Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

#2_(Harbinger x Seiya)

Omegaverse/semi Au.

_____

El sonido de un fuerte golpe contra el suelo de parte de uno de los instructores daba por terminado el encuentro de Seiya contra otro Beta, los entrenamientos de los Aspirantes ese día, ya cerca del atardecer estaban por terminar.

Normalmente estos eran separados por las castas en un área sumamente específica para cada uno, dónde no se juntaban hasta obtener las armaduras de Athena, siendo la excepción una que otra ocasión donde se juntaban entre diferentes castas en busca de probar la mejoría de varios sin la separación entre Omega, Alfa o Beta junto a un instructor en específico. O esa sería la idea inicial, ya que al contrario de anteriores generaciones, en está generacion se encontraba una bastante más pequeña cantidad de Aspirantes. Lo cual era desde bueno y malo a la ves, no pasando de unos 10, sin contar los ya descartados.

Desviando su mirada a otro lado al terminar, Seiya se encontró con la presencia de un Alfa al que conocía bastante bien, sentado a un costado del coliseo, ligeramente apartado del resto dónde, seguramente pudiera suspirar enamorado tranquilamente el alfa joven de cabellos morados mirando el encuentro, notándose cómo lo disfrutaba. sonriendo de medio lado levantando el pulgar, orgulloso por su Victoria más cerca del cargo de Santo de Pegaso. Retirándose al área donde esté habitada junto al resto de sus compañeros.

- Que lindo mi Omega. - Apoyando su cabeza en sus manos dijo en voz baja, lamiéndose el labio al verlo. Recidiendo un golpe en la cabeza a último momento de quien sería su instructor- ¿Que le pasa anciano? - El hombre mayor cerró el libro en sus manos, habiéndose percatado de como la atención del fornido joven iba por el castaño.

- Te has hablando mucho. No sé si eso me gusta o no. - Pasando su mano por su barbilla el hombre Beta, detallada al adolescente enamorado que tenía en frente. El contrario solo aprieta los dientes, parándose de su lugar.

- No me hable como si me hubiera vuelto débil por fijarme en un Omega, cada contrincante que pelea contra mi acaba con los huesos crujiendo.

- Así lo que lo admites. Te llevo viendo desde hace días, increíble la confianza que entre Alfas y Omegas agarran tan rápido. - Se Jacto en ironía. Sabiendo de ante mano la reacción del Alfa a su cargo. Harbinger no contesta en las provocaciones del más viejo, lleva años en el santuario, no tanto como los nacidos allí pero si el tiempo suficiente.

- No entiendo de que queja si en su época se casaban antes de mi edad. - Un pequeño tick nervioso atacó al más viejo.

- Curioso como cambian tus prioridades. De todas maneras no lo.dijo en busca de terminarte criticando, sé que eres un joven viril y jovial, pero inexperto. Si necesitas ayuda para cotejarlo, ven a mi que te puedo aconsejar. - Llevándose el libro al pecho expreso con orgullo. Parecía hablar con una voz de experiencia que Harbinger cuestionaba totalmente.

- Puedo hacerme cargo solo. Ya sólo tengo la suficiente relación con él. Ya lo bese una vez, de hecho.

- ¿Qué? - Rápidamente se volteo al joven Alfa. De eso no estaba enterado. Y por la risa que el peli morado no oculto no supo si estaba mintiendo. Un pequeño dolor de cabeza se formó en Ionia, haciendole saber porque no tuvo hijos en su momento, ya entreno muchos aspirantes de varias edades para vivirlo sin tenerlos. - Cómo digas, suerte con ese Omega. - Restándole importancia al asunto le hizo una señal al toro para irse, el atardecer estaba empezando.

___

Cuando Harbinger volvió a su cabaña, sonrió satisfecho al ver una nota del castaño, oculta dónde Seiya sabía que solo el la vería. No había nada escrito, si no que era un emblema que usaban como señal de "Quiero verte durante esta noche" o encuentros similares, una idea que tomaron hace no mucho tiempo, por iniciativa del toro.

- Hey, Seiya. - Dijo ese día, hace no más de 2 meses. Ya había pensando bastante en como hacerlo, ya que el ambiente en el que creció nunca fue favorable, ahora que tenía la oportunidad de ver a un Omega que podía decir, "quiero conocerlo y marcarlo" no sé permitió fallar. Pensó en que decir y en un código rápido para poder comunicarse. - Quiero que hablemos en privado esta noche. La verdad. Me interesas bastante, ¿Me vas una oportunidad?

- Te lo digo en la noche. Allí estaré. - Pegando su puño a su pecho le declaró, sus ojos casi brillaban seguro de si. Transmitiendo confianza al toro.

En el silencio que su cuerpo más podía generar, Harbinger se levantó de la cama y se fué de la cabaña, corriendo en bastante velocidad cuando estuvo lo suficientemente lejos para no alertar a nadie.

Los trajes de los omegas eran más cercanos a tunicas, mientras los de los Alfas eran trajes completos. Eso se notaba allí, dónde la altura no era la única diferencia entre los 2, porque con o sin eso, Harbinger se veía más grande a comparación de Seiya, y Seiya más dulce y frágil a comparación de Harbinger. Y eso que, en Seiya se notaba como buscar una armadura le afecto físicamente.

- Felicidades enano. - Abrazandolo con uno de sus brazos le felicito. El castaño levanto la vista a él, sonriendo satisfecho. Tomando su rostro para bajarlo en un beso.

- Gracias. Aunque mi enemigo tampoco fue tan difícil, solo me superada en tamaño. Un poco molesto a decir verdad.

- ¿Por? Si te ví teniendo problemas. ¿O esperas pelear con un Alfa?

- Sabes que eso no me molestaría. - Acurrucándo la cabeza contra el pecho del toro susurro, adoptando una mirada más seductora hacía él. - Pero aunque agradezco eso, no te pedí que nos vinieramos para eso. Si no que, dentro de unos días tengo mi Celo. ¿Quieres acompañarme en él? - Harbinger parecía complacido de escuchar eso, moviendo su otro brazo y cargando a Seiya en ambos. Tomandolo por sorpresa cuando lo cargo.

- Siempre pensé que si eso pasaría me lo pediría cuando ya tuviéramos nuestras armaduras. - Se cinsero. Su rostro, aunque normalmente serio y agresivo en ese momento mantenía una sonrisa serena y dulcemente en dirección a Seiya. - ¿Me dejarías marcarte o solo quieres que te acompañe?

Rodeando al toro con sus brazos Seiya se acercó a él. Otro lento beso se vieron.

- Te lo diré cuando estemos en mi cama. - Declaró. Eso, Harbinger lo tomo que casi una confirmación. Tomando los labios de su Omega nuevamente.

_____

Me encantan la idea de un omegaverse entre estos 2. Siempre quise escribirlo.

Amo como sonreí cuando no quiere quebrar huesos.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro