Narrador Obi-Wan:

Ya han pasado años desde que decidí ser el maestro de Anakin Skywalker, mi antiguo maestro Qui-Gon creía que él es el elegido y a pesar de mi anterior escepticismo, yo debo admitir que el chico se ha convertido en una excelente persona y me siento muy orgullosa de él. Su capacidad intelectual y se creatividad son impresionantes y no podría estar más orgulloso de él, pero el consejo no aprueba sus métodos y por más que intento que se adapte a nuestras reglas.... Anakin...es un niño que quiere ser libre de expresar su opinión y la verdad no lo culpo, a mí casi me destierran al AgriCorp de no ser porque Qui-Gon me aceptó bajo su tutela.

Hoy Anakin ya es un adulto de 19 años y ya está listo para las pruebas con su talento....pero hay algo que le falta y eso es...aprender a soltar sus lazos....no digo que no pueda ver a su madre, por la Fuerza...el chico vivió 9 años con ella..pero la vida de esclavo te hace posesivo de las cosas que tienes y desafortunadamente, si Anakin quiere ser un Jedi, debe aprender a dejar ir lo que quiere para poder estar en paz con él mismo. También me preocupa su salud mental, desde hace tiempo ha tenido pesadillas de su madre sufriendo y por más que quisiera ir con él a ayudarlo, el consejo le daría más pretextos para no hacer sus pruebas y la verdad es que el chico se merece ser jedi. 

Anakin: - Hola maestro - la voz de mi padawan me sacó de mis pensamientos.

Obi-Wan: - Anakin, de nuevo llegas tarde - me quejé sabiendo que se había quedado arreglando sus naves de juguete; nunca se los quité sabiendo que eso lo hacía motivarse más sobre todo porque es un increíble piloto.

Anakin: - Yo....yo me quedé dormido en meditación - contestó avergonzado y traté de no reírme, la hiperactividad que la Fuerza le proporciona es demasiada que no puede mantenerse quieto en un lugar ni siquiera por dos minutos o sin dormirse al menos - lo estoy intentando maestro, pero.... - lo interrumpí porque ya debíamos irnos, nuestra siguiente misión es de suma importancia y creo que le gustará.

Obi-Wan: - Anakin....por más que me gustaría escuchar otra de tus miles de pretextos por los cuales no puedes quedarte en meditación sin dormir....me gustaría que pudiéramos llegar a nuestra siguiente misión a tiempo - le dije comenzando a caminar hacia el hangar.

Anakin: - ¿La cocina es nuestro siguiente destino? - preguntó irónico y yo giré mis ojos sin dejar de caminar.

Obi-Wan: - No, Anakin estoy tratando de llegar al hangar, nuestra misión está al otro lado del templo - dije seguro de mí mismo.

Anakin: - ¿Maestro? - me llamó mi padawan y yo suspiré volteando a verlo.

Obi-Wan: - Sí, Anakin - le contesté cansado de esperarlo.

Anakin: - El hangar está por acá...sino más recuerdo - me dijo señalando hacia el otro lado del pasillo y yo, me sonrojé por la vergüenza de que mi propio Padawan se burlara de mi error.

Obi-Wan: - Mil truenos y demonios, por eso no me gusta volar - respingué frustrado y Anakin, me siguió con una sonrisa en su boca - no te rías, Anakin - le recriminé sabiendo que lo haría aún así.

Anakin: - Maestro.....yo jamás me burlaría de usted - dijo entre risas tratando de esconderlas entre dientes y giré mis ojos mientras caminábamos más rápido - ¿Y cuál es nuestra siguiente misión, maestro? ¿Viajar a Draboo, Christopsis, pelear con piratas? - preguntó divertido.

Obi-Wan: - No, Anakin....nuestra misión es proteger a un senador de varias amenazas contra su vida - le dije interrumpiendo su búsqueda de la aventura y sentí que el ánimo se le había bajado hasta por los suelos y sonreí sin voltear a verlo.

Anakin: - ¿En serio vamos a ser las niñeras de un senador? - se quejó como siempre cuando se trata de una misión "aburrida" según él.

Obi-Wan: - Senadora, Anakin y ¿quieres apresurar el paso? Ella nos está esperando en su departamento - lo correteé sabiendo que hacía lo imposible por no ir.

Anakin: - ¿Tan siquiera puedo saber a quien vamos a cuidar como niñeras? - preguntó girando sus ojos y fue cuando le regresé su broma de antes.

Obi-Wan: - Oh, nadie importante, sólo a la Senadora Amidala de Naboo - dije como si nada entrando en el hangar y caminando hacia el speeder y sonreí por la sorpresa que le iba a dar.

Anakin: - Claro - respondió sin mucho ánimo hasta que sentí que le cayó el veinte y su sorpresa entró a su estado de ánimo de inmediato - ¿¡¡QUÉEEEE!!? - preguntó perplejo.

Obi-Wan: - ¿Te vas a quedar así hasta el anochecer o podemos ir al edificio de una buena vez? Te explicaré en el camino - le dije riendo internamente, ver la cara de sorpresa de mi padawan valió la pena todo el drama anterior.