Peter se había quedado dormido en su silla al estar esperando a Harry, ya que éste aún no venía, se quedó dormido casi media hora después de que su novio entró al laboratorio.
Peter estaba cansado, no había dormido muy bien que digamos, perdió la noción del tiempo, y más porque no revisaba su teléfono para saber qué hora era en el momento.

1 hora inmedia después, Peter despertó, ya que sintió que alguien le acariciaba el cabello.

Era Harry.

Peter al estar bien despierto, miró a su amigo sonriendole.

Peter al ver a Harry feliz y enfrente de él, supo de inmediato lo que esto significaba.

Harry: ¿Cómo me veo?

Peter: Ya no tienes ojeras, ya no te ves tan emo como antes.
Ahora sólo falta exponerte al sol.

Ambos se echan a reír ante el comentario.

Funcionó por completo, la sangre de Peter salvó la vida de Harry, todo salió bien.

Peter se levantó de la silla y miró a Harry una vez más.

Peter: ¿Cómo te sientes ahora?

Harry: Pues, siento un poco de dolor en el brazo, pero eso es por la aguja de la inyección, nada grave.

Peter: Me alegra saber que estás muy bien ahora.

Harry: Gracias a ti, estoy bien.
Salvaste mi vida.

Peter: Haría lo que sea por ti Harry.

Harry: Lo sé Peter.
Fue algo loco lo que hiciste.
Pero fue muy lindo.
Te amo.

Peter: Yo también te amo, Harry.

Ambos se acercaron para darse un beso, un beso codicioso, sólo queriendo más de los labios del otro.
Los labios de Peter sabían a chocolate y los de Harry sabían a vainilla.

Fue un tierno momento para ambos.
Pero a pesar de que querían ir más lejos, Peter tuvo que irse a casa, ya que su Tía May puede estar muy preocupada por él, así que se despidieron y Peter volvió a casa.

Al regresar a casa, Peter llegó, saludó a su Tía May, le explicó porqué llegó algo tarde esta vez y la Tía May lo dejó pasar por esta vez, nada más porque Peter le dijo todo sobre lo que le había pasado a su amigo Harry, claro, omitió la parte de la sangre del Hombre Araña.

Más tarde, Peter se preparó para dormir, se sepilló los dientes, la cara, apagó la luz y se fue a la cama.
Pero en eso, Peter no pudo evitar pensar en Harry, rogando internamente que no tenga algún efecto secundario o algo parecido por causa de su sangre.
Aún estaba algo herido después de lo que sucedió más temprano, y en verdad tuvo una gran suerte de que todo haya pasado para así salir bien con Harry con las mentiras.

Sí le sacaron sangre, pero, fue El Hombre Araña quien le pidió a la médica que lo hiciera, y cuando ya lo había hecho, éste la tomó y salió de la escena.

Peter trató de no pensar mucho en ello, ya que trataba de convencerse así mismo de que todo iba a estar bien, Harry iba a estar más que bien.

Peter se temía una que otra cosa que podría llegar a pasar después, tanto como Peter Parker y como El Hombre Araña.

Al final, Peter se quedó dormido casi a media noche, logrando consolar el sueño finalmente y dejando de pensar mucho en eso.