Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 5


Dedicado a mi mejor amiga, quien me pegó el gusto por Harry Styles y creyó en mí cuando le dije que Boulevard tenía un final feliz, te amo.❤️

¿Te conozco?

Destiny

Sonrisas... Miradas, recuerdos ¿o sueños? Quizá pesadillas. Todo me parecía tan confuso que sentía que mi cabeza iba a explotar, como aquella vez que estudié demasiado para un examen de cálculo y mi cerebro lo único que pedía era que parara ya. Esa misma sensación sucedió cuando miré a aquel chico quien también me parecía un poco conocido.

—¿Te conozco? —me preguntó con confusión.

—Yo... eh... —contesté intentando soñar normal y calmada, pero terminó sonando más como un balbuceo—. Estoy buscando la oficina principal, vine a entregar unos documentos.

—Vale... pues si quieres te ayudo a llegar, estaba esperando a la directora pero creo que se le ha olvidado venir, así que debe estar en la oficina principal —me sonrió con amabilidad y salió de la oficina, se giró para asegurarse de que lo seguía y me apresuré a alcanzarlo — ¿Cuál es tu nombre, chica perdida?

—No me perdí, sólo.... —suspiré rodando los ojos— soy Destiny.

—Destiny... vaya, es un nombre bastante interesante.

—¿Cómo te llamas?

—Soy Jared, Jared Kan.

Parecía alguien bastante carismático, su sonrisa era muy bonita, de hecho se le notaban sus oyuelos en ambas mejillas. No pude evitar notar lo atractivo que era, tenía un porte fino y era muy alto, casi tan alto como Dareth. Llevaba unos pantalones negros y una camiseta gris de manga corta que dejaba notar sus delgados pero musculosos brazos. Sus cejas eran negras, tan negras como su cabello.

Le sonreí y seguimos caminando, me guió a un pasillo muy largo y luego nos metimos en unas cuantas oficinas para llegar por fin a la oficina principal.

Es que esta escuela es un tremendo laberinto

—¿Se encuentra la directora? —le preguntó Jared a la asistente pequeña de gafas grandes y cabello rubio. Era muy bonita y muy rubia, casi podía asegurar que era albina. Era mayor que yo, pero no por mucho, quizá dos o tres años más.

—No, pero puedes esperarla, va a llegar en unos minutos —contestó ella con un tono muy dulce y Jared asintió para luego mirarme.

—Viene a entregar unos documentos —dijo por mí.

—Oh Claro, tú debes ser Destiny —me sonrió— no se ven muchas chicas de cabello negro por aquí.

—Es verdad, sólo he visto chicas rubias y castañas, una que otra pelirroja —interrumpió Jared— eres como un bicho raro pero bonito —murmuró de tal manera que sólo yo lo pude escuchar y no pude evitar sonrojarme.

El hecho de que un chico bastante atractivo como Jared me viera bonita no era algo que pasara todos los días. Aunque quizá sólo estaba siendo amable.

—Bueno, ya puedes entregarme tus documentos —dijo la chica extendiendo su mano hacia a mí, le entregué mi carpeta y ella miró su computador — si gustan pueden esperar en la sala —me miró— en lo que checo tus horarios y materias —luego miró a Jared— y viene la directora.

—Vale, perfecto —respondí de forma alegre.

Estaba muy emocionada, ya quería ver mis materias y seguir aprendiendo, apasionarme con cada nuevo descubrimiento e investigaciones. No podía esperar a ir al laboratorio, lo había visto en las fotos pero estaba segura de que sería mil veces mejor en persona.

Jared tomó haciendo en el sofá marrón y acto seguido hice lo mismo, situándome a su lado. Él me miró ansioso, como si quisiera preguntarme algo. Apoyó las manos en sus rodillas y vaciló un poco mientras trataba de decir algo y luego optaba por callar. Luego de unos segundos pareció decidirse y preguntar:

—¿Nos conocemos de algún lado, Destiny? —me miró fijamente, expectante de mi respuesta.

Aquella pregunta me tomó por sorpresa e hice una mueca de confusión.

¿Entonces no estoy loca?

Pero la verdad es que ni siquiera yo sabía que responder, porque si bien me parecía un rostro familiar, no recordaba de dónde.

De pronto miró hacia otro lado y su semblante alegre cambió por uno helado, miró fijamente hacia la salida de la puerta, como si hubiera visto algo, o al alguien... antes de que pudiera responder él se paró rápidamente.

—Debo irme —me dijo con un tono que sonaba como si estuviera pidiendo una disculpa.

—¿No tienes que esperar a la directora?

—Sí, pero creo que lo haré después —se encogió de hombros —Ha sido un placer hallarte Destiny —me susurró al oído para luego irse.

—Destiny, aquí tienes tus materias —me dijo la chica de grandes gafas y me acerqué a su escritorio. Me dio un formato impreso donde venían mis materias: matemáticas, biología molecular, genética, química y física. — Igual si gustas puedes adelantar materias de segundo año, así podrías acabar la carrera un poco antes.

—Eso es... muy interesante, ¿qué materias puedo tomar?

—Mmm, para que no se empalmen con tus horarios podrías tomar  anatomía humana y animal.

—Me parece bien, la agrego entonces —sonreí y ella asintió escribiendo algo en su computador para luego imprimirlo. Me dio la hoja y la tomé emocionada.

—Muchas gracias... —busqué su nombre en el gafet que tenía en su pecho— Jane, hasta luego.

—Un gusto conocerte Destiny.

Me giré y salí al pasillo, pero una hoja se me cayó al suelo así que me agaché para levantarla. La tomé y me paré rápidamente.

—Vaya, vaya... —dijo aquella voz que podía reconocer en cualquier parte— así que si lograste encontrar el camino.

—Así es Dareth, yo siempre consigo lo que quiero —sonreí satisfecha.

—Me alegro que lo hayas conseguido —dijo honestamente— por cierto, nunca te pregunté... ¿qué vas a estudiar?

—Biología —me emocioné y le enseñé la hoja con mis horarios, orgullosa, él la tomó de una manera alegre y miró el contenido.

—Interesante... vas a tomar dos clases conmigo —sonrió satisfecho— ¿es que acaso me acosas, Destiny?

—Oh, para ser honesta no lo sabía —él enarcó una ceja, divertido— ¡es enserio!

—Vale, te creo —me devolvió la hoja— vamos, te llevaré a casa.

Asentí y nos dirigimos a su auto, entramos y lo miré, curiosa.

—Me sorprende que no te hayas desesperado, con eso de "tengo cosas que hacer" —rodé los ojos recordando lo que dijo—. Creo que duré un largo rato.

—De hecho lo hice, por eso bajé del auto.

—Ah —soné un poco decepcionada.

—Ah —se burló.

—No seas copión.

—Yo no soy copión, tú eres la copiona, vas a entrar a las mismas clases que yo.

—Son sólo dos —me excusé— y además ni siquiera sé qué estás estudiando.

—Virología —aseguró con orgullo.

—Interesante...

Comenzó a conducir y el silencio se hizo presente. Dareth era extraño, ni siquiera había pasado una semana de conocerlo y ya estaba causando demasiadas emociones y no entendía por qué. A pesar de su indiferencia me caía bien, y sentía que podía contarle casi cualquier cosa, como si ya lo hubiera conocido.

Los silencios nunca me gustaron, así que intenté sacar plática.

—Vale, de hecho se me pasó comentarte —recordé mi encuentro con Jared— hice un amigo... creo —Dareth me miró con curiosidad— me ayudó a encontrar la oficina principal, o sea, que mi historia cliché con un príncipe azul que me saca de apuros si llegó —suspiré alegre.

—Está bien Destiny —de nuevo el mismo tono serio e indiferente.

—¿Por qué tienes qué ser tan bipolar? —repliqué.

—¿Por qué tienes que ser tan molesta?

—¡Yo no soy molesta, tú eres bipolar! —alcé las manos llevándomelas a la cabeza.

—¡Pues es que me haces enojar!

—¿Por qué?

—¡Yo quería ser el príncipe azul!

—Bueno ¡Entonces ve con la chica pelirroja de grandes curvas y sé el príncipe azul de ella! —exclamé molesta.

Oh, oh

Espera

¿Qué acabas de decir?

Mierda

El semblante serio de Dareth cambió por uno un poco más ligero.

—¿Acaso tienes celos, Destiny? —enarcó una ceja. Seguía conduciendo y se giró para mirarme.

—¡Mira al frente Dareth, vamos a chocar! —exclamé con una mezcla de pánico, nerviosismo y enojo.

Cerré los ojos rezándole mentalmente a Jesucristo para que dejara la conversación hasta ahí, y lo hizo.

Él rodó lo los ojos y se lamió el labio inferior para luego apretar los labios y fijar su vista en el volante.

Uf... salvada

¿Y si realmente son celos Destiny? ¿O sólo estás confundida?

Espero que sea lo segundo.

Dareth sacaba una parte de mí que ni yo conocía: la parte pícara y burlona, la tímida y nerviosa, además de la parte enojona. Yo no solía enojarme mucho pero si algo me molestaba era su indiferencia y sus notables cambios de humor. Me aterraba porque él despertaba demasiadas sensaciones, y demasiadas sensaciones combinadas entre sí podían llegar a ser peligrosas.

Llegamos a la casa y justo cuando noté que iba a abrir la boca para decir algo salí rápidamente del auto.

Recé mentalmente para que la puerta estuviera abierta pero no fue así. Escuché los pasos de Dareth acercándose con calma y me hice a un lado para que abriera la puerta. Él lo hizo y acto seguido me encaminé hacia adentro con rapidez y pero antes de que pudiera safarme de su alcance él tomó mi mano y me acercó a él.

El olor de su colonia invadió mis fosas nasales y mi cuerpo tembló ante su tacto. Me dio una sonrisa pícara y me dio una caricia en el brazo con su pulgar trazando líneas de arriba hacia abajo. Mientras que con la otra mano sostenía mi otro brazo e iba acercándome más a él.

Jesús bendito ya caímos

Lamió su labio inferior y tragué saliva, me apegó aún más hacia él y mi cerebro comenzó a gritar que huyera, que no estaba bien, que ni siquiera lo conocía. Pero mi cuerpo reaccionaba a él de una forma que desconocía. Retrocedí un poco y me topé con la pared.

Estaba arrinconada, atrapada, con un apuesto chico enfrente que me ponía los pelos de punta cada que estaba cerca.

Noté algo en su rostro que no había percibido antes. Dareth tenía una pequeña cicatriz en su ceja izquierda.

Me tomó de la cintura y se acercó demasiado a mi rostro. Inconscientemente miré sus labios.

¿Acaso iba a besarme?

Giré mi cabeza hacia arriba y lo miré fijamente abriendo un poco mis labios esperando un beso que nunca llegó.

—Tú y yo tenemos una plática pendiente —me dijo al oído y soltó mi brazo para luego alejarse y subir a su habitación.

Eres un maldito, Dareth Callon

"Virginia 1985

Me encontraba acostada en mi habitación viendo una película, calmada y comiendo una que otra palomita de maíz que mi esposo Michael había preparado antes de ir al supermercado. Dieron las 11 en punto y decidí apagar el televisor. Mi vista estaba cansada y las ganas de dormir se hicieron presentes así que me acurruqué en la cama y abracé mi almohada. Paz... sentía paz... pero aquella sensación no duró mucho.

Michael entró a la habitación con pasos apresurados metiendo diversos objetos de la habitación en una maleta. Su respiración estaba agitada y la sensación de pánico entró en mi subconsciente haciéndome temblar.

—¿Pero qué ha pasado? —pregunté con terror al ver la cara de mi esposo con una ligera cortada en su ceja izquierda.

Él me miró asustado, sin reaccionar. Su estado de ansiedad y terror cambió por una mirada perdida y se sentó sobre la cama.

—Lo lamento... —me dijo con la cabeza baja.

—Tranquilo... —sujeté su rostro con ambas manos y le di un beso en los labios sin dejar de mirar sus ojos. Aquellos ojos que abrían las puertas de mi alma y llegaban hasta mi corazón.

—No podemos estar tranquilos... nunca lo estaremos —negó con la cabeza y note el cómo una lágrima caía sobre su mejilla. Me miró a los ojos fijamente y entonces noté de inmediato el por qué estaba así. Sentí una gran punzada en mi pecho y un estruendo en mi cabeza. El terror que había sentido se hizo inmenso, una oleada de miedo recorrió mi cuerpo entero haciéndome perder la respiración. Mi cuerpo no soportó más y lágrimas comenzaron a brotar sobre mis mejillas.

No puede ser... no puede pasar, ya habíamos escapado, ya estábamos tranquilos, ya estábamos felices. No podía ser posible ¿cómo?

—Él está aquí... —susurré— Él te hizo esa cortada en la ceja ¿cierto? —dije sollozando.

—Sí Olivia —me tomó las manos— él lo ha hecho. Él nos encontró y está aquí para matarnos."

Desperté agitada, con la mirada perdida y lágrimas en los ojos.

Vaya, eso se había sentido muy real. Negué con la cabeza mientras me dirigía al baño, prendí mi celular y noté que era apenas la una de la mañana. Enjuagué mis ojos para limpiar mis lágrimas y suspiré mientras me pasaba la toalla para secar mi cara.

¿Qué había sido todo eso? ¿Por qué seguía soñando a la misma persona siempre? ¿No debería ser yo quien debería aparecer en mis propios sueños?

Y... ¿por qué el chico de mi sueño tenía una cortada exactamente en el mismo lugar donde Dareth tenía una cicatriz?

Carajo.

Nota de autora

Les gustó el capítulo? Porque a mí siiii.

¿Por qué será que a Destiny le parece conocido Jared?

¿Será que por fin se dará cuenta de que lo que está soñando son sus recuerdos de su vida pasada?

Pronto lo descubrirán, nos vemos el siguiente lunes🥰

Por cierto, se viene uno de mis capítulos favoritos.

No te olvides de dejar tu estrellita, no seas fantasma. 😳✨

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro