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pequeña

Protagonista: Harbinger.

Spoiler: Inocencia, La curiosidad de Raki, momento incómodo, ship yaoi.

Hecho a colaboración con VadaSilva4 en los comentarios. Continuación de «Diputa»

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Kiki estada entendiendo a la perfección todos esos momentos de incomodidad que de seguro le provocó a su maestro y los demás cuando los señores Aldebaran y Shaina se iban solos, lo estada entendiendo a la perfección, todo debido al nuevo Patriarca y su reciente amante; Seiya de Sagitario, donde la pequeña Raki estada donde no debía.

— Maestro Kiki, ¿Porque los adultos se encierran solos por tanto tiempo? Que hacen? Juegan? — Inquiere buscando saciar su curiosidad.

— Mira Raki... — "Voy a matarlo cuando salga de esta, ¿Porque tienen que coger tan seguido?"  — Expresa mentalmente buscando una salida, Raki era muy niña para saber esto, necesitada a alguien mas — De momento no te puedo decir porque eres muy pequeña.

— ¡No es justo! — Infla las mejillas malhumorada, en una mini rabieta para irse a buscar a otro para saciar su sed de conocimiento y nadie le daba. En este momento era casi de tarde así que se dirigió a preguntarle a alguien, Fudo y Genbu fueron sus primeras opciones, luego pensó en Integra donde creyó que ella sería la mejor opción y estada cerca, ella era perfecta. Lo malo, no estada, había salido en misión con Shiryu y Hyoga.

Bueno, luego de un rato termino con Gembu, ya que Fudo parecía/estar igual que él patriarca.

— Señor Gembu? — Camino con cuidado hasta su templo en un área que usada de entrenamiento a un lado del templo. Con cuidado se acerco hasta donde estada buscando llamar su atención — Señor Gembu?

— Raki? Que pasa?

— Quiero hacerle una pregunta, vera es que no entiendo porque los adultos se encierran solos, primero Harbinger y Seiya, ahora Fudo con no sé quien ¿Me puede explicar que hacen?

"Sexo" Es lo que viene a la mente del Peli-Naranja, no podía decirle nada de eso, por lo tanto disimuladamente logro escapar de la conversación y dirigirse a otro lugar.

Raki estaba molesta, inflando sus mejillas cual Pikachu, los Bronce Saint Estaban en palaestra por lo tanto no podía pedirles consejo. Así que con la duda carcomiendola se dirigió al origen de sus males.

Al llegar a la sala del patriarca un poco cansada por las escaleras. Entrando al cuarto donde Seiya y Harbinger estaban. Al llegar encuentra al Patriarca en solo pantalones cortos como si hubiera salido de dañarse, siendo ignorado por la Muviana con facilidad previendo ir por Seiya bajo la mirada confunda del mayor.

— Seiya — Se lanza a sus brazos, la ropas del Sagitario eran simples y delgadas, como para dormir cómodo.

— Raki que pasa? Porque te lanzas a mí?

— Solo quería preguntar algo — Eso fue suficiente para dejar a Seiya muerto de nervios por dentro, mientras esperada las palabras de la niña — Solo quiero saber que hacen los adultos solos, pero nadie me contesta. — Seiya murió en viva, la alma le dejo el cuerpo mientras su cara pasada por los diferentes tonos de rojo.

Cerca de él Harbinger mirada bastante divertido apoyándose en la pared. Seiya maldecía a su novio porque se notada estar disfrutando verlo en esta situación, Raki era una niña y lo que podía decir corría el riesgo de ser peligroso para su joven mente en el retoño de la inocencia.

— Pues veras... No es nada grave... Es algo donde nos mostramos lo que nos queremos... Ahhh — Tartamudea sin saber que decir.

— ¿Como un juego?

La risa del patriarca se escucha mientras Seiya estada muriendo por dentro ¿Esto era su castigo? Cuando Raki estada por decir algo una voz los alerto, entrando al cuarto. Saori; La diosa Athena, estada presente mirando todo bastante confundida.

— ¿Que pasa? — Interroga.

— Saori — Se separa de la niña para acercarse a la Diosa — Veras, Raki tiene una pregunta que hacerte.

— ¿Enserio?

— Si. — Insistió Seiya.

— Bueno ven Raki, hablemos solas, de mujer a mujer — Y se la llevó, agarrándola de la mano para atender las dudas de la niña dejando a ambos hombres solos, y a Seiya respirado tranquilo.

— Jajajajaja — La estruendosa risa del Patriarca no se hizo esperar — Ahhhi Seiya, mi lindo Seiya, si te pusiste así con esa niña no quiero imaginar cuando nosotros tengamos nuestros hijos — Lo rodea con el brazo apoyando a Seiya en su abdomen, dejándolo rojo — Y que conste que quiero mas de uno. — Le besa los labios para luego irse a vestir y volver a sus obligaciones, dejando a Seiya en Shock.

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