Sêvěn
Había pasado un mes, un mes donde las cosas estaban un poco ¿extrañas?
Hablemos de Bangchan, él estaba... raro muy raro, resultó que se la paso persiguiendo a Jeongin todos los días, se comportaba de forma extraña, solian pelearse muy seguido pero últimamente están... muy juntitos.
- Y me dirás que es lo te traes con Bangchan? - Seungmin preguntaba, porque no quería que el tonto del mayor lastime a su amigo.
- Ya te dije solo son tutorías, y nada más- sé notaba su nerviosismo en como empuñaba sus manos.
- Sabes que si pasa algo entre ustedes te apoyaré pero no quiero que te lastime.
Ambos suspiraron y se dirigieron al salón.
...
Felix? Él también tenía algo raro, el día de la piscina, por cosas del destino conoció a Hyunjin y bueno se imaginan lo que sucedió.
- Hyunjin, él es malo, mira como dejo a Minnie - el bajito insistía pero este solo lo ignoraba.
- Ya SEO es mi problema lo que tenga con Felix, talvez Seungmin es un caso aparte de lo que suceda entre nosotros.
Ciertamente era muy extraño.
...
Estaban en el jardín de la casa o mejor dicho Mancion de Changbin, viendo algunas flores que estaban plantadas.
- Mira lo que tengo Minnie - sonrió el mayor, en su mano habia una bolsita de papel con dibujos de unas flores.
- Semillas? - preguntó divertido el menor.
- Sí, aunque no por mucho tiempo, las plantaras conmigo? - se acercó a Seungmin y tomó su mano.
El castaño asintió y siguió a Changbin hasta una zona donde había tierra sin plantas, era mas o menos unos dos metros cuadrados.
- Lo tenías ya preparado verdad hyung - sonrió haciendo pequeños sus ojitos.
- Puede que si puede que no, nunca lo sabremos - bromeó el mayor.
Con una pala de mano hicieron unos huecos pequeños, abrieron la bolsa y sacaron las semillas, eran de colores rojizos, pusieron 2-3 semillas y las taparon, a los minutos Changbin llegó con una regadera y las mojo.
- Sabes, cuando ya haya flores te las regalaré en un lindo ramo que yo mismo lo haré- sonrio hacia el menor.
Las mejillas de este tenían un tono muy bonito, su sonrisa tímida expresaba que le agradaba la idea.
- Esta bien pero, deja una para mi yo la quiero cosechar personalmente - afirmó el menor.
El mayor asintió, los rayos del sol caían en la cabellera rubia de Changbin resaltando más esas facciones tan bonitas, su nariz no muy grande, sus pestañas largas, sus labios esponjosos.
Su perfil se veía muy bonito, tenía una sonrisa coqueta, que últimamente lo pone muy nervioso.
- Soy muy guapo lo se, pero me vas a desgastar si me sigues mirando así Minnie- sonrió coqueto.
- Claro señor presumido - hizo un puchero involuntario.
Al final del día tenían una gran parte sembrada de Gardenias, Changbin quería expresar su amor secreto por medio de estas hermosas flores cuando las cosechara y sería únicamente para él.
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