Para los que quieran entrar al grupo de whatsapp pueden unirse en el enlace que está en mi perfil de wattpad;)

Él es...

Destiny

La sensación de mi frente sudando fue lo que me sacó por completo del transe en el que entré. Si ya estaba confundida sobre los sueños ahora lo estaba aún más. Ya no era Olivia, sino un chico, un chico que perdió a su novia y su vida al mismo tiempo en medio de un inmenso mar.

Carajo, todo era demasiado confuso como para digerirlo, analizarlo y encontrar una explicación coherente.

¿De nuevo la sensación de que esa chica era Dareth? Pero ¿cómo? Si esa chica era una mujer, y bueno... Dareth era hombre. Y si yo era un hombre ahí ¿no se suponía que yo era mujer? Mi cabeza dolía de tanto pensar nuevamente y preguntarme cosas que simplemente no tenían explicación. ¿Dareth lo sabría?

—Hello, tierra llamando a Destiny ¿estás bien? —me preguntó Leca y sacudí la cabeza entrando en la realidad.

Leca me miraba intrigada y Jared también.

—Yo quiero de lo que te fumas —comentó Jared y entrecerré los ojos brindándole una mirada "amenazante".

—Yo no fumo nada, pero todo medicamentos y a veces me pierdo por completo —me excusé intentando no sonar tan rara.

Aquel comentario hizo que el gesto burlón de Jared cambiara por uno más preocupado, al igual que el de Leca. Lo que me llevó a negar con la cabeza y excusarme de nuevo.

—No tengo nada malo, es sólo que suelo tomar medicamentos para la ansiedad —admití, después de todo, no lo veía como algo malo, al contrario, no era fácil vivir con eso pero lo estaba intentando.

—Lo siento, no sabía —se disculpó Jared y por primera vez lo escuché sonar triste, lo que era extraño considerando que era una persona muy alegre.

¿Y si yo lo hice sentir así? No quería hacerlo, realmente lo dije sólo para evitar mencionar las cosas raras que me estaban pasando por los sueños y así no pensaran que estaba loca.

—No, no te preocupes, eres un gran amigo —intenté remediar y Leca tosió de repente mientras Jared intentaba sonreír dándome la misma mirada que Dareth me había dado cuando le dije que éramos sólo amigos.

¿Pero qué...?

—Bueno... ¿quién quiere ir por un café el viernes? —preguntó Leca como si nada, sentándose en la banca de en frente.

—Creo que no podré, es mi cumpleaños y usualmente hago maratón de friends con mi mejor amiga —respondí como si nada y Jared y Leca me miraron indignados.

Yo les brindé una mirada perdida porque no entendía la razón de sus rostros. Pero ¿qué había dicho mal? Era verdad, usualmente en mi cumpleaños veía friends con Abby y a veces poníamos canciones de One direction y Taylor Swift para hacer karaoke. Aunque no sabía si seguiría siendo así porque estábamos en un nuevo país, en diferentes casas y ya no estaba solo con Abby, ahora me llevaba muy bien con Dareth, quien me debía mi pastel.

—¡Libra! Es verdad ¿por qué no lo dijiste antes? —me cuestionó Leca y yo fruncí los labios.

—Es que no me pareció tan importante.

—¿Cómo no? Ahora tendré que pensar en un buen regalo de cumpleaños —murmuró Jared en tono hastiado y negué con la cabeza.

—No me gustan mucho los regalos, con un abrazo y un felicidades es más que suficiente —comenté de manera sincera.

Si bien podía emocionarme tal vez algún detalle, no podía negar que me gustaba más recibir abrazos últimamente. Después de todo, no estaba muy acostumbrada a eso, pero me estaba comenzando a gustar porque me hacía sentir querida.

—Pero no puedes pasar tu cumpleaños aburrida... podemos hacer una fiesta en mi casa —propuso Leca y volví a negar nuevamente.

—Pero si es host family, no sé qué tan bien sea eso —me giré a mirar el rostro de Leca por un momento y ella apretó los labios y abrió la boca para luego decir:

—No es su host family, Leca tiene un suggar daddy —interrumpió Jared y yo sentí que la saliva se me atoraba.

¿Leca tenía un suggar Daddy?

—Un poco más de tacto, Jared —le reclamó y él sólo se encogió de hombros y sacó un chicle para luego metérselo a la boca.

—Pues no sé con qué tacto puedas decir que tienes un suggar daddy, de hecho, si fuera tú estaría orgulloso.

Comencé a atar los Cabos al darme cuenta de la vez que fui a casa de Leca y su casa era bastante grande, además de que se sentía muy cómoda en invitarnos para hacer pozole. A mí me daba mucha pena incluso invitar a Abby, o hacer algo en la cocina. Sabía que los Callon no tendrían ningún problema pero aún así no me sentía completamente confiada. Aparte, Leca siempre tenía accesorios que se veían muy caros, y el hecho de que los comprara con una beca no razonaba mucho en mi cerebro.

No la juzgaba, de hecho no me parecía malo, simplemente me había tomado por sorpresa.

—Wow —fue lo único que dijo y Leca me miró como si esperara que dijera algo más—. Eso es muy cool —continúe y apoyé mis codos sobre el pupitre—, ¿Pero tú te sientes cómoda? —era lo que realmente me preocupaba.

Si ella estaba ahí por el dinero era una cosa ¿pero y su comodidad? Quizá él la obligaba a hacer cosas o tal vez no, pero de igual manera me preocupaba que le hicieran algo.

—Claro que sí, no es tan suggar, o sea, tiene cuarenta pero a Jared le encanta asumir que es un señor de setenta años —Jared puso los ojos en blanco y Leca prosiguió—. Era amigo de mi papá y siempre fue como mi crush, un día mi papá me dijo que su amigo vendría aquí, y esta es la mejor universidad de biología —explicó y me sentí un poco más calmada. ¡Aunque igual ese señor le doblaba la edad! —. Cuando me preguntaste quise decir la verdad, pero al final me dio pena y te dije que era por una beca.

—No te preocupes, jamás te juzgaría por eso, lo juzgaría a él si te hiciera algo —advertí y ella me sonrió mientras Jared se paraba para ir a tirar la envoltura de su chicle.

—¿Pero ves? No hay problema si hacemos una fiesta.

—Pues es que no me gusta mucho ser el centro de atención sinceramente —reconocí.

No estaba acostumbrada a fiestas, a excepción del baile que organizó el abuelo y Ellie; nunca había tenido una que se tratara de mí, y la verdad no la necesitaba. Además, no contaba con muchos amigos a los cuales invitar.

—Entiendo, aunque la verdad es que si tengo ganas de hacer una fiesta, así que podríamos hacer una y cantarte las mañanitas en un lugar donde no haya mucha gente, será divertido —ofreció y para ser honesta no me desagradó la idea.

—Puede ser —sonreí y puso sus palmas al aire haciendo que yo hiciera lo mismo y las chocáramos.

—¡Hey! Háganlo otra vez y yo me uno —exclamó Jared y otra vez las levantamos y las chocamos con él—. Bueno, ¿y por qué tan felices?

—Habrá fiesta el viernes, pero será como fiesta a escondidas porque sólo las personas más cercanas a Destiny sabrán que se trata de ella y entonces no se sentirá incómoda —aclaró y yo asentí con la cabeza.

—¡Genial! ¿Y qué temática será? —nos preguntó Jared y Leca y yo nos miramos al mismo tiempo.

—¿Qué tal temática de dioses griegos? —propuse y ambos me dieron la gran sonrisa que confirmó la propuesta.

Dareth

Saber que ella compartía los mismos sueños que yo debía parecer grato. Pero en realidad era todo lo contrario, si bien me emocionaba, me hacía querer averiguarlo todo, y no tenía los recursos para hacerlo. La única persona que podía tener respuestas era mi tío, y a pesar de que me repetí a mí mismo que no indagaría más cosas con él, las ganas de encontrar respuestas me hacían olvidarme de eso.

Así que ahí estaba, dentro de la casa de mi tía mientras subía las escaleras para entrar al cuarto donde se encontraba mi tío. Lucy me había dejado pasar sin problema, ya que le comenté que quería saber cómo estaba. Y aunque era cierto, no era exactamente la razón por la que venía.

Necesitaba respuestas.

Abrí la puerta de su habitación y lo encontré viendo la televisión mientras jugueteaba con un cubo de rubic, cambiando colores y moviendo las partes de un lado a otro intentando calmar la ansiedad. Sentí una puñalada en el pecho al verlo así, yo estaba siendo egoísta por traerle un pasado que quiso olvidar, pero no sabía a quién más acudir. Goggle no tenía esa clase de respuestas.

Di un paso hacia dentro y el sonido del piso de madera rechinando fue lo que hizo a mi tío voltear a verme apartando la vista de la serie que estaba viendo. Una amplia sonrisa se formó en su rostro y me acerqué un poco más.

—¡Pero si llegó mi sobrino favorito! —comentó ampliando los brazos para que lo abrazara. Pero sólo tomé asiento en la cama —. Pff, por eso Ellie sigue siendo mi top uno.

Puse los ojos en blanco y me limité a observar los medicamentos que estaban sobre la cobija. Había algunos ansiolíticos, antidepresivos y antiinflamatorios. Yo quería que él estuviera bien por lo que intentaría no sacar todo de golpe, sino lo suficiente.

—Bueno, yo daré abrazos el día en que tú consigas un premio Nobel —le comenté y mordió su labio, pensativo.

—Comenzaré a trabajar en ello entonces —comentó y le brindé una sonrisa ligera, luego él suspiró —. No quise decirle nada a tu padre, pero ya sabes cómo es... —explicó.

—Lo entiendo —puse mis manos sobre mi regazo y antes de que pudiera decir algo él continuó.

—Pero tiene razón, y no lo digo por mí —dijo y me giré a mirarlo. Su mirada era genuina, derrochaba honestidad y angustia. Sus ojeras aún eran bastante perceptibles y su piel, a pesar de ser apiñonada se notaba pálida—. Dareth, a veces hay cosas que es mejor no saber, aléjate y deja de buscar algo que puede ser peligroso.

¿Peligroso? ¿Pero qué podía ser peligroso? No entendía nada. Si había venido a buscar respuestas ahora tenía más preguntas que respuestas.

—¿A qué te refieres?

—Sólo olvídate de todo eso porque puede hacerte más daño que beneficio, promételo. Si alguien llega a sacar el tema, no sabes nada, si alguien te dice que le pasa lo mismo, no cuentes nada —me advirtió y yo negué con la cabeza.

«Destiny» ¿Acaso él sabía algo? No pude evitar recordar la conversación en la mañana sobre todos los sueños que ella tenía también y la plática que había quedado pendiente. Tenía tanta curiosidad que no podía negarme.

—No puedo hacer eso, es tan confuso.

—A veces el silencio es la mejor arma y muchos lo desperdiciamos.

—Hay alguien, algo y...

—No digas nada —interrumpió en un tono mucho más serio y miró a todos los alrededores una y otra vez que incluso por primera vez en años sentí miedo—. Será mejor que nadie esté escuchando. Por favor Dareth, olvídate de esos sueños y déjalos pasar, tienes un gran futuro —comenzó a alterarse de repente y entonces no me quedó más opción que asentir.

—Bien, no volveré al tema.

—Créeme que es por tu bien —me señaló y me paré de la cama para dirigirme a la puerta.

—Lo sé... —murmuré antes de irme.

Estaba en una encrucijada. Por un lado tenía tantas cosas que sacar, sobre todo con ella. Y por el otro estaba advertido de no comentar nada porque podía ser peligroso. ¿Pero qué tenían de peligroso esos sueños? No tenía sentido. ¿Por qué un sueño sería peligroso?

No tenía idea de qué hacer, pero tenía la sensación de que mi tío tenía razón.

————-

"Berna, Suiza
1987

—Bien, esto es todo —dijo la monja acomodando los papeles en una carpeta—. Disfruten a su pequeño.

Olivia estaba más que feliz, lágrimas de felicidad inundaban sus ojos. No podíamos estar más emocionados, siempre habíamos querido tener un hijo y formar una familia, y al fin lo habíamos logrado.

El pequeño me miró con cierto temor y no pude evitar arrodillarme y ponerme a su altura. Aquello hizo que se acercara un poco mientras Olivia se arrodillaba igual que yo para observar al pequeño. Su cabello negro y ojos café hacían contraste con su piel apiñonada. Le sonreí con amplitud para luego decir:

—Cuidaremos muy bien de ti, pequeño Clarigan."

Nota de autora

AHHHHHH

AHHHHHH

AHHHHH

Es que todo está cobrando sentido ahora ¿A que sí?

Estoy muy emocionada, recuerda que si quieres estar en el grupo de whatsapp solo tienes que ir a mi perfil y ahí estará el enlace.

Ya me estuve comunicando con algunos de ustedes para pedirles su número.

En fin, espero que les haya gustado mucho.

No olviden votar y comentar qué les pareció el capítulo.

Esto es todo por hoy,
Los amo.

Katy🤍✨