Ver al Santo de virgo tendido sobre el brazo del Santo de Tauro muy apegado a este era algo muy peculiar entre los ojos de varios de los habitantes en el Santuario. Principalmente por la fama que solía tener Asmita de ser un hombre algo ermitaño siempre concentrado en meditar, era muy curioso cuando menos verlo en este momento donde regresada de esa cita que le había prometido al toro, siendo cargado por Hasgard en uno solo de sus brazos como si su trono fuera. Si bien puede que solo sea el instinto de protección, un poco incensario que tenía el toro hacia su nuevo novio, a Hasgard no le gustada nada las malas miradas que virgo levantada sin ser consciente de eso.

Entre ellos el que más desatada era el chico Alfa y Santo de Leo; Regulus. Residiendo a sus 2 amigos

- Hola. Me acabo de enterar y no pude evitar verlos. - Musito el mejor, parado frente a ellos en la cima del templo de tauro.

- No ha pasado mucho la verdad. - Respondió calmado Virgo aun en su posición desde en el brazo de su pareja, dándole una pequeña señal al toro para ya lo baje. - Te agradezco por preocuparte.

- De nada. Bueno, Hasgard es mi buen amigo, desde que note que tomo la decisión de acercando a ti, supuse que podría pasar algo entre los 2.

- Te agradezco entonces por no entrometerte mucho. - Menciono Hasgard, pasando por un lado y acariciando el cabello de Regulus como si su hermano mayor fuera. - Aunque es cierto que desconfié mucho de Asmita, en este momento estoy feliz por haberme acercado.

- ¿Desconfiadas de mí?

- Lo lamento chiquito. - Sonrió, disculpándose por ese pequeño detalle en su relación. Asmita nunca le tuvo algún tipo de rencor o desconfianza por lo tanto nunca encontró algo raro él que el toro se le acercara. A diferencia de Regulus o Sísifo que si estaban enterados.

- Te lo dejare pasar por ahora.

- Jaja. Les deseo suerte a los 2, principalmente cuando llegue un celo.

- Pequeño descarado. - Como si su hermano mayor se tratara el Santo de Tauro sujeto a Regulus y no editar "Darle una escarmienta" En la cual Regulus solo respondió riendo con ganas, hasta el momento de liberarse. - No digo nada malo. Yo también sé lo molestas que son esas cosas.

- Yo nunca tuve problemas con eso. - Esa respuesta dejo impresionados a ambos alfas, centrando su atención es Virgo. - Sé como concentrarme y reprimir esos deseos dominados por las épocas de celos, es similar a reprimir mi cosmos.

- Nunca me comentaste de eso. - Exclamo Regulus, bastante sorprendido de esa habilidad propia de Virgo.

- Eso explica porque siempre te veía tranquilo cuando pasada tiempo en tu templo. - Menciono el toro, ya dejando a Regulus a un lado.

- No es tan difícil. Mi celo llegara en unas semanas y... - Cuidadosamente virgo se acerco al toro, susurrando en su oreja con una sonrisa bastante traviesa. - Quiero tenerte en ese momento. - Termino besando sus labios por unos segundos antes de irse por sí mismo hacia su templo, volteando por una última vez a su pareja como si pudiera verlo y detallarlo, queriendo en parte verle la expresión que en ese momento debería adornar su rostro.

- Te deseo suerte Hasgard. Por cierto... ¿Teneo está en el coliseo verdad? - Fingiendo falsa inocencia que nadie se creería pregunto, ya hace un tiempo que su relación con el Alfa que Hasgard entrenada iba creciendo hasta un buen punto.

- Si lo está. Pero ten cuidado con lo que haces. - Si bien ambos eran de linaje Alfa, nadie que estada enterado a querido decir algo al respecto, decidiendo mejor solo esperar a ver qué tan lejos llegada todo entre Teneo y Regulus.

- Tenme confianza. - Solo eso respondió antes de irse, dejando a su compañero solo, perdidos ambos en sus propios pensamientos.

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Los próximos días eran su clásica rutina, nada fuera de lo común en el Santuario, aunque Hasgard se quedo algo pensativo por lo que Asmita le había dicho, y no negada que la propuesta al igual que cuando le pidió un beso, 2 veces no se la tenía que pensar antes de hacerlo. Puede que su propia mente este un poco más ansiosa por el momento en que eso pase de lo que le gustaría creer en un primer momento.

- Tauro. - Una voz seria y fría lo saco de sus pensamientos, siendo el hermano del fallecido Santo de Géminis y gran amigo de Asmita; Deuterus, lo que lo interrumpió. - Asmita me pidió que te dijera que te está esperando.

- Entiendo. 

Solo eso respondió, detallando al hombre moreno en su caminar fuera de los templos, muy probablemente buscando a Degel. Sabía lo apegado y protector que era Deuterus con su Omega. Dejando eso de lado y concentrándose rápidamente en el suyo propio.

- Te esperada. - Dijo virgo, sentando desde su puesto en una pequeña plataforma en forma de flor de loto. Moviendo la cabeza para que el toro se acerque, y de forma lenta, irse quitando la tela sobre su cuerpo, dejando su cuerpo pálido y delgado recostado sobre el cuerpo bronceado y fornido de Hasgard.

- ¿Estas en un celo?- Virgo negó, acariciando los brazos del toro y subiendo por ellos queriendo memorizar un mapa metal de su cuerpo. El olor que desprendía el cuerpo del Omega era embriagante, dejando al toro muy manso mientras sutilmente acariciada la espalda del Omega rubio.

- Aun no, pero quería que te quedaras conmigo hasta que eso pase. - Le respondió, si Hasgard se ponía a pensar, Asmita había dicho que siempre ha sabido controlar sus celos, suponía que en ese momento quería tenerlo a su lado tanto antes como después, debido a que era la primera vez que iba a experimentar un celo en mucho tiempo.

- Entiendo. - Sonrió, besando los labios del Omega con ferviente pasión. Separándose y quitándose la camisa permitiendo acariciarse en igual de condiciones. - Me quedare en todo momento.

- Gracias, de verdad deseo tu compañía.

- ¿Cuánto te suele tardar él celo? - Pregunto en casi un susurro, acombándose mejor los 2, dejando a Asmita acostado de lado contra su pecho.

- A lo menos unas horas, a lo mucho unos 2 días.

- Me quedare aquí hasta que eso pase. - Le volvió  a sonreír, quedando en esa posición un rato y hablando de cosas triviales luego de un ligero silencio. 

Y no mintió, Hasgard no salió del templo en los próximos días, viviendo casi con Asmita. No era extraño para los alfas y los omegas empezar el alto sexual de su relación al apenas empezarla, la de ellos duro unas semanas hasta que el celo de virgo llego, residiendo todo el amor y pasión del santo de tauro en el templo del Omega.

No encontré forma de pasar al lemon. Sorry. Por cierto, antes de que me pregunten; Si, si hare un Teneo x Regulus, pues tengo que variarme los shippeos de Teneo. Los puse a ambos de alfas, pues no tengo idea de quien seria el pasivo.

Antes de irme quiero disculparme por haberme llegado a portar como un usuario toxico, más que nada a Raíz de este libro, como comente en mi tablero, no me he sentido muy bien estos días, bastante inseguro y estresado de hecho, saliendo a flote de la peor manera sumando a yo no querer dejar mis fic inconclusos. Ahora estoy un poco mejor, ya que estuve hablando con algunos otros usuarios.