"Entrevistador: ¿Cuándo fue la última vez en que vio al señor Ulrich?

James Hetfield: (piensa muy bien su respuesta antes de hablar) En el backstage... sí, ese mismo día tuvimos un concierto, nosotros andábamos firmando autógrafos, Lars dijo que iba al baño y nunca más volvió.

Kirk Hammett: No... no regresó simplemente, no dejó huellas de nada. Dudamos mucho acerca de que haya huido.

Jason Newsted: Concuerdo con Kirk, no pudo haber huido, no presentó ninguna conducta extraña ese día...

James Hetfield: Un secuestro, sí, eso debió ser... no existe ninguna otra explicación.

Entrevistador: ¿Conocen a alguien que pudo haber cometido eso? ¿Tienen sospechas? ¿Alguien que estaba en contra del señor Ulrich y haya querido matarle por algo?

Kirk Hammett: No.

James Hetfield: Para nada.

Jason Newsted: No, sin embargo, ehh... Lars tenía una fan loca, aveces se estresaba con ella. No creo que esa chiquilla tengo algo que ver, sería algo muy loco...

Kirk Hammett: ¿La tal Cindy? (Jason asiente) Esa puta loca, joder... ella si sabía hincharle las bolas al pobre Lars.

Entrevistador: ¿Y qué saben de esa chica?

Kirk Hammett: Que es una loca...

Jason Newsted: Muy fanática de nuestra banda, sobretodo de Lars y siempre le mandaba cartas muy extrañas.

James Hetfield: Ah, sí, de ella me acuerdo, dudo que ella haya tenido que ver acá, en todo caso, si hubiera sido ella, lo habría violado al pobre enano, no lo sé... (encoge los hombros)"

Aquel extracto de una entrevista hecha por la policía local, ya daba por entendido que la banda Metallica conocía la existencia de Cindy Tanner, no creían que ella fuera capaz de lo que hizo por la simple razón de que ella era una niña pequeña de quince años. De todas formas, todos concordaban en que era una loca, sentían pena por su compañero de banda que soportaba las cartas demenciales de odio y amor que ella enviaba.

Ahora, un fragmento de su diario introductorio a First_kiss.ntsc...

"¿Recuerdan que hace un tiempo me lucía con que iba a tener un nuevo look? Pues, decoloré mi cabellera castaña natural al punto de que mi cabello sea cien por ciento blanca como la nieve, agarré un par de tijeras y arreglé el desaliño, ahora mi pelo llega hasta un poco más abajo de las mejillas. Es un look renovado, incluso, con un poco de tela vieja, me hice un vestido rojo de princesa, mis dedos quedaron llenos de agujeritos porque no sabía clavar bien la aguja... una apariencia nueva, sabía que Lars iba a amarme así, ninguna otra chica que yo conozca se ve de esa formas, todas rubias o de cabello negro, o sino, son un color mega artificial y asqueroso... Nunca vi a alguien de blanco. Creo que así de original por fin me amará..."

First_kiss.ntsc

Enciende la cámara y se ve utilizando un vestido rojo, muy mal cosido, tenía parches mal puestos y también se le apreciaron manchas de sangre en éste, de manga corta y tiro largo, la falda era más bien corta y con varios vuelos.

Se arregló frente a la cámara, como si fuera un espejo, hasta soltar un par de risas traviesas.

- Mi nuevo look completado, ya le he hecho el pastel... de crema y fresas, porque ese me resultó más fácil.

Señaló una pequeña porción repartida en un plato de loza, se veía un bizcocho pobremente decorado con crema y una fresa.

-Le despertaré, al fin, estaremos juntos por siempre...

Se corta la grabación y muestra en el segundo exacto en que despierta Lars Ulrich, horrorizado abrió los ojos a punto de salirse de sus cuentas al forcejear sus extremidades y no podía salir.

- Oh, ya despertaste, bello durmiente... -besó su frente- ¿Me recuerdas? ¡Soy Cindy! Tu verdadera novia, la única que tú amas, ¿verdad?

Le negaron y ella chilló asqueada.

- No, no... seguro el cloroformo te hace muy mal, cariño... vamos de nuevo -inhalaba y exhalaba en desesperación- Me amas a mi, ¿cierto?

Volvieron a negar.

- ¡Lars! Mi amor... el rey de mi mundo, de mis fantasías, oh, el dios de mi vida... ¿Por qué haces las cosas tan difíciles?

Mordió su labio, sus facciones faciales temblaban al punto en que perdió el cuidado a la hora de morder y se notó el bruzo cambio de emoción que tuvo al percibir su sangre en los labios. Intentó limpiarse con sus muñecas cortadas, gimió porque se notaba que los cortes en esa área recién habían sido hechos, estaba teniendo una especie de crisis en ese momento.

- ¿Tienes hambre?

Asintieron.

- ¿Quieres probar este pastel que te hice con mucho amor?

Le negaron.

- ¡¿Por qué?! -gritó, a su vez que las lágrimas caían- ¿Por qué no quieres? ¡Yo me he esforzado mucho para que todo salga bien y tú lo arruinas! ¿Vas a comer lo que te preparé o no?

Negaron.

Se tiró en el suelo a llorar y maldecir a Lars Ulrich por lo siguientes cinco minutos de grabación, posterior al escándalo, se levantó y cogió un cuchillo enorme de carnicero.

- ¿Vas a comer?

Asintió.

- ¿Prometes no gritar ni hacer mucho ruido?

Negaron.

Golpeó el cuchillo contra la pared, a medio metro de distancia del cuerpo amarrado.

Asintieron.

- Vale, pero yo te daré de comer, porque si te desato puedes gritar y si gritas, todo va a salir muy mal.

Pensó muy bien sus acciones antes de actuar, tenía un pequeño pedazo atrapado en el tenedor en una mano y en la otra, sostenía la cinta aislante. Al mismo tiempo: quitó la cinta e introdujo con cuidado el pedazo de pastel en la boca del baterista, quién con algo de dificultad y desconfianza masticó hasta tragar, ahí puso una cara de asco.

- Tranquilo, precioso -le lanza un beso-, no tiene nada de malo. Lo preparé yo, no tiene veneno, no es nada malo.

Al finalizar aquella porción, la expresión facial del señor Ulrich no cambió, seguía en desconfianza.

Le volvió a sellar la boca con rapidez, cuidadosa de no tener ningún descuido.

- ¿Ve esa cámara? -asintió- Estoy grabando todos nuestros buenos momentos, ¿sí? Me gustaría grabar nuestro primer beso, ¿te parece bien? -negó, horrorizado- ¿Ah, no? ¿Por qué? ¿No me quieres? -volvieron a negar- ¡Maldito! -gritó- ¿Por qué siempre me haces sufrir así? ¡Me ilusionas y luego me niegas! ¿Por qué? Eres tan despreciable, maldita sea, eres horrible... -sollozó mientras se le escapaban las lágrimas- ¡TE ODIOOO!

Dio un golpe seco contra la pared.

- ¿Me vas a besar o no?

Todas las respuestas fueron "no", ella no paraba de llorar al respecto, maldecía y gritaba frases denigrantes, como las de su diario.

Se notó cuando su paciencia terminó, retiró la cinta con fuerza haciendo que Lars soltara un pequeño quejido.

Agarró con fuerza su rostro para forzarlo a que le diera un beso, no se veía con mucha claridad, no obstante, el asco fue presente desde el inicio, ella intentaba lo posible porque fuera algo apasionado para ambos -cosa que no era del todo cierta-, ella sonreía y empezaba a morder los labios del baterista.

Eso era algo típico que hacen las parejas cuando quieren demostrarse afecto, eso todos lo saben y más que cuando se muerde debe haber cuidado para no herir a ese alguien.

Cindy, al parecer no fue consciente de ello o tal vez mordió muy fuerte a propósito, la sangre invadió su boca y la del baterista, sonrió encantada y prosiguió mordiendo a más agresividad con la desquiciada intención de sentir la sangre.

Se detuvo al sentir un cabezaso que le dieron, retrocedió para sobarse y Lars comenzó la gritar por ayuda. En desesperación, le arrojó el plato de loza para que se quebrantara en su rostro, dejando un par de marcas en las que empezaba a brotar gotitas de sangre.

Le bofeteó dos veces.

- ¡No seas terco! Harás lo que yo diga o sino, vas a morir aquí mismo, ¿entiendes?

- ¡¡AYÚDENMEEEEE!! -continuó, sin miedo.

Otra bofetada más, le tapó de nuevo la boca sangrante con más cinta, cubriendo toda la cabeza para que no se salga el aislante. La sangre continuaba escurriendo y eso dificultaba que el pegamento hiciera su función.

Ella salió de escena para regresar con cadenas y más cuerda.

Reforzó las ataduras con las cadenas y con la cuerda, amarró la boca para cerciorarse de que no se iba a despegar la cinta.

Acarició la mejilla, limpiando un poco para evitar que la sangre se secara y quedaba manchaba la muy pálida piel.

- Por fin juntos, mi amor... -sonrió, besó su frente- Y ya tuvimos nuestro primer beso, ¡que hermoso todo! Prepárate, que para ti, cariño, tengo mucho más.

Rió a carcajadas psicópatas, mandó saludos a la cámara y cortó con punto final la grabación de la cinta.