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III [Final]

La atracción de Sana por Jihyo, no fue a primera vista, cuando ambas tuvieron un encuentro frente a frente para sus ojos era una chica común. Pero a menudo, y en su monótona rutina de trabajo, cuando se dirigía a los baños, pasaba por el departamento de escritura, y poco a poco la chica de cabello rojo fue llamando su atención. Era poca la interacción entre ambas, Jihyo le enviaba su trabajo a través del correo electrónico. Cuando Sana leía sus mensajes; la sorprendía y eso hizo crecer ese sentimiento, que se convirtió en admiración. Sus versos breves y muy detallados le llegaban al corazón. Cuando quiso curiosear un poco más de Jihyo, descubrió que ésta trabaja en un libro de terror y que su amiga de trabajo, Jeongyeon, está ayudando en la edición. Sana no dudo en ayudarle a Jeongyeon, y mostrarle su apoyo a Jihyo de una manera discreta, para que la señorita no pensara que ella buscaba algo a cambio. Admirarla de lejos, le hacía bien, tan bien, que eso la inspiró a escribir muchas frases de amor, en las cuales público muchos tuits. Una vez la veía, se encaminaba a los baños, y con tranquilidad los escribía. Es la única forma en la que su imposible y discreta atracción, podía desenvolverse. Tal vez su manera de actuar puede ser un poco infantil, pero nunca sintió tener alguna iniciativa. Las cosas podrían cambiar desde este momento, Jihyo necesita de su ayuda.

Los ojos de Sana, no paran de observar a Jihyo mientras discute el tema de la tarjeta con Nayeon y Chaeyoung. Su corazón late deprisa, sus ojos brillan, y su cuerpo no se mueve, a la vez odia pero disfruta de la sensación. Odiaría que la pelirroja se diera cuenta de cómo está actuando, para nada del mundo podría dejar que ella lo notara. De repente, tiene la oportunidad de que las dos se queden a solas, Sana quería entablar algo más con ella, no un simple compañerismo de trabajo, tiene algo en su mente y no piensa desaprovechar esa idea, ni mucho menos la oportunidad.

Escucha la voz de Jihyo hablarle, las palabras se dirigen solo a ella. ¿Si hubiera alguna forma de decirle lo que siente? De hacerle saber que quiere conocer un poco más de ella, y mostrarle su interés romántico, aquel que comenzó como una simple admiración.

Su expresión cambia repentinamente cuando Jihyo le comenta que leyó sus tuits, y que le gusta su trabajo. No podía creerlo, de alguna manera le llegaron los mensajes, pero sin saber que son para ella. Pudo notar en sus palabras escritas, que Jihyo no es muy buena en el romance. La japonesa se siente aliviada al saber que la chica que le gusta no tiene ojos para nadie, aunque a la vez le desanima, al saber que tampoco tiene ojos para ella. Pero, ¿cómo eso iba a ser posible? Si recientemente puede que conozca de su existencia.

—Tal vez no has experimentado el romance, pero yo sí, y lo estoy experimentado justo ahora. En este mismo instante puedo expresar las miles de emociones que estoy sintiendo, solo con ver a esa persona.—le dice Sana sin pensarlo. A Jihyo no le extraño, pero la japonesa se golpearía miles de veces, para no volver a decir eso.

—¡Guau! Eso me gusto. ¿Por qué no lo anotas?—le ofrece una hoja en blanco junto a un bolígrafo.

Sana lo recibe, y presiona fuertemente con su mano el bolígrafo. Trata de que sus temblores en la mano no delaten lo nerviosa que está.

—Lo siento, olvidé lo que acabo de decir.—dice un poco avergonzada.

—Comentaste que sientes miles de emociones al ver a esa persona.—le recuerda Jihyo.—Yo también lo siento... sé que no es tu trabajo y tal vez te sientes presionada por escribir algo que...

—No es nada de eso. Es que sólo...—se queda en silencio no sabe qué decir. Solo comienza a hacer garabatos sobre la hoja de papel.

—Si es acerca de los créditos, lo hablaremos en la sala de juntas.

—No, no, eso se puede resolver luego... solo es qué hay otra condición en esto.

—¿Qué tipo de condición?

Sana trata de que su idea, no le suene y le dé la impresión a Jihyo de que es una chica insistente, o algo así por el estilo. Es obvio que no puede negar su interés en ella, pero ¿por qué pondría como condición que saliera con ella? Es tonto y...

—Olvídalo.—dice en voz baja.

—Una vez finalicemos la tarjeta, te invito a cenar algo delicioso.

Sana cambia su expresión a una sorprendida.

"Tranquila Sana, solo es una cena de agradecimiento." se dice a sí misma. "Pero es una cena con la chica que te gusta, Park Jihyo."

—¡Sana! ¿Estás bien?—interrumpe la coreana. Sana le regala un sonrisa y comienza a escribir.

—Me parece perfecto, la idea de cenar algo juntas. ¡Comencemos a trabajar!

Más de una hora trabajando en la tarjeta, ambas se encuentran exhaustas. Jihyo siempre quiso colaborarle a Sana, en todo momento. Sana levanta la hoja de papel, y comienza a leerle el mensaje en voz alta a Jihyo:

La bufanda roja

"Abrígame en tus brazos.
Hazme sentir cálida con el dulce sabor a chocolate de tus besos.
Acaricia mi piel, como la dulzura de un malvavisco.
Recuesta tu cabeza
y hazme sentir cálida con tu bufanda roja.
Mientras descanso en tu pecho, puedes sentir mis latidos, ¡feliz navidad amor mío!"

—¡Está perfecta! No dudo que a Nayeon le encantará. ¡Gracias Sana!—la abraza.

—¡Quiero ver tu tarjeta, Park!—aparece Nayeon interrumpiéndolas.

—¡Guau! Que puntual eres, Im.

—Siempre.—le arrebata el papel de las manos a Sana. Comienza a leer cada verso de la tarjeta.—Mmmj... ¡Guau! Hizo latir mi corazón.

—No sería posible sin Sana.

—No me sorprende, algo tan lindo y cursi no saldría de ti Park.—le dice su jefa.—Perfecto, nos veremos en la sala de juntas para que Chaeyoung y tú concuerden el diseño.

—No me puedo quedar, tengo un compromiso. Se los dejaré a su cargo, y por favor, créditos a Sana.

—No hay problema, lo resolveré, pueden irse hoy temprano.—Nayeon sale de la oficina.

—Sana, si quieres pasa por tus cosas y nos encontramos en el estacionamiento.—le dice Jihyo y ella asiente.

—Por cierto, ¡Gracias por ayudarme!

Sana y ella se sonríen.

—Fue un placer ayudarte, Jihyo.

[A la mañana siguiente]

—¿Ya viste que se dispararon las ventas de las tarjetas navideñas?—le pregunta Minari a Jihyo.

—¡Quiero verlas! No pude quedarme ayer para planificar el diseño.

Mina le ofrece la postal a Jihyo, esta tiene un peculiar diseño, que no cuadra muy bien con el mensaje bonito que Sana y ella se habían esforzado en crear.

"Querida amante, eres como la noche buena, corta, fría y deliciosa. Una vez al año se dará, una vez al año te voy a dar."

—¡Espera! Esta no era la tarjeta que se iba a publicar.

—¡Felicitaciones, Jihyo! Haces que esta empresa caiga en banca rota.—le dice Nayeon burlonamente.

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