Capítulo Veintidós ~ Territorial
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--¡Ya! En serio debo ir al baño. Me voy a hacer pipí, alfa. ¡No! Me haces cosquillas... --Pedía Jungkook, pero el alfa no quería soltarlo, al contrario, quería seguir besando su cuello. --Jinnie... hyung... Ah, yeobo... ¡Seokjin!
--Ya, ya, entiendo. Ya debo ir a clases de todas maneras. --dejaba un tierno beso en los rojizos labios de su joven esposo. --Recuerda que tenemos cita con tu médico a las 4. Te estaré esperando afuera, en el estacionamiento. --informaba, limpiando con su pulgar los belfos mojados del omega.
--Sí. Ahí estaré. Te quiero. --el omega dejaba un fugaz beso en los labios del alfa y corría hacia los baños para omegas varones de la universidad.
Abría la puerta y buscaba un cubículo para descargarse. Había tomado mucho café y sentía el alivio automático al orinar. Unas voces que ingresaban al lugar lo distraían un poco de sus pensamientos.
--... Bueno, yo también lo ví así. Qué lástima por Kim. ¿Lo viste? Hasta sintió asco de besarlo. Tal vez sí está siendo obligado.
--Deja de hablar idioteces, Han. Se nota que ellos se quieren y me gusta más Jeon para él que el presumido ese de Lee Chanyeol. --decía una voz grave.
--Lo dices porque Chan te quitó a tu alfa y estás celoso...
--Claro que no, a mi nadie me quitó nada, Han. Las personas no somos posesiones. Si él quiso irse, bien por él, de todas formas yo ya estoy saliendo con alguien más.
--Como sea, Kim está demasiado precioso y sexy para ese omega tan simplón... Tal vez si yo lo seduzco caiga redondito...
--Oh, lo dudo mucho, Han. --Jungkook salía de su cubículo para enfrentarse con las personas que estaban hablando de él y Seokjin. Eran dos omegas. Uno era un poco más alto que él, de pelo azul y en uno de sus ojos tenía doble párpado. Unos decorativos lunares adornaban aún más su bonito rostro y el otro... bueno... tenía salud. Casi podía pasar como un simple beta si no oliera a chocolate.
--P-pues es la verdad. --continuaba el omega de aroma a chocolate algo nervioso y avergonzado. --Es obvio que te besó porque quizás hizo una apuesta y-
--Puede ser... --contestaba Jeon secándose las manos con papel. --O tal vez es porque es mi esposo. --continuaba mostrándole su anillo. --¿Por qué crees que no habíamos asistido a clases? Estábamos en Busan, querido. En nuestra luna de miel.
El otro omega sonreía de una preciosa forma cuadrada.
--Te lo dije, Han. Se nota que ellos se quieren.
--¡Aish! --Han, frustrado salía de los baños.
--No le prestes atención, mi primo siempre ha sido algo envidioso. Kim Taehyung --saludaba, inclinando un poco su cabeza de manera jovial.
--Jeon Jungkook. --saludaba el castaño de vuelta. --No te había visto nunca por aquí.
--Me transferí hace muy poco, estaba estudiando pedagogía, pero no me gustó, luego me cambié a fotografía, pero pedían demasiados materiales, no hay bolsillo que aguante. Así que ahora estoy en artes escénicas, aunque estoy comenzando a inclinarme un poco más por la música.
--Vaya, son demasiados cambios. --decía sorprendido el castaño.
--Sí, bueno, por mi es mucho mejor. Mi padre dijo que apenas termine mi carrera me tendré que casar y yo nací para ser libre, ni loco me amarro a un alf-.
--¡Aquí estabas...! Me... hiciste buscarte... por... Ah... me duele el pecho... --se quejaba Jimin, tocándose el torso. --Hola... Taehyung.
--Hola, Jiminnie. --saludaba sonriente el peliazul al omega que acababa de ingresar al baño y Jungkook percibió un aroma a canela proveniente de él.
--Vaya, hueles a-
--¡Rollitos de canela! --exclamaban Jimin y Taehyung al unísono.
--Rollitos de canela, sí. --concedía. --Y ¿De dónde se conocen ustedes?
--A Tae... lo conocí durante tu luna de miel. No hablamos mucho, pero Taehyung... es muy amigable, llevaba una semana aquí y ya tenía un millón de amigos. --informaba Jimin, aún cansado de recorrer toda la facultad.
--Bien, debo irme. Tengo un proyecto grupal, debo ir a la biblioteca. Nos vemos por ahí. Un gusto. --se despedía el omega y salía del baño.
--¿Por qué me buscabas? --preguntaba Jungkook colgándose su, esta vez, mochila.
--Oh, hiciste todo un revuelo en la cafetería. Debiste ver la cara del idiota ese de Chan. Tuvo que salir casi corriendo y-
--¡Aquí estabas! --decía la voz de Lee Chanyeol al ingresar al baño junto a su séquito de omegas superficiales, todos parecían hechos en una fábrica.
--Otro... --Jungkook suspiraba rendido. --¿Necesitas algo?
--Te crees muy listo, ¿no? --comenzaba y el castaño rodaba los ojos.
--No me creo listo, lo soy. Y ahora debo ir a una clase importante, así que si tienes algo que decir, que sea rápido, por favor --decía mirando su reloj. Ni siquiera había almorzado aún.
--Si piensas que vas a quedarte con mi alfa estás muy equi-
--¿Tu alfa? ¿Cuál de todos? Porque ya sé que tienes más de uno. --interrumpía Jungkook exasperado. Al grupito de amigos del omega pelirrosa se les borraba la sonrisa. --Por lo demás, Seokjin no es tu alfa. Nunca lo fue. Según sus propias palabras, eras... Insípido. O algo así, no lo recuerdo bien porque estaba en mi celo, con él, mi esposo. --agregaba el castaño, haciendo enojar aún más a Lee.
--M-mira, Jeon, no juegues con fuego porque-
--No idiota, no tengo tiempo para tu mierda. Solo te advertiré una cosa. --amenzaba Jungkook ya harto de ese tipo que quería quitarle a SU alfa. Se acercaba peligrosamente al pelirrosa mientras su bola de amigos brillaba por su ausencia --Si te veo cerca de mi esposo, si te atreves a mirarlo, si siquiera te topas con él por una simple coincidencia me vas a conocer muy bien. Créeme que se me olvidará que juré no atacar a nadie solo por defensa propia y te romperé esa perfecta nariz y te volaré cada maldito diente de tu bonita sonrisa hasta deformarte la cara y créeme que si alguna vez pude hacerlo con alfas tú no serías ningún rival para mí, ¿entendiste o eres tan estúpido que necesitas que te lo repita? --decía Jungkook terminando con su voz dominante y hasta a Jimin le temblaron las piernas. El castaño tenía el rostro de Lee Chanyeol tan cerca suyo que podía oler su miedo. Sus ojos estaban cristalizados y su labio temblaba. --Eso creí. --terminaba. --Vamos Minnie, aún hay tiempo. Tengo hambre y mi yeobo no cuenta como comida...
--Bien, Jungkook. ¿Cómo te has sentido? --preguntaba el médico endocrinólogo una vez la pareja de recién casados se hubo sentado.
--Últimamente me he sentido extraño. --comenzaba y su esposo lo miraba preocupado.
--Extraño en qué sentido. --decía el alfa, acomodándose sus gruesas gafas y anotando algo en su computadora.
--Más... salvaje. No sé como explicarlo, pero estas últimas semanas he podido percibir a mi lobo mucho más cerca. Me he vuelto más territorial, posesivo y también mi celo llegó de repente, por lo general ocurría y yo ni supresores tenía que tomar, pero esta vez se salió de control. --explicaba al médico.
--¿Y estabas solo cuando ocurrió tu celo?
--No. Estaba con mi esposo. Estábamos en nuestra luna de miel.
--Tal vez estuviste expuesto a muchas feromonas de alfa. --explicaba el médico.
--Pero solo he estado cerca de un alfa, mi esposo. --respondía Jungkook.
--Y tu esposo es un alfa dominante-
--Y dominado. --agregaba el aludido, lo que provocaba una carcajada en el médico.
--Si usted lo dice... --decía divertido el médico. --Mira Jungkook. Lo más probable es que mientras sigas cerca de tu esposo y sus feromonas, tus ciclos de celo se van a ir regularizando. Además tienes más probabilidades de quedar embarazado en caso de que quieras tener cachorros.
--¡No! No quiero cachorros. --negaba el omega con horror.
--No queremos cachorros por ahora. --afirmaba el alfa al médico.
--Ni ahora, ni nunca. --reafirmaba el omega.
--No exageres, yeobo. --decía el alfa con una sonrisa.
--No exagero, Jinnie. Yo no quiero cachorros.
--Bueno, pero en el futuro tal vez...
--No, Seokjin, hablo en serio. No quiero cachorros, no los quiero nunca, jamás...
Un incómodo silencio se producía en el despacho del médico quien miraba a la joven pareja preocupado.
--Mmm... --el médico se aclaraba la garganta. --Tienen mucho de qué conversar. Por lo demás, Jungkook, te recomiendo que uses algún método anticonceptivo. Hay muchos y son seguros. Parches, implantes, inyecciones, píldoras, etc. Convérsenlo bien, sé que llevan casados muy poco tiempo, pero es importante que hablen sobre esto.
El camino de vuelta al apartamento fue incómodamente silencioso. Ninguno de los dos quería hablar ni ceder.
Ambos bajaron del auto muy callados, cada uno perdido en sus propios pensamientos.
--¿Qué quieres comer de cenar? --preguntaba el alfa después del agónico mutismo de ambos.
--Cualquier cosa está bien para mí. --resolvía el omega, quitándose la mochila y la chaqueta.
Era la primera vez que pisaba su nuevo hogar y ni siquiera había disfrutado la primera visita. Suspiraba frustrado. Ya habían discutido suficiente con Seokjin, pero esta última discusión sería la más seria de todas.
Sentía el peso del alfa a su lado y le dirigía una mirada analizadora.
--Así que... no quieres cachorros... --comenzaba el azabache, secándose el sudor de las manos en las rodillas de su pantalón.
--En efecto. --respondía el omega, cruzándose de brazos.
--¿Puedo... saber el por qué al menos? --preguntaba Seokjin de manera algo de hostilidad.
--Nunca pensé que sería un omega y me...
--¿Siempre darás la misma excusa para todo? --interrumpía el alfa ya molesto.
Jungkook miraba al azabache sorprendido por su reacción.
--¿Al menos podrías dejarme terminar de hablar? --cuestionaba el castaño.
--Es que siempre es "yo creí que sería alfa", "no debí ser un omega", "odio a todos los alfas"... Creo que ya deberías superar esa etapa y avanzar, Jungkook. Estamos casados, se supone que un alfa y un omega se casan para formar una familia. Somos adultos, maldición.
--P-podemos ser una familia de dos. --decía algo dolido por la actitud de su esposo.
--¿Te estás escuchando? Las familias de dos no existen, seríamos simplemente una eterna pareja y ¿qué hay de mi apellido y mi legado?
--¿Estás hablando en serio, Seokjin? ¡Eres un Kim! Por más que quieras un legado, tienes el apellido más común que existe en este país. --replicaba el omega sumamente frustrado.
--Ahora no te parece mi apellido, al menos dame un argumento válido por el cual no quieres tener cachorros y te tomaré en serio. --cuestionaba Seokjin, poniéndose en pie.
--Porque no quiero tenerlos, eso debería ser suficiente. Incluso aunque fuera el argumento más ridículo de todos, siempre deberías tomarme en serio, Jin. --argumentaba el omega.
--Para ti es fácil decirlo...
--No, no es fácil. Sé lo que significa lo que estoy diciendo, pero no voy a tranzar. Ni mi lobo ni yo queremos bebés.
--Entonces todo esto es un error. --soltaba el alfa.
Y Jungkook lo sabía, él siempre lo supo. Por eso no estaba en sus planes estar jamás con un alfa, siempre pensó en algún beta para él. Algo dentro de él se desgarraba, su lobo escondía la cola entre las patas ante la mención del azabache.
--Si tu lo dices, entonces sí. Gracias por todo, Seokjin. Fue bonito mientras duró, al menos para mí. --decía antes de soltar un sollozo involuntario. Tomaba su chaqueta y su mochila y salía del bonito apartamento lujoso que había recibido como regalo de bodas.
No tomaba el ascensor, elegía las escaleras para descender. Cuando llegaba al piso 1, Seokjin ya estaba abajo esperándolo.
--Espera... espera, Jungkookie. Yo...
--N-no es necesario, alfa. --decía soltando espesas lágrimas. --Nunca fui lo que buscabas, nunca fui bueno para ti. Era demasiado bonito para ser verdad de todas maneras. --chillaba y se mordía el labio para evitar sollozar tanto. Se secaba las lágrimas con la mano.
--Lo siento, en serio, lo siento mucho.
--Eso no cambia las cosas, Seokjin. No te daré un cachorro jamás. Es mejor que nos demos un tiempo. Para... pensar mejor las cosas. ¿Sí?.
--Eeh... En ese caso. Es mejor que tú te quedes aquí. No quiero que vuelvas con tu padre y te topes con Yoon. --Seokjin le extendía el folleto en donde estaba la clave de ingreso a su nuevo "hogar". Extendía nuevamente la mano y le entregaba un juego simple de llaves. --Son de mi auto. Yo puedo usar otro.
--Bien. --decía secamente al recibirlas y las apretaba en su puño.
--Bien. --Confirmaba el alfa. Metía las manos en sus bolsillos y salía del edificio sin mirar ninguna vez hacia atrás.
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*Les quiero, pero nadie me dijo que publiqué un borrador del capítulo 23 y que me salté el 22 xD. Pasas que cosan. Mañana subiré el 23 corregido y el 24. 💕
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