Pov. Narrador..........................

Ya era de noche, el cielo estaba algo despejado, dejando ver una que otra estrella en el cielo con la luna llena y brillante.

Harry aún se encontraba en OSCORP, éste estaba en la misma sala de conferencia que estuvo con Peter más temprano.
El chico estaba viendo algunas noticias en su tableta sobre El Hombre Araña, siendo un héroe todo el tiempo, salvando a la ciudad como de costumbre y ayudando a la gente.

Harry estaba enfocado leyendo noticias tras noticia y viendo las fotos, que no se había percatado que en algún momento, empezó a llover afuera.

Harry estaba bastante concentrado viendo esas fotos del héroe arácnido, preguntándose cómo habrá entrado y haber sido picado por una de las arañas de OSCORP.

En eso, algo lo sacó finalmente de su trance en su tableta.
Su teléfono estaba sonando.
Harry al despertar y volviendo a la realidad, se percató de que afuera estaba lloviendo.
La razón de porqué no escuchó la lluvia es porque todo el edificio de OSCORP tiene ventanas de cristal que impiden escuchar todo lo que está pasando afuera.
Harry tomó su teléfono que lo tenía en su bolsillo, viendo quién lo llamaba.
Era Peter.

Harry inmediatamente contestó y puso su teléfono en la oreja para hablar con su amigo.

Harry: ¿Peter?

Peter: Estoy afuera del edificio OSCORP, lo conseguí.
Tengo la sangre del Hombre Araña.

Harry al escuchar eso, abrió los ojos.
Su esperanza estaba más cerca, estaba más cerca de poder hacer lo que quiere hacer.

Harry: Voy para allá.

Harry colgó el teléfono y lo guardó en su bolsillo, antes de salir corriendo de la sala de conferencias e ir hacia la entrada del edificio OSCORP a recibir a Peter.

Harry corrió como el diablo hacia abajo para dejar entrar a Peter y éste ayudarlo.

Ya ahí, Harry abrió la puerta transparente y dejó entrar a Peter rápido, jalandolo del brazo izquierdo hacia adentro.

Cuando Peter ya estaba adentro, Harry notó lo siguiente en su amigo.
Peter estaba empapado, incluso su cabello, como si se lo hubiera lavado justo en ese momento. También, notó que Peter traía un maletín, uno pequeño pero se veía que era uno especial.

Peter: Tardé mucho, pero aquí está.
Dentro de este maletín está la sangre del Hombre Araña.

Harry estaba feliz por esto, ansioso por poder tener su cura.
Pero en eso, sintió que algo no cuadraba bien.

Harry: ¿Cómo la conseguiste?

Peter: 2 horas después de que te vi, el Hombre Araña salió a enfrentar a unos asaltantes.
Estos traían armas, en un momento en la pelea hirieron al Hombre Araña, pero él pudo atraparlos sin problema.
Pero necesitó de primeros auxilios.
Alguien había llamado a una ambulancia para él, así que en un momento que le sacaron sangre, pude escabullirme y la tomé.

Es cierto, Harry había leído esa noticia hoy mientras estaba en la sala de conferencias, leyó sobre la noticia, pero no pensó que su amigo aprovecharía la oportunidad.

Peter: Lamento la tardanza, pero pude cumplir mi palabra como dije.

Harry miró a Peter y le sonrió, agradeciéndole mucho por lo que ha hecho por él.

Harry: Gracias Peter.
En verdad, muchas gracias.

Peter: Haría lo que sea por ti.

Ambos se sonrieron de forma dulce.
Pero en eso, Peter bajó la mirada, luciendo ahora algo triste, causando algo de preocupación en Harry.

Peter: Harry.....
Sólo... Quiero que sepas que.....
Pase lo que pase, después de que te inyectes la sangre del Hombre Araña......
Quiero que sepas que.....
Te amo.....
Yo........
Yo jamás olvidé nuestra promesa de niños.
¿La recuerdas?

En ese momento, Harry al escuchar lo que dijo Peter, recordó la promesa que hicieron de niños.

Harry lo miró y le sonrió, acercando su mano a la mejilla de Peter y empezando a acariciarla.

Harry: Claro que la recuerdo.
Yo tampoco la olvidé.
Jamás olvidé esa promesa.
Y jamás la olvidaré.

Peter miró a Harry y le sonrió nuevamente.
Ambos, se acercaron, acercaron sus rostros, sus labios para así unirlos, dándose un beso, un dulce y bello beso de amor, un amor que han tenido desde niños, un lindo amor inocente.

Sé besaron de forma dulce y agradable, suavemente con amor, estando así por un buen rato.

Ambos se separaron del beso, dejando un hilo de saliva entre sus lenguas uniendolos.
Ambos tenían sus frentes pegadas al otro, disfrutando del momento.

Harry: Te amo.

Peter: Yo también te amo.
Pase lo que pase, estaré contigo.

Harry le sonrió aún más a Peter, mirándolo a los ojos, sabía que Peter estaría dispuesto a lo que sea con él.

1 hora después, Harry obtuvo acceso a los laboratorios y entró para hacer lo que tenía que hacer. Peter se quedó la sala de espera a su novio, rogando internamente de que todo saliera bien.
Pero ahora, sólo quedaba esperar.