¡La Gran y Poderosa... ¿Rainbow?!
Las voces se enredaban con las conversaciones ajenas mientras el sonido de las charolas y cubiertos chocando con los platos acompañaban a los estudiantes de Canterlot High durante el almuerzo, compartiendo un armonioso momento comiendo sus bocadillos. Algunos también aprovechaban para hacer llamadas a su celular o revisar sus redes sociales con el wifi, hasta jugar cartas como las Crusaders, escuchar música como Vinyl o practicar algún instrumento como Octavia. Una rutinaria hora de almuerzo...
Hasta que una explosión seguida por una nube de humo cortó el momento para obligarlos a toser molestos mientras Trixie Lulamoon expandía sus brazos hacia arriba con su sonrisa jovial y triunfante, usando su sombrero de punta y capa purpuras decorados con estrellas celestes y amarillos.
Todos arquearon la ceja. Ya sabían lo que les esperaba...
-¡Buen provecho, alumnos de Canterlot High, deléitense con la aparición de la Gran y Poderosa Trrrrrrrixie!- vociferó, cargando sus palabras de petulante actitud.
-¡Empezó la farsante!- exclamó alguien y Trixie identificó enseguida su voz. Para su desgracia la reconocería en cualquier lado...a cualquier kilómetro de distancia...
-Rainbow...- masculló con mal sabor de boca y entrecerrando sus ojos, viendo a la deportista bebiendo soda desde un sorbete para después tirar un grueso eructo que hizo que Rarity le fulminará con la mirada.
-Por Dios, Rainbow, ¿Debo regañar tu educación en la mesa todos los días?- expresó ceñuda.
-¡Rainbow Dash!- bramó Trixie, señalándola para abrir las manos hasta parecer garras-. ¿Cómo osas insultar de esa manera a la Gran y Poderosa Trrrrixie?
-Te insultas sola, Trixie- exclamó la joven, tirándole una mirada ácida a Rarity ante su regaño. Volvió a mirar a Trixie, poniéndose de pie -. Tus tontos intentos por superarme son los insultos que tú misma creas y peor aún, cuando intentas hacer "magia"- rió -. Cosa que hasta en eso te supero ya que yo sí la tengo.
-¡Rainbow!- retó Applejack, halándola de la blusa -. No alardees la magia que tenemos.
-¡Pero es que ya estoy harta de su pedante actitud!
-Y yo de la tuya cuando empiezan con sus rivalidades infantiles.
-¡Oh, por favor, alguien debe darle una lección y soy la única que se atreve a callarla!
-Pero eso no justifica que te rebajes a su nivel- comentó Sunset mientras Pinkie alaba del cuello de su chaqueta. Sunset sonrió y miró a Pinkie -. ¿Se te ofrece algo, Pinkie?
-¡Uy, uy! ¿Me prestas tu chaqueta para verme más ruda?- sonrió anchamente.
-Como si eso fuera posible...- sonrió.
Mientras Sunset se quitaba la chaqueta, Trixie caminó hacia la mesa donde el grupo comía el almuerzo. Cuando Pinkie iba a tomar la prenda, Trixie se la arranchó, ganándose una mirada ácida de la dueña de la ropa.
-¡Hey!- bramó con mala cara pero Lulamoon la ignoró.
-¡Yo, la Gran y Poderosa Trrrrrixie...!
-¿Cuántas veces repetirás eso?- se quejó Rainbow, tapándose los oídos. -. Ya sabemos quién eres...para desgracia...
Trixie simplemente la miró con una suspicaz sonrisa de lado.
-Como decía, ¡Yo, la chica más talentosa de Canterlot High, haré el truco del reflejo!- expandió sus brazos hacia arriba, esperando asombro del resto de sus compañeros...
...Pero ellos habían retomado sus conversaciones y distracciones, sin mostrar apenas interés. Todos en la escuela estaban acostumbrados a sus presentaciones exageradas y fracasos para ganar su admiración...excepto dos.
-¿Truco del reflejo?- preguntó Snails corriendo con Snips a su lado.
-¡Oh, Gran y Poderosa Trixie! Deléitanos con su magia- pidió Snips con admiración.
-¿Saben que no tiene magia, no?- les dijo Fluttershy con su voz baja.
-Lo sabemos- guiñó el ojo Snips -. ¿Pero no es mágicamente hermoooooooosa?- y con su amigo salivaron por la ilusionista, bueno, intento a ilusionista, quien miraba con entrecejo la escena por la interrupción a su truco.
Applejack y compañía arquearon una ceja. Excepto una.
-¡Sí, es bonita!- saltó Pinkie con inocencia y las demás la taladraron con la mirada -¡¿Qué?! Además tiene un sombrero genial- chilló Pinkie y se acercó a Trixie -. ¿Me lo prestas? ¿¡Ah, ah, ah?!
-¡Claro que no, freak!- bramó ceñuda y apartándola de un empujón. Acto seguido se aclaró la garganta y volvió a su semblante egocéntrico mientras caminaba alrededor de la mesa -. El truco que Trixie hará consta de cubrir la cabeza de alguien y...- se detuvo detrás Rainbow Dash y colocó la chaqueta de Sunset sobre su colorida cabeza.
-¡Oye!- se quejó, soltando la chaqueta y mirando ceñuda a Trixie.
-¿Quieres comprobar que soy mágica sí o no? ¿Y qué mejor manera que seas tú mi voluntaria y tus amigas mis testigos?
-¡Ja! Ya veremos... pierdes el tiempo pero acepto...- aprobó, cruzándose de brazos.
Trixie colocó de nuevo la chaqueta sobre su cabeza ante las miradas escépticas de las jóvenes, aunque Snails, Snips y hasta la propia Pinkie Pie esperaban ansiosos la continuación del truco.
-Una vez cubierta la cabeza- prosiguió trixie, colocando las yemas de los dedos sobre esta -¡Yo, la Gran y Poderosa Trrrixie, ordeno reflejarme en Rainbow Dash!- cerró los ojos, balbuceó unas palabras que provocó que las cuatro jóvenes gesticularon diferentes reacciones en sus caras mientras Pinkie aplaudía emocionada y Snails con Snips suspiraban en ver la "hermosa" cara de concentración de Trixie.
Segundos después, Trixie paró de hablar, abrió enormemente los ojos y quitó la chaqueta, tirándola en el aire.
-¡Oye, es nueva!- se quejó Sunset ceñuda pero no tuvo tiempo de seguirse quejando, ya que tanto ella como el resto, quedaron de piedra al ver un repentino semblante diferente en Rainbow Dash.
La deportista miró a su público, frunció el ceño y abrió los brazos hacia arriba.
-¡¿Qué tanto miran a la Gran y Poderosa Rrrrrainbow?!
Snails, Snips, Rarity, Sunset, Fluttershy, Applejack, ¡Hasta la propia Trixie! quedaron quietos de sorpresa, mientras Pinkie hizo aparecer silbatos y serpentinas, celebrando el truco.
-¡Whoohooo! ¡Eso fue genial! ¡Ahora yo, ahora yo!- chilló.
-¿Funcionó?- balbuceó Trixie incrédula para luego aclarar la garganta, sacudiendo la cabeza -. ¡Claro que funcionó! En sus caras Rainbrujas- carcajeó cuando la mano de Rainbow la calló de golpe.
-¡Silencio! Tú risa molesta los oídos de Rainbow- habló con aquel característico tono de Trixie.
-¿Rainbow Dash?- dudó Fluttershy y la joven la miró.
-Gran y Poderosa Rainbow Dash, para ti.
-¿Esto es en serio?- reaccionó Rarity, al fin -. ¿De verdad funcionó?- y estiró su brazo hasta tocar un brazo de Rainbow, quien se apartó de ella con un respingo.
-¡¿Cómo osas, poca cosa, tocar así sin más a la Gran y Poderosa Rrrrainbow?!
-¿"Poca cosa"?- repitió Rarity, furiosa.
-Sep- exclamó Applejack -. Funcionó.
-¡Sabía que era fabulosa!- se maravilló Trixie con Snails y Snips más deleitados qué nunca.
-¡Ja! ¿Tú?- rió Rainbow, llevándose una mano a la cadera, tal como posaba en el momento Trixie -. Tú ni nadie tiene comparación con la Gran y Pode....
-¿Cuántas veces repetirás eso?- se quejó Trixie, tapándose los oídos.
-¡Para que te des cuenta cuán molesto es eso!- le reprochó Sunset, de brazos cruzados.
-¡No interrumpen a Rainbow!- se quejó la joven, parándose en su silla y con puños a los aires.
-¡Deja de imitarme!- ya se enojó Trixie, mismamente mostrando los puños a los aires, quedándose ambas en la misma pose.
-¡Deshazte del truco!- explotaron las cinco amigas, perturbadas de ver dos Trixie.
-¡No griten ante mi presencia!- gritaron Rainbow y Trixie al unísono, cosa que terminó por perturbar a la ilusionista.
-Esto se puso raro ya, ¿No es cierto, Snips?... ¿Snips?- pero su amigo estaba ido, mirando con coros celestiales ante la pose y nueva actitud de Rainbow.
-Sí...- balbuceó -, ya no sé a quién admirar...ambas son hemoooooosas- respondió. Ambos sacudieron la cabeza y salieron disparados de allí.
-Siempre les gustó las chicas malas y de horrorosas personalidad- dijo Pinkie y respingó, mirando a Sunset que no pudo evitar arderle los oídos por el comentario -. Sin ofender- sonrió -. ¿Pan de canela?- le ofreció, sacándolo de la nada.
Mientras tanto, Trixie torció el gesto, realmente incómoda de esta Rainbow, quien bajaba del asiento de un salto y sonriendo con aquel semblante de ego infinito. Trixie tomó la chaqueta de Sunset del suelo y cuando volvía a ponérselo en la cabeza, Rainbow objetó.
-¡¿Cómo te atreves usar esa porquería del suelo en mi magistral cabeza, eh?!- y le dio un manotón que la obligó a soltar la chaqueta. Trixie echó chispas.
-¡¿Cómo osas TÚ golpear a Trixie?!- agarró de nuevo la chaqueta -. ¡Obedece!
-¡Rainbow no obedece a nadie!
-¡Pues a Trixie sí, así que obedece!
-¡Jamás!- y de su bolsillo robó de sus explosivos e hizo estallar una nube de humo.
El grupo tosió hasta que de a poco se disipó el humo, encontrando el asiento de Dash vacío.
-¡DESAPARECIÓ!- chilló Pinkie pero al girar la cabeza, la encontró oculta tras una máquina de sodas -. Ah, no, ahí está- la señaló y Rainbow huyó de la cafetería.
-¡¿Por qué, por qué, por qué?!- lamentó Rarity - ¡De todas las cosas malas que podrían pasar ESTA ES LA PEOR...COSA...POSIBLE!- bramó, echándose para atrás como desmayada y Fluttershy la agarró antes de que caiga al suelo.
-Descuida, Rarity- trató de calmarla Applejack -. La encontraremos y Trixie nos devolverá a nuestra no tan exageradamente pedante y egocéntrica Rainbow Dash que queremos y a veces no aguantamos- tiró una mirada amenazante a la ilusionista -. ¿No es cierto, Trixie?
-Eh... ¡Por supuesto que sí! ¡Nunca dudes de la asombrosa e inigualable habilidad de la Gran y Poderosa Trrrrixie!- iba a hacer explotar una de sus nubes de humo pero Sunset le paró la típica escena de huida, bajándole el sombrero hasta los ojos.
-¿A dónde crees que vas? Tienes que ayudarnos a encontrar a Rainbow- exigió firme.
-¿Yo?- explotó, acomodándose el sombrero -¿Por qué? Ustedes son las amiguitas de Rainbow Crash, no yo.
-¡Para empezar por tu culpa anda por allí actuando como lunática!- bramó Rarity.
-¡Hey! ¡Está reflejada como yo!
-¡POR ESO!- le gritó el grupo.
Las seis jóvenes salieron de la cafetería y se dividieron en parejas. Por supuesto, nadie quería pasar más tiempo de lo debido con Trixie, por lo que decidieron que sea una moneda que acomode los grupos, dejando a Sunset y Pinkie Pie como posible pareja de la ilusionista.
-Elige, Pinkie- avisó Fluttershy.
-¡Cara! No, no ¡Sello! Pero mejor sería cara, ¿cierto? Aunque pensándolo mejor tengo suerte con sello... pero el otro día gané el último helado del refrigerador con Maud al decir cara. Tal vez debería elegir cara, pero el sello en la moneda me da buena espina aunque...
-¡Basta!- estalló Trixie -. ¡Me niego a pasar un segundo más con esa excéntrica!- tomó a Sunset de la mano y la juntó a ella -. Tienes suerte, serás la pareja de la Gran y Poderosa Trixie.
-¡Nooooo!- gimió Sunset, tratando de escapar pero Trixie la retuvo agarrándola de un brazo.
-¡Considéralo un honor!- le reprochó.
Sunset hizo la mayor fuerza posible para apartarla y el aura amarilla se hizo presente, rodeando su cuerpo por lo que la punta de un ala de fuego se asomó a su espalda y espantó a Trixie, haciendo que la suelte. Apenas libre, el brillo y el pedazo del ala desaparecieron.
-Aun no entiendo por qué te sucede eso- exclamó Applejack.
-Yo tampoco- murmuró, aun meditando si debía comentárselo a Twilight Sparkle, pero sacudió la cabeza -. No es tiempo para eso. Debemos encontrar a Rainbow- resopló y se resignó -. Aunque me toque estar con Trixie...
Applejack y Fluttershy se dirigieron hacia los lugares deportivos. Pinkie Pie y Rarity a los salones de clases y Sunset y Trixie al área de descanso. Por un momento el teléfono de Sunset sonó y lo ojeó, suspirando.
-La pregunta sería...- le dijo Sunset a una Trixie concentrada más en mirarse en el espejo de mano y acomodándose su sombrero que de buscar a Rainbow – Ya que ella es tú ¿...donde irías después de una de tus huidas?
Trixie se detuvo, chasqueando los dedos.
-Ya sé dónde estoy ¡Digo! donde está Rainbow.
Ambas entraron de nuevo a la escuela, atravesaron el pasillo en el que conduce a la biblioteca y justo ahí, vieron a Rainbow Dash ceñuda con unos billetes en mano frente de una máquina expendedora de allí.
-Es la única con galletas de mantequilla- suspiró Trixie con ojos encantadores y llevándose las manos a la cara.
-¡Estúpida máquina!- exclamó Rainbow, pateando la expendedora. -¡¿Cómo te atreves a rechazar los billetes de la Gran Rainbow?!- y volvió a patearla.
-¿No tienes cambio?- preguntó Trixie y Rainbow la miró. La ilusionista le mostró como modelo de joyería una moneda -. Trixie siempre tiene cambios para sus galletas de mantequilla.
Rainbow se la quedó mirando.
-¿Qué quieres a cambio?
-Ohh, deja que intente un truco contigo- sonrió, pasando la moneda entre sus manos, haciendo que los ojos de Rainbow miraran de derecha a izquierda, hipnotizada con la tentación hasta hacerse reaccionar sacudiendo la cabeza.
-¿Sólo eso necesitas de Rainbow? Rainbow sirve para mejores cosas que esas infantiles actividades.
-¿Por qué siempre hablas en tercera persona?- le susurró Sunset a Trixie pero esta le calló.
-¿Y bien?
Trixie caminó hacia ella, inconscientemente se llevó la mano a la cadera con el cuerpo hacia adelante, pose que la misma Rainbow tenía.
-Ok- aceptó a regañadientes.
Trixie colocó la moneda a la máquina, aplastó botones y las galletas salieron. Mientras Rainbow las comía con estrellas en los ojos, Sunset se desprendía de su chaqueta y se la entregaba a Trixie. La joven cubrió la cabeza de Rainbow, colocó las yemas de los dedos en su cabeza, repitió en voz baja las palabras y en cuanto terminó, tiró de la chaqueta. Tanto Trixie como Sunset aguardaban la reacción de Rainbow, pero esta continuaba devorando las galletas, mirando aburrida a las jóvenes.
-¿Terminamos? ¿La Gran y Poderosa Rainbow puede irse ahora?
Trixie palideció y Sunset la fulminó con la mirada.
-¡Trixie!- bramó, furiosa -. ¡Dijiste que podrías devolverla!
-¡Eso creí!
-¡¿"creí"?! ¡No puedes dejarla así!
-¡La encontraron!- exclamó Pinkie, corriendo hacia ellas con Fluttershy, Applejack y Rarity tras ella.
-¡Aish! ¿Ustedes de nuevo?- suspiró Rainbow -. Cansan la vista de Rainbow.
-¿Aún no lo han cambiado?- dudó Applejack y Sunset miró a Trixie con regaño.
-Anda...diles.
Trixie tragó saliva. Eran cinco contra una y cuando se enojaban ahí sí que le temblaba la voz.
-Pues...necesito un día... ¡Sï! Un día para volverla a la normalidad- improvisó.
-¡¿Qué?!
-Olvidé ese detalle- continuó -. Debe pasar un día para que el efecto se debilite y pueda volverla a la normalidad- sonrió, tensa.
-¿Segura?- dudó Sunset -. Hace un rato no parecías recordar eso...
-¡Que lo olvidé, dije!
-De acuerdo, de acuerdo...un día pero TÚ te encargas de eso- bramó Applejack, señalando a Rainbow que estaba perdida en sus galletas de mantequilla.
-Esa no es nuestra Rainbow, es un reflejo de ti así que no queremos una Trixie de repuesto para amargarnos el día- apoyó Rarity.
-¡Sí, tú te encargarás de ella!- dijo Pinkie ceñuda.
-¡Ja! ¿Qué les hace pensar que Trixie recibirá órdenes suyas?
-Sé que regañé a Rainbow por esto pero...nosotros tenemos magia...- amenazó Applejack.
-Sin mencionar a la fénix que puede volver cenizas ese ridículo sombrero y capa mal diseñado- agregó Rarity.
-Pero yo no puedo controlar cuando aparecen...- susurró Sunset pero Rarity le guiñó un ojo.
-Pero ella no lo sabe- le respondió.
Ante las amenazas, Trixie tomó aire y fingió desinterés.
-Sí, ajám, lo haré para deleitarme con mi reflejo, ¿no es cierto, Rainbow?
Al no escuchar contestación, todas se giraron y encontraron el envoltorio de las galletas en el suelo. Sin rastro de Rainbow.
-¡Esta vez sí DESAPARECIÓ!- bramó Pinkie, llevándose las manos a la cabeza.
-¡Ay, no puede ser!- jadeó Trixie, golpeándose la frente con una mano.
-Pues anda a verla. Eres tú y sabes dónde estarías- dijo Applejack mientras sonaba el timbre.
Las cinco dejaron sola a Trixie. La ilusionista gruñó caminando sentido contrario. Aun no podía creer que no podía regresarla a la normalidad. Sí, era un truco que apenas leyó anoche antes de dormir. Tal vez debió estudiarlo mejor. ¿Y si no podría regresarla? Tragó saliva, integrándose al mar de estudiantes que empezaban a buscar libros en los casilleros para regresar a sus clases cuando unos aplausos llamaron su atención. Un grupo de chicos rodeaban a una petulante Rainbow, que afinaba su guitarra mientras Trixie dejaba su boca caer al suelo al verla... ¡Con un sombrero y capa exactos al de ella! Con la excepción de que en vez de tener estrellas eran rayos con los colores del arcoíris.
-¡¿Cómo osas imitar el característico atuendo de Trrrrixie?!- reclamó, haciéndose camino a la fuerza entre los alumnos para llegar frente a Rainbow.
El reflejo ni se inmutó, sonriéndose mientras Snails y Snips le sacaban fotos. Trixie los fulminó con la mirada.
-¿Y ustedes que rayos están haciendo? ¡Es a Trixie a quien deberían inmortalizar su esplendorosa belleza!
-¿Pero no se ve hermosa con su nuevo atuendo?- babeó snails
-Y fue mi idea...- dijo Snips, acercándose a Rainbow y ella sonrió.
-Y Rrrrainbow agradece tu gesto, Snieps.
-¡Casi dice mi nombre!- se derritió el chico.
-¡Ahora apártense!- exclamó y miró a la congregación de alumnos -. ¡Escuchen y admiren a la Gran Guitarrista y Cantante Rrrrainbow Dash!- y tocó un solo de guitarra que emocionó a más de un alumno.
Hizo tantos trucos y poses para lucirse que el público aumentó en un parpadeo. Trixie se sentía poca cosa al ver no sólo lo genial que actuaba Rainbow, sino que todo el mundo esté gritando su nombre y ovacionándola. De pronto, Rainbow cambió las notas, tocando una canción que Trixie reconoció enseguida.
-No...no te atreverías...- murmuró para sí y sí, se atrevió.
-No vas a reír al ver trucos aquí, te cautivaré, soy genial ya lo sé yeih, yeih...
Esta era una versión de Rainbow de "Trucos Bajo Las Mangas", más cargada y pesada que despertó chiflidos y puños al aire del alumnado, más aún cuando su entusiasmo provocó su transformación, apareciéndole las orejas y alas, seguido del crecimiento de su cabello. La joven se elevó por los aires, tocando más duro, sudándole la frente y que su voz saliera más alta y armoniosa que nunca con cada letra de la propia canción de Trixie.
-¡Me enamoré!- gritó Snails, afanado -. Definitivamente me enamoré de la Gran y Poderosa Rainbow.
-¡Sí!- apoyó Snips -. ¡Ella no sólo es mágicamente hermosa, es MÁGICA realmente! ¡Rainbow Dash es mejor Trixie que la propia Trixie!
Aquello fue la gota... y Trixie reventó.
-¡BASTA, PAREN ESTA ABOMINACIÓN!- vociferó, desconectando la guitarra y saltó para agarrarle del pie a Rainbow y obligarla a bajar. Miró a los demás -. Se acabó el show, ¿Qué esperan? ¡Adiós, adiós, adiós!
Murmurando y con mala cara, los alumnos se dispersaron, quedando las amigas de Rainbow mirando a una Trixie que parpadeaba el ojo derecho como tic y se veía más tensa y dura que roca viendo a Rainbow.
-Vuelve a ser como eras, ¡YA!- exigió, caminando hacia ella con pesados pasos pero Rainbow la detuvo colocándole un dedo sobre la frente.
-¿Por qué dejaría de ser como soy?- preguntó, mirándose en un espejo de mano, admirando su sombrero -¡Soy Imparable y Grandiosa! ¡La más talentosa y mágica de Canterlot High!- rió, haciendo diferentes poses como para ser fotografiada. A Rarity le encantó ver eso. ¡¿Dónde tiene una cámara cuando la necesita?! Tal vez nunca vea a Rainbow así de interesada en su apariencia.
-¡No es cierto! ¡No eres nada de eso!- reventó Trixie -¡Eres petulante, agobiante, IRRITABLE! No te aguanto y no puedo estar con alguien tan insoportable ni un minuto más.
-No puedes regresarla... ¿cierto?- intervino Fluttershy.
Trixie volteó a mirarlas y dejó que toda la frustración e ira se vaya con un suspiro.
-No...- admitió, sacándose el sombrero -. No puedo...y no puedo creer que la dejaré con esa horrible personalidad...
-Pero ella...eres tú- le recordó Applejack.
-Lo sé- susurró y su semblante pedante desapareció por un momento -. Sólo quiero recuperar a la antigua Rainbow...
-Bueno, era lo que quería oír- exclamó Rainbow Dash, quitándose el sombrero, la capa y despeinando su cabello para tener su estilo de siempre.
-¡¿Rainbow?!- jadeó Trixie, mirándola con cuidado. -¡Rainbow!- y la abrazó hasta levantarla.
-¡Por Dios, alguien que me la quite de encima!- gritó Rainbow, perturbada por la muestra de cariño de su rival y sus alas y orejas desaparecieron, así como su larga cabellera.
-¡Has vuelto! ¡Funcionó, mi truco funcionó! Reacción retardada ¡Pero funcionó!- celebró. -. ¡Pues claro, ya que soy la Gran y...!
-Eh...en realidad no- confesó interrumpiéndola y Trixie la soltó de golpe.
-¿Cómo que no? ¡Pasaste un buen rato actuando como yo!
-Bueno, ¿Qué puedo decirte, Trixie? Soy genial deportista, guitarrista, cantante y ahora actriz.
-¡¿Nos mentiste todo este tiempo?!- jadeó Trixie señalando a su grupo pero al mirarlas, ellas reían a lo bajo intercambiándose miradas cómplices -. ¿Ustedes lo sabían?
-Cuando Rainbow se nos perdió- explicó Pinkie -. Nos envió un mensaje de texto diciendo que estaba fingiendo para darte una lección y que le sigamos la corriente.
-¿Lección?
-No te hagas, Trix- le dijo Rainbow colocando un brazo sobre sus hombros -. Tú misma admitiste que ser tú es toda una molestia. Tal vez ahora pienses mejor y cambias tu actitud.
Trixie volvió a hacer parpadear un ojo y se apartó de ella con violencia, ida de vergüenza y con el orgullo por los suelos al caer en su trampa tan ingenuamente.
-¡Pero no te funcionó Rainbow Crash!- bramó con sus poses de reina del mundo -. Esto sólo ha desatado más nuestra rivalidad y no sólo a ti- miró a las cinco amigas -. ¡Ustedes también están en mi lista, Rainbrujas! ¡Nadie se burla de la Gran y Poderosa Trrrixie y vive para contarlo ¡Trixie se vengará!- e hizo explotar la nube de humo, haciéndolas toser.
-A este paso mis pulmones quedarán negros- jadeó Rainbow.
-¡DESAPARECIÓ!- chilló Pinkie al no ver a Trixie en su lugar pero entonces la vio doblar la esquina hacia el otro pasillo -. Ah, no, por ahí va.
-Lástima que no haya aprendido la lección- lamentó Sunset.
-Ya aprenderá- sonrió Rainbow -. Tarde o temprano lo hará.
-Eh, Rainbow- llamó Fluttershy -. Creo que tienes un problema peor acá- y señaló a Snails y Snips, mirándola con ojos de cachorro.
-Chicos, ya oyeron, mentí- dijo Rainbow con sonrisa nerviosa.
-¡Pero eso no quita lo fabulosa...
-...hermosa...
-....y mágica que eres!
-Tus palabras son órdenes para nosotros- corearon.
-Bueno, no puedo discutir con eso- se dejó llevar Rainbow pero sacudió la cabeza -. ¡No, no, no! Ustedes sigan tras de Trixie como siempre.
-¡Sí, señora!- obedecieron y corrieron hacia Trixie.
-Bueno, recibieron tu orden- rió Applejack.
-Y espero que ustedes reciban el mío.
Todas voltearon para ver a una severa Directora Celestia con entrecejo y brazos cruzados.
-¿No debieron entrar a clases hace quince minutos ya?
Las seis retuvieron un grito y corrieron tras el pasillo en el que desapareció Trixie para ir a su salón.
-¿Y qué se siente ser Trixie?- preguntó Pinkie mientras corrían.
Rainbow tiró una risa.
-Debo admitirlo...aunque conseguido de mala manera... ¡Grande y Poderosa!
Y el grupo rió.
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