Marchando hacia Carelia
En marcha hacia el frente, en algún lugar de Carelia, 10 de enero, 1940
Paaveli Venäläinen, libreta de campo.
Partimos desde Helsinki bastante rápido, solamente hicimos una pequeña escala en Vipurii y partimos hacia Yläjärvi, durante el viaje que mayormente en silencio se escuchaba una pequeña guitarra de uno de los chicos con melodías alegres intentando levantar los ánimos a algunos de los que estábamos ahí.
-Eh, el ejército cuida bien a sus soldados... No?, paseos en autobús y todo.- Dijo alguien con tono sarcástico
-Solo están apurados por enviarnos a resistir en algún lugar estrecho...- Dijo Matti
-Ah, vamos un paseo gratis y tu comienzas a dudar...- Dijeron desde el fondo
-Solo ponte a rezar que el precio no sea de nuestras vidas.- Dije.
-Eso sería un precio muy barato, dicen que vamos al frente de Mannerheim a matar rusos desde las trincheras. No hay necesidad de salir afuera.- Dijeron por ahí.
-Tomen chicos- Dijeron al pasar una botella de Vodka, de seguro robada a los rusos –Tomen un poco si no quieren volver congelados como héroes en este autobús...- Dijeron.
-Al menos así tendríamos una historia que contar a nuestros hijos.- Dije sin más.
Voltee la cabeza por la ventana para ver a los muchos que marchaban a los lados de los vehículos, puestos como si fueran guardianes para nosotros. Llevamos viajando un par de horas hasta llegar a una especie de puesto de avanzada. Un general nos esperaba allí para re-asignarnos una misión.
13:09PM, Retaguardia del frente de Taipale:
Si, recuerdan que dije que los Héroes del Rio Taipale están muertos?, bueno me equivoque. Esos héroes llevan resistiendo tanto como nosotros y nos quieren enviar como apoyo a sus tropas asignándonos a la 4ta compañía de Carelia.
-¡4ta Compañía de Carelia, prepárense para avanzar sobre la cresta de Äyräpää! ¡Los combatientes dejen sus mochilas aquí junto a las cocinas de campaña!-
-¡Bien muchachos, nuestra labor consiste en emboscar a los rusos si se atreven a cruzar el rio Taipale!-
-¿Vendrán muchos?- Pregunte.
-Vendrán los que hagan falta para hacernos caer...- Dijo.
-Pero podrían ser capaces de rodearnos y aislarnos!- Dijo un hombre
-Bueno, Laurila quiere que los sorprendamos detrás de aquella cresta, si los rusos logran cruzar el río... Podrían cortar el frente de Taipale entero.-
-Puede que nos dividan...- Dije sin más.
Frente de Taipale, Región de Carelia, 15:09 PM
Mientras esperábamos los ataques ocultos en nuestras posiciones, dos de esos malditos cazas pasaron por encima de nosotros volviendo a hostigar con sus ametralladoras y el consecuente apoyo de la artillería que levantaba nubes gigantes de polvo, asegurando y cubriendo el avance de centenas de rusos.
-¡Se acercan los rusos! ¡Fuego a discreción!- Grito Matti.
El sonido de nuestros disparos casi quedaba encubierto por el incesante "URRAAAA!!" de los soviéticos que con sus cargas de infantería estaban decididos a tomar nuestras posiciones y asegurar el cruce del río, decenas y decenas de soldados caían por el plomo finlandés. Hasta que los soldados simplemente dejaron de aparecer.
Alcance a reconocer el sonido de esos infernales tanques, completamente blanco que se movía sin problemas, un chico que estaba a mi lado con un fusil comenzó a silbar mientras ese vehículo se acercaba. Cuando se detuvo, tomo un cóctel molotov y me dijo. –Oye, si no vuelvo acribilla a tantos rusos como puedas- antes de ir con la botella para destruir ese tanque que al ver al finlandés corriendo hacia el comenzaba a retirarse.
-¡Haz explotar el motor por la rendija de ventilación trasera!- Grito Matti
Cosa que hizo y el tanque exploto, apareciendo decenas de rusos detrás de él. Tome el subfusil que tenía conmigo y comencé a disparar a todo ruso que osara a aparecer, no sabía si le habían dado o no porque cayo relativamente cerca de mi. Viendo la escena los fineses que estábamos ahí hicimos una especie de cordón disparando con los rifles y ametralladoras y tan concentrados estábamos que no nos dimos cuenta que el hombre volvió sin problemas a nuestro lugar.
-Maldito afortunado...- Dije al verle.
-Afortunado dices?, esos desgraciados dañaron mi rifle, tendré que robarle uno nuevo a ellos.- Dijo
-¡Sera en otra ocasión!- Grite al ver que los rusos se acercaban hasta nosotros -¡Sepárense!- Grite mientras disparaba ráfagas con mi Suomi
POV Matti:
Esos desgraciados parecieran ser inmortales, no importa cuántas bajas les encajemos sacan más soldados de quien sabe dónde. A punto de traspasar nuestras defensas, Paaveli dio la orden de separarse y retirarse.
Uno de ellos intento saltar y golpearme con su rifle, logre bloquearlo y golpearlo con mi puño... Le robe el rifle, para reemplazar mi Mosin-Nagant.
POV Paaveli:
Disparando contra los rusos, de un momento a otro me quede sin balas, así que un ruso aprovecho para intentar matarme a bayoneta, defendiéndome como pude logre clavar su bayoneta en el suelo y darle un tiro con mi pistola antes de que otro me golpeara el casco con su fusil antes de ser asesinado por Matti.
Aproveche y les quite los guantes y gorros que llevaban, munición y armas antes de irme con los demás.
Unas decenas de metros más atrás...
POV Matti:
Oculto detrás de unos árboles esperaba que los últimos finlandeses llegaran para poder organizarnos, desde aquí aun podía oír el grito de los rusos y los disparos de las armas
-¡Oye Paaveli! ¡Regresa!- Le dije -¿Se ha quedado alguien?- Pregunte.
-No, nadie que hable fines... Pero descuida no llegaran hasta aquí.- Respondió antes de irse con los demás
-¡Oye!, se están reagrupando para atacar el río!- Grite al seguirle.
Nos re-ubicamos con los demás, que estaban descansando un poco, recargando o revisando sus armas.
-Eh, Pentti... Creí que habías comprado tu rifle...- Dije.
-Lo había hecho, pero he tenido que robarle uno a ellos... Venäläinen, estas bien?-
-Eh?, ah si... Ese desgraciado me golpeo... Debió haberme disparado si quería acabar conmigo...- Respondió revisándose la cabeza.
-Pues ya lo he matado yo...- Dije.
Posiciones defensivas Finlandesas, Cercanías del Rio Taipale, 6 AM.
-Matti... Matti...-
-Eh?-
-No te duermas amigo, podrían regresar en cualquier momento...- Dijo Paaveli.
-¿Quiénes?- Dije Dormido.
-Y quienes van a ser?, los mismos que nos han intentado invadir...- Dijo algo enojado.
-Ah, cierto...-
-Escuchen chicos!, ¡No podemos permitirles que lleguen hasta el rio, eso significaría el fin para todo el regimiento! ¡Vamos a intentar llegar y retomar nuestras posiciones, muchachos!-
-¡La fuerza aérea nos apoyara, se que muchos están cansados pero tenemos que intentarlo!, después de todo... Los rusos no saben que tenemos pocos aviones...- Dijo Paaveli, tomando la palabra como un general.
Frente de Taipale, 11:09 AM
POV Matti:
A las once de la mañana, cargamos entre gritos contra las posiciones rusas disparando a cualquiera que osara moverse frente a nosotros... Apenas al vernos llegar corriendo hacia ellos, los rusos abandonaron sus pozos de zorro retirándose torpemente entre disparos.
Pudimos apenas llegar hasta aquellos pozos, no nos pusimos "cómodos" por que al momento una horda de rusos volcó contra nosotros
-¡Están regresando, vienen por nosotros!- Grito Paaveli.
Apoyados por su fiel artillería, decenas de soldados intentaban llegar hasta las posiciones que antes les pertenecían, entre disparos y algunas granadas, ni siquiera lograban acercarse lo suficiente para usar sus bayonetas contra nosotros.
-¡Oye! ¡A donde crees que vas!- Grito Paaveli, al ver que Pentti retrocedía con subfusil en mano. Ya detrás de un árbol cercano, vació el cargador del Suomi contras las tropas rusas del área.
-¡Agáchate! ¡Te expones demasiado harás que te maten!- Grite.
No le importo, un segundo cargador era vaciado contra los soldados que continuaban llegando hasta nosotros, no le importaba si era alcanzado, estaba literalmente a punta de mira de cualquier arma.
-¡CÚBRETE!- Le gritaban los demás.
Nos conmociono, cuando una bala le dio certeramente en el pecho... El continuaba con el subfusil en mano sujetando el gatillo fuertemente sin dejar de intentar disparar al número más grande de rusos que pudiera mientras sangre brotaba de su pecho y boca... nosotros también hicimos igual hasta que los rusos se retiraron del área y se escuchó el sonido del percutor del Suomi. Había cesado la ráfaga de balas.
Nos apresuramos a ir con él, para ver si podíamos salvarlo... Estaba muerto cuando llegamos.
-¿Quién es?- Pregunto Paaveli.
-Pentti Hakainen...- Dije al ver su placa de identificación.
-Matti... Ve al cuartel, y diles que los rusos han tomado posiciones... Y que no podremos sacarlos de allí, al menos no hasta mañana por la tarde.- -Dile al general Silvho, si puede enviar algunos hombres para reforzar.-
-Ya fueron tres personas, ninguna ha vuelto... Intenta sobrevivir hasta entonces.- Me dijo.
-Lo tendré en cuenta.- Dije al irme.
-Ah, ¡La contraseña es Äyräpään Ärjy!- Grito.
-Me acordare...- Dije sin voltear antes de desaparecer entre los arboles...
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