
Capitulo 15
LET'S GET LOST
Luego de un desayuno relativamente tranquilo, me pidieron que fuera a ver a Victor pues mis heridas debían ser revisadas para descartar cualquier posible infección.
- Ve, nosotros avanzaremos con la investigación - dijo Axel tomando el rumbo contrario.
- Llámanos si ocurre algo - secundo Yeng siguiendo a Axel y perdiéndose tras girar en uno de los pasillos.
La enorme mansión era magnífica, paredes blancas y terracota, con enormes ventanales, muchos ventales y balcones que en verano ventilarian el interior,estatuas que representaban leones, el piso de marmol le aportaba frescura a la mansion.
Todo es pulcro, elegante y sobrio desde la luz calida de las lámparas de araña, hasta la luz de día que cae como manto sobre las imperiosas alfombras de tono ceruleo que recorrían los largos pasillos, era como estar dentro de una caja musical.
El olor a hospital me abofeteo con fuerza al entrar a la enfermeria, el olor característico a alcohol y limpio, hacia que me arderá la nariz, no me desagradaba del todo pero seguía sin tolerarlo.
Victor se encontraba esperándome junto a la camilla.
- ¿Que tenemos aquí? - pregunta más para el mismo que para mi - ¿Haz sentido mucha molestia al caminar?
- Un poco - respondo tímidamente, sin poder apartarle la mirada.
Al tenerlo tan cerca detallo mejor sus facciones, tenia su cabello negro engomado, es lampiño, sus facciones parecen cinceladas en mármol, no hay imperfección visible, la misma mandibula fuerte, ojos verdes y nariz recta de su hijo, pestañas largas, cejas prominentes, alto y con buen físico, la piel olivacea y un tanto bronceada le daba un aire europeo, nada parecido al tipico estadounidense, tenia algunas líneas de expresión alrededor de sus ojos y en su frente, que evidenciaban el paso de los años en el.
Es hermoso, ¿Cuanto años tendrá enrealidad?.
Pensé distraidamente fijando mi mirada en otro lado por la vergüenza, mientras me quitaba con delicadeza la media de compresión.
- Oh basta, haras que este vejestorio se sonrroje - comenta Victor cortando la venda de mi pierna - mi edad es un secreto.
Me mira con expresión divertida, siento mi cara arder, siempre termino ignorando ese pequeño detalle, sabrían lo que estaba pensando siempre.
- La curiosidad no es ningún pecado - habla tomando con delicadeza mi pierna y revisando la herida en ella - no le tomes cuidado
Grande fue mi sorpresa al ver que en mi pierna en lugar de haber una herida suturada y con aspecto horrible solo habían dos largas líneas de un intenso color rosaceo y de aspecto algo hinchado, pero nada más.
- Pero si vi como la madera atravesó la piel - exclame sorprendida acercando mi mano a las extrañas marcas.
- Los humanos utilizan métodos arcaicos para tratar heridas en comparación a los nuestros - dice Victor riendose por lo bajo - hice todo lo que estuvo en mi mano para evitar que quedara otra cicatriz
Señala mis brazos con un gesto de su cabeza, tomando un algodón con una sustancia extraña.
- Me parece que te incomodan un poco - habla con calma - creo que son marcas hermosas que prueban lo fuerte que eres, pero es solo una opinión personal.
Me quedo impávida al escuchar sus palabras.
- Trate tus heridas en una habitación diferente - continua y me guiña un ojo con complicidad - nadie más aparte de mi las vio.
Esta bien, su hijo era un gran necio, un estúpido engreido, egoísta y caprichoso, pero el era amable y considerado, estaba muy agradecida, no me hubiese gustado ver el rostro horrorizado de Axel mirando todas las cicatrices que tenía, habría atado cabos y entendido todo.
- Las heridas del brazo y la pierna desaparecerán en un par de días y podrás hacer todo con normalidad - dijo terminando de poner una larga gasa sobre las marcas para que no estuvieran expuestas - lo que me preocupa es la herida que te hizo el gourmand.
Flasbacks pasan por mi mente.
El rostro del Wendigo moviéndose de forma antinatural.
Yo acorralada entre las llamas.
Verlo preparando para desgarrar con sus enormes zarpas.
Se me erizo la piel al sentir el frío en mi abdomen ahora expuesto.
Victor quito la gasa del costado de mi torso, estaba cubierta de una espesa sustancia negra, la reconoci de inmediato como lo que tenia la bestia en sus manos.
- Bueno, esto es inusual - dice en voz baja.
Mi mirada horrorizada no paso desapercibida para Victor, que detuvo sus acciones y puso un pequeño espejo frente a mi para que pudiera ver.
La herida no se veía nada bien, las marcas de las zarpas de la bestia se habían cerrado pero pequeñas ramificaciones de color violaceas y negro, se extendían de ellas, tal como harían las figuras de Lichtenberg pero a menor escala.
El toca la extraña zona haciendo un poco de presión, el latigazo de dolor que sentí, se extendio a todo mi cuerpo dejándome sin aliento.
- Se extiende - murmura en voz baja frunciendo el ceño
- Es grave - inquiero alarmada al ver como las ramificaciones se extienden lentamente sobre mi piel, apenas unos centímetros.
- Generalmente no. - dice comenzando a limpiar la herida con sumo cuidado.
La preocupación se asienta con peso en mi estomago al salir de la enfermería, según lo que dijo Victor no debía preocuparme, pero tras ver esas extrañas marcas se me antojaba imposible.
Recorro los pasillos sumergida en mis pensamientos, sin rumbo fijo, nada parecía mejorar, monstruos sueltos, Alex desaparecida, los padre de Axel encubriendo cosas cada vez más extrañas, sueños extraños, las cosas que tuve que soportar, todos mis años de encierro y ahora esa cosa extraña en mi cuerpo que parecía tener vida propia.
Me tomo un momento para respirar profundamente, quisiera olvidar, estoy consumiéndome en toda esta historia oscura y retorcida, dieciocho años es demasiado temprano, quiero encontrar a Alex y asegurarme de que todos a los que e arrastrado a esto estarán bien, quiero olvidar, me encantaría olvidar todo el caos que se a formado, que al despertar el dia de mañana, este en mi cama, y todo lo que a ocurrido hasta ahora, solo sea una pesadilla provocada por el cansancio del viaje, hasta una alucinacion me valdria, cualquier cosa estaría bien.
Soy torpe y descoordinada, no tengo una fuerza devastadora, no soy veloz, soy pesimista, ansiosa, depresiva, aveces malhumorada, me cuesta salir de la cama cada mañana, soy un chica más del montón, que no a tenido suerte en su vida.
¿Alguna vez han deseado que su cuerpo y su mente se detengan?
No por siempre, solo un momento, unos minutos, para poder descansar y dejar de sentir tanto, de sentirlo todo, de pensar, desconectarte de ti mismo y dispersarte en la nada.
Yo lo deseaba continuamente.
No se en que momento mis pies resbalan en mi trayecto, pero antes de caer, siento unos brazos fuertes y duros sujetar mi cintura y tirar bruscamente de mi para estabilizarme.
Acto de buena fé o no, toco la herida en dolor se extiende sin misericordia por todo mi ser, suelto un grito de dolor frustrado.
Al levantar mi vista me encuentro con el amargado de cabellos negros con una mirada furiosa.
- Mire por donde camina - reclama iracundo
No logro entender que es lo que pasa, mechones de cabello humedo le bordean la cara, y su torso está...¿descubierto?
Su pecho sube y baja con brusquedad por la agitacion, no puedo evitar fijarme en el buen físico que tiene, cuerpo tonificado, y marcado, las gotas de agua recorrían con lentitud toda la extension de su piel cremosa, hasta perderse en lugares que mi vista no podía alcanzar.
Mis ojos se desvían hacia su brazo izquierdo hay exactamente las misma marcas violaceas y negras con patrón de rayos que tengo en un lado de mi cintura, abriéndose paso hasta la mitad de su brazo, las líneas son más gruesas, parece un tatuaje, un tribal que solo realza su atractivo.
Ojos arriba Meghan, ojos arriba, ojos arriba.
Me ordenó mentalmente para recordarme quien es la persona frente a mi.
- ¡¿Me está escuchando maldita sea?! - grita.
Salgo de mi trance y me encuentro con sus ojos ardiendo en furia.
- Deja de gritar - refutó liberandome de su agarre
- ¿Que hace aqui? - enarca una ceja con arrogancia - ¿No se estaba muriendo en la enfermería?
- Eso te encantaria, pero ya estoy perfectamente
- Prefiero que sea asi, voy a disfrutar matarla con mis propias manos por insolente - amenaza con tranquilidad
- ¿No tienes mas gente que amenazar?, eres insoportable
- Busquese un mejor insulto si lo que quiere es ofenderme, ¿nisiquiera eso puede hacer bien?
- Se me ocurren un millón te lo juro.
- Entonces la escucho - me reta acercandose a mi a paso firme
- Solo buscas una buena excusa para acabar conmigo, no pienso darte ese gusto, no vale la pena desperdiciar mi vida por ti - exclamo molesta
Eso lo enoja de sobre manera puedo ver como tensa la mandibula por la molestia.
- La reto- me mira fijamente - veamos si logra ofenderme como tanto presume, iletrada.
Se acerca a mi despacio, como si se tratara de un depredador asechando a su presa, mi respiración empieza a agitarse cuando mi cuerpo choca contra el barandal de las escaleras.
Me recorre el cuerpo con la mirada y se concentra en mi torso.
Sus ojos estan oscurecidos, me arrasa como una ventisca a la arena, tan penetrante como los rayos de sol.
Es sofocante y contradictorio mi piel cosquillea inquieta bajo su escrutadora mirada.
Da un paso, luego otro, y otro y otro, lo tengo justo frente a mi, su perfume me envuelve, es sofocante y contradictorio, me ve con desdén como si tuviera que estar a su merced y obedecer todas las cosas que ordena.
- Es un gran necio - suelto molesta - un estúpido engreido, egoísta y caprichoso, te odio ¿contento?
Trato de huir de la situación, pero reacciona más rápido y me encierra poniendo sus manos en el barandal, su maldita costumbre de acorralarme me irritaba aún más.
Esta tan cerca que podrá contar sus pestañas, son largas, un abanico que sube y baja cada vez que parpadea.
- Ya e oído eso antes, almenos varíe sus insultos iletra
- Me llamo Meghan, ¿no te llega suficiente oxígeno a la cabeza para recordar algo tan simple? - bramo molesta tratando de empujarlo lejos mi
- Es que eres molesta - reclama tomándome de las muñecas - estoy haciéndole un favor.
- Yo no te lo pedí - le sostengo la mirada
- Quite esa cara - ordena
-¿Y cual me pongo? Con ella nací.
- Destesto esos malditos ojos hazel.
- y yo tus ojos verdes.
- Y su cabello, su figura. Toda usted.
- Entonces tapete los ojos y deja de mirarme - replicó ofuscada - mi vida se vuelve significativamente peor cada vez que apareces
Siento como aprieta su agarre en mis muñecas.
- Me duele imbecil - le grito adolorida.
Sus ojos se iluminan, tan brillantes como una piedra de jade bajo el sol, maldito psicópata disfruta ver el sufrimiento y la impotencia en los demás, quiero liberarme de su agarre y golpearlo en ese rostro engreído que tiene.
- ¿No dijo que ya estaba perfectamente? ¿Acaso mintió Meghan? - el tono es suave, como una caricia inesperada y por ende me asusta.
Se me corta la respiración al reparar en su cercania.
- Suéltame - le ordenó, pero el aprieta nuevamente su agarre en mis muñecas, me muerdo el labio con fuerza evitando que se me escape otro grito de dolor - sueltame maldito enfermo.
Su mirada es diferente, me inquieta como sus pupilas parecen haberse expandido, las comisuras de sus labios se elevan en una media sonrisa infame marcando sus oyuelos, triunfante, como si hubiera conseguido lo que tanto quería.
- Detesto en demasia las mentiras Meghan - su voz ronca le pone énfasis a mi nombre como si disfrutará pronunciarlo - castigo a aquellos que tienen la osadía de mentirme descaradamente.
Su aliento cálido roza mi piel, haciendo que me estremezca, no puedo seguir el hilo de la conversacion, no se me ocurre ninguna buena respuesta, ninguna respuesta enrealidad.
Nuestras respiraciones parecen mezclarse, su mirada me quema, me expone, hace que me sienta diminuta a su lado, pero también hace que mi corazón se desboque.
- ¿Adonde fue toda esa valentía de la que alardeaba iletrada? - dice susurrandome al oido y rompiendo el silencio con su sarcasmo
Separa su rostro apenas unos centímetros de mi para verme con cierto triunfo y altaneria en su mirada, trago grueso, cuando el jade brillante en su mirada me atrapa, si no fuera un idiota, me gustarían mucho estos ojos de extraña tonalidad verde.
Pero entonces algo extraño sucede, su expresion altiva cambia por una consternada, puedo sentir como acaricia la piel de mis muñecas, palpando la extraña textura que mi piel tiene ahí.
Maldigo en mi fuero interno y trato de alejarlo con todas mis fuerzas, pero sabe perfectamente donde presionar para hacer que el dolor me mantenga quieta.
No conforme con tocar mis muñecas, desliza sus manos lentamente por todo el largo de mis brazos, como si quisiera saber que diablos es lo que esta tocando, al notar que me aferro con fuerza al barandal y no podrá tirar de mis brazos para ver, se apega aún más a mi cuerpo intentando ver desde esa posición.
Muy cerca para mi gusto, el aroma que desprende su cuerpo me esta nublando el pensamiento, quiero golpearlo y alejarlo, pero me odio a mi misma al notar que también quiero ser envuelta en esa fragancia.
Mi piel arde al contacto con sus manos, que no pierden detalle de todo lo que hay bajo la tela del vestido que cede ante sus toques la extraña acción hace que me cueste respirar y mi cuerpo tiemble.
¿Que esta pasando? ¿Es algún tipo de droga?
Y entonces aparece, un extraño hormigueo en mi estomago, forma espirales, es nuevo, inquietante, revolucionario, enérgico, no puedo controlarlo, escalofríos recorren mi espalda haciéndome perder la fuerza.
La estancia está en silencio y sólo puedo escuchar el sonido de mi respiracion agitada, su perfume parece hacerse vuelto más fuerte me atrae con una fuerza magnética de la que no puedo escapar.
.・。.・゜✭・.・✫・゜・。.
Esas manos árbitro, se a puesto intensa la cosa entre esos dos 👀
Si llegaron hasta aquí solo quiero decirles:
Muchas gracias por todo el apoyo, ya son más de ✨️500✨️ lecturas las que tenemos, espero que te estés divirtiendo y haciendo teorías, porque se vienen cositas.
Me esforzaré por seguir trayendo contenido de calidad para ti, de lunes a jueves sin falta.
Si eres nuevo me alegra mucho haber conseguido que te quedaras hasta este punto
En medio de esta historia con sus rarezas tienes un pedacito de mi.
Besos de misterio, sangre
y un amor letal
Sinceramente, su amiga
Herleking ❤️
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