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Es tiempo de un cambio

Faltaba un poco más de dos meses para que el año escolar concluyera. Ya habían pasado la primera fase de los exámenes y la mayoría habían salido bien. Pese las semanas en las que Sunset era un completo zombie dentro del aula, también salió bien, no sacó siempre los dieces que estaba acostumbrada a sacar en todas las materias, siendo el único nueve en matemáticas y gracias Whooves, por lo que ver algunos ocho, sietes y hasta un seis, le afectó.

Sostenía su libreta de notas entre sus manos. Estaba apegada de espaldas a su casillero y no pudo evitar soltar un suspiro de decepción.

-¿Esa cara larga, Caramelo?- le preguntó Applejack mientras abría su casillero. Entonces vio su libreta de notas -. Oh, no es tan malo.

-Lo es para mí. El estudio siempre ha sido lo mío, lo único en lo que no fallaba y ahora hasta en eso estoy fallando.

-Tuviste un mal tiempo y en la peor de las semanas. Te recuperarás en las próximas pruebas.

-No lo entiendes. Esto va más allá de buenas notas...- calló, apretándose los labios. "Estoy cambiando..." pensó, curvando las cejas.

-Dime- le dijo llevándose una mano a su sombrero -. ¿Cómo van las pesadillas? ¿Sigues teniéndolas?

-A veces. No tan seguidas como esas semanas, pero a veces.

-¿Y aun no recuerdas qué sueñas?

Negó con la cabeza mientras se apartaba y abría su casillero para guardar la libreta de notas.

-Tengo que irme- avisó Sunset -. Se supone que debo cargar la nueva tanda de donaciones para el evento benéfico.

-Oh, sí, yo tengo que hablar con la organizadora del evento- ambas se intercambiaron una sonrisa.

-Pinkie Pie- corearon.

-Sí- suspiró Applejack –Para ver cuántos pies de manzana necesitan, jabas de sidra, manzanas acarameladas, bueno, en fin.

-Es realmente encantador que este año sea en un parque de diversiones- opinó Sunset -. Así aquellas personas sin hogar podrán distraerse y despejar sus mentes de malos recuerdos mientras reciben donaciones de los estudiantes y ciudadanía.

-Y todo gracias a Trixie- rió la vaquera -. No puedo creer que su padre sea del gran linaje de hombres y mujeres de negocios, entre ellos ser importante accionista del parque de diversiones como para dejarnos hacer el evento allí sin cobrar ni un centavo. Claro, a excepción del uso de los juegos que nosotros debemos pagar pero serán donados. Los beneficiados podrán subirse gratis.

-Déjate de cosas Applejack y admítelo, al menos el apellido Lulamoon sí es Grande y Poderoso...

-See...- y cerró su casillero.

...

Cherry Crash se pasaba el rímel en una velocidad record sin manchar ni una gota de negro su rostro. Parpadeó y se sonrió frente al espejo que tenía pegado en su casillero, entonces se dio cuenta que sus labios estaban perdiendo color, por lo que sacó su labial rojo y se lo pasó suavemente por la boca. Se pasó ambas manos por su cabello corto y verde y se los desbarató hasta quedar en un "peinado despeinado", como ella lo decía con risa.

Entonces sintió más potente el calor de una mirada. Desde hace un rato la sentía pero no prestaba atención, sin embargo quién sea que la miraba, ya estaba abusando, por lo que empezó a sentirse demasiado expuesta.

-Ok, me halagan pero basta de tanto ojeadera, ¿no?- bramó, volteando y mirando a cada alumno que caminaba y sacaba cosas del casillero, mirándola confundidos. Giró los ojos y siguió con lo suyo en su casillero.

Para esto, algunos casilleros más atrás, Bonbon ocultaba su rostro en el cuello de Trixie, avergonzada.

-Trixie capta el mensaje- dijo la ilusionista, mirando a Cherry -. Oh, ¿Quieres que Trixie te siga el dúo? ¡Puedo hacerlo!- entrecerró los ojos, mirando de pies a cabeza a la rockera -. Bueno...ella tiene....no, no...ella es....tampoco...sus caderas son...emm... su figura me...tampoco... ¿Me gusta su pelo verde?- se golpeó la frente -. ¡Lo siento, pero Trixie no puede hacerlo!

Bonbon se sonrió, olvidando la vergüenza de hace un rato y se apartó.

-No, Trixie, no tienes que hacerlo. Es mi culpa. No sé qué me pasó. Jamás me quedo mirando a alguien tanto tiempo.

-Entonces...- agrandó los ojos -¿eso quiere decir que ya olvidaste a...ya sabes, a Lyra?

Bonbon se pegó a su casillero, abrazando un cuaderno y suspiró.

-Ya no duele tanto, pero no deja de doler y ya ha pasado unos buenos días sin que le haya llorado- volvió a suspirar parar mirar a Cherry sacar unas baquetas del casillero y empezar a tocar con ellas sus piernas un ritmo. -. Pero no sé- se encogió de hombros -. Sólo me la quedé mirando porque...- se calló, sonrojándose y mirando a Trixie -no tienes que escucharme si...

-Ya hablamos de eso, Bonbon.

-De acuerdo- tragó saliva y volvió a mirar de reojo a la rockera -. Es genial y linda- suavizó la mirada -, muy linda.

-Awww- gimió y la abrazó de lado -. Bonbon se está dando otra oportunidad al amor...

-No es eso- la apartó de golpe y con ceño fruncido, poniéndose seria –y además no puedo, al menos no en esta escuela ya que parezco ser la única que gusta de las chicas.

-Sin mencionar que soy la única que lo sabe.

-Además- tragó saliva, más seria -No quiero repetir la historia como la de Lyra- apretó más el cuaderno -. Mi corazón no aguantaría otra decepción.

-Hola, Trixie- saludó Sunset acercándose a ellas -. Hola, Bonbon.

-Hola, llamitas, no incendiaste nada hoy, ¿cierto?- bromeó Bonbon.

Sunset le sonrió pero el apodo y comentario le desagradó bastante.

-¿Nos vamos?- le preguntó a Trixie y ella cerró su casillero enseguida tomando su mochila.

-¡Trixie siempre está lista y puntual!- exclamó levantando los brazos triunfal para después mirar a Bonbon -. Nos vemos en la hora del almuerzo.

-Claro- aseguró haciéndoles de las manos mientras se iban, pero entonces se apegó a la pared al ver que Cherry Crash caminaba cerca suyo platicando animadamente con Mistery Mint mientras tocaba en el aire con sus baquetas. Bonbon le dio la espalda y pegó su frente al frío metal de su casillero. "Esto es demasiado complicado...", pensó, soltando un suspiro.

...

Ringo, un chico de piel lavanda, de cabello y bigote gris oscuro con unas rayas blancas que al igual que Vinyl Scratch, tenía la costumbre de usar gafas la mayor parte del tiempo, tocaba teclas al azar, aburrido, mientras Flash estaba sentado en un silla tocando una misma nota en su guitarra.

-La espera me está matando leeeeentamente- dijo Ringo. -. ¿Cuánto lleva de retraso?

-Ya va hacer cuarenta minutos- refunfuñó Flash mirando la hora en su celular -. La Subdirectora Luna nos prestó el aula de música por una hora antes de que entrara la banda de la escuela. ¡Ya no tenemos tiempo!

-Pero creo que lo suficiente para romperle un tambor en su cabeza.

-¡Chicos!- exclamó Brawly Beats, un chico de cuerpo fornido y piel ámbar pálido con el cabello medio largo de color ópalo moderado, mismo color de sus ojos. Entró al aula pero tragó saliva al ver las fulminantes miradas de los dos chicos -. Antes de que digan algo, tardé por esto- y levantó su mano derecha, que estaba vendada.

-¡¿Qué, qué?! ¿Estás lastimado?- bramó Ringo, dejando de tocar el teclado -¡Debes estar bromeando!

-¿Qué te pasó?- preguntó Flash y Brawly sonrió, avergonzado.

*Flashback*

Un quejido seguido de un mar de aplausos se escuchó mientras Applejack gritaba el característico sonido de vaquero emocionado, levantándose de la silla mientras un chico se sobaba la mano tras una lucha de vencidas.

-¡Esa es mi vaquera! ¿No es un encanto?- exclamaba Thunderlane entre el público de alumnos.

-¡Vamos, ¿Quién es el que sigue?!- exclamó Applejack, recogiendo con su sombrero el dinero de la apuesta.

-¡Yo!- exclamó Brawly, apartando al perdedor y sentarse en la silla.

-¿Estás seguro, Caramelo? Mira que eres baterista y no respondo si te llego a lastimar ya que, aunque no quiero sonar petulante, tengo el título de campeona de vencidas. Me corresponde advertirte.

-Descuida, no seré amable así que tampoco tú lo seas.

-Uhhhh- exclamó el público estudiantil presente en el aula sin usar, empezando a apostar de nuevo. Applejack sonrió desafiante y se sentó en su silla.

-¿Quién dijo miedo?

-Yo no lo hice.

-Yo tampoco.

-¡Vamos, Applejack!- gritó Thunderlane levantando un cartel con su nombre, fascinado de ver la fuerza de la vaquera mientras Pinkie Pie, que era la arbitra en el juego, aparece vestida con camiseta de rayas blancas y negras y short oscuro.

-¡Uno, dos, tres, empieza!- chilló reventando un globo y sonó el silbato.

En el presente, los dos músicos rechinaban los dientes al baterista.

-¡¿Te torciste la muñeca en un estúpido juego de vencidas?!- bramó Ringo, indignado.

-¡Bien Applejack te lo advirtió! Ella es la campeona de vencidas de Canterlot High- se descargó Flash. -. ¿Cómo te atreves a desafiarla justo cuando tenemos que tocar el sábado en el evento de beneficencia?

-Tranquilos, tranquilos- calmó Brawly -. Por eso no sólo llegué tarde ya que me las arreglé para conseguir un reemplazo.

-¡Hello, guapos!- entró Cherry Crash con energía a la sala.

-Hola, chicos- saludó más calmadamente Mistery Mint tras de su amiga, mostrando una cajita blanca -. ¿Mentas?- ofreció.

-¿Qué hubo, bonitos?- saludó Cherry, dando un sonoro beso en la mejilla de Flash y Ringo, acostumbrados a su característica forma de saludarlos; sellando con su labial rojo en plena mejilla su boca. -. ¿Quieres que te dé otro?- parpadeó Cherry a Brawly.

-No, gracias- y le mostró su marca de labial en la mejilla izquierda -. Con este es suficiente.

-Nunca se tiene suficiente de Cherry Crash- y le besó la mejilla derecha. -. Ok, soy el reemplazo del tonto pero querido Brawly Beats, así que yo sólo tomaré mi lugar- caminó hacia la batería y se sentó –y ustedes me guían la canción que tocarán.

-Bueno...- suspiró Flash mirando a Brawly -. Al menos conseguiste un buen reemplazo. Cherry es muy buena y se adapta rápido al ritmo.

-¡Ya rugiste Sentry!- exclamó Cherry y empezó a tocar salvajemente la batería.

-Si ella no podía iba a decirle a Pinkie Pie- le dijo Brawly a Flash entre el ruido que hacía Cherry -. Y créeme, no quería hacerlo conociendo que es peor que Cherry...

-Y ya de por sí con Cherry ya tenemos suficiente- apoyó Flash, cerrando los ojos y tapándose los oídos como los demás ante el bullicio de su amiga -.Cherry.... ¡Cherry! ¡Hey!... ¡CHERRY!

-¿Dime, guapo?- preguntó ella, deteniendo su ritmo salvaje y todos se quitaron las manos de las orejas con alivio.

-¿Mentas después de ese ruido?- preguntó Mistery en general.

-Yo tomaré uno- aceptó Flash.

-¿Escuchaste eso, Mistery?- preguntó Cherry con una risa burlona ante la mirada amenazante que su amiga le hacía mientras caminaba hacia el chico -. Flash quiere de tus mentas...- y meneó los hombros cerrando los ojos y estirando los labios, tirando besitos.

Gracias al cielo Flash estaba de espaldas a Cherry por lo que no vio nada. Mistery tragó saliva y le sonrió mientras sacaba unas cuatro bolitas blancas de la caja y se las pasaba a Sentry. El breve contacto de sus dedos dejó a Mistery espaciarle un sonrojo.

-Gracias, Mistery- le sonrió, llevándose los caramelos a la boca.

-De nada, Flash- contestó sonriente.

-Ya que soy la baterista de la banda- empezó Cherry.

-Reemplazo- corrigió Brawly mirándola fijo -. Reemplazo de baterista de la banda.

-Ok, ok, guapo, ya que soy "reemplazo de baterista de la banda"- dijo imitando su voz al ponerla gruesa y los demás soltaron una risita –¿puedo sugerir a mi estimada Mistery Mint como vocalista femenina?

-¿Yo qué?- jadeó Mistery.

-Por favor, estimada- dijo Cherry poniéndose de pie y sacudiendo su falda cuadriculada -. Tienes una voz hermosa que no aprovechas más para cantar en tu cuarto sacudiendo la cabeza con un cepillo de cabello como micrófono. Ya viene hora que aproveches tu potencial- decía caminando y abrazó por detrás a Ringo -. Deberían hacerle una prueba para que sepan que no miento- lo agarró de la barbilla para que la vea a los ojos -. ¿Y cuándo Cherry Crash miente?- lo soltó de golpe -. No me contestes. Pero sabes por qué punto voy- y se dirigió hacia Flash, apoyando su barbilla en su hombro y cubriéndole el otro con un brazo que lo dejaba colgar sobre su pecho -. ¿Mencioné también que toca la guitarra?

-Cherry, ya sabíamos todo de eso de Mistery- habló Brawly.

-Pues a mí me parece que se les olvidaron porque sería ideal como integrante femenina de la banda.

-Cherry...- jadeó cansada Mistery y llevándose la mano hacia la frente -. Por favor, deja de hablar como si no estuviera aquí. Además dudo que quieran un integrante más y...

-Cherry tiene razón- habló Flash y Mistery se mandó a callar de golpe.

Cherry sonrió con triunfo mientras se apartaba de Flash y este caminaba hacia Mistery. "Te voy a matar, Cherry, te voy a matar cruelmente, Cherry" pensaba Mistery en su cabeza con los nervios de punta al ver a Flash sonriente hacia ella.

-Te he escuchado cantar antes. Mejor dicho todos nosotros ya que cuando usas audífonos empiezas a cantar parte de la letra y tienes una maravillosa voz que no estás aprovechando al máximo.

"Insisto Cherry, veré la forma de asesinarte mientras crees pasar un noche de sueño tranquila" continuaba pensando Mistery, tratando de no sonrojarse con fuerza ante los cumplidos que Flash le hacía.

-¿Qué dicen chicos?- preguntó Flash a Ringo y Brawly -. ¿Se nos une Mistery Mint como cantante femenina?

-No veo problema- respondió Ringo jugando con su bigote.

-Por mi lado tampoco- aprobó también el baterista.

-¡Así tal vez algunos chicos los escucharán al menos porque tienen a una sexy chica rockera con aliento a menta!

-¡Cherry!- retó Mistery.

Flash volvió a mirar a Mistery y estiró una mano hacia ella para un apretón.

-Felicidades, eres una de los Flash Drive.

Mistery apenas pudo reaccionar cuando Cherry se apareció y los empujó a ambos entre sí.

-¡Qué apretón, un abacho!- exclamó energizante y todo el sonrojo que contenía Mistery reventó en su cara al tener que estar así de cerca de Flash. Tras el abrazo y que Flash se dirigía a sus amigos, Mistery miró horriblemente a su amiga y le dio un puñetazo en su brazo.

-Cuánto te desprecio...

-No es cierto- sonrió divertida, sobándose donde recibió el golpe.

El timbre sonó y el grupo debió despejar el salón para los otros estudiantes.

-Mañana a la misma hora y puntuales por favor- pidió Ringo casi con suplica -. Odio la impuntualidad.

-Sí, guapo, lo que digas. Hasta mañana- despidió Cherry. -. Y chicos, gracias por lucir mi marca. Así toda la escuela sabrá que son propiedad de Cherry Crash- bromeó caminando sentido contrario con Mistery.

Los tres chicos se miraron entre sí y sonrieron al recordar la marca del beso de Cherry y empezaron a quitárselos frotándose la mejilla con la mano.

Una vez lo suficientemente lejos, Mistery gruñó y se montó sobre la espalda de Cherry, ahorcándola con sus brazos alrededor de su cuello.

-¡Te mataré y lo disfrutaré!- bramó Mistery.

-¡No me arrepiento de nada!- jadeó Cherry riéndose, dejándose caer de rodillas y se desplomó al suelo, con Mistery golpeándola sin cesar, por lo que Cherry se puso boca arriba y empezó a luchar con ella, pero en todo el rato sin desprender su sonrisa y tirar una risas.

Todos los alumnos que pasaban ahí miraban con una ceja levantada la escena extraña.

-¡Ya basta!- quiso parar Cherry -. Uso falda, ¿recuerdas? Apuesto que me vieron todo.

-¡Cómo si fuera algo que quisieran ver!

-¡Soy irresistible, ¿lo olvidas?!- y se carcajeó.

-Ehém- hizo sonar alguien su garganta y ambas pararon en seco, mirando a la subdirectora Luna con ambas manos a la cadera con mirada estricta. -¿Pueden explicarme qué rayos sucede aquí?

Ambas se pusieron de pie enseguida con risas nerviosas mientras se sacudían mutuamente la ropa.

-Estábamos...jugando...- contestó Cherry.

-¿Menta?- ofreció Mistery levantando la cajita hacia Luna.

-Claro...- aceptó aun seria y levantó la mano. Mistery hizo caer cuatro caramelos en su palma y Luna saboreó uno -. Vayan a clase antes de que Celestia las vea, ¿sí?- y siguió caminando, llevándose otro caramelo a la boca.

-Y por esto soy de las que están en el equipo Luna- exclamó Cherry, chasqueando los dedos en dirección a la subdirectora.

-Cuánto te desprecio...- suspiró, resignada.

-No es cierto- y la abrazó de lado, plantándole un beso en la mejilla, marcándole el labial -. Eres también propiedad de Cherry Crash, mi mejor amiga y quiero que seas feliz- la miró -. Estoy harta que tengas que reprimir tus sentimientos por un año más. Ya va tiempo que te declares a Flash Sentry.

-Basta, ¿sí? Sabes bien que no estamos destinados a estar juntos- suspiró y ambas caminaron por los pasillos -. También era nueva igual que él al venir a Canterlot High. Fue la primera persona con quien me hablé al estar juntos durante el recorrido del Comité de Bienvenida. No conocíamos a nadie más así que pasábamos siempre juntos. En el trayecto, me fui enamorando. Pero no pasó ni un día cuando descubrí mis sentimientos hacia él cuando lo descubrí con un juego de coqueteos con esa Sunset Shimmer para más tarde sean novios. Mi corazón se había hecho pedazos cuando apenas pudo disfrutar el sentimiento, y cuando terminaron, dejé pasar un tiempo ya que me parecía precipitado lanzarme al agua apenas había terminado una relación cuando aparece Twilight Sparkle- se llevó las manos a la frente, levantando su cerquillo morado y abriendo los ojos de la frustración, dejando escapar un gruñido -. ¿Cómo competir con ella? Es mágica, hermosa ¡Y una princesa que salvó nuestro pellejo dos veces!- y se detuvo para golpear su cabeza contra el casillero más próximo, con gruñido tras gruñido en cada golpe.

-Hey, oye, oye- la frenó, apartándola del casillero y hacerla mirar -. En primer lugar, no tienes por qué compararte con esa Twilight Sparkle o con cualquier otra chica. Tú tienes tu propio encanto, Mistery.

-No es suficiente- y regresó al casillero para golpearse.

-¡Basta, tonta!- y la volvió a frenar -. Estimada, eres igual de hermosa y especial a tu estilo y si eso no es suficiente para Flash Sentry, es de mi propiedad ¡pero es un completo idiota entonces! Eres talentosa para la música, tienes buen gusto para las bandas, hueles a menta siempre, donas sangre, eres buena alumna y la mejor amiga que alguien puede tener- la abrazó -. Eres más que suficiente, Mistery.

-Cuánto te desprecio, Cherry...- murmuró sonriente, correspondiéndole el abrazo -. Gracias.

-Así que ya sabes- dijo apartándose con una sonrisa alentadora y dándole un amistoso golpe en el brazo -. Ve tras él. Es tu oportunidad. ¡Haz que Twilight Sparkle quede corta al lado de una conquistadora Mistery Mint!

-Cielos... ¿En qué lío me he metido?...

-El del amor- le contestó, guiñándole el ojo.

...

Sunset y Trixie resoplaban de cansancio mientras cargaban cajas de ropa donada hacia el gimnasio, con quienes otros chicos ayudaban a ingresar del camión a la escuela toda la donación para el evento y separar por artículos.

Ambas dejaron escapar un bufido al dejar las cajas en el montón.

-Trixie no creyó que esto sería complicado- expresó, tragando saliva al ver la enorme cantidad de cajas que faltaban de separar.

-Recuerda. Es para una buena causa- sonrió -. Es lo que me repito para no perder el ánimo- jadeó del cansancio mientras se quitaba la chaqueta.

-Lo sé- dijo Trixie mirándola y bajó el cierre de su sudadera azul para sacársela y dejar lucir una blusa blanca de tiras-. Hace calor.

-Descansamos unos diez minutos para tomar aire- y se dejó caer en el liso suelo y se apoyó en una pila de cajas. Lo mismo hizo Trixie y comprobaron que algunos chicos hacían lo mismo -. Oye, fue muy lindo de tu padre dejarnos usar gratis el parque de diversiones a los beneficiados.

-¡Bah!- murmuró con fastidio, cosa que hizo a Sunset mirarla con mayor atención -. Si supieras lo que Trixie tuve que suplicar para ablandar su corazón y dejárnoslos usar.

-¿Ah, sí?

-Ya te dije, Shimmer. Soy sólo el reflejo de mi familia y por eso nadie me corrigió. Sí, somos egoístas y ególatras, pero asimismo nunca nos damos por vencidos y "llegamos a ser los grandes Lulamoon"- ante la última línea hizo comillas con sus dedos mientras hablaba con sarcasmo y cierto fastidio. Suspiró, -, bueno, por lo que no me importó insistirle e insistirle hasta que me dijo "¡¿Si lo hago te callarás de una buena vez, Beatrix Lulamoon?!" y cuando dice mi nombre completo sin su diminutivo es porque ya rebasé su límite.

-Oh...lo siento entonces.

-Sí, bueno, te lo cuento a ti porque confío en ti, así que deja que los demás piensen el hombre de corazón solidario y altruista que creen que es- la miró -. Al menos tu familia debe ser mejor que la mía.

Ante el silencio y el repentino ambiente incómodo, Trixie se quiso ser chiquita al ver el rostro duro pero ojos aguados de Sunset.

-Oh, cielos...Trixie no aprende su lección de meter la pata, ¿no?

-Está bien...- suspiró -. No tengo familia y no lo sabías, bueno, Las Rainbooms tampoco lo saben.

-¿Ah, no? Se suponen que son íntimas.

-Pues... no preguntan mucho de mi pasado en Equestria y yo tampoco les cuento. Tal vez creen que me pondré mal y quieren evitar abrir alguna Caja de Pandora.

-No tienes que contarle a Trixie si no quieres.

-¿Y si quiero?

Trixie dejó de respirar para mirar fijamente a Sunset, quien se había recogido las piernas para abrazárselas y apoyar la cabeza en las rodillas, con la mirada hacia el frente. De una forma, revelar alguna intimidad que nadie más sabe...es pisar una zona más profunda en su amistad.

-Me encontraron de bebé abandonada en el bosque Everfree, un lugar en el que viven peligrosas criaturas. Así que si no lo hacían pronto, alguna criatura me hubiera devorado o habría muerto de hambre. No sé mi historia familiar, me crié en un orfanato hasta que empecé a mostrar talentos altos para la magia y ya sabes el resto, estudiante, Celestia de tutora, etc...- sonrió -. Por eso, hacer este evento benéfico anualmente, y ver a esos niños y jóvenes, olvidando sus tragedias al menos por un rato...- miró a Trixie- Entonces te doy las gracias a ti, por insistir en darle a ellos y de una forma, a mi pequeña potrilla, un día en el que pueda sentir diversión, felicidad y esperanza en la vida. Sé en carne propia lo duro que es no saber de dónde vienes...- suspiró cabizbaja, con la mirada hacia a un lado de su pierna, a su Cutie Mark -...ni hacia dónde vas...

-Shimmer...- se rejuntó a ella, posando la cabeza a su hombro y Sunset apoyó la suya sobre la de ella, como si fuesen dos árboles que estuvieron a punto de caer pero en el trayecto se encontraron y ahora se apoyan mutuamente para mantenerse en pie.

-Gracias por escuchar- sonrió.

-Gracias por confiar en Trixie- suavizó la mirada -. Gracias por darle la oportunidad a Trixie.

Sin decir nada más, compartieron un nuevo agradable silencio para después seguir con su parte del trabajo.

...

-Ñam, ñam, ñam, ñam- saboreó sonrojada Lyra con la cuchara en la boca que sostenía Bicmac -. ¿Por qué será que tu comida sabe mejor que la mía?

-Estamos comiendo lo mismo- dijo sonriente mientras pasaba la cuchara otra vez a su gelatina y volvía darle en la boca a Lyra.

-Ñam, ñam- saboreó para apartarse y darle un corto pero profundo beso en los labios hasta estirarle un poco el inferior. -. La manzana sabe mejor en tu boca- le susurró y ambos se sonrieron mirándose fijamente.

-De pronto no me apetece mi gelatina...ni volver a comer manzana- le murmuró Bonbon a Trixie mientras arrastraba su gelatina hacia ella -. ¿La quieres?

-No- sonrió y le susurró: -. ¿Por qué no le dices a Cherry que te lo dé en la boca?

Bonbon levantó una ceja y aplastó el plástico del postre sobre la cabeza de Trixie. Tanto Derpy, Whooves, Bicmac y Lyra se quedaron quietos al ver la escena, pero Trixie ni se inmutó, sólo empezó a asentir.

-Trixie siente que se lo merecía- tomó un trozo de gelatina en su cabello y se lo pasó a su boca -. Uva...- escupió el pedazo sobre su charola -...odio la uva...

En otra mesa, Cheese Sandwich estaba haciendo un monólogo con una papa hervida, haciendo reír a Flash, Caramel y hasta Thunderlane que dado un momento se cruzó de piernas, diciendo que se había orinado, lo que elevó las risas...

Pero Soarin estaba en su propia burbuja, sin poder evitar lanzarle cortas miradas a la mesa de Las Rainboom, hacia Rainbow Dash.

Se odiaba por haber sido un tonto. El peor novio del mundo al no darle el beneficio de la duda, cosa que ni debió dudar si decía conocer bien a Rainbow. Ahora, apenas se hablaban lo necesario durante los entrenamientos hacia los niños de primaria y ellos ya lo notaban. La misma niña pecosa que se sonrojaba al estar con él, se acercó un día de estos y le dijo "Entrenador, ¿Usted y la entrenadora Rainbow Dash ya no se quieren? Porque sé que soy muy chiquita para ser su novia, pero me hubiera gustado que alguien tan genial como ella fuera la suya". Soarin no supo cómo responderle, sólo le sonrió fugazmente y la regresó a su entrenamiento. "Tal vez yo no sea tan genial para ella" pensó en ese momento, mientras Caramel ayudaba a Thunderlane ir al baño sin que nadie viera su pantalón mojado y Flash y Cheese se seguían riendo.

-Hola, guapos- saludó Cherry sentándose en una de la silla que dejaron libre, junto a Cheese. -¡Oh, eres el chico fiestero!- sonrió y le plantó un sonoro beso en la mejilla. -. Ahora eres propiedad de Cherry Crash- sonrió divertida mirando la marca de su labial rojo.

Todos, incluyendo a Soarin, saltaron del susto al ver repentinamente a Pinkie Pie aterrizando sobre la mesa de ellos, mirando con ceño fruncido a Cheese para luego soltar una sonrisa típica suya. Se inclinó, tomó una servilleta, la remojó un poco con su lengua y se la pasó al cachete con el beso de Cherry en él.

-Tienes sucio ahí, Cheese- restregó con fuerza hasta dejarle roja la mejilla -. ¡Listo!- miró a Cherry y borró la sonrisa, sin apartarle la mirada amenazante mientras se bajaba de la mesa y caminaba de espaldas de vuelta a la suya, haciendo que dos chicos casi chocaran contra ella.

-Oooookeeeeyyyy- dijo Cherry mirando a los chicos -. Eso fue... interesante.

-Cielos...se nota que le gustas- comentó Flash a Cheese, que se pasaba la mano donde Pinkie le había restregado con fuerza –y a ti te gusta, ¿Por qué no te le declaras de una vez? Es obvio que dirá "¡¡SÏII!!"- arremedó una voz chillona y levantó los brazos con las manos abiertas -. Imagina que están cayendo serpentinas- y tanto Cherry como Soarin tiraron unas risas.

-No lo sé...- contestó Cheese -las cosas como están me gustan y somos felices... ¡Sé que sería más feliz si fuera mi novia! Pero...

-¿Pero...?

-Pero...- continuó -. Siento que si somos pareja, voy a arruinarlo y terminaremos separados.

-Auch...- murmuró Soarin de brazos cruzados.

-¡No, no lo dije por ti!- se apresuró Cheese.

-No, está bien si lo es ya que de verdad lo arruiné- suspiró, mirando a Rainbow -. Realmente arruiné algo demasiado genial.

-¡Cielos, no sé por qué los chicos se quejan de las chicas con esta bobería del amor si son igual o peor de dramáticos!- se quejó Cherry y apuntó a Soarin -. Tú, en vez de estarte lamentando tanto y deshaciéndote en suspiros, ¿has hecho algo para remediar lo que hiciste? ¿Intentas volver a conquistarla o algo? ¿No? A nosotras no nos gustan las personas que prefieren mirar lo caído en vez de levantarlo y al menos tratar de repararlo. ¡Haz algo!- miró Cheese -. Y tú, sandwichito, eres cool y divertido pero ¿Qué es eso de andar con inseguridades?, ¡Vamos! Eres un tipo genial, bien parecido ¡Y fiestero! Por Dios, eso es demasiado cool - miró a Flash -. En cuanto a ti...

-¿Yo? ¡Ni siquiera he hablado!

-¡No es necesario! Y creo que eres el peor de estos dos porque andas haciendo ojitos de tontos y sonrojándole a una chica que ni siquiera pertenece a este mundo, ¿es decir, qué pasa en la cabeza de Sentry para que te fijes en una chica de otra dimensión? Una que es princesa con obligaciones en su tierra, ¿Acaso piensas con seguridad que a ella le gustas realmente como para dejar sus responsabilidades como monarca para conservar un cuerpo que no es el suyo por ti?

-Cherry...

-¡O al contrario! ¿Te gusta lo suficiente como para abandonar TU mundo, TU cuerpo, TUS amigos y familia por ella, para convertirte en una raza de pony de un mundo mágico y tener que aguantar alguna otra contraparte tuya allá?

-¡Bueno, basta, ya estuvo!- se incomodó Flash poniéndose de pie.

-¿Qué pasa? Sólo canto unas cuantas verdades porque eres mi amigo y quiero que reacciones y...

-¡Claro! ¡Lo dice quién es experta en romance, ¿cierto?! ¡La que ha sido botada y usada en dos relaciones fallidas!- apenas lo dijo sintió la ola de culpa revolcarlo -. Cielos...Cherry...

-Eres un idiota, Sentry- dijo ella con voz seria y levantándose arrastrando la silla hacia atrás.

-Lo siento, no quise...

-No pero lo hiciste- y le dio la espalda -. Ya no eres de mi propiedad.

Flash se dejó caer en la silla y miró a Cheese y Soarin, especialmente a este último que negó con la cabeza.

-¿En serio tocaste el tema de Sweet Breeze y Stormy Crush?- preguntó desaprobatoriamente.

-Lo sé, fui un idiota...

-¿Quiénes?- dudó Cheese, mirando a ambos.

-Es una historia larga...- suspiró Flash mirando la hora en su celular -. Tenemos tiempo...

...

Sweet Breeze, era una joven estudiante nueva que parecía de personalidad tímida y reservada, por lo que la integrante del Comité de Bienvenida, Cherry Crash, trató de no mostrarle de golpe su personalidad explosiva. Durante el recorrido, Cherry se conmovía por la dulce apariencia de Sweet. Tenía ojos ámbar, piel verde claro y cabello largo, lacio y castaño.

-Y eso es todo- dijo Cherry saliendo con Sweet al área de descanso -. ¿En serio no tienes preguntas? Has permanecido callada todo el recorrido.

Sweet se dio cuenta que todos los alumnos estaban en clase y el área estaba despejado, sonrió y miró a Cherry.

-Y tú has permanecido fingir que no me miras en todo el recorrido

Cherry sintió cómo la garganta se le cerraba y agrandaba los ojos.

- ¿Te soy linda, verdad? Me di cuenta cómo me mirabas... ¿Te gustan las chicas, cierto? ¿No es osado de tu parte mirarme de esa manera sin saber si te voy a corresponder?

Cherry se sonrojó horriblemente, llena de vergüenza.

-Rayos, chica...- jadeó apartándose -. Tienes razón, se me fue por alto, lo siento si te molestó...no quise...

-No, al contrario...- sonrió -. Me gusta cómo me miras...y me gustan tus labios rojos...

Mistery levantó una ceja al ver que los papeles se intercambiaban. Era Cherry Crash ahora la que se golpeaba la cabeza contra un casillero con gruñido tras gruñido.

-Emmm, ¿Qué haces?- preguntó Mistery a su lado.

-Aparto horribles recuerdos de mi cabeza- contestó sin dejar de golpearse.

A comparación de Cherry, Mistery la dejó golpearse.

-¿Tiene que ver con la pelea en la cafetería con Flash?

-¿Y tú cómo...?

-Cherry... eres escandalosa para hablar...- suspiró -. No me digas que quisiste darle un empujoncito hacia mí.

-Más o menos pero no es por eso precisamente...

-Es difícil hablar si sigues golpeándote.

Cherry se detuvo, dejando su frente pegada al casillero.

-Mencionó mi historial desamoroso.

-Oh...ya veo...

-Sí...- suspiró, cerrando los ojos, viéndose los momentos felices de su relación con Sweet Breeze hasta que...

*Flashback*

-¿Qué?- jadeó Cherry.

-Que esto ya no funciona.

-¿Por qué dices eso? Creí que estábamos bien.

-Sí pero eres demasiado salvaje para mí...

-Sweet, tú me conociste así...

-No, yo conocí a una Cherry Crash pasiva y hasta tierna por robarse una mirada de mí pero después comenzaste con tu rock, tu voz escandalosa y odio que uses piercing.

-Yo siempre he sido así sólo me contuve ese día porque conocí a una Sweet breeze que parecía dulce y amable, hasta ciertamente reservada pero que salió ser una que me hacía saltar clases, me entrometió en un lío con la directora Celestia que afectó mi año escolar y que me manda a callar cuando habla con sus tontos amigos igual de tontos que ella. Si buscaste a alguien sumisa a quien puedas mandar y controlar, te equivocaste, lo fui por un tiempo pero ya no. Así que ya no funciona, ¿eh?... ¿Por qué? ¿Por qué decidí no mangonearme más?

Sweet la miró y sonrió cruelmente.

-Ya no funciona porque ya hay alguien más.

Cherry Crash agrandó los ojos, congelada de la impresión...y de no llorar mientras Sweet la miraba con repugnancia y seguía hablando:

-Eres mi peor error, Cherry...no sé qué rayos te vi en primer lugar...creo que ni de verdad me gustaste. No tienes nada que valga la pena para mantenerse a tu lado.

-¡Te odio!- bramó Cherry y comenzó a golpearse de nuevo.

-Bueno, ya estuvo.

-¡Déjame, Mistery!

-¡No dejaré que te descerebres!

-¡Suéltame, mentitas!

Ambas forcejearon hasta caer el suelo y luchar estúpidamente.

-¿De nuevo ustedes dos?

-¡Luna!- corearon ambas, saltando de pie.

-¿Mentas?- ofreció Mistery.

-Esta vez no funcionará. Es la segunda y no me arriesgaré a una tercera. Ambas castigadas- miró a Cherry -. Señorita Crash, ¿qué le ocurrió en la frente?

Cherry miró hacia arriba mientras Mistery se reía al ver la marca roja de los golpes en su frente.

-Eh... ¿Mencioné que estoy en su equipo, "TeamLuna"?- sonrió Crash con tensión.

-Sólo vayan al Salón de Castigos después de clases, ¿sí?- pidió Luna volteándose sin poder evitar sonreírse mientras alcanzaba a Celestia -. Esas dos me recuerdan a nosotras a esa edad.

Celestia miró de reojo a las dos rockeras.

-Sí...época de rebeldía...pero tú te pasaste- se llevó una mano a la cara con un largo suspiro - Aún no puedo creer que te hayas tatuado una luna en la...

-Fueron buenos tiempos- rió Luna y Celestia rodó los ojos.

...

Era ya tarde cuando Twilight Sparkle retornaba del castillo de Canterlot. Dio unos cuantos bostezos mientras caminaba a la habitación de Spike y sonreía al encontrarlo profundamente dormido abrazando el peluche con forma de Rarity. La alicornio rodó los ojos y suspiró de cansancio mientras entraba en su habitación.

-Cielos, en serio la Princesa Celestia se pasa cuando quiere "alegrar" la Gran Gala del Galope invitando a un Discord celoso- dijo con cierta molestia pero no pudo evitar reírse -. Bueno, en realidad fue graciosa la cara de Rarity cuando succionó su vestido- suspiró y despeinó su melena seguido de quitarse su vestido de gala. -. Creo que estoy demasiado seria...me preocupo demasiado...- y levantó la mirada hacia un librero -. Como por ejemplo, no puedo dejar de molestarme que Sunset Shimmer no me haya escrito e ignora mis mensajes- dejó caer las cejas -. ¿Le habré dicho algo malo la última vez que nos escribimos?- entonces hizo levitar el libro con el que se comunica con Shimmer y lo abre para leer las últimas conversaciones -. Nada. Sólo hablamos de mi esfuerzo por acostumbrarme al castillo, del misterioso mapa, lo que pasó con Tanque y Dash, algunos deberes reales que...un momento...- repasó las páginas -. Sólo hablamos de mí... - se llevó un casco en la frente -. Eso es. Tal vez está un poco dolida que sólo sea yo el centro de nuestra conversación. Debo arreglar esto- levitó una pluma y empezó a escribir: -"Querida Sunset Shimmer. Te pido mis más sinceras disculpas ya que he descubierto mi egoísta acción de olvidar que no sólo tú estás ahí para mí sino yo para ti. De un momento a otro no hemos hecho más que hablar sobre mí y mi mundo en vez del tuyo. He tenido muchas cosas en la cabeza y lo siento. Por favor acepta mis disculpas y dime, ¿Cómo anda todo? En serio quisiera saber cómo estás, tú y las chicas. Tu amiga que te quiere, Twilight Sparkle".

Mientras tanto, a un espejo de distancia, Sunset Shimmer miraba el libro vibrar e iluminarse dentro de su mochila. La joven cerró los ojos y le dio la espalda mientras se marchaba.

-Lo siento, Twilight...no es buen momento...

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