Aroma en el viento parte 3 (Final)
Entre las rocas ardientes del Magma del volcán de la isla Kanon, los 2 Gold Saint recorrían el terreno buscándose, en el caso de Ilias, logro conectar con las voces de naturaleza que lo ayudaban a buscar a los demás, apareciendo en forma de zorros, guiándolo hacia donde sus amigos.
(N/A: pues creo yo que tiene esa habilidad, nunca especificaron bien eso de "las voces de la naturaleza")
Mientras eso, en otro lugar; uno menos caluroso. Tenma había cedido a los acercamientos del Saint de Géminis. En este momento ambos estaban abrazados, o más bien, Deuterus lo tenía atrapado de forma posesiva, mientras este se dejada querer con la cabeza pegada a su cuello mientras este aspirada su aroma, acariciando su cabello.
Tenma debía admitir que el olor de Deuterus era interesante, al punto de extraño. Bosque fresco con un ligero aire de quemado. ¿Sera por el tiempo que estuvo aquí? No lo sabía.
- Deuterus - Busco llamar su atención, mientras estaban solos en silencio.
- Dime Pequeño Pegaso. - Ese apodo usado por el moreno, no le terminada de conversar, frunciendo el ceño.
- Quería peguntarte porque estás aquí. Fuera de todos.
- Pues, digamos que a los ojos del santuario siempre he sido en despreciado, la sombra de mi hermano básicamente.
- ¿Enserio? - De todas las respuestas que Tenma pudo recibir esa nunca la espero. Abriendo los ojos con sorpresa antes del que el mayor prosiga.
- No te sientas mal, ya lo supere. Pero al morir mi hermano que era el único que me amaba y cuidaba, decidí no acercarme. Sage digo que me aceptada, y que lo disculpara por no estar enterado de mi existencia, pero no quise acercarme a ellos y llevo aquí. - Contesto como si nada, volviendo a abrazar a Tenma en sus brazos mientras este estada analizando rápido que decir.
- Lo lamento.
- No tienes nada que lamentar. A la final fueron mis decisiones. ¿Quieres decirme algo de ti?
- Pues nada que no hayas escucho de otro omega.
- ¿Padres que murieron y tuviste que estar solo desde entonces?
- Exactamente. - Tenma sabía que no debía estar apenado por eso, pero no le era fácil, mas viéndose descubierto por tremendo (e Intimidante) Alfa. - Mi tiempo en el Santuario fue difícil, pero mi maestro Dohko me apoyo.
- ¿Dohko de libra? ¿Qué tipo de relación tienes con él?
- Solo es mi maestro, es casi un hermano para mí. - Contesto ante lo cuestionado por el mayor, contrayéndose contra si sintiéndose incomodo por lo dicho por este ¿Estada celoso? - ¿Por qué lo preguntas?
- Por nada. Solo se me hace rato que esa sea tu relación. Por lo generar no es raro que los Alfas marquen a los omegas que entrenan.
- Umh... Dohko nunca fue así conmigo, de verdad lo considero un hermano. - Aunque la verdad si estada enterado que eso pasara, el más claro caso es sus amigos Yato y Lacoille que fueron marcados por sus maestros, y santos de oro de paso.
- Como digas. - Engroso lo voz, volviéndolo a apegar con fuerza, aplastado el rostro del castaño a su pecho, sonrojando un poco al muchacho entre sus brazos.
No era desagradable en lo más mínimo. (Comparado a otras experiencias) Pero era algo raro considerando que apenas se conocían. Pero para Deuterus eso no era un problema, quería a Tenma como su Omega, tenerlo siempre como en este momento.
El castaño por otro lado estada esperando a que Hasgard e Ilias volvieran. Un escalofrió recorrió desde su columna hasta cada parte de su cuerpo cuando Deuterus paso su mano por su espalda en una caricia, una y otra vez. Levantando la mirada hacia este en un gesto deleitable para el mayor.
¡Athena Santa! ¡Malditas hormonas! Deuterus se veía sexy ante la mirada que le regalada al joven Omega, estar tan cerca uno del otro no era bueno.
Mirándose a los ojos, Deuterus no tardo en tomar posesión de los labios del menor con los suyos, robándole el aliento mientras este buscada seguir su ritmo dominante.
Cuando se separaron Tenma estada rojo, con los labios hinchados, y respirando acelerado. Con la misma rapidez del cual se separo Deuterus lo volvió a besar, buscando apegarlo contra de sí mismo. Cuando Tenma sintió la virilidad del Alfa recta contra si supo que ya valió su estatus de Omega sin dueño, reforzándose ante las palabras que el moreno le susurro al oído;
- Quédate conmigo. Se mío Omega. - Voz de alfa, esa cosa era un demonio a su sistema, haciéndolo derretirse en sus brazos. - Quédate conmigo.
- Uhhmm. Quiero esperar. - Fue lo único que dijo, sin querer verlo a la cara.
No dijeron mas, pasaron los minutos, y sorprendente hora y media. Hasta que a la distancia el olor de un alfa y un omega llego a la nariz del Moreno, poniéndolo alerta, los habían encontrado.
Sin decir mucho Deuterus se separo de Tenma antes que este se parara y lo sostuviera del brazo, evitando que se apartara.
- ¡Tenma! - Esa era la voz de Hasgard, haciendo que el castaño se separa unos breves centímetros del moreno, buscando visualizar al Toro.
- Veo sorpresa que estas con Deuterus. - Ninguno de los Gold cabía en su asombro de tener que ver a Tenma junto a Deuterus, sumado al hecho del olor de Deuterus en el castaño.
- Bueno... El... - Pone su mano en su mejilla sin saber cómo responder.
- Ahora Tenma es mi Omega. - Se adelanto a decir el moreno de cabellos azules, poniéndose frente al castaño y rodeándolo con su brazo de forma posesiva.
- ¿Tenma?
- Ahh... Es verdad, y por eso Deuterus volverá con nosotros al santuario. ¿Verdad?
-----
- Hasgard - Este era el momento que Ilias estada esperando, casi era de noche y lo estada esperando afuera de su templo.
Desde esta tarde que se entero del linaje del Tauro quiso hablar con él. En todo el día no tuvo oportunidad, luego de volver con Deuterus y Tenma, principal por el hecho que quería que estuvieran solos.
- ¿Ilias? - Al verlo frente de si no quiso verlo a la cara, aun avergonzado. No tenia forma de ignorarlo.
Al darse cuenta el Saint de Leo estada frente a él, buscando que lo mire a la cara.
- No le diré a Nadie de tu linaje, descuida en eso.
- Te lo agradezco. Para mí ha sido difícil ocultarlo, no quiero que se sepa tan fácil.
- Lo entiendo, solo quiero saber ¿Por qué lo escondiste?
- ¿Por qué no la haría? Ilias no soy un Alfa o un Beta, soy un Omega, hubiera sido difícil por lo menos lograr entrar como Saint.
- Al patriarca eso nunca lo detuvo, ¿Por qué a ti si?
- Digamos que ya tuve problemas con mi linaje antes.
- ¿Estadas inseguro?
- Correcto. Desde que tengo 14 tengo un cuerpo más desarrollado que el de un Alfa promedio, siempre me vieron la idea de que nunca tendría pareja al ser lo que nadie quiere de un omega. Yo... Querías demostrar lo que podía.
- ¿Puedo preguntar cómo lo hiciste?
- Use supresores, y como la ropa de entrenamiento era de otros alfas, me ayudaron a esconder mi aroma. ¿Qué piensas de mí ahora?
- Te lo responderé así. Tenma te adora ¿Sabes? Te admira luego de saberse eso porque como Omega quiere llegar a eso.
- ¿Cómo estás tan seguro?
- El me lo dijo.
- ¿Enserio?
- Hasgard yo no tengo problema con esto, sigues siendo mi compañero y alguien que estimo. Esto solo me hace admirarte.
Los ojos del peli-blanco se movieron en todas partes ante su asombro por esas palabras, sin poder pronunciar nada coherente.
- Agradezco tus palabras.
- No tienes del porque. - Le tiende su mano, la cual Hasgard acepta, entrelazando sus dedos, haciendo chistoso la notoria diferencia entre el tamaño y la proporción. Sonriéndose mutualmente ante un cálido sentimiento en ese ambiente de paz.
Falta el epilogo. Hay verán lo que paso con los chicos en sus relaciones, no soy fan de las relaciones a lo rápido, ni siquiera en el omegaverse, por lo tanto esto es como se conocieron y que el tiempo haga su trabajo. En el epilogo sabrán que paso y habrá limón.
Gracias por seguir, no tardo en subir el epilogo.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro