·Besos y suspiros·
·Jungkook·
—¿Porqué te fijaste en mi primero? Se honesto, no me voy a enojar.
—Eso dicen siempre antes de enojarse.
Seguimos en su habitación, aún es emocionante, no mentí cuándo dije que era la primera vez que conocía el cuarto de una chica, es incluso más emocionante ya que estamos ambos acostados en su cama.
Pero tengo sueño, y ella molestando mi cabello, haciendole moños y no sé que mas, no ayuda mucho a que me mantenga despierto.
—Sólo dilo, tonto— me río suavemente— necesito material para crear una historia convincente por si papá vuelve a preguntarme como nos conocimos y porqué llegaste de la nada diciendo que te gusto.
—Eso es un problema, pues si soy honesto, primero me gustó tu rostro, solo eso— enumero con los dedos— luego, tu cuerpo llamó mucho mi atención y después de eso, nos besamos y tocamos ebrios, así que creo que me deje llevar un poco por esa química sexual.
—¿Cambió algo? No necesitas que sea tu novia para eso.
—Si cambió algo— cierro los ojos— fui a disculparme contigo luego del asunto de Mingyu, pensé que estarías muy molesta conmigo pero al contrario, me sonreiste y dijiste que era culpa de ambos— siento como deja mi cabello en paz— así que pensé, woah, incluso su sonrisa es atractiva— su respiración me golpea de lleno el rostro, sigo con los ojos cerrados— entonces, sólo pensé que sería divertido coquetear con una actitud como la tuya, y luego mientras trabajaba con el resto de los chicos... se me pasó por la cabeza invitarte a salir.
Siento un besito, pequeño e incitador que me hizo relamer los labios.
—¿Entonces?— suspiré.
—Hablé con Namjoon, mi hyung— continué— le dije que deseaba hacer, estuvo de acuerdo y su novia me ayudó a planear la cita, así que fui a tu casa con todo planeado y esperando que no te negaras.
D
os besitos y su mano desabotona el inicio de mi camisa, acaricia el hueso de mi clavícula y aún con los ojos cerrados suspiro disfrutando de los mimos.
—¿Entonces?
—Entonces—trago saliva— fue una cita de lo mas perfecta, me gustó tu seguridad, tu humor, tu risa y lo arriesgada que eres, tenías miedo, pero querías hacerlo— traza circulos en mi piel y ya estoy empezando a ponerme ansioso— eso me encantó— abrí los ojos, sonreía cuál seductora— y decidí que quería coquetear, pero con un fin más serio, luego todo se puso a mi favor y henos aquí, fin. Ahora bésame, no me estés tentando.
—¿Qué fue ese resumen? ¿Y el resto de la historia?— blanqueé la mirada.
—No leo el futuro, vamos a ver como resulta ser el resto de la historia.
—Eres tonto.
Sonreí impaciente, mi mano fue a parar a su cuello y busqué su boca, estampandola con la mía. Mierda. No sabía cuánto necesitaba un beso de Al hasta ahora, el sonido placentero que abandona mi garganta es inhumano, jodidamente me fascina la brusquedad que tiene a la hora de besar, es su lengua buscando la mía y son mis labios chupando los suyos, abandono el agarre en su cuello y ambas manos bajan, terminando dentro de los bolsillos traseros del jean ajustado que se robó mi atención cuando llegué.
Es deliciosa, deliciosa y toda para mi.
Me gusta.
Como que todo está muy tranquilo, ¿no?
Besitos rojos.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro