respondí chocándola con la mía.

-Muchas gracias señor- Tome un sorbo de mi lata y luego la deje a un lado.

-Y... ¿Te gusta jugar béisbol? A Apple le gustaba de pequeña, de hecho estuvo en una liga pero lo dejo porque a mi esposa no le gustaba la idea de que su única hija, practicara un "deporte para niños", ella estaba devastada cuando la sacamos de eso... Pero no hubo manera de convencer a su madre que cambiara de opinión.

-La próxima vez que estemos libres, la llevare a jugar al parque.

   En esa tarde conseguí la aprobación de mi suegro, pude tener una conversación tranquila y nada incomoda con él, además de que la carne nos quedó de maravilla.

-A ver di "Ahhh"- Mi adorada novia acero un tenedor con un trozo de carne hacia mi boca, seguí su orden como me dijo, me gustaba que ella me diera de comer de esa forma, no éramos el centro de atención, porque su abuelo estaba hablando animadamente con la señora Evie, acerca de cómo mi hermano le había salvado la vida y Raven se encontraba un poco avergonzada, mientras que mis suegros se encontraban hablando entre ellos.

    Me encanto poder pasar este día así con ella, rodeada de ese ambiente familiar tan bonito y tranquilizador, me hubiera gustado poder incluir a mi padre en esto también, pero creo que eso será más a futuro, pero poder estar así por ahora era más que suficiente, tal vez algún día estaré junto a mi rubia en una casa, con niños correteando por todos lados, mientras asamos una carne y luego terminamos jugando a la pelota en el patio- Darling, ¿En que piensas?- Pregunto Apple al verme con la mirada un poco distante.

-En que, quiero llevarte a un parque que conozco...- Dije al darle un tierno beso en la mejilla.

La próxima vez, iría a jugar béisbol con ella.